Hola amig@s, he vuelto ( le empiezan a lanzar todo tipo de objetos)
Se que tarde demasiado, y lo lamento...
Pero esa es la vida del escritor/dibujante.
Dejemos las explicaciones para el final...

Empecemos

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" Me duele todo... Siento un poco mojada la cabeza, creo que... Creo que no es agua...
Creo que ya no puedo soportar más...
No, no, no... Tengo... Tengo que levantarme...
Demonios.
¿En que momento se arruino todo?,
¿En que momento le arruine la vida a todos...?"

Una enorme felicidad invadia a los chicos Loud, indescriptible en ése momento, pero sin duda alguna, Lincoln era el mas contento de los tres, su felicidad y tranquilidad eran tan grandes que el joven no paraba de sonrerir mientras miraba al cielo, un cielo despejado y colorido.
Lynn y Lars, quienes iban justo detras de el, lo veian de forma curiosa, aunque sabian que ese joven no era su hermano, era difícil verlo con otros ojos, pero, segun ellos, no era nada por lo que debian preocuparse en esos momentos.
Aun asi, el castaño no soportaba el misterio.

  - Lincoln, ¿estas bien hermano? - pregunto el mayor.

  - Por supuesto Lynn ¿por que no lo estaria? Tu jugaras tu partido, iremos a una gran fiesta y yo saldre con Ronnie en la noche.- contesto el peli blanco sin dejar de ver el cielo.

  - Eso lo se, pero ¿por que estas sonriendo de esa forma? - volvio a preguntar el joven castaño.

  - Bueno, ya que insistes tanto, te dire lo que sucede.- Lincoln se dio vuelta sin dejar de caminar - Apesar de la primera impresión qué me dejaron cuando llegue aquí, me doy cuenta de que cierto grupo de torpes, a.k.a my brothers, no son tan malos y que de hecho me quieren mucho y que en el fondo, muy en el fondo, tienen su pequeño y meloso corazoncito. - aquellas ultimas  palabras habian sido dedicadas a uno de los chicos en particular.

Y sin decir absolutamente nada, Lincoln continuo caminando de forma normal, aun con una sonrisa en su joven rostro.
Pero aquellas palabras, mas qué responder las preguntas de Lynn, solo lo habían confudido aun más.

  - Oye Lars, ¿tu entendiste algo de lo que dijo? - le pregunto el mayor al joven gótico.

  - No, yo... Yo tampoco lo entendi. - Lars, quien si habia entendido la indirecta de su hermano, solo se avergonzo, lo que causo que tartamudeara en su respuesta.

  -  ¿Y a ti que te pasa?

  - Nada importante.

Despues de una pequeña caminata, los chicos habian regresado a su hogar, Lynn habia sido el primero en entrar a la casa Loud ya que no podia esperar para contarle a sus padres sobre su asombrosa hazaña.
Lincoln y Lars seguian afuera de la casa, riendo un poco de la actitud de su hermano mayor.

  - Sabes, creo que no lo olvidará facilmente y para nosotros eso no es nada bueno que digamos. - decia Lincoln en un tono burlon.

  - Creo que estara bien, dejalo vivir su momento de gloria... - contesto el chico gotico.

  - Lars Loud hablando de vivir, eso es muy extraño viniendo de ti.

  - Lo se, pero no te acostumbres mucho a eso, ahora si me disculpas, debo regresar al lado oscuro.

  - ehhh, claro, como digas.

  - Nos veremos en la noche.

  - Saludame a Anakin.

El chico de piel palida fue el segundo en entrar en la casa, ahora Lincoln se encontraba enfrente de la estructura, aquel lugar en el que dio sus primeros pasos, donde dijo su primera palabra, donde habia vivido tespestades, tonados y miles de desastres naturales.

El joven empezo a pensar en voz alta.

