A Demon's Tale Forty-Five


Kyo estaba teniendo una semana horrible y cualquiera que estuviera cerca podía notarlo, por lo que era normal que se formará un perímetro a su alrededor como medida de seguridad, incluso los profesores permitieron a sus compañeros mover sus asientos para darle su espacio a la carnívora.

Los pocos idiotas que se atrevieron a cruzar su camino, fueron mordidos como nunca antes, con una brutalidad jamás vista antes de la japonesa que incluso parecía estarse conteniendo, nadie quería saber que pasaría si dejaba de contenerse, para el final de la semana le estaba haciendo justicia a su sobre nombre del demonio de Gótica.

Ahora se preguntaran que tenía molesta a nuestra carnívora, la verdad es que ni ella mismo lo sabía. Todo comenzó el lunes en la noche cuando algo la despertó a mitad de la noche con tanta fuerza que la tiro al piso de su habitación y por unos instantes su cabeza la mato con un dolor de cabeza horrible al mismo tiempo que sentía que se ahogaba, no estaba segura de que pasó después... Solo recuerda despertar con su habitación hecha un desastre, sus manos heridas y un humor de perros.

Por supuesto fue al doctor en cuanto tuvo la oportunidad pero nadie podía decir a ciencia cierta que tenía, Shamal dijo que podían ser "las hormonas adolescentes" y terminó metido dentro de una pared por eso —De lo que sinceramente debía estar agradecido ya que con el humor que Kyo tenía pudo ser mucho peor—.

Kyo solo sabía que podía sentir una ira que parecía rasgar debajo de su piel en busca de salir, y en caso de que pudiera salir... No, no podía dejar la salir, algo le decía que de hacerlo las cosas no terminarían bien para nadie. Por lo que se obligó a mantener un rostro estoico y controlarse lo mejor que podía y lo odiaba.

Tener que pretender que todo estaba bien, asentir cuando quería gritar, le traía recuerdos horribles de sus años en el hospital, lo que la dejaba con un sabor de boca amargó y más enojada y furiosa que antes.

Al notar que el mar humor de Kyo se estaba volviendo un problema todos en la casa intentaron ayudarla.

El primero fue Fon con algo de meditación.

— Cierra tus ojos, despeja tu mente y sólo respira. — Indico mientras ambos estaban sentados en el jardín con algo de insienso para ayudar a calmarla. — Concentra todas tus malas energías en la palma de tu mano y aprieta.— indicó y ella realmente se concentró haciendo lo pedido y tal vez se concentró demasiado porque empezó a sentir algo caliente en su mano. — Ahora abre tu mano y dejalo ir... — abrió su mano al igual que sus ojos y una llama dorada la recibió... Bueno mierda.

— Tengo que irme. — Dijo saliendo antes de que su tío pudiera verla y corrió lo más lejos que pudo.

Cuando sintió que estaba fuera de la mirada de cualquiera vio su mano donde unas llamas doradas la recibieron... Viendo el lado positivo al ser un sol estaba libre de ser un elemento de Tsuna... Esperen habían fics donde el cielo acumulaba elementos a diestra y siniestra y con todos los cambios en la trama nada le aseguraba que este no fuera uno de ellos, Maldijo sintiendo esa ira chispeante debajo de su piel y tomo una larga respiración ¿que era lo que decían en esa serie para calmarse?

— Hay tres cosas que no puedes ocultar... El sol, la luna, y la verdad. — la última parte no era del todo reconfortante pero después de repetirlo algunas veces las llamas se fueron, pero la ira seguía ahí, de hecho, estaba segura de que ahora con el nuevo descubrimiento se volvieron más fuerte.

Bueno mierda.

El siguiente en inténtarlo fue Bruce con una sesión de entrenamiento, lo que desde un principio debieron saber que sería una mala idea.

— No estoy segura sobre esto. — Dijo temerosa de que sus llamas se manifestarán durante la pelea.

— Creeme, te ayudará. — aseguró Batman y ella decidió confiar en él.

Al final del encuentro Kyo entendía totalmente como Drake se sentía. Debido a que se estaba conteniendo para no sacar sus llamas, el caballero de la noche barrio el piso con ella de forma repetida.

— ¡vamos! ¡Defiende te! ¡Pelea! ¡Dejalo salir! — Le incentivo el mayor dándole una serie de golpes consecutivos y entre sus gritos y los golpes la carnívora no pudo pensar bien.

—¡Callate! — Grito dándole un golpe en el estómago que lo mandó a volar bastante lejos. Por un segundo todo fue silencio con la respiración acelerada de la menor hasta que noto que lo mandó mucho más lejos de lo que normalmente podría hacerlo ¿uso sus llamas? Maldición.

