Capítulo 14
(Nota de autora: ¿cuál crees que será la primera cosa que Harry diga cuando hable?)
DESPUÉS DE CONSEGUIR que un Harry negado se metiera a la ducha, Evelyn y Sasha se quedan fuera del baño. Hay un silencio extraño entre ellas, aunque Evelyn no diría que es incómodo. La pequeña niña sigue mirando a Evelyn como si estuviera esperando algo. Evelyn no tiene la más mínima idea de lo que la niña quiere de ella, así que aparta la mirada centrándola en el techo.
Evelyn siente la necesidad de inspeccionar el IKEA, simplemente por cotillear y curiosear. Hasta ahora ha contado cincuenta personas, sin embargo, IKEA es un sitio enorme y algo le dice que hay más cuerpos ocupando el edificio. Quincy parece suficientemente amable, así que es poco probable que negara la entrada a muchos rezagados. Él les ofreció un sitio, ¿verdad?
Pero hay algo... raro sobre él. Quizás son sus palabras demasiado amables y sus sonrisas, o quizás sólo es que Evelyn está centrada en su propio pasado que detesta excesivamente a las personas felices. No es que haya algo malo en ser feliz, pero hace que Evelyn se sienta incómoda alrededor de personas constantemente joviales.
"Me gustan tus ojos."
Evelyn frunce el ceño al mirar a la pequeña niña. Su frase había sido casi inaudible, pero Evelyn lo escuchó claramente. "Um, gracias..." echa un vistazo a la niña. "Me gustan tus zapatos. Quizás podamos limpiarlos un día para que vuelvan a brillar, ¿eh?"
Sasha sonríe entonces, su rostro completo reluce mientras dirige la mirada a sus deportivas brillantes. Están cubiertas de mugre, pero se ve y parece que a Sasha le satisface que Evelyn se diera cuenta.
La puerta del baño se abre, prácticamente haciendo que Evelyn diera un salto por el susto. Se gira, entonces desea no haberse molestado en ello.
Harry estaba ahí de pie sólo con sus jeans, con el torso desnudo. Su cabello húmedo gotea en su fuerte pecho y su tonificado abdomen, captando la atención de Evelyn un poco demasiado más.
"¿De verdad? ¿La ropa te molesta tanto?"
Él frunce el ceño, entonces enseña su destrozada camisa manchada de sangre y porquería.
Ella frunce los labios. "Me olvidé de pedir al Sr. Jefazo ropa limpia para ti."
Él rueda los ojos.
"No actúes como si fuera el fin del mundo." Ella se muerde el interior de su mejilla, inmersa en sus pensamientos e intentando no quedársele mirando. No puede exactamente dejarle aquí a su libre albedrío. ¿Y si un soldado viniera y es forzado a mirarle? No pueden arriesgarse a que descubran quién es de verdad si tienen alguna esperanza de pasar una noche en un buen refugio.
Sasha habla, en voz muy baja. "Me quedaré con él."
Evelyn lo piensa. No es lo que ella preferiría, pero es algo, supone. "¿Estás segura?"
Sasha asiente.
"Dile a quien venga que alguien está usando la ducha, ¿vale? Y, Harry," dice, dirigiéndose a él e intentando mantener los ojos en su cara, "quédate aquí, ¿de acuerdo?"
Él rueda los ojos otra vez, pero cierra la puerta de todas formas.
Evelyn prácticamente sale corriendo al pasillo, un sentimiento de preocupación se crea en el fondo de su estómago.
***
Sasha se apoya en el contrachapado, pensando. El pasillo está vacío, pero se siente incómoda. ¿Por qué se ha ofrecido voluntaria a quedarse sola? Cierto, Harry está al otro lado de la madera, pero aún así hay distancia. Había querido ser valiente. ¿Qué podría pasar en los cinco minutos que Eve no estaba?
Pero ya han pasado esos cinco minutos. Sasha cuenta los segundos en su cabeza cuando termina la canción que estaba tarareando. Sesenta segundos son un minuto, pero no puedes contar demasiado rápido ni demasiado despacio. Cuenta al ritmo normal, e incluso entonces alcanza a contar ocho minutos. Ocho grupos de sesenta, y Eve no ha vuelto.
¿Quizás no puede encontrar a Quincy?
