Una vez todos se encontraron dentro, observaron la casa, tenía una cocina enorme con una barra ancha donde comía una anciana, la cual se volvió hacia ellos y los escaneó por completo, poniéndolos nerviosos. Nozomi entró corriendo a la cocina.

     —Esa banda... ¿Son de Konoha? —preguntó la señora de entre los 80 y la muerte, mostrando sus negros y diminutos ojos que perdían color.

     —¿Cuantas veces te he dicho que no corras en la cocina, Nozomi? —se escuchó la voz grave de un señor desde la cocina.

     —Papá, ¡Naruto-senpai está aquí! —gritó Nozomi, para segundos después observarse como un enorme señor autoritario y de ojos pequeños con un delantal que decía "Konoha, te amamos" salía a toda prisa de la cocina, y tal como su hija lo hizo, se le tiró encima a Naruto, abrazándolo con entusiasmo.

     —¿Son de Konoha? —preguntó de nuevo la señora que parecía moriría en cualquier momento.

     —Así es —dijo Naruto apuntando hacia su banda con orgullo. Al instante los diminutos ojos de la señora se cristalizaron mientras se levantaba de la barra y se acercaba a ellos.

     —¿Conocen al héroe que asesinó a aquel chico? —preguntó sosteniendo con fuerza una prenda entre sus manos, refiriéndose a Hidan.

     —Está justo aquí, es él —respondió Sakura propiciándole un ligero golpe en la espalda a Shikamaru para que la anciana lo identificara.

     —¡Eres tú! Muchas gracias! —dijo la anciana comenzando a llorar, para que segundos después el enorme hombre del delantal escuchara y le perdonara la vida a los pulmones de Naruto para tomar a la señora, a Nozomi y entre los tres abrazar a Shikamaru— ¡muchas gracias muchacho! Eres el héroe de Yugakure! —dijeron los tres mientras ahora la sentencia la tenían los pulmones de Shikamaru, comenzando a ponerse morado y a rogar por ayuda a Kakashi, mientras sus compañeros se reían de él.

     —N...no es gran cosa, a demás, no lo hice sólo, recibí ayuda de mis compañeros, mi maestro y todos ellos —dijo Shikamaru llamando la atención del enorme hombre para que los juntara a todos entre sus brazos.

     —Eres muy joven, muchacho —dijo la señora una vez que estuvieron libres y el color les regresaba a la cara— todos lo son —sus diminutos ojos negros comenzaron a derramar lágrimas— toda Yugakure les agradece de corazón, Konoha... Hablando dé... ¡Le diré a Misuri! —dijo la señora dándose cuenta de algo, para después salir corriendo de la casa, corriendo los más rápido que sus articulaciones le permitían.

     —Ella era la abuela Natzuki —dijo Nozomi riendo mientras observaba como la señora salía corriendo de la casa— él es mi papá, Ryu, el mejor cocinero de la aldea. Y ellos son Kakashi, Sai, Sakura y Yamato amigos de Naruto-senpai, de Konoha.

     —Un gusto. Bueno, Natsuki perdió a su familia en El Día Obscuro de Yugakure, e intenta de todas las formas posibles de reunir a la aldea ya que se quedó sola, solo viene aquí a comer lo mismo todos los días y después se va a hablar con su hija difunta Misuri, perdió un poco la cordura, pero la gente de aquí la ama igual. Seguramente le avisará a todo el mundo para que haya una fiesta en las fuentes termales mañana, así que descansen hoy. ¡Por cierto! ¿Tienen hambre?

     —Demasiada —dijo Naruto sobándose su crujiente estómago igual que sus compañeros.

     —¡Excelente! —dijo Ryu sonriente— Nozomi, consígueme algo de agua de fuera.

     —¡Está bien! Naruto-kun, acompáñame —dijo tomando de la mano al ojiazul y obligándolo a salir corriendo de la casa con ella.

     —Bien, les agradezco mucho lo que hicieron —comenzó aquel enorme hombre una vez Nozomi y Naruto salieron de la casa— Pero ¿Qué hacen aquí? No me mal interpreten, es un placer que estén aquí. Sin embargo; sospecho que hay un motivo, de no ser así, Naruto habría venido con Jiraya o sólo —dijo Ryu sentándose en la barra e invitándolos a que hicieran lo mismo— las cosas han cambiado mucho en estos días en Yugakure, creía que era por los 5 años desde aquel día, pero sé que es por otra razón. Sucede algo, algo malo, no es así?

