Capítulo 30
EVELYN SE LEVANTA alarmada cuando Robbie suelta un grito irritante. Al instante saca su daga, se pone en pie para encararse a la amenaza.
Casi le da un paro cardíaco.
Una bestia, pareciendo tan normal como una bestia podría, está intentando llevársele.
Robbie se resiste, clavando los talones en el suelo y mordiendo el brazo de la bestia cada vez que intenta cogerle. Robbie se retuerce demasiado como para que la criatura le agarre correctamente, y una o dos veces Robbie se las apaña para escapar pero sólo por unos momentos. La bestia o no le importa o no se da cuenta de que ha despertado a todo el campamento; sigue agarrando a Robbie.
Los pies de Evelyn se mueven por sí solos, rápidamente. Intenta pillar por sorpresa a la bestia, pero él ha estado prestando más atención de lo que creía. Deja a Robbie a su izquierda, parando la daga de Evelyn con su antebrazo derecho. Es increíblemente fuerte, incluso luchando con una mano, y Evelyn hace todo lo que puede para intentar derrotarle. Le patea las piernas, pero sus pies están firmes en el suelo. Corta su antebrazo con el filo de la daga, pero no hace nada.
Encuentra un punto débil, le corta en el otro brazo, el que sostiene a Robbie. Ella se las arregla para pillarle bajo de guardia con la ayuda de la contínua reistencia de Robbie. Su daga se clava profundamente en su hombro, lo suficiente como hacerle sisear y soltar a Robbie. Robbie corre hacia el campamento con los otros niños, y Evelyn tiene el tiempo justo para ver a Maxie cogiéndole.
Entonces la bestia la ataca.
Se cae de espaldas, el aire sale de sus pulmones, pero es rápida en recuperarse. Le golpea en la mandíbula, intentando distraerle lo suficiente como para agarrar su daga y sacarla de su hombro. No funciona. Su cara apenas se aparta. Usa el borde de su mano para golpearle la tráquea, pero sólo funciona un segundo e inmediatamente contraataca. Sus manos se cierran alrededor de su garganta.
Ve a Locke sobre el hombro de la bestia, a punto de clavar una rama en la cabeza de la criatura.
Pero la bestia le escucha, y se gira tan rápido que Locke no puede mover la rama a tiempo. Acaba con él con una mano, manteniendo la otra en la garganta de Evelyn, y aparta la rama lejos de Locke. Eso parece dejarle sin aliento, y se echa atrás, un poco asombrado.
Evelyn usa esa distracción para lanzar la rodilla contra el estómago de la bestia, pero de nuevo esta bestia es innegablemente fuerte. Su cuerpo apenas se mueve, y si algo, agarra su garganta más fuerte.
Arquea el cuello intentando coger el aire que tan desesperadamente necesita, mordiendo su brazo sin conseguir nada. Vuelve a golpearle con la rodilla, pero no parece perder fuerzas. Su visión se está oscureciendo, el mundo alrededor se mueve y distorsiona.
Locke intenta otro ataque, pero la bestia le lanza con tanta fuerza que apenas puede mantenerse en pie de nuevo. Intenta golpearla como a una pelota de fútbol, pero la bestia no se mueve mientras los pies de Locke se deslizan sobre la tierra como si intentara derribar una casa de ladrillos. Obtendrá brownies por el esfuerzo.
Pero Evelyn está perdiendo el conocimiento lentamente.
¿Dónde está Harry?
Había estado ahí cada vez que necesitaba ser rescatada cuando constantemente se negaba, y ahora cuando en verdad necesita y quiere ser rescatada, no está. Pensamientos molestos llegan a su cabeza. Quizás está devorando gente inocente por su propio bien.
Es injusto que ella piense que él sería tan egoísta, pero está demasiado enfadada y decepcionada y asustada como para importarle.
Aunque deja que sus ojos se cierren, sigue intentando combatir contra la fatiga y el mareo lo mejor que puede. Su cuerpo gradualmente se queda sin fuerzas, su mente se aleja.
