Ya había pasado un día entero desde la conversación con su hermano perdido, eran altas horas de la noche pero nadie dormía en la casa Loud, todas las hermanas y hermano Loud se encontraban realizando sus actividades diarias, ya fuera Luna con su música, Luan con sus bromas e incluso Lincoln leyendo sus comics en ropa interior, o por lo menos eso intentaban hacer, era notable la tensión que había en la casa desde el día anterior, todos intentaban mantenerse tranquilos y pacientes a que sus padres llegaran pero la realidad era totalmente distinta, simplemente no podía dejar de pensar en Brandon, en lo que les había dicho. Aun que había varias ocasiones donde se hacían enojar unos a otros e incluso no se hablaban por días, su unión y amor familiar siempre les permitía superar cualquier situación, así eran los hermanos Loud, siempre apoyándose unos a otros y amándose como una verdadera familia, estando ahí para cuando se necesitaran mutuamente, siempre creyendo que todo en el mundo estaba bien para todos.

Parte de esa creencia murió el día anterior ¿Cómo podrían creer eso de la misma forma ahora con el hecho de que mientras todos ellos vivían sus vidas felices los unos con otros, en otro lugar. . . totalmente alejado de ellos, un niño; su hermano, se encontraba sobreviviendo quien sabia como hasta que llego al orfanato, solo para seguir igual de solo e ingenuo de su existencia?

El ex único varón de la familia, Lincoln; no podía avanzar de la primera pagina de su comic. Ni siquiera su muy cómoda ropa interior roja que su pequeña princesa Lola le había obsequiado podía darle la comodidad necesaria para concentrarse en su lectura, no podía dejar de recordar aquello que había pensado justo antes ir a aquellas vacaciones familiares.

¿Cómo seria mi vida si no hubiera tenido a mis hermanas a mi lado?

-Hehehehe. . . supongo que ya tengo mi respuesta- Pensó el Peliblanco mientras dejaba caer su comic y hundía su cabeza en sus brazos. La depresión crecía cada vez en el, la puerta de su cuarto de repente se abrió revelando a Luna.

-Lincoln. . . ¿estas bien bro?

Lincoln no levanto la mirada para observar a su hermana rockera, Luna se sentó en la cama junto a el y empezó a acariciar su cabeza.

-¿Estas bien hermanito?

-Que si estoy bien? Ja, no lo sé Luna. ¿Parezco estar bien?- Lincoln respondió aun sin levantar la cara.

-Supongo que la respuesta era obvia, lo siento. . .

Lincoln observo a su hermana, avergonzado por lo que acababa de decir.

-No Luna. . . yo lo siento, no tenia derecho a hablarte de ese modo, es solo. . .

-No te preocupes hermano, te comprendo. Yo tampoco puedo dejar de pensar en. . .el.

-¿Te refieres a nuestro hermano?

-Eso aun no esta del todo comprobado. . .

Lincoln observo a su hermana con una cara de ¿En serio?

-Esta bien! si! Supongo que realmente no hay duda. . . aun así, no estaría de mas una confirmación de nuestros padres. . . si obtienen alguna.

-¿Crees que realmente hallaran alguna respuesta?

-No lo se Lincoln, ni siquiera sabemos a donde fueron, Ni siquiera Lori lo sabe, solo nos queda esperar.

-Entiendo. . . dime Luna, Independientemente lo que pase ¿Qué crees que ocurrirá ahora? Me refiero ¿Con Brandon?

-Yo. . . tampoco se eso hermano, realmente no lo se, supongo que mama y papa decidirán eso pero. . . conociendo a mama, si en verdad es convencida de que es nuestro hermano, es muy obvio lo que hará.

-Te refieres a. . .

Antes de que Lincoln pudiera terminar, el sonido de un taxi afuera de su casa lo distraje, rápidamente observo por su pequeña ventana, sus padres salían del vehículo y empezaron a caminar hacia la casa.

-Mama y papa están aquí!- Grito Lincoln y de inmediato corrió a la planta baja para recibirlos, no tardo mucho para que sus diez hermanas se le unieran justo en frente de la puerta de entrada. La espera se hizo incluso mas insoportable pero hacían todo lo posible para no salir a bombardear a sus padres con preguntas.

…..

