– ¡AHORA! - La gata morada controló con sus manos el poco fuego que lanzaba el dragón.

Lancé mi martillo cerca de su boca deteniendo el poco fuego que desprendía, la gata comenzó a sacar esferas de fuego disparando las contra nuestro enemigo.

Silver y los demás se encargan de que las piedras del Techo no cayeran encima de nosotros. La velocidad de Sonic y los golpes actúan muy poco. El dragón regresó a estabilizarse listo para rematar contra nosotros.

Retrocedía hacia atrás cuando choque con la espalda de Shadow, mirándome preocupado me hizo a un lado salvando me de las llamas del dragón. Agradecí internamente.

Mientras la gata morada controlaba el fuego, intente buscar algún punto débil del dragón, ¡¿Cuál es?!

– ¡Una pregunta! - Gritó Sonic distrayendo al dragón de un lado a otro - ¡¿Cómo matamos a esta cosa?!

– ¿Qué tal los ojos? - Argumento el albino tirando piedras a la espalda del dragón - Podría funcionar.

Observé por unos segundos más al dragón, descubrí el pequeño patrón, cada vez que alguíen intentaba acercarse, o ruge con fuego, o intenta aplastarte, pero sobre todo intenta alejarte del pecho.

Lancé mi martillo para verificar, cuando Silver tiró la piedra grande en su espalda, el dragón se levanto en dos patas rugiendo con dolor. Mi martillo impacto en el centro de su pecho y la luz destellante de un error de programa lo rodeó.

¡Es un error!, hice aparecer el martillo de nuevo en mis manos, y por la reacción de Tails parece que logro comprender.

El pecho es su zona mas débil por error, algún programador debió haber echo algo mal en el juego.

Sostuve mi martillo con fuerza, corrí detrás del dragón mientras él luchaba contra los intentos de mis compañeros.

– ¡Debemos golpear su pecho! - Grité acaparando la atención.

– ¡Yo no puedo seguir!, ¡Tengo que ver a alguien!, ¡Necesita de mi ayuda! - Grito la morada, sus poderes desaparecieron y lucía cansada, su respiración estaba agitada y el calor comenzaba a sofocarse.

– ¡Yo puedo ir! - Me acerque de nuevo a ella ayudándola a sostener el equilibrio - Dime donde esta y ayudaré a quien lo necesite.

– ¡¿Cómo se que no le harás ningún daño?! - Me gritó desconfiada.

– ¡Tienes que confiar en nosotros!, ¡No queremos hacer ningún daño!, de lo contrario, ya te hubiéramos dejado sola aquí. - Le conteste mirando sus ojos dorados, ella me observo unos segundos para después sonreír. Una sonrisa sincera.

– De acuerdo, esta cuatro pisos arriba de este agujero, en una sala llena de piedras oculta, ¡No dejes que muera!, la dejo en tus manos - Apretó mis manos con fuerza. Ascendí decidida y me separe de ella tomando las medicinas que me entregaba.

Corría en dirección a las escaleras cuando la cola del dragón apareció de repente, las escaleras se destruyeron de un solo golpe, quedando en escombros, no podría subir.

Mire el agujero del techo, si puedo encontrar una manera de subir.

– ¡Ustedes vallan y encuentren a ese alguien! - Sentí mi cuerpo mas liviano, el poder de Silver estaba levantándome del suelo junto con Sonic, Shadow y Tails - ¡Nosotros nos encargaremos de  esta lagartija! - Gritó emocional y divertido, nos elevaba hasta llegar al segundo piso, de ahí podrías subir sin más problemas.

– ¡No podrán hacerlo solos!, ¡Necesitan ayuda! - Intente detenerlo.

– Estaremos bien, solo hagan lo que deben. ¡Nos veremos mas pronto de lo que creen! - Aseguró como si nada.

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– ¿De verdad lo lograremos? - Le pregunto la chica apareciendo fuego en sus dos manos.

– Lo descubriremos - el albino movió sus manos, un aura verde rodeaba el cuerpo del erizo, moviendo la lava que había al rededor. La gata asombrada miraba como el erizo se enfocaba en protegerse y protegerla creando así una celda de lava cubriendo al dragón de cinco metros.

Estaba sorprendida, pero el tiempo no fue suficiente, el erizo calló al suelo repentinamente sin su aura, y la poca lava callo de igual manera sobre el dragón.

Los poderes se habían agotado, la habilidad ya no estaba y no podía usarla hasta el siguiente nivel. Que destino tan cruel al adelantar el tiempo del debido.

El error de programación no era solo el dragón. Y Silver observaba la lava restante  con rapidez acercándose peligrosa hacía su rostro.

•─────✧─────•

– ¿Dónde podría estar? - Gritó el azabache mirando las puertas que llevaban a diferentes salas, ¿Cuál elegir en un momento tan crucial como ese?.

– No se preocupen, puedo buscar su presencia - Aseguro la rosada.

– ¿Y si eliges la equivocada?, ¿Qué pasa si nos encontramos a alguien más?

– No pasara - Dijo Shadow - El castillo esta por caerse en esta parte, solo un idiota se quedaría aquí esperando. Trata de encontrarlo, si no encuentras nada solo significa que se fue y esta a salvo.

