BIRMINGHAM, 1924

Hetty recordaba el día que llegó a Birmingham como si hubiera sido ayer, a pesar de que había pasado la mayor parte de dos años en la ciudad que ahora llamaba su hogar.

Recordaba cuando Alfie, su figura paterna, la había sentado y le había explicado que había hecho un arreglo con un hombre llamado Thomas Shelby; un arreglo que implicaba que Hetty se casara con el primo de Tommy.

El impacto había sido breve, pero el resentimiento hacia Alfie había durado mucho más. Hetty sabía, en el fondo, que Alfie lo estaba haciendo para beneficiar a su familia, y eso la incluía a ella, pero eso no le impidió actuar como una niña e ignorarlo durante cuatro días seguidos, a pesar de tener 17 años. Estaba molesta porque él no se lo había dicho de antemano y había aceptado el arreglo sin siquiera consultarlo con ella.

La otra cosa que la decepcionó fue el hombre con el que se suponía que se iba a casar, Michael Gray, quien no parecía muy aficionado a la idea y no dudó en dejar en claro que no quería tener nada que ver con Hetty. Desde el momento en que lo conoció por primera vez en octubre de 1922, él había sido frío con ella; su clara aversión por ella era evidente en la forma en que le hablaba y no la miraba a los ojos cuando se dirigía a ella.

Afortunadamente para ambos, Tommy pospuso el matrimonio real hasta que los dos lograran llevarse bien, y había estado esperando en vano durante casi dos años para que ocurriera tal anomalía. Tommy no podía entender por qué se odiaban tanto, especialmente porque John y Esme parecían perfectamente contentos de estar casados.

Finalmente, después de darse cuenta de la inutilidad de tratar de obligarlos a llevarse bien, Tommy decidió que simplemente mantendría a Hetty, protegiéndola y mantieniendo su promesa para mantener a raya a Alfie Solomons. En cierto modo, Tommy había salido victorioso y era un maestro en el arte de derribar piezas de ajedrez para abrirse camino a través del tablero hacia la victoria.

En el tiempo que Hetty había estado en Small Heath, había vivido con un hombre llamado Mason James, cuya hermana se estaba por casar con Tommy. Hetty se había encariñado con los hermanos James, y así fue como se encontró con un vestido de dama de honor de color morado oscuro, sosteniendo un ramo de flores mientras observaba a Tessa James caminar por el pasillo hacia su futuro esposo.

A pesar de cuanto intentó odiar a Tommy Shelby por poner su vida patas para arriba, él había mostrado su amabilidad al mantenerla alimentada y protegida. Además, ver la expresión en su rostro mientras veía a la mujer que amaba caminar hacia él hizo que cada gota de ira se desvaneceria, reemplazada por una nueva emoción.

Hetty se dio cuenta de que Tommy Shelby era capaz de sentir emociones, y en ese momento estaba tan abrumado por ellas que parecía que estaba a punto de desmayarse. Por primera vez desde que Hetty conoció a la familia Shelby, Tommy Shelby finalmente parecía feliz.

Después de la ceremonia, la familia Shelby y la familia James hicieron el viaje de regreso a la mansión de Tommy y Tessa para la recepción de la boda. Hetty iba detrás de la procesión, caminando con Isaiah, quien se había convertido en un buen amigo durante su prolongada estadía en Birmingham.

—Vamos, chica londinense —dijo Isaiah, empujándola con el codo mientras caminaban—. Sonríe, es una boda.

Hetty no tenía muchos motivos para sonreír, especialmente con los pensamientos corriendo por su cabeza—. Es... frustrante pensar que nunca tendré una boda como esta. Nunca me voy a enamorar del hombre de mis sueños y lograr que me mire como Tommy mira a Tessa. Me voy a casar con alguien que me odia y me quitaron esa decisión.

Isaiah sabía todo sobre la situación de Hetty y se dio cuenta de como, a la luz de la boda de Tommy, parecía cruel hacerla presenciar una unión entre dos personas que se enamoraron voluntariamente en lugar de verse forzados a un matrimonio que no querían—. Sí, bueno, siempre podríamos huir juntos. Ir a cualquier parte del mundo.

—Nos encontrarían —dijo Hetty con tristeza—, y luego nos matarían a los dos.