- Cielos, y pensar que esta casa ha visto millones de cosas, desde las más simples hasta las más extrañas, con tan poco espacio y muchos chicos, es increible que aun estes de pie...
Aun asi, no esta del todo mal, verdad amiga. - pensaba el peli blanco mientras tocaba uno de los postes de madera que sostenian el techo.

En ese momento, el chico recordo algo muy importante, asi que sin perder tiempo, corrio hacia el lado derecho de la casa.
Cuando estuvo frente a la pared, su alma descanzo en un gran rio de tranquilidad.
En aquella pared se encontraban pintadas las manos de todos los integrantes de la familia Loud...

O casi todos.

Lincoln reconoció casi al instante las manos de sus hermanos, los colores los delataban, pero faltaba alguien entre todos ellos...
La marca de Lincoln no estaba en su lugar, en su lugar solo habia un espacio vacio.

Del patio trasero salieron corriendo Leif y Lexx junto con el pequeño cachorro Charles, pero su juego se detuvo al ver a su hermano mayor viendo la pared de una forma muy extraña.
 
  - Lincoln, ¿que estas haciendo? - pregunto Lexx.

  - Nada, solo veo la pered. - contestó el chico en un tono algo cortado.

  Linconl volteo a ver a sus hermanos pequeños, se veian preocupados, pero Lincoln ignoro por unos momentos esos sentimientos, el lo unico que queria eran respuestas en ese momento.

  - Chicos, ¿puedo preguntarles algo? - dijo el mayor, quien volvió a ver la pared con una mirada vacia.

  - Si, claro - contestaron los gemelos al mismo tiempo.

  - ¿Por qué mí marca no esta aqui? - pregunto el mayor, con el mismo tono. 

Los gemelos se miraron lor unos momentos, hadta que uno de ellos decidio empezar a hablar.

  - Las hicimos hace un año, poco tiempo después del nacimiento de Leon. - contesto Lexx.

  - Todos pusimos nuestra marca aqui... Todos menos nuestro Lincoln, el solo se burlo de nosotros, nos dijo qué no tenia caso enorgullecernos de una pocilga como esta. - constesto Leif en un tono serio, recordando la rabia que habia sentido en aquel día por las palabras de su hermano.

Lincoln tambien sintio un poco de rabia en esos momentos, sentia tantas ganas de gritar, pero tenia que contenerse, no solo por el, si no por sus hermanos pequeños.

  - Tengo una idea, ¿por que no pones tu marca ahora Lincoln?, no importa lo que el otro tipo  halla dicho, tu eres mejor que él, tu mereces esto más que nadie - decia Leif, tratando de levantar el animo de su hermano mayor.

¿Que soy para ellos?

 
Lincoln se quedó callado por unos segundos, hasta que ese silencio se rompio con un susurro.

  - No .

La respuesta habia tomado por sorpresa a sus hermanos menores, Lincoln se agacho para estar a la altura de sus hermanitos.
Su rostro ya no mostraba rabia o tristeza, al contrario de eso, su cara dibujaba una gran sonrisa.

  - No quiero hacer algo que no me corresponde hacer a mí,  ese espacio es de su Lincoln, el Lincoln de esta dimensión, el es su hermano, no es un tipo cualquiera, el es su familia, y créanme cuando les digo esto: estoy seguro que el los quiere mucho. - Los jovenes lo veian de forma admirable, sobre todo Leif, al cual le brillaban los ojos de manera algo comica.

- Ahora, por que no jugamos un rato y nos olvidamos de los problemas. - decia Lincoln tratando de cambiar el tema de conversación.
Los menores empezaron a saltar de felicidad, algo que a Lincoln le parecio sumamente gracioso, hace unos días jamas hubiera imaginado en verlos comportarse de aquella forma.

  - Muy bien, juguemos al escondite, tienen un minuto para esconderse, Charles y yo los buscaremos ¿Okey?. - dijo Lincoln con un tono divertido.

  - Jamás nos encontrarás - gritaron los gemelos antes de salir corriendo adentró de la casa, dejando a Lincoln y a Charles sólos.