— Kyo... — Murmuró sorprendido el azabache sujetando su pecho que sentía como si fue quemado, pero no tenía nada además de la amenaza de un moretón y por un segundo en que Kyo le via con ira contenida podía jurar que sus ojos brillaron dorados.

— Ire arriba. — Fue todo lo que dijo la joven antes de darse la vuelta e irse dejando solo a Batman.

La siguiente en intentarlo fue Ivy quien le ayudó con algo de jardinería.

— Sólo dales un poco de agua y luego las mueves para que les dé algo de sol. — Indicó la mayor con tranquilidad y ella Suspiro, eso parecía fácil y sin ningún problema de sacar sus llamas.

Se equivoco, en retrospectiva fue su culpa.

Cuando Pamela dijo que las plantas necesitaban algo de sol, puede que pensara que probar sus nuevos poderes serían una buena idea, lo que claramente no fue una buena idea ya que la planta creció demasiado y luego comenzó a morir, antes de que la villana pudiera decir algo tiro la maceta y salió corriendo diciendo una disculpa.

Lo leyó en una parte, las llamas de sol usadas de forma incorrecta podían causar cáncer... Paso una mano por su rostro, si antes estaba asustada de su propia poder ahora estaba aterrada. La sola idea de hacer pasar a otro ser humano por lo que ella tuvo que pasar la asqueaba y tan solo se Rio ante la ironía de la vida.

La niña que murió de cáncer, podía darle cáncer a otros. Genial, sería la chica cancer, dándole muertes lentas a los que tocará.

Su humor fue más en declive desde ahí, ahora ni siquiera se atrevían a mirarla directo y ella tampoco los culpaba, ya que ni Kyo podía verse al espejo sin sentir miedo y furia en iguales parte.

El último intento vino de parte de Harley.

— ¿Un karaoke? Si... No creo que esta fuera la mejor idea. — Murmuró Drake luego de que la rubia los arrastrara a todos.

— Debo admitir que de todas tus ideas está es la mas normal así que te doy un 7 por el intento. — Le felicito Pamela acariciando su cabello.

— Pudimos hacer esto en casa. — comentó Bruce al notar lo cuestionable del establecimiento.

— ¡Eso no es divertido! Es mejor hacerlo con público. — Defendió Byakuran y el resto entendió que fue una idea en conjunto.

— Me parece interésante, en Japón estos lugares son comunes pero nunca pude visitar uno. — Comentó Fon quién como el adulto responsable dejó a Ipin durmiendo con Alfred como niñera, por supuesto el se ofreció en quedarse pero el mayordomo rechazo la idea enseguida.

— Si no te gusta podemos irnos Kyo. — Dijo Richard a su lado quien luego de enterarse del mal humor de su novia decidió intervenir por lo que se unió a su salida. — ¿Kyo?

La carnívora no le miró ya que estaba mirando el escenario donde una chica cantaba algo desafinada pero con emoción y le recordó la máquina de karaoke que su padre donó al hospital para que pudieran entretenerse los días que no podían visitarla y para que practicará con su voz.

En cuanto la chica terminó Kyo sin mirar atrás fue al escenario tomando su lugar, viendo la pantalla en busca de una canción que conociera y cuando encontró la correcta no dudo en presionarla.

La música comenzó a tocar con la guitarra y la bateria y ella tomó una larga bocanada de aire antes de comenzar a cantar.

I can feel it in the back of my tongue. (Puedo sentirlo en la parte de atrás de mi lengua) — Canto la primera parte tomando con fuerza el micrófono. — all the words getting trapped in my lungs. (todas las palabras quedando atrapadas en mis pulmones) — Ni si quiera miro el publico o la pantalla, tan solo se concentró en la canción, en sentir cada letra y melodia. — heavy like a stone, waiting for the river to run... (pesado como una roca, esperando que el río corra) — Tomó una bocanada de aire extra mirando al frente — I wanna lash out! I wanna let it out! (Quiero arremeter! Quiero dejarlo salir!) — Prácticamente Grito contra el micrófono sintiendo una satisfacción olvidada comenzar a recorrer su cuerpo como adrenalina pura. — cause I can feel it, in the back of my tongue on the back of my tongue...(porque puedo sentirlo en la parte de atrás de mi lengua, en la parte de atrás de mi lengua...)

Con más confianza renovada, dejó todos sus sentimientos embotellados en la letra de la canción.

Oh, hard to hold this fire inside me, oh I know sometimes it's frightening, hard to hold this fire inside me,oh oh it's not really like me. (Oh es difícil contener este fuego dentro de mi, oh lo sé a veces es aterrador, es difícil contener este fuego dentro de mi, oh, oh no es realmente como yo) — Canto  con una sonrisa llena de emoción en su rostro soltando toda la ira y frustración de estos días. — lash out! I gotta let it out! I wanna lash out! I wanna lash out! (Arremeter! Tengo que dejarlo salir! Quiero arremeter! Quiero arremeter?)

