Parte única.

Esto contiene spoilers de End Game??? No sabría decirte, pero bueno. Si lo quieres leer sin haber visto la película, that's your business.

Algún día editaré esto y le daré una portada. No me crean; pero algún día.

Había escrito algo más largo y angustioso pero aún lo estoy puliendo, también he decidido escribir esta pequeña cosita porqué de verdad que estoy tan molesta e indignada con el final de End Game que hasta podría hacer cinco one-shots más. #NotMySteve.

Dedicado a las chicas (y Luis) del grupo de apoyo Stucker. Son el único motivo por el cual no me suicidé la noche después de ver End Game. Las quiero (y a ti tambien, Luis).


⭐⭐⭐

Cuando la figura de Steve desaparece, Bucky por fin deja salir el suspiro que se ha estado aguantando.

Bruce empieza a contar y Sam se ve emocionado a su lado, pero Bucky no está seguro de que hacer en este momento. Se siente tenso, ver como ambos hombres en frente de él se ven tranquilos solo logra alterarlo más. Ellos no tienen ni idea de lo que está pasando.

Steve no va a volver. Pudo verlo en su mirada, pudo verlo en como se alejó. Él no va a volver y Bucky desea estar bien con eso, de alguna manera. Es lo que siempre ha querido, que construya una vida, que tenga una esposa y sea feliz; es lo que siempre deseo mientras ambos crecían en Brooklyn, que pudiese tener una vida plena y feliz al lado de quién amaba.

Pero entonces, ¿por qué no se siente así?

Cuando Bruce termina de contar y Steve no aparece, Bucky está seguro de que en cualquier momento va a empezar a llorar. Todo empeora cuando Sam empieza a ponerse ansioso, preguntándole a través de gritos a Bruce dónde demonios está Steve.

Bucky se da la vuelta porque verdaderamente va a empezar a llorar; no puede estar más tiempo aquí. Sam sigue gritando y Bruce sigue balbuceando detrás de él, sin entender exactamente qué ha salido mal. Bucky no tiene fuerzas para decirles que nada ha salido mal, que simplemente Steve no va a volver.

Pero no es así. No tiene que explicarle nada a Sam y Bruce porque rápidamente el portal vuelve a abrirse y el sonido y la luz hace que Bucky se detenga donde está parado. Sin embargo, no se da la vuelta. No sabría si podría soportarlo si lo hace y no ve a Steve detrás de él.

—Vaya —escucha su voz, y es casi mágico. Bucky casi siente que no puede respirar.—, eso fue rápido.

Bucky, finalmente, se da la vuelta, y no se siente preparado del todo para verlo parado ahí, sonriente y divertido, casi arrogante. Sam suelta un suspiro aliviado, exagerado, pero aliviado.

—Dios. —exclama, una mano en su pecho, una sonrisa extendiéndose en su rostro.— Me habías asustado, Cap, por Dios.

—Sí, bueno, las cosas se complicaron un poco, pero ya estoy aquí. Y las gemas están donde debían estar. —Steve deja de mirar a Bruce y Sam, y sus ojos van a Bucky. Ojos bizarramente azules que le miran con un brillo que no estaba ahí antes de que se fuera.— Todo en orden.

Steve entonces, se acerca a Bucky. Bucky trata de mantenerse tranquilo, sereno, no hacer nada apresurado o estúpido, como empezar a llorar o abrazarlo, o gritarle. Se mantiene lo más tranquilo posible, y Steve se detiene en frente de él, sonriendo con pequeñez, sus ojos azules brillando con intensidad.

— ¿Me extrañaste? —dice Steve, en un susurro, y Bucky sonríe casi sin querer, lágrimas aún queriendo salir de sus ojos. Steve está aquí, más hermoso que nunca, más imponente que nunca; el hombre que siempre ha amado.

Bucky no sabe exactamente qué decir, pero no tiene tiempo de decir nada de todas maneras. Sam, que parece notar que esto no es un espacio para que él o Bruce se entrometan, con rapidez planea su huida.

— ¡Bruce! —exclama, haciendo a Bruce brincar sobre sus pies, para después mirarle con curiosidad.— ¡Dios, Bruce! Hemos olvidado que tenemos ese... Asunto, ¡sí! ¡Ese asunto!

— ¿Qué asunto? —cuestiona Bruce, obviamente confundido, sin entender de qué demonios está hablando.

— ¡Ya sabes! —Sam intensifica su tono— ¡El asunto! ¡La cosa qué tenemos qué hacer! Vamos, tenemos que irnos... —A este punto, nadamás mueve su cabeza lo más disimulado posible hacia Steve y Bucky, haciendo que Bruce los mire y rápidamente capte de que está hablando.

— ¡Ah, sí! ¡Eso, sí! —Es casi ridículo ver a un gran Hulk verde removerse nervioso, pero hay mucho de Bruce en este Hulk que aún deja a todos fascinados (tal vez demasiado).

Bruce y Sam les dan una última sonrisa antes del marcharse. Bucky se siente más nervioso y ansioso que antes, pero no escapa. No puede seguir escapando.