Y entonces el peso sobre ella se esfuma.
Le lleva un largo rato reunir fuerzas para abrir los ojos. Quiere gritar a Harry por haberle llevado tanto tiempo, pero también quiere agradecerle. Siempre llega en el momento justo, ¿verdad?
Excepto que cuando Evelyn abre los ojos, no encuentra a Harry ahí--encuentra a Sasha. Sasha, la pequeña niña frágil que ha perdido a todo el mundo, está de pie con el mango de la daga de Evelyn en su mano mientras clava el filo en el cuello de la bestia, que ahora ha caído hacia un lado. Mientras la bestia se retuerce y se queja, Sasha clava más hondo la daga, todo mientras lágrimas caen de sus ojos y tiembla.
Mareada y con náuseas, Evelyn se las apaña de alguna forma para ponerse de rodillas, agarrando gentilmente la muñeca de Sasha. Aunque la niña se resiste, manteniendo el puño cerrado en el mango hasta que la bestia muere y su sangre empapa el suelo. No la suelta hasta que el último suspiro sale de sus labios, e incluso entonces, sigue un par de segundos quieta. Finalmente, deja que Evelyn aparte su mano y la agarre ella, y la niña se tira al pecho de Evelyn.
El campamento está en silencio menos por los llantos de Sasha.
Evelyn la abraza fuerte, como una promesa de que nunca la dejará.
Se oyen ramas crujir, y Evelyn alza los ojos para ver a Harry. Se percata de la bestia muerta y de los llantos de Sasha, quien tiene las manos ensangrentadas. Oh, tenía un par de palabras que decirle. Él dudosamente la mira a los ojos, y como si su oído fuera lo suficientemente impecable para leer mentes, agacha la cabeza avergonzado.
***
"¿Dónde demonios estabas?" ella susurra-grita, con cuidado de que los niños no escuchen mientras Harry y Evelyn se mantienen a un lado del campamento.
Él aún no se ha atrevido a mirarle a los ojos de nuevo. Después de que ella calmara a Sasha, Maxie vino y se llevó a la niña a la cama y la arropó con la manta. Ayudó a Sasha a lavar sus manos con algo de agua de la cantimplora de Evelyn, pero los dedos de la pequeña niña aún estaban manchados de rojo. Harry había arrastrado a la bestia lejos sin decir una palabra, y Evelyn le había apartado del campamento antes de que pudiera desaparecer entre los árboles.
"Cuando no quiero tu ayuda, siempre te metes de por medio. Cuando necesito tu ayuda, no puedo encontrarte. ¿Tienes idea de lo que habría pasado si Robbie no hubiera gritado? Si la bestia--o experimento, lo siento--" añade sarcásticamente, rodando los ojos "--le hubiera matado? ¿Qué pasa si le hubiera drogado o ahogado o--"
"Evelyn," interrumpe Harry finalmente, aún mirando al suelo. Niega con la cabeza lentamente. "Lo siento."
Su voz está pesada y llena de emoción, y Evelyn tiene la impresión de que se está disculpando por más que su ausencia esta mañana. Echa un paso atrás, asustada de pronto. "¿Qué has hecho?"
Él inhala fuertemente, mirándola. "Debería haber estado aquí."
"Joder, claro que deberías." Ella entrecierra los ojos. "¿Pero dónde estabas, Harry?"
"Encontrando un campamento," murmura con voz tan baja que casi no le oye.
"¿Perdona? ¿Por qué harías eso? No funcionó tan bien la última vez, en caso de que lo hayas olvidado."
"No lo he hecho." Tensa la mandíbula. "He estado pensando, y no creo... no creo que ninguno de vosotros debiera estár involucrado en esto. Tengo un mal presentimiento."
Evelyn parpadea múltiples veces, pillada por sorpresa. Echa otro paso atrás como si el shock de las palabras le hubiera golpeado. "Bueno, yo tengo un mal presentimiento cuando no estoy contigo."
Oh Dios, ¿tenía que decirlo así?
Aunque no miente al decirlo, así que no intenta reiterar.
