Capitulo 15: Fracaso de Plan
Brandon observa a los chicos Loud por varios minutos sin decir nada, toda habilidad para hablar había abandonado su cuerpo, todos en la habitación también le observaban, no solo los hermanos Loud, si no también los pocos niños huérfanos presentes en la habitación. Al igual que el peliblanco, nadie se atrevía a decir nada. Sorprendentemente fue una pequeña niña quien rompió el hielo, se acercó a Brandon y dijo:
-Brandon, ese niño es igual a ti, ¿Acaso es tu hermano?
Brandon volteo a ver a la niña, inmediatamente la reconoció, no tenia mas de cuatro años, otra dulce pobre alma quien tuvo la mala suerte de tener escorias como padres. Saliendo de su sorpresa, el chico se arrodillo.
-No Estela, no es nadie, yo también estoy sorprendido por su parecido conmigo pero te puedo decir que no estamos relacionados.
-Entiendo.
-Sí, pero. . . podrías hacerme un pequeño favor e ir a tu cuarto un rato, debo arreglar ciertas cosas aquí.
-¡Esta bien!- Contesto la niña y de inmediato corrió fuera del vestíbulo, Brandon la vio irse y de inmediato se puso de pie y observa a las demás chicas del Orfanato.
-Eso va para todos, por favor salgan de aquí ahora!
Todos los niños salen de la habitación también, los hermanos Loud no pasaron desapercibida la autoridad que Brandon ejercía sobre todos los niños esos, Lola incluso no pudo evitar sentir un poco de respeto por eso. Una vez que todos estaban solos, Brandon con sus brazos cruzados y una mirada seria, hablo:
-Así que realmente me encontraron
La hermana mayor observa a su pequeño herm. . . a Brandon y concurso:
-Literalmente eres difícil de encontrar chico, y lo creas o no, nuestra intención no es causarte problemas, solo queremos hablar contigo, si prometes no intentar escapar de nuevo, quiero proponerte que charlemos en el parque cerca de aquí.
-¿Qué pasaría si digo que no?
-Hablare con la encargada de este lugar y le platicare acerca de tu pequeña escena en nuestra casa, estoy seguro que le encantara oír de todo lo que hiciste y dijiste ahí. No soy experta pero se que eso seria un lio muy gordo para ti.
La chica sorprendentemente creyendo que tenia al peliblanco acorralado pero no contaba con que este le sonreiría de vuelta.
-Tienes razón, estoy seguro que a ella ya algunos policías les encantara escuchar como fui literalmente forzado a entrar a una casa contra mi voluntad, secuestrado, y golpeado, no te preocupes; Te enviare canastas con fruta a la cárcel.
Tanto Lori como los demás se quedaron de piedra, en serio no esperaban esa clase de respuesta.
-De acuerdo. . . pero aún así es tu palabra contra las de una familia gigante, perderías y los sabes.
Si Brandon estaba asustado, podía esconderlo muy bien, el chico ni siquiera parpadeo.
-(Suspira) Esta bien, charlemos en el parque, y no voy a escapar. ¿A dónde escaparía de todas las formas? Ya descubri donde vivo y no estoy de humor de volverme un vagabundo. Pongámonos en marcha.
-Muy bien- Respondió la rubia mayor.
-Pero escuchen bien esto Louds! Si alguno de ustedes intenta algo en mi contra, ¡me defenderé! Con violencia si es necesario, ¿Entendido?
-Como el cristal, ahora vamos al parque-
Brandon se dirigió al parque en su patineta mientras que los chicos Loud lo seguían en Vanzila, una vez ahí, encontraron un lugar apartado de las demás gente y se sentaron en el césped. Brandon observaba frente a frente a los causantes de sus recientes problemas, no queriendo extender mucho la situación, hablo:
-Observando a su hermano Lincoln, supongo que la respuesta de cómo dieron conmigo es obvia pero aún así preguntare, ¿Como dieron conmigo?
Lynn se acerca unos pasos al peliblanco.
-Veras chico, lo que paso fue. . .
…..
-Hmmmmm chicas, ¿Están seguras que esto funcionará?- Pregunto Lincoln mientras observaba su nuevo Look y peinado.
-Muy seguras Lincoln, además debes admitir que te queda muy bien, ya es hora que cambies tu estilo un poco ¿No crees?- Contesto Lisa.
-Lo dice la niña que usa el mismo suéter verde todos los días- Pensó el peliblanco pero no podía negar que esa ropa lo hacia sentir un poco más genial.
