Capítulo 30. Oportunidad

*editado*

Ariana

"Te hice una pregunta." dije seria al ver que el chico de ojos claros no respondía.

"¿No te alegras de verme? Me esperaba un poco más de ilusión de tu parte." dijo riendo mientras se sentaba a mi lado.

"Aun no me respondiste." repetí de nuevo.

"Este lugar te le enseñe yo." dijo mientras miraba fijamente el río.

"Lo sé, pero pensé que estabas en Alemania." dije mirándole aun, ¿tanto le costaba responder a mi pregunta?

"Volví ayer, no quería seguir tan lejos así que provoqué mi propia expulsión y volví." dijo tranquilo mientras cerraba los ojos y llenaba sus pulmones del aire que nos rodeaba a ambos.

"¿Y por qué has venido ahora a este lugar?" dije dejando de mirarle y mirando el agua que corría tranquilamente.

"Es donde vengo siempre que algo me hace no estar tranquilo, y lo sabes de sobra, me conoces demasiado como para no saberlo."

"Eso pensaba antes, que te conocía, pero se ve que tú estás tan equivocado ahora como yo lo estaba hace años." contesté en un tono tranquilo mientras dejaba de mirar el agua y me tumbaba sobre la suave hierba que había por el suelo.

"Nunca me perdonarás por lo que te hice, ¿verdad?" se dio un poco la vuelta mirándome fijamente a los ojos.

"Yo sí que sigo siendo la misma que conociste, Caleb. He cambiado en algunos aspectos, pero en el fondo sigo siendo la misma, y sabes que no perdono traiciones fácilmente." cerré los ojos mientras hablaba, no quería mirarle a él, así que era mejor mantenerlos cerrados.

"Cuando te conocí había cosas que se podían hacer para que perdonaras a la persona."

"¿Sabes el problema?" dije abriendo los ojos y encontrándomele tumbado a mi lado con sus ojos clavados en los míos "Que lo que tú me hiciste no fue una traición cualquiera, fue una que me costó mucho superar y, sinceramente, por ahora lo único que has hecho ha sido empeorarlo." tranquilamente me puse de pie para irme de allí, pero antes de que pudiera marcharme su mano tomo la mía haciendo imposible que siguiera con mi camino.

"No llegó a pasar nada entre ella y yo, llegaste antes de que nada pasara." dijo mirando al suelo.

"¿Y si no hubiera llegado qué? ¿Tampoco hubiera pasado nada entre vosotros?"

"Déjame demostrarte que soy buena persona, por favor." suplicó bajando su agarre por mi brazo hasta llegar a mi mano.

Sabía que no debería hablar con Caleb, que no se lo merecía después de lo mal que me lo había hecho pasar, pero algo dentro de mí no me dejaba dejarle hay solo. Serían los malditos recuerdos de los más de seis meses en los que había sido la persona más importante de mi vida.

"¿Cómo quieres demostrarme eso?" dije mirándole a los ojos, esos ojos en los que tantas veces me había perdido.

"Yo- yo aún sigo enamorado de ti, Ariana." dijo sinceramente dejándome con los ojos abiertos como platos y sin palabras.

"Eh... no." dije seria dando un paso hacia atrás y haciendo que soltara mi mano.

"No, ¿qué?" me miró con preocupación.

"No puedes hacerme esto." tragué saliva intentando eliminar el nudo que se estaba formando en mi pecho "Me hiciste mucho daño, Caleb. No puedes venir, aparecer un día sin más y decirme que sigues enamorado de mí pensando que me arrojaré a tus brazos y todo volverá a ser como antes."

"¿Por qué no puede volver a ser como antes?" dijo triste.

"Porque no lo mereces, Caleb. Me rompiste el corazón. Si no llega a ser por Niall todavía seguiría en mi habitación encerrada sin querer saber nada de nadie, pensando que no podría confiar en nadie porque todos me defraudarían." las lágrimas amenazaban con salir de mis ojos, pero luchaba por no dejarlas caer "Y luego encima tener que soportar tus miradas de desprecio por los pasillos, ¿quién coño te creías para mirarme así?" solté todo lo que lleva pensando estos años y no había dicho nunca.

"Me dolía verte con otros chicos." dijo él con tristeza.

"Yo al menos cuando estaba con otros chicos ya no tenía novio. En eso no nos parecemos, tú salías con otras mientras estabas conmigo."

"Solo fue esa vez y no llegamos a nada, te repito." intentaba excusarse, pero no quería creerle.

"¿Y cómo puedo creer yo que ahora no me estas mintiendo? ¿Cómo sé que puedo confiar en ti?"

Suspiró llevándose las manos a la cabeza y miró al suelo mientras tiraba de las puntas de su pelo.

"No sé qué hacer para que me creas, Ariana." dijo... ¿desesperado?

"No sé si habría algún modo de que te creyera. Lo siento, Caleb, pero es la verdad. Sera por la costumbre que tengo de no querer sufrir." dije irónicamente y comencé a andar de nuevo, pero él me detuvo.

"¿Aún me quieres o estás enamorada de otra persona?" en ese momento se me vino a la mente la imagen de Louis con Sylvia.

"Ninguna de las dos cosas." dije sin llegar a convencerme a mí misma, así que no sabía si él se lo tragaría.

"¿Así que aún tengo una pequeña oportunidad de que vuelvas a ser mía?" suspiré cansada y me di media vuelta para mirarlo.

"Caleb, ya te-" fui a decirle que no insistiera, que no volvería a sufrir por su culpa. pero de repente sus labios contra los míos impidieron que siguiera hablando-

¿Por qué mierda me estaba besando?

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top