Una pequeña nave en estado crítico y con bastante daño, vuela a toda velocidad hasta llegar y entrar a una nave tipo fortaleza de gran tamaño.

-¡Comandante! ¡Comandante Raff!- gritó una especie de rana humanoide con un yeso en la mano.

Y corriendo a toda velocidad hacia alguien llamado Raff.

Un sujeto que posee una máscara en toda su cara y de ojos de color rosa, el cual lleva puesto algo similar a una túnica que cubre todo su cuerpo.

-Estas en la zona de la guardia real- dice el llamado Raff.

-Frolic, de la guardia personal de la princesa Attea, mientras pasábamos por un sistema enemigo, fuimos emboscados por el cazador Sevenseven-.

-¿Es enserio? ¿Y dónde está la princesa?- pregunta Raff.

-Lo único que pudimos encontrar fue este pedazo de su ropa- dice la rana enseñando un pedazo de tela en su mano no enyesada -Oh... la batalla fue gloriosa-.

-¿Cuánto tiempo podremos escondérselo al emperador?- se pregunta Raff.

-Ya estoy enterado Raff- se escuchaba una voz a lo alto que se escuchó por toda la nave a través del sistema de comunicación.

Inmediatamente Raff y la rana llegan a una cámara especial, donde sentado en un trono había una rana humanoide con verrugas en los brazos, cabeza y la barbilla, y usa una túnica negra y dorada con pantalones negros y un collar de oro con tres orbes oscuros.

-Emperador Milleous, luz del imperio Incursiano, destructor de galaxias, poseedor del rayo conquistador, todas las criaturas vivientes te temen, ten misericordia de nosotros- dicen tanto Raff como aquella rana con respeto y temor a su emperador de nombre Milleous.

-¡Rápido, mi hija desapareció!- grito el emperador Milleous

-Si... no se preocupe señor, Sevenseven se la llevo viva, ya sabe... así es...- dijo Raff.

-¡Attea no se rendiría! ¡Solo un tonto lo supone!- grito el Emperador Milleous.

-Emperador Milleous... tenga piedad-.

-¿Piedad? ¡Por tu incompetencia! Muy bien- dice el emperador mientras un botón se desplaza desde una esquina del descansa brazos de su trono -Ejecutare tu destrucción-.

Al presionar el botón, desde el techo sale una especie de onda de energía que le da al Incursiano herido, el cual solo hace un saludo a su emperador antes de desaparecer por completo.

-¡Y tú! ¡Mi supuesta mano derecha! ¡Encuentra a mi hija!- grito el Emperador Milleous con la paciencia al límite.

-Ah... no hay problema su excelencia

-Sevenseven es una herramienta útil contra los enemigos del imperio- dice Milleous mientras trata de pensar quien contrato al nombrado cazador.

-Pero puede ser cualquiera señor, cualquiera que no haya esclavizado o destruido- sugiere Raff.

-Cierto... busca el planeta más cercano ¡Arregla esto o te destruiré!- dijo el emperador Milleous amenazando a Raff en hacer lo mismo que hiso con el otro.

Al mismo tiempo, en Royal Woods... más específico afuera del Salón de Juegos: Bocadillos.

-¿Podemos tomar una decisión?- pregunta Lincoln.

-Solo lo diré una vez... exposición de fósiles- sugiere Chase mientras terminaba de comer una hamburguesa.

-Y yo sugiero que a las rampas de skateboard... ¿cierto torpe?- dice Ronnie Anne.

-Yo quería ir a los juegos de video... pero no estaría mal ver restos de dinosaurios- dijo Lincoln.

-Argh... ¿esto puede ponerse peor?- pregunta Ronnie Anne...

En lo que simultáneamente una luz brilla intensamente frente a ellos, a la vez que aparece un grupo conformado por seis Incursianos.

-No creo que estén interesados en ir a la exposición ¿verdad?- dice Lincoln mientras aquellos Incursianos apuntan al grupo con sus armas, listas para disparar.