"No puedo proteger a todos," dice, sonando profundamente abatido. "Mira lo que le pasó a Delia y a Nive y a muchos antes que ellas. Mira lo que acaba de ocurrir ahora." La mira con los ojos bien abiertos, y si ella no le conociera mejor, diría que hay rastro de miedo en su mirada. "Ya no estáis más a salvo conmigo que con gente normal."
"Eso no es cierto," discute, cruzándose de brazos instintivamente. "Ni siquiera habría llegado tan lejos si no fuera por ti. Sí, estoy muy molesta porque no estabas aquí ahora, pero has estado las otras veces. No te estás dando el suficiente crédito."
"Tú me estás dando demasiado crédito."
Ella bufa, mordiendo su labio inferior molesta. Las palabras flotan en su mente, aún queriendo ser dichas, y el miedo intenso de que Harry les deje solos finalmente la convence para decirlo. "Confío en ti, Harry. ¿Sabes cuánto ha pasado desde que de verdad he confiado en alguien?"
Él mantiene la mirada, sus labios apenas se mueven cuando murmura las palabras, "Soy un monstruo."
"No eres un monstruo," dice, casi riendo por cuán incrédulo suena--la posibilidad de Harry siendo malo y Evelyn diciendo en voz alta que una bestia no lo es. Inconscientemente vuelve a dar esos dos pasos al frente. "No puedes dejarnos."
Harry nota lo desesperada que suena, lo asustada que está. Su rostro se llena de confusión, pero sus ojos nunca se separan de los suyos. "¿Qué te ha hecho cambiar? La semana pasada habrías estado rogándome que te dejara sola o me amenazarías con desgarrarme la garganta."
Ella se atreve a sonreír un poco. "Culpo a Delia del principio del cambio. No creo que en verdad haya cambiado, ¿no? De hecho, te desgarraría la garganta si me dejaras."
"Técnicamente me matarías, así que aún así te dejaría."
"Pero lo harías bajo mis condiciones."
Él intenta sonreír, pero falla. Ni siquiera parece importarle que Evelyn está mirándole los colmillos, es lo máximo que podrá ver de ellos. Ella quiere tocarlos para confirmar que todo esto no es falso, pero cree que sería algo grosero considerando que tiene sangre y suciedad bajo las uñas. Nunca puede llevar demasiado lejos con las dos cosas, aparentemente.
Sus dedos se mueven a sus lados, y justo cuando está a punto de alzarlos, su rostro se aparta y ella se tensa.
"Evelyn..." La manera en la que dice su nombre hace que sus hombros caigan. Él está negando de nuevo. "No puedo dejarte ir conmigo."
"Menos mal que no pregunté por tu permiso," contesta automáticamente, de esa manera cuando alguien le dice que no puede hacer algo que quiere.
"Lo digo en serio."
"Y yo también."
"Por favor, sólo..." Suspira, pasando una mano por su cabello castaño. "Bajo otras circunstancias, no te pediría que te fueras--no quiero que lo hagas. Pero este sentimiento... es fuerte y no se va. Prefiero prevenir que curar. Encontré un campamento no demasiado lejos. Están bien organizados y vi muchas mujeres y niños que parecen sanos. Creo que es una gran oportunidad."
Evelyn le mira. "¿De verdad quieres que nos vayamos?" Odia lo débil que suena, triste. ¿Por qué le afecta tanto? Seguramente es algún tipo de síndrome. Él la ha salvado numerosas veces, así que es inevitable que se sienta atada a él, ¿verdad?
¿Verdad?
"Es la mejor opción," es todo lo que dice, volviendo a mirar al suelo.
Enfadada con todo esto de nuevo, ella bufa, exasperada. "Vale. Pero quiero algo antes de que te olvides de nosotros."
Mareada por el signo de traición, decepción, y completa molestia, alza su barbilla y le besa.
Es simplemente labios contra labios aunque toma una gran cantidad de fuerza por su parte, se gira y se aleja de él como si el momento no significara nada para ella.
Ella desea que ese fuera el caso.