Rita Loud sentía que todo el cuerpo le pesaba, cada paso que daba era como levantar un ladrillo en lugar de sus pies, de no ser por tener a su esposo a su lado, lo mas seguro es que hubiera colapsado hace rato, Lynn Sr no se encontraba mucho mejor pero sabia que necesitaba ser fuerte para su querida esposa, ambos amaban a sus hijos grandemente pero no era secreto que ella era mucho mas pasional que el cuando se trataba de su bienestar.

El matrimonio ingreso a la casa y de inmediato notaron a todos sus hijos frente a ellos. . . o al menos a casi todos, ellos los observaban con clara preocupación en sus rostros, en condiciones regulares, los señores Loud se hubieran enfurecido por encontrar a sus hijos despiertos tan tarde, la sorpresa de los chicos Loud fue grande cuando sin ningún aviso, Rita corrió para intentar abrazarlos a todos, cosa que le fue imposible aun con sus dos brazos estirados al máximo, su esposo se le unió un segundo después. Rita empezó a llorar otra vez mientras presionaba mas su abrazo, como si temiera que sus hijos pudieran desaparecer si los soltaba. Por su parte, todos sus hijos estaban en shock al ver a sus padres así, aun cuando su madre les daba mucha libertad en la casa. Conocían muy bien lo dura y autoritaria que podía ser si se lo proponía, solo el hecho de poder controlar a once hijos era prueba fidedigna de ello. Sin dudar, cada uno de ellos devolvió el abrazo a sus progenitores, Leni, Lola y Lily incluso lloraron también, no soportaban ver a su mami así.

Pasaron mas de diez minutos para que Rita lograra calmarse lo suficiente para poder soltar a sus hijos, luego procedió a ir al comedor donde ella, su esposo y todos sus hijos se sentaron alrededor de la mesa familiar. Lynn Sr no tardo en preparar chocolate caliente para todos. Aun que era algo delicioso que todos disfrutaban, también sabían que era una mala señal, una señal de que se acercaba una platica bastante seria, mas aun cuando no ordenaron a los pequeños ir a sus habitaciones. Era una platica en su totalidad familiar.

Una vez todos reunidos y con sus bebidas en mano, Rita los observo una vez mas, sus hijas e hijo, sus tesoros, lo mas importante en su vida. Una a una, los observo, por alguna razón, dejo de ultimo a Lincoln, su pequeño caballerito, con esos hermosos cabellos blancos, herencia de su abuelo, ninguno de sus hijas o hijo jamás lo pregunto pero la verdad es que su padre también había nacido con cabello blanco, siendo honesta, al tener tantas hijas, era sorprendente que solo Lincoln saliera peliblanco pero no era hora de preguntarse eso de nuevo. Sus ojos seguían posados en Lincoln, mirándolo detenidamente, de pronto. . . algo mas apareció, justo detrás de Lincoln se encontraba de pie, como una especie de espejismo o fantasma, El!, Brandon! Observándola con una mirada llena de rencor, esos ojos lo decían todo.

-Te odio!

Una vez mas, Rita tuvo que contenerse para no llorar y correr a abrazar a su hijo, solo se quedo sentada mientras cubría su rostro con sus manos. No pudiendo esperar mas, Lori hablo:

-Papa! ¿Qué esta ocurriendo? ¿Por qué mama esta así? Por favor contesta!- pregunto desesperada aun que en el fondo, ya tenia una idea clara de que podría ser.

Lynn Sr observo a su hija mayor por algunos segundos, luego al igual que Rita, dio un reojo a todos sus hijos, no era fácil decir lo que quería decir pero sabia que debía hacerlo de todas formas. Luego de dar un sorbo grande de chocolate, el patriarca de la familia hablo:

-Muy bien Lori. . . chicas. . . Lincoln, les explicare. Su madre y yo viajamos a Washington

Todos los chicos Loud suspiraron en sorpresa pero Lynn no se detuvo.

-La razón fue que en ese lugar, en una prisión. . . se encontraba el doctor que se encargo del parto de Lincoln y si, antes de que cualquiera de ustedes pregunte, ese doctor esta encerrado en ese lugar.

-Pero ¿Por qué?- Rápidamente cuestiono Luan.

-A eso voy mi pequeña comediante, verán; ese doctor. . . No! No creo que merezca que me refiera a el como doctor, ese monstruo esta en prisión por venta ilegal de bebes recién nacidos.