— ¿Qué haces aquí? —pregunta Bucky, puro asombro en su rostro y en sus ojos, sus manos temblando por las ganas de querer tocar a Steve— Pensé que te quedarías, eso es lo que habías dicho anoche que harías... Habíamos acordado que-

—Sí, bueno, creo que cuando finalmente llegó el momento no fui capaz de hacerlo. —Steve alza sus hombros, restándole importancia a este asunto; como si eso fuese posible. Esto no es una conversación sobre el clima y aún así Steve se ve tan calmado que es casi ridículo— Hablé con ella —dice, la sonrisa yéndose de su rostro—, hablé con ella solo unos momentos y le devolví el teseracto. Y... Ella fué feliz, Bucky, ¿sabes? Me lo dijo una de las últimas veces que nos vimos, me dijo que había vivido una buena vida, que había sido feliz. Y verla allí, tan joven y espléndida, solo me hizo confirmar que ella está bien. Y yo simplemente no pude quitarle eso.

Bucky aprieta sus labios en una densa línea, mirándole con atención. Steve no se ve del todo triste por esto, se ve diferente, con un aire nuevo. Se ve un poco esperanzado, casi emocionado.

—Tal vez anoche pensé que esto era lo correcto, que era lo que debía hacer, pero no es así. Amé a Peggy y por eso mismo, debo dejarla vivir el futuro tan maravilloso que viene para ella. —continúa diciendo, y aquella sonrisa vuelve a aparecer— Esa vez que nos vimos, hace ya unos años, me dijo que su único arrepentimiento era que yo no fui capaz de vivir mi vida. Y ¿sabes, Bucky? Tiene razón; este es sin más, el momento perfecto para que pueda vivir —Steve solo ensancha su sonrisa y hay algo precipitándose en el pecho de Bucky con alegría—, contigo.

Bucky pierde el aliento, y con ello, las lágrimas que tienen tantos minutos amenazando con salir de sus ojos. Bucky se siente tan ridículo justo ahora, tan lleno de emociones encontradas que no terminan de salir de sus labios y que lo hacen sentirse tan vibrante.

—Steve... Si estás quedándote por mí, no tienes por qué. Estoy bien, mejor, al menos. Tengo a Shuri, Sam, T'Challa, no estoy solo más. No tienes que cuidar de mí, pudiste haber sido feliz-

—Ese es el punto, soy feliz, soy feliz contigo. Vivir en un mundo donde no estés tú es ridículo y creo que yo lo he sido aún más por no darme cuenta hasta ahora. —Steve estira sus manos y ambas acunan su rostro, con cariño, una calidez expandiéndose por todo su cuerpo con el contacto.— No puedo dejarte, incluso cuando quiero.

—Pero, Steve, Dios... Lo hiciste, salvaste al mundo, mereces tener a la chica, mereces tener la vida que siempre soñaste.

—Tienes razón, ¿eh? Suena como el plan ideal. Salvar al mundo, obtener a la chica. Yo nunca he sido un chico que se siente muy atraído por las cosas sencillas.

—Steve- —Bucky no quiere seguir llorando, esto se siente ridículo. Él se siente ridículo. Trata de alejarse de Steve pero él solo prosigue con su discurso.

—Eres todo lo que quiero, eres lo que siempre quise, no sé en qué momento lo habré olvidado, pero acabo de recordarlo. —Bucky puede ver lágrimas caer de los ojos de Steve también.— Siempre fuiste tú.

Bucky quiebra en llanto y Steve lo abraza con fuerza, con toda la fuerza que tiene. Bucky deja de sentirse ridículo, deja de sentirse egoísta por estar feliz de que Steve esté aquí, que haya decidido estar con él. Simplemente se deja apretar en este abrazo que tanto ha necesitado, que tanto ha anhelado. Por fin están juntos, después de tantos años, después de tanto dolor, después de tantas guerras y tantas promesas, por fin están juntos.

—Eres un tonto, Dios, en serio pensé que te habías ido, Steve- No te rías, esto no es gracioso. —Pero Steve se sigue riendo y Bucky comienza a reírse con él, extasiado, aún sin poderse creer esto.

—Una vez oí a alguien decir —comienza a decir Steve, su mano acariciando el cabello de Bucky mientras las manos del castaño se aferran a su espalda, le acarician con cariño, se adhieren a él como un náufrago a la orilla—, que la historia está escrita por los vencedores; y por fin podemos decir que somos nosotros; que estamos aquí-

Bucky le besa, con sorpresa pero el beso no es indeseado. Es descordinado, es profundo, y trata de decir tantas cosas que ambos nunca se habían dicho antes. No lo habían hecho cuando crecían, ni en la Segunda Guerra, ni en Washington, ni en Wakanda. Pero ahora tenían la oportunidad, no había más razones para seguir echando esto aún más hacia atrás.

Bucky le besa y es todo lo que siempre ha necesitado, porque incluso cuando no tenía nada, tenía a Bucky; y hoy por hoy, es suficiente, es todo lo que quiere. Es todo lo que siempre ha querido.

Juntos hasta el final, le había dicho Bucky una vez, hace ya años. Pero así seguía siendo. Hasta el final, siempre juntos.

⭐⭐⭐

jaja obvio que no lloré escribiendo esto, de que hablan.

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