     —Bueno, tenemos entendido que Hidan tenía un compañero —comenzó Yamato— Y en Konoha tanto como aquí se ha sentido ese cambio inexplicable. Sin embargo, existen serias sospechas que recaen sobre el compañero de Hidan y estamos aquí para averiguar información sobre él.

     —De acuerdo, trataré de ayudarles. No sé mucho pero lo intentaré —dijo suspirando— su nombre era Takeshi. A diferencia de Hidan, él no participó en El Día Obscuro de Yugakure, ya que el mismo día había abandonado la aldea sin más, por lo tanto no sabemos mucho sobre él, sólo que después de que se fue, el mismo día en que Hidan decidió volverse un renegado, muchos de nuestros aldeanos desaparecieron. Estos aldeanos antes eran Shinobis, de los mejores de Yugakure, la mayoría de los desaparecidos no tenían familia o tenían antecedentes, ninguno de ellos traía algo bueno a la aldea. Incluso hoy, 5 años después, no hemos sabido nada sobre ellos. Como si se hubieran desvanecido. Entre ellos estuvo la familia de la abuela Natsuki y le puede mucho. Pero antes de que Yugakure hubiese decidido volverse un lugar turístico, Takeshi había llegado a la aldea huérfano, sólo con su hermano Raiji, y se hizo amigo de un ninja de Konoha... Orochimaru, creo que era su nombre. Sin embargo, Takeshi asesinó a su hermano. Se desconoce cómo o porqué. Al día siguiente abandonó la aldea —suspiró— Nozomi lo conocía, sólo tenía 8 años pero ella aspiraba a ser ninja, y  Takeshi pensaba lo mismo, así que eran amigos. No sé mucho sobre la relación que tenían ambos, ya que siempre estuve inconforme con esa amistad. Takeshi no tenía antecedentes, pero decía cosas muy extrañas.

     —¿Qué clase de cosas extrañas? —preguntó Shikamaru, haciendo nota mental de la información.

     —Sobre la obscuridad de los corazones de las personas. A demás, a diferencia de Hidan, él no se hizo religioso, era todo lo contrario, negaba la idea de alguien más poderoso que la humanidad. Bueno, es todo lo que sé. Nozomi debería saber más, pero es complicado hablar con ella sobre el tema.

     —¿Porqué? —preguntó Sakura.

     —Bueno, la razón pueden ser varías; o le duele que su amigo Takeshi haya abandonado la aldea; o es por lo sucedido con su madre —su voz se quebró al mencionarla— De cualquier manera es algo doloroso tanto para ella como para mí. Yo no estaba aquí en El Día Obscuro de Yugakure, estaba en otras aldeas buscando un poco de ingredientes para cocinar. Nozomi se quedó sola con su madre aquél día, ella... Ella trató de defenderla como pudo... Realmente no sé cómo sucedió, Nozomi no habla de esto, pero cuando regresé... ella estaba llorando escondida bajo la mesa de la cocina y mi esposa estaba tendida en el suelo, sin herida alguna más que un rasguño en la mano, frente a ella había un triángulo dentro de un círculo y sangre, no era de ella. Pero Nozomi nunca habla sobre cosas que hayan sucedido antes de ese día, como si hubiera decidido olvidar todo sobre su madre. Mi niña pasó por muchas cosas, y los primeros días no decía nada, era fría y nunca sonreía. Hasta que llegó Naruto con Jiraya tiempo después. Me revivieron a mi niña, y siempre les estaré agradecido por eso.

     —Lo siento mucho —dijo Sakura.

     —No importa. Siempre trato de compartir tiempo con ella, hacer todo más interesante, divertido, además, Naruto y ella se identificaron mucho, y ella lo aprecia demasiado, Supongo que es por el hecho de que a ambos se les fue un amigo de la aldea. Naruto pudo hacer por Nozomi lo que yo no. Es un chico con demasiada luz, un alma limpia, pura, capaz de sanar a los demás, y me alegro mucho de lo que ha hecho por nosotros desde que lo conocemos, él y Jiraya nos han traído paz.