El suspiro de sorpresa de sus hijos fue aun mayor que el anterior.

-Me lo quito. . .

Todos, incluido Lynn Sr desviaron la mirada hacia Rita, quien empezó a dar golpes no muy suaves a la mesa.

-¡Me quito a mi bebe! ¡Ese maldito alejo a mi bebe de mi! ¡ME LO ROBO! ¡MALDITO! ¡ME ROBO A MI BEBE!- Rita se lanzo a los brazos de su esposo, hundió su cabeza en su pecho mientras seguía derramando lagrimas de desesperación.

-¡Rita! ¡Contrólate! Se que te duele ¿Cómo crees que yo me siento? Pero necesitas tranquilizarte

-No. . . no puedo Lynn, simplemente no puedo, ¿Cómo puedo calmarme cuando haya afuera mi bebe esta pensando lo peor de mi.

Sabiendo que sus hijos habían escuchado lo que su madre recién había dicho, el Sr Loud supo que ya no era posible seguir dándole vueltas al asunto.

-(Suspiro) Chicas, Lincoln. . . verán, durante nuestra visita con ese sujeto, el nos confeso. . .

Lynn Loud Sr conto a sus hijos todo lo que William le había confesado a el y a Rita, decidió no guardarse nada, con mucho detalle, les hablo de todo lo transcurrido, por obvias razones solo dejo afuera la parte donde Rita de una manera casi sobrehumana, estuvo a punto de romper un vidrio fortificado para estrangular a esa basura, aun daba gracias a Dios de que no se hubiera roto la mano, su esposa podía ser realmente tenebrosa cuando quería. Todos los chicos Loud escucharon con detenimiento y sin atreverse a interrumpir a su padre ni una sola vez. Para cuando termino, el silencio reino en la habitación por varios segundos. Los hermanos Loud no sabían que decir, todos habían pensado que una confirmación de sus padres no seria tan impactante, de cierto modo ya habían creído acerca de la veracidad de tener otro hermano, las pruebas de Lisa daban fe de ello. . . pero aun así, el escuchar la historia de sus padres en aquella prisión, dejando totalmente en claro que Brandon si era su hermano, fue como una balde de agua fría sobre todos ellos.

-Ento. . . entonces si es real, tengo un hermano gemelo- Dijo Lincoln rompiendo el hielo, su voz sonaba baja.

Si hijo- Respondió su madre ya sintiéndose un poco mejor pero sin dejar de abrazar a su esposo.

-No puede ser. . . no puede ser!- Pensaba Lola, rehusándose a creer sin éxito.

-Esto es literalmente horrible! Entonces ese. . . esa persona secuestro a mi hermanito y lo abandono en un callejón solo y sin protección

Aun dolidos por escuchar esa espantosa verdad, ambos padres asintieron. Lori noto de inmediato como sus palabras parecían abrir heridas muy frescas en sus padres.

-Oh! Lo siento- Dijo avergonzada.

-Esta bien Lori, no es como que hubieras dicho una mentira.

-Pero entonces ¿Qué paso con el después? ¿No les dijo nada acerca de eso?- Pregunto Luna.

-No hija, después que su cómplice dejo abandonado a tu hermano, jamás lo volvieron a ver, creo que esa pregunta solo la podría contestar Brandon.

-En ese caso, como que debemos ir al Orfanato a preguntarle! y después llenarlo de muchos abrazos y besos!- La segunda hermana mayor dijo muy preocupada.

Tanto Rita como Lynn Sr observaron a su hija horrorizados, ¿Realmente acababan de escuchar bien lo que Leni acababa de decir? ¿Orfanato?

-¡Leni!- Gritaron todas sus hermanas y Lincoln, por su puesto que tenían planeado contarle a sus padres acerca de su encuentro y platica con el chico pero nunca imaginaron que Leni lo mencionaría tan adrede. Antes que cualquiera pudiera aclarar la situación, Rita tomo a Lori por ambos brazos.

-Hija ¿A que te refieres con Orfanato? ¿Mi hijo vive en un Orfanato actualmente? ¿No tiene padres adoptivos o algo así?

