diagnostico 

Narrador Lincoln Loud

Solo podía pensar, en porque merecía esto, las cuide y ayude, sin nada a cambio y lo más gracioso de esto podría ser que aún no lo acepto, me niego a creer que los años de amistad y amor fraternal, hubieran sido una simple mentira, tres costillas rotas me obligaron a debilitar esa mentira que me decía mi mismo. Mirándolas a los ojos pude por fin ver la realidad, siempre estuve solo, no tenía a nadie, entonces porque no acabar con mi vida, lanzarme del edificio más alto y caer de cabeza al concreto frió, cortarme las venas y dormir plácidamente para siempre, tomar la soga en mi cuello y morir a los 30 o 60 segundos o comer plomo por la boca sería mejor un disparo y es el fin.

Y la respuesta es que tenía miedo, no de dios, porque sé que no existe, miedo a dejar de existir, no hay nada después de esto.

Entonces solo tengo que ser fuerte, salir de esta tortura, ser libre.

Y vivir la vida que se me está siendo arrebatada por mis hermanas, no hay que negar lo que son, pero eso no quiere decir que las ame como tal. Tampoco las odio, simplemente no quiera saber nada de ellas, para mi ellas solo son basura y nada más, odio lo sentía hacia mis padres, ellos no hicieron nada, no detuvieron esto, se reían de mi dolor y mis lágrimas. Son mis padres y eso es lo que odio de ellos, ellos me crearon para solo sufrir, por eso los odio.

El frio del césped de jardín hacia que me olvidara de la sangre que salía de mi pecho y cabeza, los moretones y hemorragias internas se camuflaban por la bonita luna que miraba acostado, sabía que fin seria en unos minutos y cuando cierre los ojos, solo recordare una cosa, solo una pequeña cosa e importante, nací solo y moriré igual.

Sentí que mi momento se acercaba, tal vez un par de minutos y seria el fin.

_me hubiera gustado disfruta más la vida y no solo encerrarme en mi habitación. Ser alguien importante tal vez, tener una novia, etc.

Tantas cosas que abandonare en un minuto, una parte de mí también quería gritar insultos a todas mis futuras asesinas, pero, sabía que no merecían nada de mí, ni siquiera mis palabras.

Los segundos pasaron lentos, algo que agradecí, porque gracias a eso podía disfrutar la vista de la bella luna en todo su esplendor. Solo unos segundos más y dejaría de existir.

Entonces empezó, sentir el cansancio, mi cuerpo dejo de moverse y mis papados caían, cerrando los ojos sentí que el aire mis pulmones salían, como si fuera mi último suspiro.

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Narrador

En el momento que el Loud cerró los ojos, una van se estaciono en la parte de afuera de la cochera, las luces delanteras como traseras de apagaron y las puertas del vehículo se abrieron, saliendo de este a los padres del joven Lincoln, alguna jóvenes desde las ventanas de arriba observaron a sus padres.

Las chicas dentro de la casa Loud, observaron que sus padres se acercan a la puerta de entrada, pero para su sorpresa ellas se desviaron del camino, dirigiéndose hacia el patio de su hogar. Pero vieron que antes de acercarse al patio frenaron y vieron que discutían,

_ crees que él nos perdonara por esto _ la señora Loud, pregunto a su esposo, el mismo agarro la mano de su esposa y respondió _ tranquila, estoy seguro que nos perdonara y todo volverá como antes, cariño _ el hombre se mintió a sí mismo y a su esposa, pensando que solo decir todo volverá a hacer como antes.

_si tienes razón, pero _ La señora no pudo continuar porque quiso llorar ahí mismo, pero pudo continuar _ no creo ser fuerte para verle los ojos, la culpa _ antes que terminara su esposo la abrazo con mucha fuerza.

_ Tranquila él no te odia, jamás te odiaría, vamos cariño, tenemos que ser nosotros como sus padres, poner fin a esto _ el señor Loud dijo, dejando de abrazar a su esposa, quien tomo de la mano y empezaron a continuar su camino hacia su hijo.

Cuando llegaron, observaron una escena que los perturbarías en sus sueños como en sus conciencias.

El primero en caer fue la señora, se arrodillo aun mirando a su hijo, sus lágrimas y la cara de horror que tenía era lamentable de ver, su cuerpo temblaba de solo acercarse.

Su esposo no cayo solo quedo en shock por ver a su único hijo varón paliado.

