Ellas se miraron, no existían palabras correctas para la situación que las estaba envolviendo porque una amaba con locura y la otra solo la quería como una buena compañera de las clases de baile, cómo llegó a hacerlo en su momento, Chaeyoung tenía los pies bien puestos sobre la Tierra y comprendía lo que era sentir el dolor por ver que el ser amado por el que uno lo daría todo no siente ni una pizca de lo que tú sientes.

Lamentablemente también gran presas de amores no correspondidos y ahora que estaban frente a frente con la persona con la que querían hablar para poder solucionarlo todo, comprendieron en ese preciso instante que las cosas no son tan fáciles como parece, mucho menos cuando ambas se han llevado por lo que sus corazones le han dictado desde siempre y no son tan lógicas como las otras personas que están en alguna de las otras habitaciones que observaron cuando estuvieron caminando por ese largo pasillo en donde ellas decidieron estar justo en ese lugar porque consideraron que era la puerta que abriría otras en su vida.

Tzuyu, no era alguien que tenía los pies tan sobre la Tierra y sobre todo era por su edad o era lo que todas creían, una chica demasiado risueña que seguía creyendo en fantasías las cuales la vida la había brindado poco a poco como si se tratara de un reloj de arena pero que ahora parecía que se las iba a arrebatar de la forma más vil que puede llegar a existir en el mundo.

Una porción de lo que la inocencia y pureza del mundo estaba destinada para esa chica, con su mirada llena de ilusión y esa sonrisa aniñada que todo el mundo amó y ama porque es imposible no hacerlo, el problema es que toda esa fachada tiene un gran secreto y es que ama con cada fibra de su cuerpo a la persona que está frente a ella, que ahora mismo se dirige hacia la zona en donde están las frutas y toma una manzana para posteriormente morderla de lo más tranquila del mundo.

Parece estar calmada y en paz con lo que tiene la cabeza, cosa de la que ella misma no posee y se siente mal por eso, porque quiere dejar todo muy en claro y la decisión se supone que debería estar en sus manos pero no cree que eso llegue a pasar.

Sabía muy bien que la surcoreana no tenía ninguna necesidad o ganas destrozarle el corazón pero al fin y al cabo lo iba a hacer de alguna u otra forma porque el simple hecho de que esté frente a ella de lo más tranquila y con una decisión que sabe muy bien que no será muy buena para el amor que siente, le romperá el corazón.

Nunca nadie lo había hecho y tal vez por esa razón es que sigue manteniéndose tan pura, solo que ahora es el objeto de una especie de experimento en la que está segura que todo lo que en algún momento creyó que era perfecto se convertirá única y exclusivamente en su pensamiento personal, no en el de la chica que está frente a ella porque comprende que en el corazón de esta hay otra persona que reside en el y no parece querer sin importar cada una de las cosas que han pasado.

La menta que es historia de amor que en algún momento llegó a pensar que iba a suceder nunca se hará realidad, que le toca crecer de golpe por lo que su pecho le está diciendo y ese órgano que la mantiene viva es el mismo que la orilló a la situación en la que ahora mismo la encuentra.

"Bueno chicas están aquí en diferentes habitaciones en donde ninguna de ustedes a menos que esté en la misma habitación puedan escuchar la conversación que tienen". Tzuyu, saltó del susto porque se había mantenido sus pensamientos en todo este tiempo en donde esperaban la voz de Jeongyeon y el comienzo de las veinticuatro horas que decidieron tomar. "Esto es más que un experimento, es mi más grande ayuda como la amiga que soy de cada una de ustedes, lo que menos quiero es que les llega a pasar algo malo y es por eso que espero que tomen la mejor decisión que sea para ustedes mismas, se vale de todo si la otra persona está de acuerdo, eso sí espero sepan que lo único que se va a grabar será el audio, luego se les entregará una copia del mismo y podrán hacer con el lo que les salga...de saben dónde".

Soltó una risilla por lo que dijo y el pitido de que la mayor había dejado de hablar ese y su presente, sus ojos divagaron por toda la habitación hasta llegar a aquel cronómetro en el que el tiempo iba a ser más grande y horrible condena.

Toda su vida ha luchado con todo lo que esté a su alcance y siempre ha salido victoriosa pero con lo único que no ha podido tener una batalla es con lo que nadie puede detener, el tiempo.