Poco a poco, la sonrisa de Lincoln se fue haciendo cada vez mas pequeña.
El chico tenia cerrados sus puños con tanta fuerza, a tal grado de que de ellos empezaron a escurrir pequeñas gotas de sagre debido a la presión.

Lincoln callo al piso de rodillas, sus ojos reflejaban ira, pero su sonrisa aun no se borraba por completo, el peliblanco estuvo a punto de golpear el piso a manera de desahogo, pero sus acciones se detuvieron por la intervención de Charles, quien simplemente empezo a frotar su cabeza en la pierna de Lincoln.
Cuando el chico vio la accion del cachorro, todo pensamiento de ira se habia esfumado.

  - Jejeje, Gracias amigo, de verdad lo necesitaba. - decia el chico mientras acariciaba la cabeza del cachorro.

Lincoln se levanto y se dirijio a la entrada de la casa, se detuvo justo enfrente de la puerta y susurro en un tono muy bajo unas palabras...
...
Despues de eso, el joven entro a la casa para buscar a sus hermanos junto con su preciada mascota.

6:00 pm.

Lincoln se encontraba recostado en el sillon de la sala, vistiendo la ropa que Loni le habia comprado el dia anterior.
De la planta alta salio corriendo Leif.

  - ¡Lincoln! ¡Lincoln!  - grito el pequeño mientras corria hacia donde estaba su hermano mayor.

  - ¿Que sucede? - preguntó el peliblanco.
  - Necesito ayuda con los botones de mi camisa - el pequeño vestia una playera de color verde azulado y unos jeans de mezclilla al igual que una camisa de botones del mismo color, pero los botones de esta estaban colocados de manera equivocada, lo cual causo una pequeña risa por parte de Lincoln.

  - Es increible que necesites mi ayuda para esto, ya deberias hacerlo tu sólo.

  - No lo hago a propósito.

  - De eso no me queda duda.
 
Mientras Lincoln resolvia el dilema de su hermano menor, este ultimo aprovecho para preguntarle algo importante al mayor.
  - Lincoln.

  - ¿si?

  - ¿Ronnie Anne es tu novia?

Lincoln por poco rompe uno de los botones por la sorpresa de aquella pregunta. De nuevo, su rostro tenia la tonalidad de un tomate.

  - ¿Por que preguntas eso? jejejejeje - contesto el chico con una risa sumamente nerviosa.

  - Tengo curiosidad - contesto el menor de manera sumamente inocente.

  - Solo.es mi amiga, una amiga y ya - contesto el chico de aun nervioso.

  - ¿y por que se besaron el otro dia? solo los novios hacen eso.

  - ¿Que demo... ¿nos estabas espiando? - decia Lincoln de manera impactante.

  - No solo yo, todos estaban ahi, incluso mamá y papá.

  - No importa la realidad, nunca hay privacidad ¿verdad? ( jejeje, eso rimo).

  - ¿Te casaras con ella cuando seas mayor? - pregunto el menor.

  - No lo se, quizas... Es decir, Eso no es de tu incumbencia - contesto Lincoln algo irritado.
  - Solo quiero saber.

  - La curiosidad mato al gato, o en este caso, a la ranita - decia Lincoln mientras revolvia el pelo de su hermano.

En aquel momento, el timbre de la casa sonó, Lincoln se apresuró en atender el llamado, sin dejar la conversacion que tenia en esos momentoa con Leif.

  - Ademas, ella es mi amiga, y jamas la he visto de otra forma. - Lincoln en su interior no sabia con exactitud si sus palabras era verdad o no, jamas se detuvo a pensar en éso.

El pensamiento no abandonaba la cabeza del chico.
¿que era Ronnie para el?
¿una amiga? ¿un amor imposible?

Lincoln abrio lentamente la puerta, aun con esos pensamientos en su mente, cuando la puerta estaba abierta en su totalidad...