Delante de ellos y lo que sus ojos en conjunto observaban a su hijo, tirado en el suelo con la cabeza mirando al cielo, eso no fue lo que provoco los espasmos de los padres del albino, sino, la sangre derramada en todo el césped que provenían de su cabeza como de su pecho, su piel pálida acompañada con moretones y raspones, sus ojos cerrados y con una pequeña sonrisa placida, hizo que se acercaran que la señora Loud, arrodillada saliera disparado a su hijo.

_ Hijo por favor abre los ojos _ la señora Loud abrazo el cuerpo sin vida de su hijo y con sus manos acariciaba su mejilla _ vamos hijo solo abre tus ojos... por favor... _no obtuvo respuesta pero aún seguía hablando, sus lágrimas cayeron en el rostro del albino, pero el resultado aun nulo.

El señor Loud actuó rápido y llamo una ambulancia, desesperadamente escribió los números, coloco su celular a su oído y espero a que respondieran _ si señor dígame cual es la situación _ se escuchó en celular.

_ P-OR FAVOR VENGAN RAPIDI MI HIJO SE ESTA MURIENDO _ el señor dijo y continuo dictándole la dirección de su casa.

Adelante del hombre se veía a una madre que lloraba mientras aún seguía hablando con su hijo _ solo déjame ver tus ojos hijo... snif... t-e prometo que no te volveré a tratar mal, te comprare todo lo que tú quieras _ HIJO POR FAVOR, NO ME DEJES, NO ME DEJES, LO SIENTO, LO SIENTO_ la mujer hundió en pecho de su hijo mientras solo empezar a llorar_ AAaa...aaa... no te vayas... _ al no escuchar el sonido del corazón de su hijo la mujer muy rápidamente intento reanimarlo, golpeo su pecho con fuerza una y otra vez intentando que el corazón de su hijo vuela a latir.

Tanto su distracción intentado salvar a su hijo que no escucho a la ambulancia afuera de su casa.

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Narración Lincoln Loud

Oscuridad y un ambiente frio era lo que sentía, así que después de la muerte, no hay nada, eso me alegra, no tengo porque preocuparme por algo, no hay necesidad de querer algo, esto era la paz que estaba anhelando hace ya 1 año.

Sentí un jalón en mi mano izquierda en el momento que disfrutaba esto, me deje arrastrar hacia donde esa fuerza me enviaba. Y de un momento a otro aparecí en el parque de mi ciudad, estaba sestado en una de las bancas del al fondo, el cielo era completamente blanco y no había sol.

_ porque te rindes _ escuche al costado de mí, gire mi rostro hacia la persona que estaba sentado a lado mío. Y me encontré una chica de 8 o 10 años de edad, tenía un rostro perfecto en mi opinión, su cabello negro y ojos del mismo color, me parecieron muy bellos y su vestido blanco largo.

_ ¿quieres que te hable de aquello? _ respondí, intentando acomodarme en la banca _ ¿por cierto, dónde estamos? _ mirando un poco a mis lados, note que estábamos rodeados de árboles y algunos arbustos. Deje de ver a mi alrededor y me fije en mi acompañante.

_ no respondiste la pregunta, no te responderé hasta que tu respondas mi pregunta _ como una niña mal cridad hablo. Me miro algo mal, era algo gracioso viniendo de una chica tan linda y adorable.

_ Que maleducada eres ni siquiera te presentaste _ dije con seño fruncido, la verdad la niña si fastidiaba algo. Su reacción me costó una pequeña carcajada, ella me miro sorprendida, avergonzada y disgustada.

_ ¡QUUEE! _ ella grito talmente impactada, yo solo cruce mis brazos y la mire _ COMO TE ATREVES A DECIR QUE SOY UNA MALEDUCADA, TONTO, EL UNICO MALEDUCADO Y TONTO ERES TU _ vi cómo se sonrojo más, bajo la mirada y suspiro _ disculpa por eso, comencemos de nuevo, me llamo Annie _ se presentó.

_ creo que eso está mejor, yo soy Lincoln_ levante mi mano para estrecharla con ella, vi que dudo un minuto pero acepto al final. _ entonces ¿Dónde estamos? _

_ ni idea, ya va unas semana desde que estoy aquí _ respondió, sin ni siquiera importarle.