Anteriormente no era contado o por lo menos no sabía cuánto le quedaba, ahora si y debía apresurarse porque si no lo hacía entonces la decisión que tomó sería por completo en vano.

"Prometí que no me sobrepasaría contigo". Habló, utilizando un tono de voz el cual parecía ser calmado y que estaba ocultando a los innumerables demonios que estaban en su cabeza. "Pero hay varias preguntas que te quiero hacer y sé que probablemente sean invasivas, así que si no deseas contestarlas entonces no lo hagas". Tragó lentamente y más aún al verla a los ojos, antes no tenía la fuerza necesaria como para poder mantenerla la mira, las cosas habían cambiado y esperaba demostrarle seguir con la persona con la que estaba hablando no era esa niña pequeña que todo el mundo quería cuidar. "Espero que si quieres responderla por lo menos una pequeña parte de ti quiero hacerlo, deseo que lo hagas".

"No tengo ningún problema con contestártelo". Ya no tenía la respuesta de esa persona que había conocido el primer día en el que estaba tan nerviosa por ir a practicar baile, gracias a la boda de su hermano decidió que lo mejor que podía llegar a ser era darle un gran espectáculo y que todo el mundo se diera cuenta de que esa fachada de chica seria solo era una forma de poder defenderse de las fauces espantosas de su familia.

En el presente tenía la respuesta muy clara y concisa de Son Chaeyoung, esa pequeña que no era tan pequeña y se había convertido en una mujer a la que su corazón amaba con locura pero que su mente no era estúpida y se daba cuenta de que ni siquiera parecía que quería estar con ella.

"¿Por qué saliste corriendo cuando te dije que sentía algo por ti?". Había ido directo al grano y al fin y al cabo habían accedido a estar en ese lugar para eso mismo, por fin dejaría las divagaciones y se convertirían en mujeres que tienen la fuerza necesaria para poder enfrentar cada uno de los miedos que componen amar a una persona que no siente nada por ti.

Chaeyoung la miró a los ojos y en ese momento no supo que responder, tal vez había sido eso que siempre nos persigue incluso cuando crecemos, la vergüenza y el miedo, es más mientras uno más crece hay una de ellas que se vuelve gigante y otra que gracias a nuestro raciocinio poco a poco va disminuyendo, en el caso de la mayor ninguna de las dos había o aumentado o disminuido, es más seguían exactamente igual tal vez por esa razón es que nunca había podido enfrentarlas.

De sus labios salió el típico balbuceo de una persona que no tiene la fuerza necesaria como para poder contestar esa clase de preguntas pero aún así la taiwanesa se mantuvo firme haciendo todo lo posible para que la contraria se diera cuenta de que no iba a dar su brazo a torcer, debía saber cada una de las cosas y salir de las tantas dudas que había tenido desde lo ocurrido.

Porque extrañaba llegar a la academia y encontrar a la que ella consideraba una buena amiga, ahora no había nada más que triste recuerdos en una sala de baile en donde se la pasaba bastante mal por estar sola.

Aunque le gusta la soledad no es exactamente lo que ella está buscando en estos momentos y es que quería abrirse a la idea de poder estar con una persona, lamentablemente cuando lo hizo apuntó a la misma que estaba enamorada de alguien más y con la única con la que no tenía ningún tipo de oportunidad porque si había algo con lo que la surcoreana persistía era con estar enamorada de Mina. Constantemente se lo repetía como si fuera un mantra o algún tipo de señal para que se diera cuenta de que nunca iba a llegar a tener una oportunidad con ella y a pesar de que eso hizo que abriera los ojos la lastimó por demasiado tiempo.

Aún así por todo lo que ha pasado no tiene ningún atisbo de rabia hacia la mayor porque también hace lo mismo con otra persona, entonces no debería sentirse mal cuando hace algo similar con Sana. Eso la hace comprender que cuando amas a una persona nunca vas a estar al pendiente de lo demás por más que todo quiera estar teniendo tu atención, es algo que ella no sabía y por más que le parezca interesante, le duele.

Porque aunque esté clara de muchas cosas que van a pasar y otras que no van a pasar, eso no le quita que está enamorada de una persona que no siente absolutamente nada por ella más allá de un compañerismo, eso tampoco le quita que haya sido en vano el estar pensando por tanto tiempo para poder expresar sus sentimientos y cuando lo hizo lo único que recibió de la persona fue un acto de cobardía en su máximo esplendor.