X=Linc+2

-Chase... ¿sabes que sucede?- pregunta Lincoln que junto a Ronnie Anne y Chase tenían las manos levantadas debido a que los Incursianos seguían apuntando con sus armas.

-Son guerreros... y se ven que traen armas muy avanzadas- dice Chase tratando de suponer la situación en la que están metidos... hasta que al igual que lo hicieron los Incursianos, aparece su comandante, Raff.

-No disparen, armas abajo-.

-¿Y tú quién eres?- pregunta Ronnie Anne.

-Me llamo Raff, soy el segundo al mano en 40 galaxias... y tu niño, debes ser el famoso terrícola que posee el Omnitrix- dijo Raff frente a Lincoln, mientras los Incursianos miraban curiosos el Omnitrix y hablando entre sí.

-Vaya... tengo una reputación en el espacio- dijo Lincoln sorprendido.

-Que no se te suba a la cabeza, Linc- dijo Ronnie Anne.

-No es por eso, solo me sorprendio- dice Lincoln.

-Vaya vaya, miren a quien tenemos aquí, que tal estas Chase, ha pasado tiempo, mírate, cuanto haz crecido- dice Raff.

-¿Te conozco de algún lado?- pregunta Chase confundido.

-Es verdad, eras muy joven para recordarme y al Emperador- dice Raff, pero Chase seguía confundido.

-Y... ¿Qué te trae aquí?- pregunta Lincoln.

-Sevenseven secuestro a nuestra princesa en este sistema, necesito encontrarla, y espero contar con ayuda para esto- dice Raff enseñando aquel pedazo de tela en su mano.

-Espera, ¿dijiste Sevenseven? ¿Tiene algo que ver con Sixsix?- pregunta Lincoln.

-Ambos son de la misma raza, pero más peligroso- responde Raff.

-Si, 11 veces más peligroso- dijo Ronnie Anne.

-Te ayudaremos- dice Lincoln.

-¿Por qué lo haríamos? Ellos nos amenazaron- decía Chase...

-¡Terrícolas!- la voz del Emperador Incursiano se escuchó a lo alto en todas partes mientras los Incursianos se arrodillan al oír la voz de su líder... pero aquella voz solo se escuchó desde las insignias de Plomero que los chicos tenían -¡Soy el Emperador Milleous! ¡Le di a Sevenseven la oportunidad de regresarme a la princesa Attea! ¡Si no lo hace, volare su lastimoso planeta con el incomparable rayo de conquista!-.

-Eso cambia las cosas, ¿Cuándo empezamos?- pregunta Ronnie Anne.

-Habrá pánico, la Tierra no recibe amenaza todos los días- dijo Lincoln.

-Fue una transmisión subatómica, los radios de la Tierra no reciben transmisión más rápida que la luz- responde Chase.

-Pero ese emperador no sabe eso, Chase olfatea esa tela y dinos si encuentras una señal de la princesa, y como tú te puedes tele-transportar prácticamente la tenemos- dice Ronnie Anne.

-Bien, si no hay de otra- dice Chase tomando aquella tela y empezando a olfatearla, y entonces alzar su nariz al aire... -La tengo, está en Gran Monterey... y está peleando-.

En alguna otra parte del planeta, una pequeña nave de color amarillo iba volando muy cerca de una repesa, mientras al mismo tiempo era perseguido por alguien que dispara mientras volaba muy cerca de aquella nave.

Era alguien de una apariencia muy similar a Sixsix, solo que de una estructura más musculosa, de una armadura que era completamente de color morado y con más armas añadidas, el cual sin duda se trataba de Sevenseven.

Mientras que volando aquella nave, se encontraba la princesa Attea de los Incursianos.

Al igual que el resto de los Incurcianos, es una rana humanoide de un color verde más claro y de una apariencia más femenina, lleva puesto un traje púrpura de aviador con guantes grises, gafas, un pañuelo blanco alrededor del cuello y pantalones blancos debajo de su traje.

-¡Gloria!- grito Attea mientras evadía los disparos de Sevenseven, pero los cuales terminaban dañando la represa, saliendo una gran cantidad de agua desde el otro lado.