     —¡Volvimos! —se escuchó cerrarse la puerta de entrada, segundos después entró un Naruto completamente agotado y envuelto en sudor igual que Nozomi.

     —¡Dios mío! ¿Qué le hiciste a mi hija, Naruto? —dijo Ryu sacando una toalla de su delantal para entregársela a Nozomi para que se limpiara mientras la alejaba de Naruto protectoramente.

     —No me hizo nada, papá, sólo estábamos jugando unas carreras. Y Naruto me enseñaba algunos trucos con la kunai. Pero bueno, aquí está el agua —dijo entregándole un balde que traía Naruto cargando, quien se había sentado junto a Sakura en la barra para descansar, apoyando su cara sobre esta.

     —¿De qué hablaban? —preguntó Nozomi sentándose junto a Naruto mientras Ryu entraba a la cocina con las bolsas.

     —Sobre Jiraya... —respondió desde la cocina donde se escuchaba que había comenzado a cocinar.

     —¡Es verdad! ¿Por qué no vino con ustedes, Naruto-senpai? —preguntó recargándose en la barra igual que Naruto para verlo a la cara, el cual se había quedado con la mirada perdida — ¿Naruto-Kun? —preguntó picándole la cara con la punta de su dedo.

     —¿Qué? —preguntó Naruto enderezándose.

     —¿Ocurre algo con Jiraya? —insistió.

     —Ho, bueno... Ero-sennin ya no está... —respondió mientras se recargaba con desánimo en la barra de nuevo. Pero al ver que Nozomi no había entendido, habló de nuevo— Bueno... —Naruto no sabía cómo explicarlo, ya había aceptado la muerte de Jiraya, pero seguía siendo difícil.

     —Un Akatsuki luchó contra él por información sobre Naruto —comenzó a contar Kakashi— Pero él no le dijo nada, lo cual cobró su vida...

     —Quieres decir que está... —no pudo terminar de hablar.

     —¿Hace cuánto? —preguntó Ryu saliendo de la cocina de nuevo y sentándose del otro lado de la barra.

     —Hace algunos meses ya —respondió Yamato mirando a Naruto que seguía sin decir nada.

     —¿Por qué nadie nos dijo nada? —preguntó Ryu algo desilusionado y deprimido.

     —Están algo lejos de Konoha, además, son los únicos en Yugakure que lo conocen. Y nuestra aldea estaba ocupada reconstruyéndose después de que el Akatsuki la destruyera buscando a Naruto.

     —Está bien —dijo, segundos después sonó algo en la cocina— el ramen ya está listo, iré a servirlo —al pronunciar aquel platillo Naruto se volvió a animar y miró a sus compañeros sonriendo, no estaba sólo.

     —¡Les encantará! Es el que más competencia le hace al Ichiraku ramen! —dijo emocionado, frotando sus manos con ansias.

     —Bien, ¡Está listo! —anunció Ryu saliendo de la cocina con 8 platos de ramen en una bandeja acomodándolos en la barra para cada uno.

     —¡A comer! —dijeron todos separando sus palillos para comenzar a saborear el delicioso ramen de Ryu, durante la comida platicaban animosamente sobre recuerdos que tenía Naruto con ellos, como el día en que Nozomi estaba cocinando con Ryu y por accidente vació todo el picante en la sopa, terminaron en el baño todo el día después de eso. O como el día en que Naruto le enseñaba a Nozomi a controlar su Chakra para caminar sobre el agua y está casi termina siendo arrastrada por la corriente del río, o cuando fueron Naruto, Jiraya y Ryu a las fuentes termales y descubrieron a Jiraya espiando a las chicas, ese día terminó con moretones en los moretones.

     Naruto y Nozomi se quedaron dormidos minutos después, así que tuvieron que despertarlos para ir a descansar.

     Ninguno se podría esperar lo que vendría. Su única advertencia era aquella extraña presión en el pecho. Pero vaya que se encontraban en un terrible peligro. Especialmente Naruto.

     Pero ¿Cómo saberlo?