La mire como si le faltara un tornillo _ y no te preocupa, digo... tus padres y esas cosas _ creo que fue una pregunta algo personal, porque vi la tristeza en sus ojos _ ¡ay! Lo siento no debí preguntar eso de ver-.

_ No tienes que disculparte_ interrumpió, suspiro y dijo _ la verdad es que no los recuerdo mucho_ bajo la cabeza _ las primeros días fueron algo solitarios, me sentí sola, pero _ ella me miro los ojos, de verdad eran muy bonitos _ en mis sueños puede verte, mejor es decir pude ver tu sufrimiento, de verdad lo siento por lo que pasaste, vi que nunca te rendías, aun cuando esas chicas te golpeaban tú te preocupabas por ellas, no sé si eres un idiota o muy buena persona, solo sé que eres alguien especial y lindo _ ella freno y se sonrojo por eso, bueno yo también, una chica muy bonita que te decía que eras lindo no, no paso nunca.

Pero no me quede en eso, sabía que la chica a mi adelante, se sentía sola, tenía que ayudarla _ bueno, entonces es bueno que este aquí contigo, que haces aquí para divertirte _ ella me miro sorprendida, pero luego cambio a una bella sonrisa.

_ bueno no recuerdo mucho, pero tengo un pequeño recuerdo de un juego que consistía en perseguir a uno al otro _ ella puso un dedo en su mentón, en una pose algo pensativa, para mí se ve adorable.

_ creo que se llama, atrapadas, vamos a jugar_ con un de do le toque la frente y Salí trotando del lugar, ella, se quedó inmóvil por unos segundos, pero el resultado final, una sonrisa enorme. Y nos perseguimos uno al otro, por no sé cuánto, esto era tan divertido que ni siquiera pensé en lugar que me encontraba.

Narrador

Lugar # hospital de royal Woods #

El ti, ti, ti, resonaba después de intentos de los doctores, por devolverle la vida al joven albino, el trabajo duro un poco más de treinta minutos, algunos doctores se hubieran rendido a los veinte, pero, al escuchar las suplicas de la madre del chico, no pararon, eso logro que recupera la vida y una cirugía para sanarlo se hiciera, el cuerpo del albino para los doctores era delicado, moretones acompañado de heridas internas, los huesos del brazo izquierdo y su dos piernas quebradas, provocaron una reacción en cadena, los doctores hicieron todo para que se estabilice.

Tuvieron que pasar dos horas en cirugía para por fin terminal su cometido, ninguno se quedó en silencio y preguntaron a los señores Loud, que paso con su hijo, ellos na sabían que contestar, si revelar que por un año maltrataron física y mentalmente al chico, los llevaría tras las rejas, sabían que lo merecían y más, mucho más. Un conflicto interno dentro de sus cabeza, resolvieron su respuestas, de alguna otra forma egoísta o asquerosa, solo mintieron, diciendo que no sabían nada y que solo lo encontraron tirado en su patio.

Eso fue comido por los doctores y la policía que no creían, ni un poco que los culpables eran los padres e hijas.

En un acto de hipocresía decidieron adentrarse a ver a su hijo en su habitación, el cual fue negado por las enfermeras y el doctor, diciéndoles que aún no podían ver a su hijo, que no se encontraba muy bien, solo les hicieron esperar tres días.

Los padres aprovecharon eso días, para castigar a sus hijas, lamentablemente o justa mente, el señor Lynn, golpeo con su cinturón a cada una de su hijas espeto a la más pequeña de las Loud, Lili Loud.

Después de aquella justicia, hablaron con todas sus hijas y las llevaron a cada una al psicólogo que ellos usaron.

Cuando el tiempo que el doctor les dio termino, por fin pudieron ver a su hijo. Y sus conciencias les fastidiaban por mentir a los doctores.

_ Señor y señora Loud, tenemos noticias de su hijo _ hablo el doctor entrando a la habitación del albino, la curiosidad por saber el estado de su hijo, hiso que la señora Loud tomara la mano de su único hijo varón.

_ qu-e pasa con nuest-ro hijo _ pregunto la señora Loud, tartamudeando por el miedo y preocupación que sentía por la salud de su hijo.

_ disculpen pero déjeme decirle que su hijo se encuentra en coma y no sabemos cuándo pueda despertar_ el doctor dijo dejando en shock y abriendo los ojos enormes a los padres del chico. La mujer que sostenía la mano del chico se desmayó.