Luego de eso, Lincoln empezó a caminar por el vecindario, Lisa y los demás lo monitoreaban desde Vanzila con un receptor y micrófono que Lincoln llevaba en sus ropas, el chico camino por mas de una hora sin resultados, tanto el como sus hermanas empezaban a desesperar.
-Tal vez el no vive por aquí después de todo
-Comienzo a creer que puedes tener razón Lincoln, ni modo; Vuelve cuanto antes a vanzila y planearem. . .
-¡HOLA BRANDON!
Lisa fue interrumpida por esa voz a la distancia, Lincoln inmediatamente volteo a muy y observa que un niño probablemente un par de años menor que el se le acercaba a toda velocidad.
-¡Bingo! Lincoln, trata de actuar lo más natural posible y no te pongas nervioso.
-Enterado Lisa
-¿Eh? ¿Con quién hablas Brandon?
-¿Yo? Yo no hablo con nadie, no hay nadie aquí para hablar, solo un loco hablaría consigo mismo ¿no crees?
Sin saberlo el peliblanco, en la camioneta familiar, todas las hermanas golpeaban sus cabezas con su palma.
-De acuerdo. . . estas un poco raro pero cambiando de tema, parece que ya esas locas y raras chicas que mencionaste se han ido! Supongo que por eso saliste.
-¿Locas y raras?- Pensaron Lincoln y sus hermanas al otro lado de la línea. Mientras el peliblanco luchaba por no reír, los demás ya imaginaban tener a Brandon frente a ellas para darles una buena lección.
-Eso es. . ¡si! En efecto, que bueno que ya se fueron! Solo me estaba asegurando de eso ja ja ja!
-Muy bien Brandon, empiezas a asustarme un poco, supongo que aun estas un poco adormitado, ven; ¡Volvemos al Orfanato!
El chico no se dio cuenta, pero una vez que esa palabra salió de su boca, el chico frente al y las hermanas que escuchaban se quedaron helados, ninguno realmente había esperado escuchar esa palabra cuando decidió dar caza al chico.
-¿Di...dijiste Orfanato?
-Ahhhh, ¿Si? Brandon. . . ¿Estás seguro de que no te estás metiendo nada? Definitivamente estas muy raro, mejor vámonos ya, es obvio que necesitas descansar más.
El empezó a correr y Lincoln, un poco recuperado del shock, le siguió a toda marcha, rápidamente Lori subió a la camioneta y procedió a encontrar a Lincoln con el localizador de su hermana nerd. Mientras conducía, no pudo evitar ver por el retrovisor las expresiones de sus hermanas. No era difícil imaginar que todas pensaban en lo mismo, incluso ella no podía sacarse ese pensamiento de la cabeza.
-Orfanato. . .
…
-Interesante, supongo que realmente los subestime, ese fue un error muy grande; Realmente pensé que había cubierto todo rastro hacia el Orfanato- Dijo el peliblanco un poco impresionado.
Al oír eso, Lincoln que había estado observando a Brandon con una sonrisa de victoria por haber sido más astuto que su doble, inmediatamente cambio a observarlo con ojos de preocupación y pena, Brandon lo miro de vuelta con una expresión molesta.
-Chico, realmente no me gusta la forma en que me miras, voy a pedirte que dejes de hacerlo.
-¿Qué? ¡Oh! Lo siento, es solo que. . . no te imaginas que tu
-¿Viviera en un Orfanato? Si si sorpresa, sorpresa; No era tan difícil de imaginar si lo piensas bien pero dejemos eso de lado y vamos directo al grano, ¿que desean de mi? ¿Qué podría motivarlos a pasar por tantos líos solo para encontrarme? ¿Tanto así quieren vengarse por lo que le hice a su malcriada hermana?
Antes de que cualquiera pudiera contestar, la hermana mayor dio un paso al frente y respondió:
-Literalmente tenemos muchas cosas que arreglar y discutir pero por ahora, nuestra charla tendrá que bastar, deseo hacerte unas preguntas. ¿Esta bien?
-Me parece bien, pero de una vez te digo que si son muy personales, no responderé. Jamás le hablo de mi a nadie.
-Muy bien.
…
-¿Tu bebe? No se de que hablar. . .
Rita golpeo el vidrio con fuerza, no lo suficiente para rajarlo pero el punto estaba dado, no estaba de humor para jugar al juego de las adivinanzas. William la observaba por unos instantes, suspiro hondo y se resigno, igual no importaba ya lo que dijera, era obvio que jamás saldría de ese lugar, ya que importaba una confesión más.