No le habría molestado tanto a Sasha si no hubiera visto a la persona que merodeaba por el pasillo. La misma persona que se burló de Eve antes en la verja. Sasha arruga la nariz al verle. Transmite un aura arrogante, pero Sasha puede ver la crueldad en sus ojos. Tiene que dejar de estremecerse cuando él se para frente a ella.
"¿Estás usando el baño?"
Niega con la cabeza.
Él va a abrir la puerta.
"Yo no lo estoy usando," dice Sasha rápidamente, intentando alzar la voz, aunque por naturaleza habla en voz baja. "Pero alguien sí."
Él suelta un suspiro exasperado. "¿Lleva mucho rato?"
Ella se encoge de hombros.
"Dios te dio el don de hablar por algo, niña."
Dios también me dio educación, pero supongo que a ti no.
Se le queda mirando, irguiéndose lo mejor que podía. Él se ríe por su tonto intento de parecer dura, pero ella no se mueve.
Unos largos minutos pasan antes de que Locke, cree Sasha que se llama, gruñe en voz alta. "A la mierda. Quien quiera que esté dentro más le vale haber terminado porque voy a entrar."
Los ojos de Sasha se abren y se pone frente a la puerta. "¡No puedes!"
Él entrecierra los ojos, sus irises azules se oscurecen. Ella tiembla. "Aparta de mi camino."
"No está bien interrumpir a alguien," susurra, un nudo en su garganta comienza a formarse por su intensa mirada. "Debería terminar pronto." Nerviosamente mira al pasillo, aunque aún no hay signos de Eve.
"Tienes una oportunidad más para apartarte, niña."
"S-sólo espera un momento."
Él agarra el cuello de su camiseta, apartándola con brusquedad. Ella cae de culo, pero al instante se pone de pie para agarrarle del borde de su chaqueta. Él aparta su mano con tanta rudeza que le deja una marca roja y ella se queja, con lágrimas formándose en sus ojos. Sasha intenta de nuevo apartarle, pero esta vez él se gira y la empuja por los hombros innecesariamente fuerte. Su pequeño cuerpo se golpea contra la pared contraria, y Sasha llora, agarrándose su cabeza herida.
La puerta del baño se abre de repente, pero no es porque Locke haya entrado--es porque Harry ha salido.
Su mano se cierra en el cuello de Locke a la vez que le estampa contra la pared, más fuerte que cuando Locke lo hizo con Sasha, y dos de los contrachapados se rompen por el impacto. Los ojos de Locke se llenan de miedo, confusión e ira, pero Harry se gira hacia Sasha, quien estaba echa un ovillo en el suelo, y la mira dulcemente, como su padre hizo cuando ella se cayó de la bici y se rompió el brazo.
Una mirada de preocupación sincera, e hizo que el corazón de Sasha se derritiera.
Las lágrimas que se escapan de sus ojos no son sólo por el dolor que Locke le había causado, sino también por el amigo que ha ganado.
***
Evelyn maldice cuando ve el encontronazo del pasillo. Agarra el polo en su mano, acelerando el paso. Todo lo que tenía que hacer era quedarse en el baño. ¿Había sido pedir demasiado?
Pero entonces ve a quién tiene sujeto, y parte de ella quiere reír.
"¡Harry!" grita, y él la mira sobre su hombro. Cuando le alcanza, agarra su brazo. "¿Qué estás haciendo?"
Sin embargo, justo cuando las palabras salen de los labios de Evelyn, se percata de Sasha tirada en el suelo. La pequeña niña está agarrando su cabeza, llorando tan fuerte que hace que el pecho de Evelyn duela.
Evelyn se gira hacia Locke, dándole la peor mirada que pudiera. "¿Qué demonios has hecho?"
"¿Qué demonios has hecho tú?" dice, mirando a Harry que aún seguía agarrándole del cuello. "¿Has traído a uno de esos... esos... animales aquí?"
Evelyn se cruza de brazos. "Si tú estás aquí no veo el problema en la presencia de Harry."
Locke ahoga su miedo con un grito enfurecido. "¡Espera a que le cuente todo a Quincy! No le importará una mierda lo que haga contigo, y tengo muchas cosas en mente."
Harry gruñe, cerrando tanto la mano que sus nudillos se vuelven blancos.
Evelyn ladea la cabeza. "No creo que le guste lo que has dicho."
"Puta loca," susurra Locke debido a la falta de aire en sus pulmones. Ambas de sus manos están sobre las de Harry, aunque no hace nada, ni siquiera parece que esté poniendo muchas fuerzas en mantenerle agarrado.