Sin embargo la nave de Attea ya se encontraba en mal estado y termina aterrizando cerca de una zona de tierra firme, y la princesa Incursiana sale de su nave y rápidamente corre y salta para propinarle una patada directa a Sevenseven.

Mientras en la carretera encima de la represa, nuestros héroes Lincoln, Ronnie Anne y Chase llegan ya vestidos con sus trajes, acompañados de Raff y los soldados Incursianos gracias a esa tele-transportación.

-¡Allí están!- dijo Lincoln señalando hacia abajo, señalando como la princesa Attea tenía su pelea contra Sevenseven que retrocede debido a otra patada de parte de la princesa Attea.

Pero inmediatamente tomar vuelo y luego transformar su brazo izquierdo en una especie de arma de fuego tipo metralleta, y disparando balas de energía directo a Attea, la cual tuvo que correr para evitar los disparos... pero estos empezaron a causar más destrozos en la represa y esta misma comienza a caerse a pedazos.

Lo cual también afecto aquella carretera donde corrían los demás para llegar abajo, pero Chase que se encontraba muy atrás termina cayendo, pero gracias a que activo sus alas de Pterodactylo logra volar y aprovecha de llevarse a Attea lejos de Sevenseven.

Para empeorar todo, el agua que había detrás de la represa empieza a subir y arrastrar a cualquiera que había en el camino, entre ellos Ronnie Anne que con un hechizo de viento empuja a Lincoln lejos de la ola, mientras ella era arrastrada por la corriente.

Sin embargo el agua era tanta que igualmente logra alcanzar a Chase junto a Attea, al mismo Sevenseven, e incluso a Raff y los soldados Incursianos todos siendo arrastrados por la fuerte corriente, siendo Lincoln el único que se salvó al llegar por las tuberías de distribución de agua.

-Tengo de detener el agua- dice Lincoln mientras buscaba algún alienígena que pueda ayudar en esta crisis -Debo hacerlo y rápido- entonces Lincoln presiona el reloj y se transforma...

Ahora es un alienígena humanoide de un cuerpo completamente negro, excepto por sus manos que eran de color blanco y con pequeñas estrellas blancas distribuidas en su cuerpo, sus ojos son de color verde sin pupilas, su cabeza tiene tres cuernos semejantes, lleva el símbolo Omnitrix en el pecho.

-¡Alien X! ¡Aprobado! ¡Detener el agua ha sido aprobado!-

En ese preciso instante, Alien X formo un patrón circular en el aire y lo manda como si fuera una onda de sonido, y de manera increíble parece que el tiempo retrocede, ya que la presa era reconstruida, el agua regresa a su lugar, y todos los presentes se encontraban a salvo en tierra, como si nada de lo que ocurrió hace unos momentos hubiera pasado.

-¡Oh sí!- dice Raff contento de que todo se solucionara.

-Guau- dice Ronnie Anne asombrada.

-¿Y ese quién es? ¿Ya se había convertido en el antes?- pregunta Chase asombrado por las habilidades que mostro Alien X.

-No lo sé, aunque creo que no, pero con todo ese poder ya debe ser el héroe predilecto- dice Ronnie Anne igual de asombrada.

Sin embargo, antes de que pudieran seguir asombrándose por el nuevo alienígena, Sevenseven llega volando y se lleva a la princesa con él, y al ver esa acción, los Incursianos intentan detenerlo con sus armas, pero ninguno de sus disparos le daban a Sevenseven, y el cazador se termina alejando de allí.

-Lincoln que esperas, detenlo, se está escapando- dice Chase, pero Alien X no responde, solo estaba allí parado de manera inmóvil.

-¿Linc?- dice Ronnie Anne mientras chasque los dedos frente a Alien X, pero nada -Vamos torpe reacciona, Sevenseven se escapa con la princesa, ¿Linc?-.

-Eso fue... ¡Genial! ¿Cómo hago para que pasen más cosas?- pregunta un emocionado Lincoln que se encontraba en un lugar abierto similar al espacio exterior.