***
No es fácil explicar a todos por qué se separan. La excusa de Harry de tener "un mal presentimiento" no sienta demasiado bien a Robbie y Sasha, quienes están intentando hacerle cambiar de opinión. Locke parece indeciso y Maxie parece más asustada de lo normal. Se sumerge en su cuaderno en el momento en el que Evelyn abrazada a Ress.
Aún así, ahí están ellos caminando hacia el supuesto campamento en el que Harry parece confiar con fuerza.
Evelyn aún no puede ordenar su mente, o descifrar cómo se siente con todo esto. Engañada no, tampoco abandonada. Enfadada no va acorde ni tampoco decepcionada, aunque no puede decir por qué se siente tan desanimada. Quizás porque él había empezado a ser su única esperanza. Quizás porque él había sido el plan b para Robbie y Sasha en caso de que Evelyn lo fastidie todo.
Lo cuál hará eventualmente--nunca falla.
Todo lo había decidido con Harry, y ahora volverá a no tener planes, ni intenciones, ni tampoco sabrá a dónde ir a partir de ahora. De acuerdo, no tenía ni idea de lo que iba a hacer después de llegar al laboratorio con Harry, pero de nuevo, ella está segura de que él tiene un plan.
Delia había tenido razón con los planes; está bien tener uno.
Ahora Evelyn simplemente se siente perdida.
Se pregunta cómo Harry se las está apañando para resistirse a los dos niños. La voz de Robbie se había callado mientras Sasha continuaba rebatiendo sus argumentos. Evelyn no se molesta en mirarles.
Incluso Locke se queda en silencio y camina con las manos metidas en los bolsillos, cojeando un poco por los golpes que recibió hace un par de horas antes.
Cuando salen de entre los árboles alrededor de treinta minutos después, Harry les guía hacia la izquierda. Parece una simple carretera en la que la gente solía ir rápido, no hay edificios a la vista y nada más que árboles alrededor. Podría haber sido un sitio tranquilo en una situación diferente.
Aunque pronto, un edificio se hace visible. Evelyn se ralentiza por instinto, sus labios se abren cundo se da cuenta de que es la Capital donde todos los hombres y mujeres importantes de negocios pasaban por alto Florida. Como Harry dijo, el lugar está vallado (ya lo estaba antes, claro) y mucha gente patrulla la frontera. Le recuerda un poco al campamento de Quincy, sin embargo, este parece mucho más estable y oficial.
Quizás sólo es por el edificio.
Harry se para abruptamente para estar lo suficientemente lejos como para que los cuatro hombres de la puerta delantera no puedan ver su rostro, o sus ojos. Evelyn no quiere despedirse. Son cursis e innecesarias y siempre te dejan con un horrible sentimiento. Sólo quiere alejarse y olvidar su existencia, pero puede sentir su mirada y odia la manera en la que su estómago se retuerce de pena.
"¿Qué pasa si no nos acogen?" pregunta en voz baja, girándose lo suficiente como para mirarle de reojo.
"Lo harán," dice sinceramente. "Les vi acoger a un par de personas esta mañana. No niegan el paso a nadie, o eso es lo que dice el hombre que está a cargo."
Evelyn tensa la mandíbula, mirando al edificio.
"Sabes tan bien como yo que tu lugar está con ellos," susurra él.
"No."
"Tu lugar tampoco está conmigo."
No discute eso.
"Piensa en los niños," le dice, justo a su lado. "Es mejor para ellos tener un sitio seguro donde quedarse que caminar por las calles y los bosques todo el tiempo."
De nuevo, no puede discutirlo.
Así que le da la espalda.
Deja que los niños murmuren sus enfadadas despedidas, entonces Robbie y Sasha la cogen de las manos, y ella camina al lado de Locke mientras Maxie y Ress les siguen detrás. No mira atrás cuando los guardias les ven. No mira atrás cuando los guardias preguntan por su llegada.
Nunca volverá a mirar atrás.
☆☆☆☆
Novela original escrita en inglés por juliaxwrites
All the love, A.
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