“Qué manera de empezar de nuevo para derramar tu piel y encontrar el viejo tú. Todo el mundo quiere hacerse famoso pero sólo quieres bailar en un sótano. No te importa si alguien está mirando mientras permanezcan en movimiento.”
-The Mezingers

THE LAWYER

La ley del más fuerte.

Namjoon observó a su abogado por unos instantes, este se había apartado y parecía agobiado mientras luchaba contra sus propios sentimientos.

-¿Por qué estás aquí entonces? - Nam dejó caer su espalda contra la pared del edificio y escondió sus manos en los bolsillos de sus pantalones sin quitar la vista del hombre ante sus ojos. ¿Cuál era el motivo por el que el abogado había ido a ese lugar si no quería buscar lo que todos los demás de su clase buscaban allí?

-Solo quería divertirme un poco, eso es todo. ¿Hay algo malo en eso? - el tono del abogado era frío y parecía a la defensiva mientras sus inexpresivos ojos lo recorrían.

Namjoon tragó saliva notando lo distinto que aquel hombre se veía ahí, bajo las luces naranjas de las calles oscuras de Seoul y con el cabello desordenado. La figura de chico duro e intocable seguía permaneciendo en su mirada congelada pero había algo distinto en él después de haberlo observado bailar sin preocupación entre el gentío del Limbus.

-Este no es el mejor lugar si la forma en la que quieres divertirte no conlleva sexo - Namjoon hizo una pausa notando la exasperación del abogado y dejó escapar una corta carcajada nerviosa. De repente se sentía un poco tonto juzgando a un hombre que claramente tenía mejor cabeza y objetivos de vida que él mismo - Pero conozco algunos lugares buenos si quieres ir…

-Eres mi cliente, no voy a salir de fiesta contigo Namjoon…

Namjoon se apartó de la pared tratando de demostrar una seguridad que se diluía paulatinamente por segundos al percibir la posición inamovible del chico ante sus ojos. Era curioso, Jin parecía joven pero a veces sus comportamientos y maneras de hablar le recordaban a las de un viejo amargado, no era solo su estricta forma de vestir oscura o sus gafas cuando entraba en el despacho, tampoco su mirada fría… sino su comportamiento general. No era profesionalidad sino aburrimiento y tristeza, el abogado no parecía estar respirando con placer su juventud, más bien parecía enterrado en una vida soporífera.

-Ni siquiera he llegado a ofrecerlo - Namjoon se encogió de hombros antes de avanzar unos pasos - pero si quieres divertirte primero debería derribar esa frialdad tuya tan desesperante.

Seokjin suspiró dejando vagar sus ojos de nuevo sobre el chico que se encontraba ante su mirada, la despreocupación de Namjoon hacia todo tipo de temas lo desesperaba pero también conseguía causar envidia y admiración en su mente. Si él pudiese ser así probablemente no se encontraría encerrado en una vida rutinaria y repleta de momentos monótonos.

Necesitaba ceder, responder a sus estímulos más a menudo, pero de nuevo eso podría suponer la ruptura de una rutina que si bien no le gustaba lo mantenía seguro. Si las cosas estaban bien así, ¿por qué cambiarlas?. Solo que no estaban bien, no podía haber nada bueno en sentirse atrapado en una burbuja de cristal que lo asfixiaba más y más con cada segundo que transcurría.

Sus ganas de escapar eran tantas y tan fuertes como su miedo a hacerlo.

-¿Dónde están esos sitios que conoces? - Jin no sabía bien todavía qué era eso que lo había empujado a aceptar el veredicto de un chico como Namjoon, sin embargo las opciones eran limitadas y realmente se había llenado de valor aquella noche para salir a divertirse. Había hablado con Hoseok y este entendió al instante que necesitaba un poco de espacio para lograr respirar, pero incluso en medio de un monte Seokjin no podría respirar cuando todas esas cosas seguían atrapandolo en la telaraña del autocastigo.

Namjoon sonrió, un hoyuelo se formó en sus mejillas antes de que una expresión de galanería atravesase su gesto. Jin se estremeció sin saber todavía lo que podría significar seguir a ese muchacho perdido.

-No es demasiado lejos, puedes ir a por tu amigo si lo prefieres.