Y frente a él, se encontraban dos seres parecidos a caras humanas de color verde, la primera tenía características femeninas muy realistas, mientras que el otro tenía características masculinas notables como ciertas arrugas en su rostro.

-Eres uno de tres Lincoln- dice la cara femenina con un tono gentil y amable en su tono.

-¿Lo escuchaste?- dice la cara masculina con un tono grave y serio.

-Si claro, ¡Equipo Alien X!- dijo Lincoln emocionado e incluso alzando la mano en señal de victoria.

-Somos unos de los seres más poderosos del universo-.

-Por qué nosotros somos los más precavidos-.

-¿Quieren decir que la Tierra está a salvo?- pregunta Lincoln.

-No, ¿Por qué lo dices?-.

-Soy Serena, la voz del amor y la compasión-.

-Y yo Bellicus, la voz de la ira y la agresión, se supone que tú seas la voz de la razón-.

-Bellicus y yo estamos en pelea eterna- dijo Serena.

-Si eso es genial, pero la Tierra será destruida en un minuto- dijo Lincoln preocupado.

-Me da mucha pena... millones de vidas se perderán- dijo Serena tristemente.

-Nah, probablemente se lo merecen, lo entiendes genio, así pensamos- dijo Bellicus explicando cómo funciona las cosas en la mente de Alien X -Ahora tu inténtalo-.

-Quiero saber que le paso a mis amigos- dijo Lincoln.

-Aprobado- dijo Serena a favor del pedido de Lincoln.

-Lo acepto- dice Bellicus aceptando igualmente el favor del peliblanco.

Y una vez aprobado aquella orden, una pequeña luz blanca aparece frente a los tres, lo cual hace que puedan ver lo que pasa en el exterior.

Mientras regresando con los demás, Ronnie Anne y Chase intentaban lo que tenían a su alcance para que Alien X reaccione, desde cosquillas, pellizcos, darle una sobada a la nariz, e incluso tocar una alarma cerca del oído... pero nada.

-Ahora si me estoy preocupando, no se ha movido desde que arreglo lo del agua, talvez este herido...- dice Ronnie Anne.

-No, está caliente, quizás está descansando- dice Chase mientras aun intenta hacer reaccionar a Alien X, mientras un soldado Incursiano recoge otro pedazo de la ropa de la princesa Attea.

-La tela real- dijo el Incursiano.

-Dámela, puedo rastrearla con su aroma a...- decía Chase tomando aquella tela... pero en ese preciso momento, todos los presentes desaparecen del lugar.

Para inmediatamente aparecer dentro de la nave Incursiana, frente al trono del emperador, en compañía de varios soldados Incursianos.

-Raff, se agotan tus horas de vida- dijo el Emperador Milleous aun en su trono.

-Ya casi lo logro... es decir Emperador Milleous, luz del imperio como cree, nunca me atrevería a pasar sobre usted...- dice Raff mientras se arrodilla ante el emperador, pero el Emperador Milleous lo calla al levantar la mano.

-Comuníquenme con la Tierra- dijo Milleous mientras un soldado le entrega un micrófono para dar un mensaje al planeta -Terrícolas, se les acabo el tiempo- dice mientras termina la comunicación -Tráiganme el detonador-.

Ante esa orden, un soldado Incursiano le entrega a su emperador una especie de caja en forma de un octágono, con un botón en la zona de arriba.

-No se atrevería...- decía Ronnie Anne, pero entonces el Emperador Milleous se ríe y termina apretando el botón... pero a la Tierra no le ocurrió nada.

-Claro que no, mi hija se encuentra ahí, pero si dispare el rayo, quiero ver al planeta en la pantalla- ordeno el emperador Incursiano, mientras la imagen de la Tierra es cambiada por otra imagen de un planeta distinto, uno más pequeño y de aspecto desértico.

-Oye, ¿ese es Plutón?- pregunta Chase.

-Claro que no, eso es solo tierra congelada- aclara Ronnie Anne... pero entonces lo que ella llamo tierra congelada es golpeado por un rayo... que termino por hacerlo estallar y destrozarlo en pedazos.