La voz de Rita se escuchaba desesperada, claro que la idea de que Brandon, tras obviamente haber sobrevivido el abandono, hubiera vivido en algún Orfanato por un tiempo, pero también creyó que tras un tiempo, pudo haber sido adoptado por personas cariñosas, incluso ya había empezado a pensar en que decirle a los "Padres adoptivos" de su bebe, solo el pensar que el siguiera viviendo solo y sin familia fue otro flechazo directo al corazón, mas que nunca. Esperaba que Leni estuviera de nuevo fantaseando y que Lori le respondiera que era mentira, pero no fue así. Lori lentamente negó con la cabeza. Afirmando que si! Su pequeño niño vivía solo y sin padres que lo amaran. Una vez mas, las cataratas se abrieron en los ojos de Rita. Requirió otro abrazo grupal de familia y muchos minutos para calmarla.

-Mama, tranquila. . . Por lo que pudimos ver, Brandon parecía estar muy bien, incluso se le veía feliz con su vida, pese a vivir ahí- Dijo Leni tratando de consolar a su madre, no hacia un buen trabajo.

-Leni! en serio, déjame manejar esto a mi ¿Ok?- Respondió Lori claramente irritada. La modista solo asintió un poco asustada por la actitud de su hermana mayor.

Una vez que Rita se había calmado lo suficiente de nuevo, Lori le conto todo acerca de lo que hablaron con Brandon, por un breve momento, Rita se sintió muy feliz al escuchar que su pequeño parecía no guardarle rencor pero no duro mucho tras escuchar que el no deseaba verlos ni tener nada que ver con ellos. Aun que le doliera muchísimo, en el fondo comprendía por que su pequeño decía y pensara eso. ¿Cómo podía pedirle a su segundo varón que la amara cuando literalmente vivió toda su vida sin ella y peor aun, pensando que lo desecho? Tanto ella como su esposo sabían que se encontraban en una situación complicada, tal vez la mas difícil de toda su vida.

Pese a las protestas de sus hijos, los Señores Loud los enviaron a sus habitaciones, sentían que ya habían hablado lo suficiente, sin mencionar que ya era bastante noche, todos se despidieron con un ultimo abrazo grupal y procedieron a dormir si era posible, lo mas posible era que no. En todos ellos se formulaba la misma pregunta.

¿Qué harían sus padres ahora?

…

Ya con todos su hijos arriba, Rita y su esposo se abrazaron una vez mas, eran raras las veces que se sentían tan tensos y cansados. Haber cuidado a tantos hijos por años los había acostumbrado a manejar muy bien todo tipo de presiones pero esto estaba en otro nivel. Quizás una de las pruebas mas difíciles de su vida.

-Lynn. . .- Dijo Rita observando a su esposo.

-¿Si querida?

-¿Sabes que debemos hacer? ¿Verdad?

-Lo se. . . ¿Pero crees que podremos?

-La verdad no lo se, pero aun así lo intentare con todas mis fuerzas.

Lynn Sr observo a su esposa, casi podría jurar que veía fuego en sus ojos.

-¡Es hora de traer a nuestro hijo a casa!

…..

-¡Muy bien Directora! ¡Ya me voy! ¡Volveré entrada la tarde!

-Esta bien Brandon, ¡solo recuerda tu toque de queda!

-¡Lo hare!

Brandon caminaba bastante tranquilo hacia la salida del Orfanato, había dormido muy bien, de hecho no recordaba ninguna noche tan buena como esa, el haber aclarado las cosas con los chicos Loud le daba una sensación de libertad muy grande. Ellos de seguro se encargarían de hablar con sus padres y seguramente lo dejarían en paz, no importaba lo que la hermana mayor hubiera dicho, simplemente era imposible que regresaran, no importaba que explicación tuvieran, quería creer que la Sra Rita entendería, aun mejor; ya teniendo once hijos que cuidar ¿Para que querría uno que ni siquiera quiere ser parte de su familia? Simple lógica que un adulto no debería tener problemas en entender.

Con una patada abrió la puerta de enfrente para recibir un nuevo día.

-¡Buenos días Mundo! Estas list. . . ¿Eh?

Justo en frente del chico, dos figuras adultos que el reconoció inmediatamente se encontraban paradas justo en frente de el.

-Hola. . . hijito- Dijo Rita con una voz temblorosa.

-. . . . 🐬🐬🐬 Madre- Fue lo primero pensó el chico antes de ser literalmente asfixiado en un potente abrazo de oso.