– En ese caso lo encontraré - La eriza cerro sus ojos, concentrándose en los puntos donde podría estar. Hasta que sintió la persona dos pisos más arriba cerca de una ventana. Subió las escaleras seguida de los demás.

Una gran puerta apareció frente a ellos, y con solo un golpe de su martillo calló al instante, derribando el poco polvo y moviendo las pequeñas piedras de la pared que la sostenía.

Una coneja pequeña los miraba asustada, su brazo estaba lastimado y la barra de salud bajaba lentamente. Debía tratarse antes de morir, ¿Ella es la amiga de la gata?.

En un rápido movimiento, la coneja levanto sus manos disparando contra ellos esferas de energía explosiva.

Lista para seguir disparando contra ellos, el azabache apareció por detrás deteniendo sus manos para no causar mas explosiones. La coneja se sobresalto y cerró sus ojos con fuerza esperando recibir algún golpe del contrario. Su sorpresa fue mayor al sentí como su brazo estaba siendo vendado por la eriza rosada con el martillo que había visto anteriormente.

– ¿Quiénes son ustedes? - Pregunto dudosa de tanta amabilidad.

– Tu amiga nos dijo que estabas aquí, y que necesitabas ayuda - Aclaró Amy - Ya nos habíamos visto antes, ¿Verdad? - Pregunto y la coneja ascendió al instante.

– Soy Cream, ¿Dónde esta Blaze? - Se presento y pregunto por alguien desconocido, segundos después entendieron que debía ser la gata morada.

– Está abajo, y necesita ayuda urgente, ella y nuestro amigo están peleando con la criatura de este nivel - Habló Tails, la coneja lo observo con un pequeño brillo en sus ojos, el zorro se sintió incómodo ante la dulce mirada de la niña.

– Oye, parece que ya tienes a quien conquistar amigo - Sonic golpeó el hombro del zorro con diversión, el zorro solo lo observo molesto y con un pequeño rubor en sus mejillas, entendía a la perfección al erizo.

– No hay tiempo para esto, tenemos que volver - Interrumpió el azabache - Vas a venir con nosotros - Se dirigió a la coneja y ella ascendió con timidez.

Los cinco corrieron bajando las escaleras hasta llegar al gran agujero en el suelo, la coneja miro hacia abajo temiendo por la horrible caída que podría tener al estar tan cerca de la orilla.

Retrocedió asustada abrazando el brazo del zorro, quien en el momento se encontraba incómodo de la presencia de la niña. Aun mas, teniéndola tan cerca.

– ¿Y ahora como bajamos? - Pregunto la misma.

– Tails puede volar con sus colas - Dijo Sonic.

– No puedo cargarlos a todos, no soy tan fuerte, necesito que sea alguien liviano - Contesto irritado intentando quitar a la coneja de su brazo.

– ¿Qué tal si llevas a la Cream?, su poder es fuerte, puede ayudar ahí abajo - Amy observó a Tails.

– Es cierto, las esferas de energía podrían funcionar, harían retroceder al dragón hasta hundirse en la lava- argumento Shadow con los brazos cruzados, los demás esperaban una respuesta del zorro, ya que él sería el que iba a tener que cargarla.

Molesto y con irritación no tuvo otra opción más que aceptar ante las miradas súplicas de la eriza y por el bien del equipo. Se elevo con ayuda de sus colitas y estiró sus manos a la coneja, que sin oponerse las agarró con fuerza. El zorro comenzó a descender ante la vista de sus amigos y bajando por el gran agujero.

Al llegar lo que encontró fue al dragón en el suelo siendo quemado entre la lava, a un albino acostado y la gata sosteniéndolo entre sus brazos. Se acercó con rapidez ignorando el gran monstruo de cinco metros. Soltó a la coneja y corriendo apartó las manos bruscamente de la gata.

No confiaba en ella para nada. 

- ¡¿Que paso?!, ¡¿Que le paso a Silver?! - Grito molesto frunciendo su ceño, el erizo respiraba con dificultad y la barra de salud estaba en números peligrosos y bajando. No había señales de cortes, solo grandes quemaduras en su rostro y parte de su mano. Estaba preocupado, no tenía ninguna venda en ese momento. 

- Tranquilo, estará bien, el juego va a terminar y la vida volverá a la normalidad - Aclaro la gata como si nada, eso hizo enfurecer aun mas al zorro.

- ¿No pasara nada?, ojala hubiéramos dejado sola a tu amiga, no le pasaría nada tampoco, además de que gastamos vendas en ella, de nada - Cargo al erizo con pesadez, no podía hacerlo pero uso todas las fuerzas que podía, levantando al erizo con dificultad temiendo caer junto con el y lastimarlo aún más.

La gata se quedó perpleja por las palabras del zorro, ignorándolo abrazo a la coneja que tenía frente a ella con alegría, su compañera estaba a salvo y eso era lo único que le importaba.

– En el siguiente nivel, ni se te ocurra acercarte a nosotros - Amenazó el zorro con frialdad. La criatura había desaparecido, y pronto sus manos y su alrededor también lo hacían.

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Siguiente nivel

ᴛʜᴇ sʜᴀʀᴋ ᴀǫᴜᴀʀɪᴜᴍ

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