-Corrección, ERA solo tierra congelada niña- dijo el Emperador Milleous mostrando lo aterrador y sin misericordia que era, dejando sin palabras tanto a Ronnie Anne como a Chase.

-No puedo creerlo, destruyo el Planeta Plutón- dijo Lincoln sin palabras.

-Plutón no era un planeta, era un cuerpo enano- dijo Bellicus.

-Creo que pudo ser un planeta enano, ¿no crees Lincoln?- dice Serena.

-No me importa, ese tipo va a volar la Tierra- dijo Lincoln.

-Tus amigos se pueden encargar de la Tierra, deja que se encarguen de ello- dijo Bellicus sin importancia al asunto de Lincoln.

-Ahora te estas contradiciendo- dijo Serena.

-Tú también- dijo Bellicus.

-¿Podríamos tomar una decisión ahora?- pregunta Lincoln.

-Pero no hemos terminado de discutir- dijo Serena.

-Claro que no, necesito ayudarlos ¡Ahora!- dice Lincoln desesperado mientras intenta activar el Omnitrix... pero este no responde -¿Qué ocurre?... estúpido aparato, jamás funcionas cuando te necesito enserio-.

-Alien X no hace nada hasta que haya sido puesto a votación, te dimos una prueba Por qué eres nuevo, es el procedimiento- dijo Bellicus.

-Entonces... les pido que me dejen usar el Omnitrix- dice Lincoln.

-Es una orden... ¡No aceptada!- grito Bellicus.

-Buen voto- dijeron tanto Serena y Bellicus a la vez.

-Veras, Alien X siempre estuvo pendiente, pero nosotros hemos llegado a una conclusión, como podríamos dejarte ir- explico Serena.

-¿Lo entiendes genio? Tú nunca volverás- dijo Bellicus, dejando a Lincoln sin habla ante esa aclaración, de que quizás jamás regrese a la normalidad, quedando atrapado dentro de la mente de Alien X... para siempre.

-Lo voló enserio...- dice Ronnie Anne aun sin creer que el emperador Incursiano haya volado un planeta.

-Mira el lado bueno... Neptuno será el último planeta- dijo Chase.

-Sí, y si no me devuelven a la princesa Attea, la Tierra será reducida a menos que eso- dijo Milleous.

-¡Eso no tiene el menor sentido! ¡La Tierra no se puede comunicar contigo!- grito Ronnie Anne.

-Mensaje de la Tierra, su violentísima alteza-.

-O tal vez me equivoque- dice Ronnie Anne, en lo que en la pantalla aparece Sevenseven, el cual daba una demanda en aquel idioma inentendible al igual que Sixsix.

-Bueno... me da gusto que la princesa este bien, es una de las cosas que usted desea- dijo Raff.

-Attea es de la realeza, transmite los fondos- dijo Milleous a la vez que Sevenseven terminaba la comunicación.

-Bien, en cuanto la princesa vuelva a casa terminamos- dijo Ronnie Anne.

-Ah... yo no lo creo- supone Chase.

-Destrúyelos en cuanto Sevenseven entrega a Attea, a tus prisioneros, a su mundo y todo quedara perdonado- dijo el Emperador Milleous a la vez que le entregaba el control a Raff.

-¡Detengan a los prisioneros!- ordeno Raff a los soldados Incursianos que iban a disparar.

-Yo no lo creo- Ronnie Anne chasquea los dedos, y entonces Capa despierta y rápidamente le quita el control a Raff y se la entrega a su ama -¡Muévete!- dice ella que junto a Chase que llevaba a Alien X a sus espaldas empezaban a huir, siendo perseguidos por los Incursianos que no dejaban de disparar.

Regresando a la dimensión de Alien X, Lincoln se encontraba de brazos cruzados mirando con enojo a Serena y Bellicus.

-Bellicus, Lincoln está enojado, por lo menos dejémoslo regresar- propone Serena al ver el ánimo de Lincoln en este momento.