—No, tú eres demasiado valiosa —dijo Isaiah—. Me matarían a mí y a ti te llevarían de vuelta.

Hetty asintió—. Porque mientras estoy aquí soy su prisionera.

—¿Has vuelto a Londres recientemente? —preguntó Isaiah.

Hetty negó con la cabeza—. Tommy no me deja salir de Birmingham desde la última vez que fui a ver a Alfie porque perdí el tren y pensó que no volvería.

Era una situación difícil, porque mientras Hetty estaba en Londres Tommy no tenía nada con que retener a Alfie Solomons excepto su promesa de que el matrimonio se realizaría. Sin Hetty, Tommy no tenía nada concreto y Alfie podría hacer lo que quisiera. Con Hetty bajo su atenta mirada, Tommy sentía que tenía el control.

—Bien, estás siendo deprimente y estamos yendo a una fiesta —dijo Isaiah, metiendo la mano en su bolsillo—. Sé que no te gustan estas cosas, pero ¿qué tal si te relajas un poco?

Hetty apartó la mano que Isaiah le tendió—. No. No quiero cocaína, gracias.

Isaiah frunció el ceño—. Es buena. Te hace sentir mejor.

—No necesito sentirme mejor —respondió Hetty—. Necesito que este día termine porque solo alimenta mi ira.

Llegaron a la gran casa de Tommy, y, mientras entraba, Hetty pasó junto a Michael. Sus ojos captaron su mirada y apenas esbozó una sonrisa antes de apartarla. Hetty no lo culpó, porque al final del día él se había visto tan afectado por el acuerdo como ella. Aún así, eso no le impidió estar con una serie de mujeres en los últimos dos años, dejando en claro que aún no estaba listo para establecerse con Hetty.

Mientras la gente se arremolinaba, bebiendo champán y discutiendo los finos detalles de la boda, Hetty encontró un lugar tranquilo en la cima de la escalera de Tommy y se apoyó en la barandilla, abriendo un libro en su regazo e intentando ahogar la boda a su alrededor.

Había intentado evitar asistir a la boda, pero Tessa, quien hizo que pareciera una buena idea en ese momento, la había obligado. En cambio, Hetty se encontró inmersa en El Libro de la Selva, uno de sus nuevos libros favoritos. De vez en cuando miraba hacia arriba, intentando ver a quién reconocía entre el mar de rostros desconocidos.

Allí estaba John hablando con su esposa, Esme, luciendo bastante molesto. Hetty sabía que no eran exactamente los mejores cuando se trataba de ponerse de acuerdo, y la mayoría de las veces sus desacuerdos restultaban en una pelea a gritos que generalmente terminaba con sexo.

Luego estaba Mason James, el hermano mayor de Tessa, y quizás la única persona además de Tessa que hacía que Hetty se sintiera como una persona en lugar de una prisionera, apagando un cigarrillo de manera bastante llamativa en una maceta.

Vio a Finn Shelby caminando, aparentemente en busca de alguien; luego vio a Isaiah intentando coquetear con una chica en la recepción, y por último, vio a Arthur Shelby, quien la estaba mirando fijamente.

Cuando captó su mirada, Arthur la señaló—. ¡Hetty! —gritó, abriéndose paso entre la multitud—. Ven aquí.

Suspirando, Hetty cerró su libro, se lo puso bajo su regazo y bajó las escaleras para encontrarse con Arthur—. ¿Sí?

—¿Qué estás haciendo sentada allí, sola? —preguntó el Shelby mayor—. Es una boda.

—Estaba leyendo —dijo Hetty, mostrándole a Arthur su libro—. Y prefiero estar sola.

Arthur negó con la cabeza y le arrebató el libro de las manos—. No, es una boda. Puedes leer tu libro mañana. Esta noche te vas a divertir.

Hetty se dio cuenta de que la única forma de recuperar su libro era seguir a Arthur, por lo que le permitió poner un brazo sobre sus hombros y guiarla entre la multitud de personas.

A/N:
Esta historia puede resultar un poco confusa ya que aparecen Tessa y Mason pero en violent ends no aparece Hetty, y esto es porque esta historia se escribió después de violent ends. Pero Hetty sí va a aparecer en el último libro de Tommy y Tessa :)