Eso la hace sentir mal consigo misma y algo enojada, porque si lo hubiera pensado con mente fría se hubiera dado cuenta que es exactamente lo que iba a suceder porque conocía muy bien a Chaeyoung, no era una chica que afrontaba demasiado las cosas que le pasaban y mucho menos tenía una buena reacción cuando le pasaba algo de golpe, tuvo que haberlo pensado antes de expresar todo lo que sentía y quedar como una completa idiota porque la rubia no sintió nada.

"Fue un acto de cobardía y porque no quería afrontar la realidad de creer que por eso que me ibas a decir perdería tu gran amistad". No se esperaba una respuesta de esa índole, en realidad no esperaba ni siquiera una palabra por parte de la contraria.

Así que lo único que hizo ante la respuesta fue suspirar y observar detenidamente a la persona que estaba frente suyo porque podía existir la posibilidad de que fuera la última vez que tuviera el tiempo necesario como para poder detallar cada una de las cosas que parecía que nadie se daba cuenta que estaba.

Una de ellas era la forma en la que su hoyuelo cambiaba de tamaño dependiendo de la sonrisa que tenía, había veces en las que hacía todo lo posible para captar cada una de las emociones que tenía y la forma en la que las cosas que le decían la hacían sentir en base a como su hoyuelo cambiaba, está casi segura que es la única persona que lo ha hecho o por lo menos solo ella ha tenido ese detenimiento en cada una de esas acciones porque por muy tonto o poco interesante que parezca para ir a lo máximo.

Era una forma de conocer a la persona por la que comenzaba a sentir algo y no se siente para nada mal por hacerlo porque al fin y al cabo es alguien que se dejó caer en el gran abismo de lo que es el amor, tuvo una mala experiencia; sin embargo, eso la hizo reflexionar y entender muchas cosas las cuales para ella era más sencilla de lo que parecen.

Sobre todo se dejó llevar por un sentimiento nuevo el cual nunca había llegado a experimentar en toda su vida y eso es un gran logro para ella, entonces más que sentir dolor por lo sucedido se siente bien porque se dejó llevar por algo que está muy segura que en el pasado no hubiera dejado, antes se protegía mucho y se dió cuenta de que esa coraza es lo que le hacía no poder experimentar tantas cosas en la vida.

Tzuyu había tenido un gran avance como una persona que quería cambiar y mejorar en muchos aspectos, sin importar que en ese camino sufrió diferentes adversidades porque considero que para poder sentir que debía mejorar de la mejor forma posible debía soltarse a la realidad y dejar de auto taparse los ojos como una muestra de no querer ir hacia un mundo en donde lo que probablemente reine sea el dolor.

Y ese mundo es el amor.

Porque cuando amas a una persona por alguna tiene razón te vuelves muy vulnerable y cada una de las cosas que pensaba puede dar un giro de trescientos sesenta grados, alamar a alguien parece que olvidas tus límites y te enfrascas todo el tiempo en que esa persona se sienta bien haciendo que esté por encima de como tú te sientas al respecto, y eso lamentablemente son comportamientos que no están para nada bien pero son muy comunes cuando es el primer amor.

Es por eso que Chou decidió acceder a pasar por todo eso para poder avanzar y considerarse a la persona que puede elegir todo lo que quiere, además de tener sus propios límites y no herir a una persona porque sabe muy bien lo que se siente.

"No te voy a mentir, vine acá a masacrarte a muchas preguntas y cómo a descobrarme de la forma en la que me sentí por lo que hiciste". Tomó una manzana y la mordió. "Pero ahora me di cuenta de que eso no va a ser que yo cambie como persona ni que el destruirte o hacer que te sientas culpable por cada una de las cosas que me hiciste me haga sentir feliz".

Chaeyoung sonrió levemente porque comprendió que la persona con la que estaba era alguien que tenía corazón.

"La venganza solo es algo que persisten en nuestros corazones porque es la única forma en la que creemos que le vamos a dar tregua a lo que sentimos por esa persona y no es así, la venganza es como el alcohol, primero planificas todo para poder llevarlo a cabo y mientras lo haces lo estás disfrutando pero luego no hay nada más que arrepentimiento". La miró de reojo y sintió un nudo de la garganta, tenía que dejar la persona de la que ha estado enamorada por tanto tiempo porque era lo mejor para ella y para ambas.