-Awhh... Lincoln, Lincoln, Lincoln ¿Por qué no te preocupas por un cambio?- dijo Bellicus.

-Hay, tú sabes que si- dijo Serena.

-Propongo que votemos por salvar la Tierra- dijo Lincoln.

-Ese es un asunto nuevo, todavía tenemos asuntos desde antes que llegaras- responde Bellicus.

-Pues apúrense- dijo Lincoln impaciente.

-Por supuesto, propongo que votemos por el número 80.000.003: salvar a los dinosaurios de la extinción- propone Bellicus.

-Está en contra- niega Serena ante la propuesta.

-Solo escucha, estoy seguro que puedo convencerte- dijo Bellicus.

-Yo digo que cambiemos de tema para ayudar a la Tierra, por qué está en crisis- propone Lincoln.

-Aprobado- dijo Serena.

-Hmmm... está bien- dice Bellicus aceptando de mala gana.

-Propongo que transportemos a los Incursianos a un billón de años luz, ¿sí o no?- sugiere Lincoln.

-No- dicen Serena y Bellicus negando la petición.

-Y... ¿Qué tal desarmar el rayo de la conquista?- pregunta Lincoln.

-¡No!- vuelven a negar ambas entidades.

-Tienen que hacer algo- dijo Lincoln tratando de llegar a una aceptación de su parte.

-Bueno... no hemos escuchado argumentos- dijo Serena.

-¿Y ya habían tomado una decisión antes?- pregunta Lincoln ya algo desesperado.

-Bueno...- dicen Serena y Bellicus pensativos por aquella pregunta.

-Hay no... esto podría ponerse peor- dice Lincoln al lector, a la vez que ya se estaba desesperando por la actitud de aquel dúo.

Algunos soldados Incursianos caminaban por los pasillos buscando alguna señal tanto a Ronnie Anne como de Chase, los cuales se escondían y avanzar sin tratar de llamar la atención.

-¿No puede el emperador llevarse a su hija y no hacerle nada a la tierra?- pregunta Ronnie Anne.

-Tetrax me conto del código Incursiano, generalmente si no te esclavizan te destruyen- responde Chase, pero entonces ambos se detienen al tener en frente a tres soldados Incursianos que rápidamente empiezan a disparar.

-¡Placas de Ankylosaurio!- grito Chase a la vez que de su espalda le crecen picos que forman una coraza que lo protege de los disparos, y luego volver a correr por el sentido contrario.

Pero al llegar por un camino que conduce a dos pasillos de izquierda a derecha, del lado izquierdo aparecen más Incursianos que seguían disparando, obligando a Ronnie Anne y a Chase a correr por la derecha... pero allí aparecen más Incursianos.

-Ya me canse de ustedes, ¡Cola de Ankylosaurio!- dice Chase a la vez que atrás de él aparece la cola del mencionado dinosaurio, y con ella golpea a los Incursianos que tenía en frente, pero uno que logró esquivar intenta propinarle un puñetazo en el estómago, pero Chase hábilmente bloquea y luego da una patada que lo manda hacia atrás.

Pero cuando dos de los que golpea se levantan para disparar por la espalda, Ronnie Anne manda a Capa a atacar, envolviendo la cabeza de uno de los Incurcianos y luego usarlo para golpear al restante, y finalmente regresar con Ronnie Anne.

-¡Chase!- grito Ronnie Anne apuntando a más soldados Incurcianos que llegaban, y Chase carga de nuevo a Alien X y junto a Ronnie Anne siguen corriendo.

Pero al doblar por una esquina... frente a ellos estaban el Emperador Milleous, acompañado de Raff y tres soldados Incursianos más, los cuales sin pensarlo comienzan a disparar mientras persiguen a los chicos que sin otra vuelven a correr por donde estaban.

Pero cuando estaban por cruzar por una puerta... desde esa misma aparece Sevenseven junto a Attea como prisionera, el cual detiene a los chicos apuntándoles con su mano que vuelve a convertir en un arma de fuego.