"He oído cosas peores," remarca Evelyn, caminando hacia Sasha para ayudarla a levantarse. La pequeña niña al instante se agarra a Evelyn con sus pequeños brazos.
"¿Quieres apartar a tu perrito faldero de mí?" Locke intenta pronunciar la frase, pero cuando lo hace Harry casi aplasta su cuello.
Evelyn se burla. "No le ha gustado eso."
Aunque le gustaría mucho ver al sucio pervertido morir, una mirada a Harry basta para que le suelte. Ya le han descubierto, y ni siquiera habían tenido la oportunidad de probar las camas. Sin embargo, la última cosa que necesitan es ser perseguidos por matar a un soldado del campamento.
Harry frunce el ceño cuando ve a Locke correr despavorido, sin duda alguna contará a su jefe el secreto que acababa de descubrir.
"Vamos a por Robbie y a despertar a Nive," dice Evelyn, rascándose la sien. No se espera lo que está a punto de ocurrir, pero lo que está claro es que les echarían del campamento. También podría ser rodeada por la banda.
Harry la mira como si estuviera disculpándose, pero ella no lo necesita. Sasha estaba contando cómo él salió porque Locke estaba siendo un "grosero" y la empujó, y Evelyn no puede enfadarse por eso. Le gustaría creer que habría hecho lo mismo en su situación. Además, ver la arrogancia de Locke desplomarse, si sólo fuera por un momento, haría que la situación fuera mucho mejor.
Mientras comienzan a caminar por el pasillo, no tienen siquiera la oportunidad de reunir a Robbie y Nive. Quincy les sigue con al menos seis de sus soldados apostados a sus lados, incluído Locke que aún miraba con desprecio a Evelyn. Ella le habría sonreído de no haber sido por la rapidez de Quincy. Dos de sus hombres al instante empujan a Harry, temblando como perros mojados aunque intenten sacar los pechos. Harry no se resiste, pero sus peculiares ojos rojos se oscurecen, y uno de los soldados le ata con una cuerda.
"¿En serio?" Evelyn se dirige a Quincy, entrecerrando los ojos. "¿Acaso parece que planee matar a alguien?"
Quitchy imita su mirada, toda la amabilidad de antes desaparece. "Intenté daros el beneficio de la duda, ¿sabes? No es probable que alguien fuera lo suficientemente estúpido como para colar a uno de esos demonios aquí."
Evelyn no se echa atrás, y Sasha se agarra a ella más fuerte. "Le he visto matar a más de su especie en treinta segundos de lo que tú probablemente has hecho desde que todo esto empezó. Él podría haber acabado con todos vosotros fácilmente, pero no lo hizo. Y, ¿sólo porque protegiera a una niña de ese patético que dice ser hombre le quieres atar?"
Quincy da un paso hacia Evelyn, pero un gruñido bajo de Harry hace que pare. Él mira a la bestia, entonces vuelve a dirigir su atención hacia ella. "Precauciones," dice. "Además, tenemos ciertas normas sobre lo que hacer con estos demonios."
"¿Y cuáles son esas reglas?"
Él se ríe sin gracia y se encoge de hombros. "Nos divertimos antes del evento principal. No te preocupes. Me aseguraré de que tengáis asientos en primera fila." Chasquea sus dedos. Locke y otro soldado agarran a Evelyn, y otros dos se encargan de separarla de Sasha.
"Quizás quieras descansar," dice Quincy mientras Evelyn intenta resistirse a las cuerdas que están siendo atadas a sus muñecas. "Ya es de noche, y la diversión comienza al amanecer." Le guiña un ojo y se marcha.
Locke agarra su brazo con fuerza, acercando sus labios a su oreja. "Me temo que no descansarás, cariño. Tengo mi propia diversión en mente."
Evelyn aparta su rostro e intenta darle un codazo en el estómago, pero su agarre en ella no afloja y se ríe por su intento. Incluso se ríe más cuando Harry gruñe, pero Evelyn le mira a los ojos, entonces dirige su mirada a la cuerda que rodea sus muñecas. Cuando vuelve a sus ojos, él asiente tan débilmente que si no hubiera estado atenta no se habría dado cuenta.
Ella oculta su sonrisa mientras les guían en direcciones separadas.
☆☆☆☆
Novela original escrita en inglés por juliaxwrites
All the love, A.
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top