Jin asintió, todavía inseguro caminó hacia el interior del local dónde Tao parecía haber encontrado un muchacho con el que divertirse. Las ganas de vomitar se asentaron en el estómago de Kim, pagar para follarse a alguien que supiese mantener la boca cerrada era tan asqueroso como recurrir a la prostitución. Aquellos que están desesperados, de forma habitual pueden llegar a cometer los mayores errores como método de huida a sus problemas abrumadores.

-Tao - su amigo levantó la mirada, sus ojos brillantes y repletos de algo que Jin no sentía desde hace demasiado tiempo. Por Dios, ¿se había enamorado de alguien a quién le pagaba? - Iré a ver algunos locales cercanos, deberías venir si…

-¿Te importa si no te acompaño? Tengo planes ahora… Sé que dije que iría contigo pero me he encontrado con un viejo amigo y me gustaría tener una charla con él a solas.

Jin dejó escapar una carcajada llena de ironía, sin embargo asintió. Namjoon tenía razón, muchos niños ricos acudían allí para comprar el silencio de sus aventuras de una noche, pero él jamás había pensado que su mejor amigo sería alguien así. Tao ni siquiera residía en Seoul la mayoría del tiempo, el que conociese un local así le resultaba incluso más repulsivo de esa manera porque significaba que probablemente había ido allí con una única intención.

-¿De veras vas a hacer esto? ¿Vas a pagar para mantenerte en el armario?

El chico a su lado se tensó y su mano caminó sobre el brazo de su amigo hasta alcanzar la mano de este.

-Hace un tiempo que Tao no paga por mí e incluso si todavía lo hiciese ese no es tu problema.
Seokjin rodó los ojos negándose a seguir aquella conversación y tras recoger su abrigo caminó lejos con rapidez, dejando atrás los intentos de explicaciones de su amigo. Jin no solía ser una persona a la que le gustase meter el hocico en los asuntos ajenos, pero se consideraba a sí mismo un buen amigo y a veces necesitaba dejar salir sus pensamientos sin remedio alguno.

-¿Listo? - la voz de Namjoon chocó contra sus pensamientos en cuanto sus pies se posaron sobre la salida del local. Con un asentimiento caminó hacia el chico, ambos avanzaron sin decir nada.

Generalmente Jin era el tipo de persona que prefería los silencios tensos a hablar y dejar escapar tonterías debido a situaciones demasiado emocionales. A él no le resultaba fácil romper su burbuja, incluso ante su familia se mantenía cohibido y encerrado en una imagen que a sus padres le resultase fácil de digerir. Seguía en Corea, seguía siendo el segundo hijo de una familia importante y seguía teniendo que mantener un puesto fijo en un buen bufete de abogados. Había demasiados motivos que lo obligaban a ser distinto al ser humano que le gustaría, dolía saber que la época más feliz de su vida se desenvolvió entre las gruesas paredes de un colegio privado en el que pudo ser rebelde, en el que logró enamorarse por primera vez y en que por primera vez se desinhibió sin repulsión hacia su propio ser.

Pero aquello había quedado atrás, ya no tenía diecisiete años y Hoseok al igual que él, necesitaba mantener una imagen recatada ante la prensa. Aunque su pareja no dudaba en dejarle saber al mundo su condición sexual, no era algo que mostrase con gran frecuencia. Su intimidad era… completamente íntima.

-Estás de nuevo perdido en tus pensamientos - Namjoon caminaba a su izquierda con la mirada al frente - Cuando haces esos pareces incluso más frío rey de hielo.

Jin suspiró cerrando sus manos en puños, las uñas levemente largas rasguñaron su piel nivea.

-Y tú sigues juzgando sin conocer, ya hemos hablado de eso.

-No necesito conocerte para comprender que tienes la cabeza en otro sitio y que tus ojos se vuelven incluso más inexpresivos cada vez que eso ocurre, lo he visto varias veces en tu despacho y lo confundí con un intento de profesionalidad exagerada pero supongo que lo haces de forma habitual.

-Yo… es solo que me siento un poco asfixiado, no pretendo ser frío pero ocurre de vez en cuando - el porqué le estaba contando aquello a Namjoon era algo que Jin todavía no comprendía pero la opción de poder desahogarse con alguien le parecía en ese instante realmente atractiva - No juzgues Namjoon, no sabes las batallas que una persona está librando en su interior mientras decides considerarla de alguna forma en base a ciertas acciones momentaneas.