Pero antes de retroceder, los Incursianos que acompañaban a Milleous llegan y les apuntan con sus armas, obligando a Ronnie Anne y a Chase a levantar las manos en señal de rendición, al mismo tiempo que Sevenseven libera a Attea soltando las esposas con las que la mantenía prisionera.

-¡Hija! Estas a salvo- dice el Emperador Milleous contento de ver a su hija... pero su felicidad duro poco ya que Sevenseven le apuntaba ahora a él con las armas de su mochila, lo cual hace que Milleous mire curioso a su hija, la cual solo da una leve sonrisa.

-¡Guardias! ¡Tomen a mi padre!- ordeno Attea traicionando a su padre.

-Ordenes son ordenes- dijo Raff mientras los soldados Incursianos ahora apuntaban sus armas contra su propio emperador.

-¿Pero por qué?- pregunta Milleous sin entender lo que sucede.

-Qué tonto eres, después de que pagaste mi rescate, le ofrecí a Sevenseven el doble para que pueda tomar tu lugar- responde Attea.

-Hay... pero que decisión tan respetable- responde Milleous asombrado.

-Es mucho para el gran dictador, y como la Tierra ya no está en peligro... terminamos, toma a Lincoln y vámonos...- decía Ronnie Anne.

-Aun no terminamos- dijo Chase deteniendo a Ronnie Anne, mientras la misma Attea tomaba el control del rayo de conquista.

-Jajajaja... es costumbre para un emperador nuevo celebrar con un espectáculo de fuerza, el final de ese planeta generara excelentes fuegos artificiales para mi coronación- dijo Attea revelando que ella continuara con el plan de volar la Tierra a pedazos.

-Eres una...- decía Chase que estaba por atacar, pero Sevenseven lo detiene del brazo y luego aplicándole una llave que consistía en torcerle el brazo hacia atrás.

-¡Chase!- grito Ronnie Anne, pero los soldados Incurcianos la detiene al apuntarle con sus armas, pero Attea levanta la mano a Sevenseven para que se detenga.

-Bueno, bueno, pero si es mi viejo amigo Chase, sí que has crecido colmilludo- dijo Attea mientras le quita la máscara a Chase y la tira.

-Lo siento, pero no me suena tu cara- responde Chase.

-Típico, nosotros los Incurcianos tenemos una excelente memoria, no como especies inferiores como la tuya- dice Attea mientras los soldados levantaban a Alien X que estaba en el suelo -Esa cosa ya no sirve, quítenla de aquí y al calabozo junto a esos dos que me quisieron rescatar... les perdonare la vida, serán excelentes especímenes en mi zoológico- dijo Attea mientras reía esperando el momento para destruir el planeta.

-Se supone que tú eres amor y compasión ¿Cómo puedes dejar a un mundo morir?- dice Lincoln regañando a Serena en lo que ella baja la mirada deprimida, y luego voltea hacia Bellicus -Y tú eres la ira y la agresión ¿Cómo puedes permitir que algo malo no sea castigado? ¡¿Y cómo pueden ser tan inútiles?!-

-¿Inútiles?- dijo Bellicus ofendido por esa palabra.

-Somos lo más poderoso del universo, cambiamos la naturaleza del espacio y el tiempo- dijo Serena.

-¡Pero no hacen nada! ¡Billones de vidas están por terminarse porque están bajo procedimiento!- grito un ya muy enojado Lincoln, logrando que Serena se ponga a llorar.

-¡Mira lo que hiciste! Muy bien salvemos a la Tierra ¿Feliz?- dijo Bellicus.

-¡NO! ¡Solo sáquenme de aquí, allá afuera hay personas que lo harían mucho mejor!- grito Lincoln por última vez.

-Ah... eso duele- dijo Serena.

-Que se destruya el núcleo, porque no me interesa que nada sobreviva- dijo Attea sentada en el trono, preparándose para usar el control del rayo de conquista para volar la Tierra en pedazos.

Mientras con Ronnie Anne y Chase, ambos se encontraban encerrados en una jaula junto a Alien X, mirando impotentes sin saber cómo detener la destrucción de su mundo.