-¡De acuerdo! ¡Entiendo! Pero puede ser un poco larga la historia.
-Viaje desde Royal Woods a escucharte desgraciado, tengo todo el tiempo del mundo. Empieza a hablar.
…..
William se encontraba en su escritorio revisando algunos documentos, la hora de ir a casa ya estaba cerca, simplemente esperaba a su último paciente, luego de algunos minutos; ella y su esposo entraron a la oficina. El los recibió con una sonrisa y un abrazo, ya venia conociendo a la pareja desde hace tiempo. Una vista simple parecía una pareja común y corriente, excepto por un pequeño detalle muy interesante. ¡Realmente les encantaban los niños! Hasta el momento, el mismo había supervisado cinco embarazos de la Señora Rita Loud, increíblemente la pareja solo había tenido niñas. Uno creería que con tantos intentos al menos ya deberían tener un varón pero no, puramente niñas.
Ahora ahí estaban, visitándolo con un sexto embarazo; Hasta este punto el doctor ya había considerado preguntarles si conocían de la existencia de condones y anticonceptivos pero por obvias razones profesionales y de ética, jamás lo hizo, si la pareja quería formar una especie de mini armada, ese era problema de ellos.
-¡Doctor Clark! Que gusto verlo de nuevo- Dijo Rita dando un abrazo a su amigo.
-Hola Rita, es un gusto tenerlos por aquí otra vez, veo que no han perdido el tiempo desde la ultima vez que los vi, aun que esta vez tardaron un poco mas, después de pasar un año completo, empezaba a pensar que ya habías cerrado la fabrica Lynn.
-Jajajaja, entiendo tu punto William, Rita y yo pensamos que debíamos tomarnos un pequeño descanso después de tener a Lynn Jr.
-Una decisión comprensible amigo, Literalmente tuvo una hija por año. De haber seguido así, posiblemente hubieran roto algún disco o algo así jajajajaja!
-Te aseguro que no es nuestra intención, pero si te diré que queremos una familia más grande, tal vez incluso podrían venir un par más después de este niño.
-Si tu lo dices, ¿Niño? Creí que después de todo lo pasado, ya estabas resignado a tener un ejército femenino.
Rita sorprendentemente y empezó a acariciar su estómago.
-Yo. . . Realmente entiendo a que te refieres pero. . . Tengo el presentimiento que esta vez será diferente, creo que esta vez si tendré el niño que tanto anhelo. Un pequeño caballerito que proteja a sus hermanas mayores y menores por venir.
-Admiro tu optimismo Rita, ¡muy bien! Entonces a trabajar.
….
William monitorio el avance del niño por bastantes semanas, todo iba muy bien, parecía que el sexto regalo del cielo de los señores Loud también vendría sin problemas, aun que algunas lecturas llamaron bastante su atención, TOTALMENTE su atención. Ya las había visto antes pero no podría estar seguro hasta tener un ultrasonido. Cuando finalmente el día vino, una sonrisa que no había tenido en mucho tiempo de regreso.
-Parece que Rita finalmente tendrá el hijo que quiere y no solo eso. . . compenso el año que no tuvo hijos, increíble- se dijo a sí mismo.
Sin perder tiempo, William de inmediato saco uno de sus ultrasonidos falsos, lo llevo a la pareja quienes no pudieron ocultar su felicidad al saber que finalmente un niño venia en camino. Al irse los Louds, William no perdió tiempo en buscar un número de teléfono.
-¡Hola! Señor DeAngelo, al fin le conseguí un paquete para usted y su querida esposa.
Por los siguientes meses, todo fue de maravilla, "El paquete" crecía fuerte, tenia que darle crédito a los Loud, siempre tenían bebes muy sanos. Cuando finalmente llegó el día, William recibió a la señora Loud en la sala de partos y no le costo trabajo convencerla de que parecía haber alguna especie de anomalía con su bebé y parecía que una Cesaría seria necesaria. Sin pensarlo mucho y pensando que su amado "único" hijo podría estar en peligro, Rita no dudo ni por un instante en dar su permiso para proceder con la operación. A veces William olvidaba lo fácil que era.
Una vez bajo la anestesia, William realizó la operación y finalmente el paquete salió, un hermoso y perfecto niño con mechones blancos.