Por unos instantes cuando Kyo fue al escenario todos se prepararon para lo peor esperando que la chica destruyera el lugar, definitivamente ni en sus sueños más locos se imaginaron que realmente comenzará a cantar.

No podían dejar de seguir sus movimientos con sus ojos de alguna forma creyendo estar en un bizarro sueño ¿y la parte más extraña? Kyo no sólo estába cantando, estaba rockeando. Podía perfectamente transmitir sus emociones en cada letra y cada movimiento parecía ensayado y refinado tras años de práctica diseñado para atraer al público.

— Santo pudin. — Harley fue la que rompió el silencio, quien siendo honestos no espero que su plan fuera a funcionar y sólo vino por los margaritas y para cantar algo de las spice Girls.

— ¿Esto está pasando? No soy el único que lo está viendo ¿cierto? — Pregunto Timothy mirando a sus acompañantes que por la forma en que estaban pegados mirando al frente veían y escuchaban lo mismo que el. — Muy bien, no estoy alucinando.

— Podría ser histeria colectiva. — Sugirió Pamela que aun no creía lo que sus sentidos le mostraban, pero a medida que la canción seguía y más personas se levantaban de sus asientos para cantar a coro con la chica su incredulidad aumentaba y disminuía a iguales medidas.

— ¿Alguien sabía sobre... Esto? — Cuestióno Bruce, el nivel con que la chica se desenvolvia en el escenario y el control sobre su propia voz eran demasiados buenos como para ser de una novata o alguien que cantaba en la ducha.

—Yo lo sabía. — Llamó la atención Richard y todas las miradas recayeron sobre el. — Un día la escuché cantando, pero nada a este nivel, ella no sabe que la escuche así que no quise decir nada. — Explicó volviendo a mirar en frente viendo cómo Kyo brillaba en ese simple y pequeño escenario como una estrella.

— Bueno, a mí me gusta. — Sonrió Byakuran tomando la mano de Harley para ir al grupo que estaba cantando de pie junto al escenario como en un concierto.

I can't be the cork come out of the bottle, I can't be the cork come out of the bottle (No puedo ser el corcho, sal de la botella, no puedo ser el corcho, sal de la botella) — Para este punto de la canción todo el mundo estaba cantando con la japonesa que daba pequeños saltos en el escenario. — Lash out! I wanna let it out! (arremeter, quiero dejarlo salir!) — al escuchar y ver a las personas bailando y cantando con ella una alegria que enterró en su primera vida volvió con ella.

Su familia estaba orientada a la música, su padre era un pianista que se convirtió en profesor de música y su madre era una cantante, que prefería el familiar público de un club conocido que una multitud de extraños en un estadio, aunque también cantaba en teatros a veces cuando un buen musical se presentaba. Sus hermanos tocaban el piano, y el violin, pero ella... Ella tomó el curso de su Madre, incluso en una cama de hospital podías cantar.

En la música ella encontró su consuelo, en las melodías y letras podía dejar sus emociones salir, podía ser libres de las paredes del hospital y a veces de su propia piel.

I wanna let it out! I wanna lash out! (quiero dejarlo salir! Quiero arremeter!) — en las últimas estrofas de la canción puso toda su energía sintiendo una catarsis en su interior que se llevó todo lo más. — I wanna let it out! I gotta lash out! (quiero dejarlo salir, tengo que arremeter!) — terminó de cantar jadeando a penas con el aire suficiente y los aplausos resonaron en todo el lugar.

Se había salido de personaje como nunca antes en su vida, al darse cuenta de esto levantó la mirada un poco asustada buscando a su familia, hasta que los vio al fondo viéndola sorprendidos pero aplaudiendo y vitoreando como el resto — Bueno, algunos más vocales que otros, léase Richard, Harley, Byakuran y extrañamente Drake — de la audiencia y tapó su boca, estaba tan feliz que sintió que podía llorar, claro que no lo hizo pero en su lugar les regalo la sonrisa más sincera que dio en su vida — vidas — mientras sentía su corazón latir en su garganta.

Al final la única que terminó cantando toda la noche sin parar fue Kyo, quien al final de cada canción le pedían otra y ella no se pudo resistir, y quizás fue el liberar el estrés de una forma no violenta  — en que no podía manifestar sus llamas — o tal vez fue el hecho de que finalmente podía mostrar una parte de su verdadero yo que oculto por años temiendo que fuera tan encontrá de su personaje que la rechazaran por ello, pero al final de la noche su humor estaba por las nubes.

———

Nota: Finalmente tenemos más del pasado de Kyo! Y Kyo se quedará con dos Robin's... Bueno tal vez tres... Depende de mi humor jsjsjs gracias por leer y los comentarios

Posdata: Recordar los dos comentarios mínimos!

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