-Emperatriz Attea, luz del imperio Incursiano, destructora de galaxias, poseedora del conquistador, todas las criaturas...- decía Raff arrodillándose ante Attea y dando las mismas palabras que le daba a Milleous.

-Cállate, veamos algo de acción...- dice Attea preparándose para oprimir el botón del rayo... pero se detiene al último segundo al escuchar una explosión, y observa que la jaula donde estaban encerrados nuestros héroes, fue destruida sin dificultad.

-Escúchame malcriada, más vale que dejes eso, acabo de salir de una discusión y estoy de pésimo humor ahora- dijo Feedback saliendo del humo que causo su ataque de manera amenazante, mientras apuntaba con su mano derecha a la vez soltaba algo de estática.

-¡Tú no eres mi jefe sea quien seas!- dijo Attea que iba a reanudar su acción, pero Feedback lanza una descarga eléctrica al suelo cerca del trono, provocando que a Attea se le caiga el botón de la mano.

-¡Piernas de Velociraptor!- grito Chase a la vez que sus piernas se transforman y con ellas correr a toda velocidad, atrapando el control antes de que tocara el suelo.

Sevenseven entonces se dispone a disparar con todas las armas que tiene a la mano, pero toda esa energía es fácilmente absorbida por Feedback, y luego enchufar sus dedos a la armadura de Sevenseven y con ello robarle toda la energía que poseía... hasta que la armadura dejo de funcionar y el cazador termina cayendo al suelo.

Algunos soldados Incursianos comienzan a disparar, pero Feedback fácilmente esquivada y luego lanzar una poderosa ráfaga eléctrica de su mano a los Incursianos, algunos siendo mandándolos a volar, y otros quedando inconscientes en el suelo.

-¡Como hozas desafiar a la Emperatriz Attea!- grito Attea apuntando con una de las pistolas de un soldado Incursiano, pero Feedback fácilmente la destruye con un disparo eléctrico que la sobrecargo.

-Ahora ríndete- dijo Feedback.

-¿Quién me va a obligar?- dice Attea colocándose en posición de combate.

-Attea...- era la voz de Milleous que apareció en el cuarto, apuntando a su hija con un arma -Me enorgulleces Attea, llegaras a ser una digna sucesora algún día, llevenla al calabozo junto con su madre-.

Ante esa orden de su emperador, un soldado Incursianos se lleva a Attea directo al calabozo.

-Sácame de esta Chase, por favor, ¿por los viejos tiempo?- dice Attea.

-Lo haría, si supiera a que te refieres con "los viejos tiempos"- responde Chase, lo cual hace que Attea le saque la lengua mientras era llevada definitivamente al calabozo, y entonces Raff sale desde atrás del trono donde estaba escondido debido a la conmoción.

-¡Lo alabo Emperador Milleous...!- decía Raff una vez más arrodillándose ante el emperador Incursiano.

-Silencio Raff, y ustedes...- dice el Emperador Milleous alzando su mano a los chicos, debido a que Chase tenía su control.

-¿Acaso...?- pregunta Ronnie Anne.

-Sí, terminamos- dice Chase entregándole el control al Emperador Milleous, al mismo tiempo que Feedback se le termino el tiempo, regresando a ser Lincoln.

-Como premio por su ayuda en este asunto, perdono a la Tierra, regrésalos- ordena Milleous, lo cual hace que Lincoln, Ronnie Anne y Chase desaparezcan del lugar...

Y reapareciendo instantáneamente donde estaban al comienzo, en las afueras del Salón de Juegos: Bocadillos.

-Ahora dime torpe, ¿Qué fue lo que te sucedió?- pregunta Ronnie Anne.

-Bueno... solo te puedo decir que no quiero volver a ser Alien X de nuevo- dijo Lincoln.

-¿Por qué? Aunque admito que fue raro no escucharte hablar por horas- dijo Chase.

-Si... es mi transformación más poderosa...- dice Lincoln mirando seriamente al lector -Pero el precio el muy alto-.

Fin de este capitulo...