Debía comenzar a salir de ese caparazón de ser una chica adolescente a convertirse en alguien adulto, un choque de realidad que está segura que nunca hubiera tenido si no se hubiera ido de la casa de sus padres y por más que sea algo que la lastime, considérate será lo mejor porque es la única lección viable para que las cosas salgan bien y ambas puedan sanar.

Ella por lo que siente por Chaeyoung y la antes mencionada por lo que siente por Mina.

"Busqué miles de razones y estudié miles de escenarios en los que...". Tuvo que subir la mirada porque parecía que las palabras salían tropezando entre su lengua y paladar, estaba haciendo todo lo posible para no poder llorar y parecía que no estaba ganando la batalla de la mejor forma. "Tú y yo nos habíamos hablando tanto como pareja como amigas pero me di cuenta que ninguno de ellos tú serías feliz".

"Oh, Tzu". Intentó acercarse y no sé quejó pero sí hizo que su corazón se moviera de tal forma que se diera cuenta de que iba a ser más difícil olvidarla de lo que creía.

"Aunque te ame no puedo ser egoísta, no vine aquí a obligarte a que estés conmigo porque sería la cosa más espantosa que podría llegar a hacer en la vida, porque te amo es que comprendí que a veces amar es también dejar ir". Se mordisqueó el labio porque no quería llorar en ese momento y al final fue imposible.

Al amar a una persona comprendes que buscas constantemente el bienestar y eso hace que te olvides por completo de todo lo que tú querías hacer, es más hay veces en las que fantaseamos con estar con ese algo y no nos ponemos a pensar ni siquiera un solo segundo en que probablemente la mente de esa persona no estamos nosotros o no de la forma que deseamos que estemos, es por eso que hay veces en las que hay que ir directo y sobre todo tener una gran comunicación con la persona que nos gusta o la que amamos, porque eso evitará que lo que tenían antes se destruya y que no se alejen por esa clase de cosas.

Tzuyu lo pensó en muchas ocasiones pero su corazón era muy egoísta y lo que menos quería era alejar a la persona que la hacía sentir tan bien por más que lo único que tenía de ella era mirarla todos los días pero para ella era suficiente en ese mundo en donde estaba aferrada ese amor y la pequeña posibilidad de estar con ella, lo que no sabía es que no todo en la vida es posible en su máxima expresión y hay momentos en donde eso que nos mantiene con vida, esa pequeña posibilidad que anhelamos y por la que nos aferramos tanto puede ser la misma que destruya las relaciones.

Así que con la mente fría y con el corazón en las manos, decidió, unos días antes de ir a esa casa, que hay momentos en los que es mejor rendirse que seguir adelante con una batalla que nosotros mismos estamos acarreando y que no hay nadie más que nos apoye porque eso es lo que significa amar a alguien que no te ama.

"Me encantaría pedirte perdón por no sentir nada por ti pero lo que realmente diré es que estoy muy orgullosa de ti, eres una chica que aprendió acerca del amor y que me acabas de dar una excelente enseñanza, espero que estas pocas horas que nos quedan sean las mejores y que te lleves un gran recuerdo de todo esto". Le dolía el pecho porque cada vez se daba más cuenta de que la persona por la que sintió todo por lo que ha ido constantemente a los bailes y demás cosas es una persona que vale la pena por completo pero que la persona que escribió esa historia de amor que está viviendo tomó la decisión de que no iba a ser de ella.

Por lo que comprendió que si debía sentir algún tipo de odio por una persona en el mundo iba a ser por ese alguien o por el mismo destino que había sido muy cruel con ella y con todo lo que sentía, sobre todo por lanzarla a que sintiera eso cuando ella se mudó a Corea del Sur solo para sentir que estaba en un lugar en donde pertenecía y terminó teniendo toda esta experiencia, que agradece, pero que hubiera preferido no tener que pasar.

"Es la única pregunta que te quería hacer y te agradezco que quieras que todo el tiempo que nos queda sea una suma de cosas buenas que me voy a llevar conmigo". Son al escuchar lo último quedó pensativa y es que no comprendía a qué era que se refería con lo que dijo, aún así no quiso hacer más preguntas y lo mejor que considero que podía ser era simplemente seguirle la corriente para que pasaran un muy buen momento porque ahora se había dado cuenta de que sería el último.