-¿Blancos? Hmmmm, eso es nuevo y muy poco habitual, tal vez incluso pueda subir el precio- Pensó
Rápidamente pasó el niño a su enfermera de confianza y esta lo limpio y dejo presentable, después procedió a llevárselo lo más pronto posible para prepararlo para la entrega mientras William se encargaba de terminar su operación con Rita. Como si el tiempo fuera del indicado, unos minutos después, Lynn Loud entró a la habitación solo para observar a su pequeño. Como era la rutina, hubieron lagrimas, abrazos y gritos de alegría por la maravilla del nacimiento. Uno diría que ese señor ya no mostraría tanto entusiasmo al haber tenido ya tantas hijas pero no, seguía tan emocionado como con la primera, podría ser que el que fuera un niño al fin tener algo que ver.
Luego de dejar a la feliz pareja con su niño en la habitación, William se dirigió a una habitación en la parte trasera del hospital, ahí ya lo esperaba su enfermera con el paquete en brazos.
-¡De acuerdo! Llego el dia de pago! Me pregunto a dónde iré a jugar primero. Pensaba mientras esperaba a su cliente. Luego de algunos minutos; William empezó a impacientarse, incluso a ponerse nervioso, esté tipo de transacciones debían hacerse en el tiempo justo o la operación podría verse comprometida, de la nada; su celular empezó a vibrar, rápidamente lo tomo y contesto la llamada, era de su cliente.
-Señor DeAngelo ¿Dónde se encuentra? Recuerde que esto debe hacerse rápido! Ya tengo aquí a su nuevo hijo. . . . ¿Señor DeAngelo? ¿Esta ahí?
-Lo siento, pero no podemos seguir adelante, mi esposa. . . mi esposa y yo cambiamos de opinión, no podemos hacerle eso a una madre.
-¿Qué? ¡NO BROMEÉ! USTED SABE QUE NO PUEDO HACER ESO! ¡ESTE NIÑO TECNICAMENTE NO EXISTE! NO PUEDO IR A DECIRLE A LA MADRE OH! LO SIENTO, COMETIMOS UN ERROR! EN REALIDAD TUVO GEMELOS!
-Aún así. . . le estamos robando a su hijo.
-¡NO ESTAN ROBANDO NADA! ¡ELLA NI SIQUIERA SABE QUE EXISTE! ¡NO SUFRIRA NINGUNA PERDIDA! ¡VENGA AHORA POR EL Y TRAIGAME MI DINERO!
-Lo siento pero no puedo. . . no podemos! Ya estamos abordando el avión, no nos llame ni nos contacte de nuevo.
-¡No! ¡No se atreva a hacerme esto! ¿Hola? ¿HOLA?
William trato de llamar a su ex cliente por más de 10 minutos pero no hubo suerte, frustrado, arrojo su teléfono al piso, rompiéndolo en mil pedazos, ahogo un grito de frustración, no le convenía que alguien lo escuchara y viniera para encontrar con un bebe sospechoso. Con algo de miedo después de ver la escena, la enfermera se acerca a William y se pregunta:
-Doctor. . . ¿Qué haremos ahora?
-¡Grrrrr, maldito ricachón estúpido! Espero que ese avión se estrelle e inexplicablemente solo el y su maldita estéril esposa sean los únicos muertos! De acuerdo. . . Déjame pensar.
-No. . . ¿No podríamos solo llevar a la sala con los demás niños? Nadie sabe de quién es, el hospital se hará cargo.
-¿Eres estúpida o que? ¡Recuerda que el hospital ya tiene registro de su hermano en este hospital! No se te olvide que el ADN de los gemelos es idéntico, no tardara mucho para que le hagan exámenes y descubran esa irregularidad lo cual llevara a los Loud y lo cual al final llevara a nosotros! ¡Ese niño no se puede quedar aquí!
-¿A que se refiere doctor? No querrás decir que lo (traga saliva) lo matemos ¿Verdad?
-¡No tonta! ¡Puedo ser muchas cosas! ¡Pero nadie jamás dirá que soy un infanticida! ¡Llévalo más lejos que puedas! ¡Fuera de este pueblo! ¡No me importa donde pero llévatelo! Y ni se te ocurre decir una palabra de esto ¿entendido?
-Sí... ¡sí doctor!
Rápidamente la enfermera colocó al niño en una pequeña canasta con sabanas, le dio de comer un poco de fórmula para evitar que llorara por el hambre. Tomo una caja completa de la bodega y de inmediato lo llevo a su auto. Condujo durante horas hasta que finalmente llego a Hatelzuki, ya era de noche cuando llego, presa del pánico y el miedo, llevo al niño a la parte urbana y en un pequeño callejón dejo la canasta, dejo junto a esta la caja con fórmula para que quien quiera que lo encuentre pueda alimentarlo, antes de regresar a su auto. Lo observamos por ultima vez.