¿Quién es esta chica? Una chica con el pelo suelto, una blusa de un color bastante interesante...
Morado, Rosa... No lo se, pero es un color ... ¿como dirian mis hermanas?... Lindo.
Me esta viendo directamente a los ojos... Acaso ¿me conoce?... Algo en sus ojos me parece familiar...
Pero no...
un momento...
Un momentO
UN MOMENTO
¡¡¡¡¡¿¿¿¿¿QUE?????!!!!!

Lincoln no pudo contener un grito lleno de confucion...
Ya no habia duda alguna...
La chica que estaba frente a el era...
Ronnie Anne.

El grito del chico habia tomado por sorpresa a Ronnie.

  - Lincoln ¿que te sucede? - pregunto la chica algo confundida.

  - Tu... Tu... ¿tu eres Ronnie? ¿La Ronnie que conozco? - preguntó el peliblanco.

  - ¿Acaso hay otra? Patetico - eso ultimo solo confirmó la pregunta de Lincoln.

  - Lo siento jejejeje, es que no te reconocí, te vez Linda - esas últimas tres palabras habían causado un leve sonrojo en la chica.

Lincoln se habia dado cuenta de sus palabras, y temiendo la opinión de la chica, trato de retractarse.

  - Es decir, siempre te vez linda, bueno, eres linda y yo ehhh, jejeje, tu y yo y heeeee.

  - Hola Ronnie - decia Leif, quien se encontraba detras de Lincoln.

  - ¿Tu de donde saliste? - dijo Lincoln dando un pequeño salto debido al susto que le habia causado su hermano menor.

  - Hola Leif, tiempo sin verte, ¿como has estado? - pregunto la chica con una sonrisa.

  - Muy bien.

  - Vaya, te vez muy lindo vestido así.

  - jejeje, gracias - decia el menor con un tono algo avergonzado. - Ronnie ¿te puedo preguntar algo? - decia el menor dando pequeños saltos, cosa que le pareció sumamente tierna a Ronnie.

  - Por supuesto.

  - ¿Tu eres la novia de Lincoln? ¿Te casaras cuando sean adultos?. - en esos momentos, no se podria saber quien esta mas sonrojado, Lincoln o Ronnie, pero algo era seguro, ambos casi se desmayaban de la vergüenza.

  - ¡LEIF! - grito Lincoln

  - ¿Si?

  - Ve a tu habitación, creo que uno de tus animales se escapo de su jaula. - decia el mayor con una sonrisa fingida.

  - 20 dolares - contesto el menor con una sonrisa burlona.

  - Pequeño estafador ¿acaso este era tu plan? - preguntó el peliblanco algo irritado.

  - No lo se.

  - okey, Toma - despues de esa pequeña transacción, Leif se fue corriendo a su habitación, no sin antes burlarse de su hermano.

  - Vaya hermano el tuyo. - decia Ronnie con una pequeña risa burlona.

  - Ahora multiplicalo por diez, esa es mi vida. - contesto el chico de forma ironica - Por cierto, ¿que haces aqui? se supone que yo pasaria por ti.

  - Lo se, pero pense que seria divertido caminar juntos hasta la fiesta.

  - Pero el caminobes un poco largo.

  - Exactamente.

Después de varios segundos, Lincoln habia entendido la indirecta.

  - Jeje, bueno, en ese caso... ¡Chicos, los veo en la fiesta! - grito el chico

Despues de dar su aviso, ambos jovenes se fueron en dirección al lugar donde se llevaría acabo la fiesta.
Era momento de algo de diversión.
Antes de continuar, Ronnie habia tomado la mano de Lincoln, accion que habia causado un pequeño rubor en el peliblanco.

¿Que es Ronnie para mí?
¿una amiga?
¿un amor imposible?...

Por ahora...
¿Que es Ronnie para mí?

Es la chica mas linda del universo.

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Bueno, chicos y chicas, ya falta poco para el final de esta historia, no olviden comentar y compartir esta historia, eso me ayudaria mucho.
Nos vemos despues amigos :)