Apreciaba muchísimo a esa chica que llegó para alegrarla en sus días más oscuros y una pequeña porción de ella siento un poco de recelo por no sentir nada por una persona que siente cosas por ella, considera que fue el universo que tuvo una mala pasada con ella y espera que más adelante la contraria encuentre a una persona que la haga sentir igual o mejor de lo que intentó hacerla sentir, es alguien que lo merece y de eso no tenía dudas.

"No entiendo por qué nos pusieron tanto alcohol y mucho menos cigarrillos". Murmuró la rubia. "Ambas somos asmáticas". Siguió con lo que decía. "Supongo que nos querían matar de alguna forma y que fuéramos como Romeo y Julieta". Siempre tenía esa clase de comentarios que hacían reír a la menor y al saberlo también estaba haciendo de todo para que el momento no fuera tan malo.

"Lo bueno es que nos dejaron fruta y hace mucho que no comía fruta". Seguía comiéndose la manzana con mucha felicidad y es que era una de sus frutas favoritas. "Cerca de los mangos hay fresas y sé que te encantan". Al decirlo con tanta seguridad no pudieron evitar mirarse y la surcoreana se sintió bien porque nunca había tenido esa clase de atención de una persona que no fuera Mina o sus padres, era una experiencia y sentimiento diferente.

No estaba para nada mal pero tampoco era para tanto.

Tampoco como para aceptar que Tzuyu entre a su vida como algo más que una amiga.

"Gracias por notarlo". Fue un agradecimiento desde lo más profundo de su corazón. "También me di cuenta de que te gusta mucho el chocolate y acabo de ver una tableta". Caminó hacia ella y se la pasó.

"Si me permites admitir algo, considero que seríamos una muy buena pareja". Habló, Chaeyoung no se lo tomó para nada mal y es que estaba acostumbrada a esa clase de comentarios por parte de la menor, al principio creía que era una especie de broma pero ahora se da cuenta de que no es así y tampoco le disgusta porque no considera que sea algo malo o que llegue a ser muy dañino. "Sé que no debería decirlo pero hay cosas que es preferible hablarlas".

La rubia la observó por un pequeño tiempo y no pudo evitar soltar una pequeña risita, ambas sabían que las dos eran excelentes personas y que no merecían lastimarse solo por no tener un amor correspondido, hay veces en las que esas cosas es mejor hablarlas y llegar a un buen acuerdo, no es necesario el destrozarse solo porque si.

Ninguna tiene la culpa de lo que siente y es preferible cuidar el corazón de las dos porque son conscientes.

"Diría algo acerca de tus comentarios pero siempre me han causado gracia, eres una persona muy graciosa aunque no lo parezca para muchos y siempre me sacaste una sonrisa aún en mí días más difíciles". Tzuyu parecía que le agradaba lo que estaba diciendo más no quería que siguiera porque eso iba a crearle alguna especie de ilusión por la que lucharía con todas sus ganas y alma, sería un terrible retroceso a todo lo que está pasando y no quiere volver a aferrarse a algo que no tiene ni pies ni cabeza para la otra persona.

"Te agradezco que me hayas ayudado a avanzar como persona, no es algo que los demás hagan y por más que fui muy egoísta en muchas ocasiones quiero agradecerte porque en ningún momento me trataste mal y...fuiste alguien con un excelente corazón, aunque hayas salido corriendo como una cobarde".

Eso las hizo reír y la taiwanesa se sintió bien por un momento porque comprendió de que tampoco era algo por lo que llorar, obviamente entendía que al principio era el dolor de la incertidumbre y de que no sabía si había roto una amistad por eso pero ahora se da cuenta de que fue solo un malentendido, además de que la persona que lo hizo le explicó y eso lo agradece porque no todo el mundo lo hace.

"Eres una excelente persona y pido perdón por la reacción que tuve cuando me lo admitiste, no lo mereces y espero que te des cuenta de que lo que mereces es más allá de la galaxia". De pronto cuando se dieron cuenta jamás estaban sentadas al pie de la cama una al lado de la otra, parecía que estaban teniendo una excelente charla sin importar todo lo que había pasado y quitando de lado de que probablemente sería la última conversación que tendrían en años o para siempre.

"Agradezco cada una de tus palabras". Se volvieron a mirar a los ojos no se dijeron nada pero no fue necesario porque con la sola presencia de la mayor se sentía tranquila y muy bien, aunque le dolía que sería la última vez en mucho tiempo y espera poder acostumbrarse a eso.