-Lo siento pequeño, esto no debía pasar, se suponía que ahora estarías siendo mimado por dos padres felices de tenerte. . . de veras lo siento, ADIOS!
La enfermera comenzó su largo y triste regreso para informar a su jefe de lo que había hecho, aún recién nacido, el pequeño logro abrir sus pequeños ojos para observar que se encontraba solo, lo único que pudo hacer en ese momento fue llorar bajo las estrellas. .
…
-¡ERES UN MALDITO MONSTRUO!
Rita grito y golpeo el vidrio con todas sus fuerzas, este no ocurrió pero si una gran rajadura quedó en donde el puño de la madre furiosa había estado un segundo atrás.
-¡Guardias! ¡Ayuda por favor!- Grito William en pánico.
-¡ERA MI HIJO! ¡MI SEGUNDO VARON! MI BEBE! Y TU DEJASTE QUE LO ABANDONARAN AHI! ¡NO ME TENIA A SU LADO PARA PROTEGERLO! ¡PARA CUIDARLO! PUDO HABER MUERTO SOLO EN ESE HORRIBLE CALLEJON! ¡MALDITO! ¡MALDITO! POR ONCE MALDITOS AÑOS EL NO ME HA TENIDO A SU LADO! SEGURAMENTE PENSANDO QUE SOY LO PEOR QUE EXISTE! ¡ESTO JAMAS TE LO VOY A PERDONAR! ESPERO QUE TENGAS UNA MUERTE HORRIBLE Y TE PUDRAS EN EL INFIERNO!
Rita seguía golpeando el vidrio para poder alcanzar a William y poder estrangularlo con sus propias manos, su esposo y tres guardias tuvieron que intervenir para detenerla, no ponían mucha resistencia, en el fondo querían dejarla, incluso hasta querían ayudarla pero sabía que no podían dejarla. arruinar su vida por un desgraciado como el. Las cataratas de lagrimas no tardaron en llegar, incluso el guardia John se retiró un par de sus ojos, jurando internamente en darle un trato aún más especial a William esa noche.
….
La triste pareja abandonó esa prisión para dirigirse directamente a su hotel, Rita se veía como si hubiera envejecido de pronto, sus ojos no dejaban de derramar lágrimas, Lynn no se veía mejor, no había llorado tanto como su esposa pero el solo verla así era suficiente para partirle el alma. Durante todo el viaje en taxi no dejo de abrazarla, su esposa no lo rechazo, necesitaba todo el cariño y consuelo que pudiera conseguir en ese momento. Una vez en su cuarto, aun sin hacer contacto visual con su esposo. La madre habla:
-¿Nos odia la verdad?
-¿Qué?
-Nuestro hijo. . . Brandon, nos odia ¿Verdad?
-Rita yo. . . no podría asegurarlo.
-¿Por qué no me odiaría? Ha vivido toda su vida creyendo que lo abandone- Nuevas lagrimas comenzaron a salir- Mi hijito. . . mi bebe cree que yo lo abandone! Lynn. . . MI HIJO NO PUEDE SEGUIR CREYENDO QUE LO ABANDONE!
Rita sujeta a su esposo con todas sus fuerzas mientras repetía las mismas palabras una y otra vez, su corazón se rompía cada vez más cuando recordaba lo que escucho de los labios de su propio hijo.
¿Quiénes son tus padres?
-Deje de hacerme esa pregunta hace mucho tiempo
-Esa es toda la información que obtendrá de mi de esos dos tontos.
-¡Tontos! Tontos! Tontos! TONTOS! TONTOS! TONTOS!
Esa palabra hacia eco en su cabeza, cada eco acompañado con una punzada al corazón, ¿Esa era la impresión que su pequeño tenia de ella? ¿La que siempre ha tenido de ella? Tal vez incluso peor.
Para ese momento ya eran cataratas de lágrimas nuevamente, Lynn; al ver a su esposa así, casi como si tuvieran una especie de conexión psíquica, el también recordó aquellas palabras del chico, el solo pensar que alguno de sus hijas o hijo podría odiarlo era inconcebible, una pesadilla que nunca querría que se hiciera realidad. . . y ahora estaba pasando. Brandon. . . su hijo probablemente lo odiaba. Eso hizo que aun mas lagrimas salieran.
Lloraron toda la noche, no hubo pensamientos alegres, no hubo lado bueno, no hubo nada que pudiera mejorar la situación o asegurar que todo se solucionaría con un final feliz. Esa noche solo hubo resignación e impotencia.
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top