Namjoon sonrió levemente y alcanzó de su bolsillo otro dulce.

-Ten, el azúcar ayudará a suavizar tu hielo. - bromeó.

Jin se limitó a bufar sin embargo alcanzó el dulce y lo desenvolvió para a continuación llevarselo a la boca.

-Me gusta el sabor a sandía - dijo complacido mirando al chico que caminaba a su lado con una pequeña sonrisa.

Namjoon estaba sentado sobre uno de los taburetes que rodeaban la barra del local al que había llevado al abogado y lo observaba con curiosidad. Jin no era un bailarín profesional pero sus movimientos en la pista lejanos a su actitud habitual, lo hacían parecer atractivo a la par que atrayente.

Sin embargo cada vez que una chica se acercaba este la rechazaba con dureza letal.

-Para nada delicado, deberías pensar en sus sentimientos - Namjoon habló cerca del oído del abogado mientras le cedía el mojito de sandía que este había pagado con su bonita cartera repleta de dinero.

-Darle esperanzas sería lo realmente cruel, para ellas y para mí. No estoy interesado, tengo a alguien que cumple con todos los requisitos.

Namjoon bufó divertido pero pronto sonrió negando cuando alguien se acercó con la disposición de conquistar al rico y bonito chico de hielo que revoloteaba por la pista de baile.

-No si quieres tener una buena noche, ese chico corta como el hielo cuando rechaza - advirtió de forma cómica Namjoon.

Las personas a su alrededor comenzaron a resultar atrapantes en el instante en el que el ritmo de la música se hizo más intenso, por lo que Namjoon se escabulló hacia la barra de nuevo, con el abogado siguiendo sus pasos. En las manos de este el mojito ya estaba vacío y Nam creyó equivocadamente que este pediría otro igual cuando lo escucho llamar amablemente al barman, pues la primera vez que lo había visto aquella noche estaba bebiendo justamente eso también.

-Un Vodka Devil's Spring por favor - Jin sonrió como si se tratase de la persona más amable del planeta de la nada, su hielo parecía derretirse un poco cuando las arrugas se formaban alrededor de sus ojos como consecuencia a la expresión de alegría.

-Invitame - Namjoon pasó el brazo alrededor del abogado pero este se libró de su toque al instante abandonando la faceta risueña que le había dedicado al barman.

-Todavía eres mi cliente Namjoon. No soy un conocido tuyo, ni tu amigo. - Jin se mantuvo serio por unos segundos antes de dejar escapar una pequeña risa - Elige, pide lo que quieras y pagaré por hoy. Has logrado que mi humor mejore y eso merece un agradecimiento.

-¿Eso ha sido un intento de broma? - Namjoon sonrió mirando directamente a los ojos al abogado quien se limitó a asentir felizmente - Que sea entonces otro Vodka Devil's Spring.

Durante las siguientes horas el abogado se mantuvo bebiendo y diciendo cosas sin sentido a medida que el alcohol parecía adueñarse de su cuerpo. A pesar de que el abogado parecía abrirse con mayor facilidad cuando su mente se hallaba en estado de embriaguez, Namjoon venció a su curiosidad y lo apartó de la barra tras la última copa que este trató de alcanzar. Kim no era un borracho agresivo, en realidad era el tipo de borracho que da abrazos de oso y pide atención constantemente.

Jin sonreía, sus ojos no eran de hielo mientras su mente estaba perdida en la placeba felicidad pero aquello no era real. Nada que causara la exagerada ingesta de alcohol podría serlo, Namjoon comprendía ese detalle mejor que nadie. Él hallaba la satisfacción a través de pastillas y al parecer el abogado la había obtenido tras una insana ingesta de vodka.

-No más alcohol amigo, estás a punto de caerte.

El abogado rodeo con sus brazos el pecho de Namjoon.

-Llevame - su voz melosa susurró en el oído de Namjoon - Todo me da vueltas y estoy demasiado mareado como para andar.

Bien, en esa situación... ¿Qué se supone que debía hacer con el rey de hielo derritiéndose así a su alrededor?

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Hiiiii!!!!
Como siempre espero que os haya gustado, alguna teoría acerca de qué pasará con Jin borracho?

Un beso, Mel 😘