El grupo de demonios se detuvo en secó, sus espadas fueron desenvainadas, sus tridentes levantados y sus alas extendidas alrededor de Ravel de forma protectora cuando vieron un borrón azul aparecer delante suyo, una enorme espada con un mango como de motocicleta apuntada a ellos.

"¡Alto!" Cuando los demonios al frente del grupo que portaban espadas anchas de una mano se pararon para atacar al castaño se detuvieron ante el grito de Ravel. "El es mi caballero, ise baja tu espada"

Mirando a los demonios que rodeaban a Ravel, se aseguró de mirar perfectamente las armaduras que portaban, debajo de la camisa de cota de malla, una delgada cinta roja con una serpiente mordiendo su cola era suficientemente visible si lo buscabas pero con su tamaño sin la visión de un demonio le sería muy complicado el siquiera notarlo. Al ver que todos portaban la cinta relajo sus hombros al tiempo que bajo su espada.

Los demonios aún en su papel de guarda espaldas hicieron caso a la chica y bajaron sus armas, las alas extendidas para parecer más intimidante se doblaron en sus espaldas.

Soltando un suspiro al ver como las tensiones se calmaron. "¿Issei que heces aquí? pensé que estarías con los Maou." Parada orgullosa con los guardias alrededor issei se le pasó por la cabeza decirle a Ravel que estaba rodeada de terroristas solo para ver la expresión que pondría sin embargo dejo esa idea a un lado.

"Vine aquí por qué me enteré que los terroristas que están atacando la academia vienen por ti, al parecer te quieren para crear lágrimas de Phoenix." Los demonios que actuaban como guardias se tenzaron ante las palabras del caballero, hace solo unas horas se les había revelado el verdadero objetivo del ataque a la reunión de las facciones específicamente para evitar que se filtrara la información y la enviaran devuelta al Inframundo y ahora resultaba que este simple demonio de clase media ya lo sabía. Cómo los maou no lo sabrían ya a estás alturas, si así fuera tenían que correr rápido antes de que alguno apareciera. Ravel no fue diferente sus pupilas se contrajeron ante la información una duda se hizo presenté en su mente que no dudo en expresarla. "¿Y como es que supiste esa información?" Los demonios también sintieron curiosidad ante la información, con suerte descubrirían al traidor.

"¡Ah! sobre eso, es por que..." Atentos a las palabras que diría el caballero phoenix ninguno de los demonios presentes se espero lo que sucedió a continuación, los demonios o al menos dos de ellos observaron conmocionados como las cabezas de dos demonios fueron cortadas mientras otras dos explotaron al impacto de cuatro balas provenientes de Blue Rose. "Fueron las órdenes que se me encomendaron." Respondió con una expresión sería a la par que fría issei ejecutó a cuatro de los guardias. Fue claro el cambio en el rostro de Ravel cuando sangre se drenó de su rostro.

'¿Acaso había escuchado bien o sus oídos la estaban engañando, sabía que estos supuestos guardias eran terroristas, su tiempo en el Inframundo como una miembro de clan habría sido inútil si ni siquiera podía distinguir una armadura falsa de la original, pero acaso su caballero lo sabía? Era claro que no abría asesinado a estos guardias si hubiera sabido que eran terroristas, tal error solo significó que en verdad hubiera asesinado a los guardias hubieran sido falsos o no."

"Aguarda un segundo" Con su ravolver ya apuntado al rostro de uno de los demonios se dispuso a vaciar sus últimas dos balas pero antes de poder presionar el gatillo la voz de Oubis detuvo a issei. Por lo general no habría echo caso y hubiera tirado del gatillo sin embargo el tono de voz tan calmado a pesar de la situación lo detuvo de hacer tal cosa aún que aun mantuvo su arma apuntada al rostro del diablo. "Dices que son las órdenes que te dieron ¿que quieres decir con eso? ¿con que grupo estás?"

Issei puso una expresión de estar confundido sin embargo respondió. "Estoy con el dragón blanco." No fue una mentira, técnicamente Vali había sido quien le había pedido mantenerse junto Ravel

"¿¡El dragón blanco dices!?" El demonio casi dejo caer su mandíbula ante las palabras del caballero Phoenix sin embargo cambio su manera de ver a issei. No fue un secreto que el grupo de Vali fueron un montón de bichos raros una yokai, el portador de Calibur y el descendiente de son Goku todos al nivel de un clase suprema con habilidades extraordinarias o poco comunes y el que tuvo en frente incluso si no podía sentir una gran cantidad de aura del diablo delante suyo no descarto que tuviera algo que atrajo la atención del dragón efímero. "Esto empieza a tener sentido." Musitó. "Nosotros somos de la facción de los viejos Maou también venimos buscando a la chica Phoenix, no hace falta las agresiones." Ravel mira a Oubis detrás suyo sin darle la espalda a issei ante las palabras del demonio se estremeció. '¿Su caballero estaba colaborando con los terroristas? Y si las cosas no podían estar peor el dragón blanco también fue parte de los terroristas.'

"Ahora esto es un problema." Dijo issei bajando su arma y mirando a los diablos que recién había asesinado cuyos sesos estaban derramados en el suelo. Realmente no sentía lastima pero tenía que parecer contrariado para hacer que los demonios restantes bajarán la guardia. Por parte de los otros dos diablos en sus rostros se pudo aprecia el enojo y furia por la muerte de sus compañeros.

"No te preocupes por ellos son solo escoria remplazable."

"Lord Bune ellos eran mis amigos como puede decir que sus vidas no valen nada." Dijo uno de los demonios mientras su compañero cuando estuvo de acuerdo con su compañero.

*Splaat*

El ruido de sangre golpeando el suelo hizo que Ravel observara
como los dos demonio cayeron al suelo de igual forma con sus cabezas separadas de sus cuerpos. "Vez solucionado."

Retrocediendo un paso Ravel cubrió su boca con ambas manos mientras miraba horrorizada la alfombra de cuerpos a sus pies.

Tal vez pudo entender y procesar por qué fue que issei mato a los demonios y aún que ver los cuerpos en el suelo no hubiera sido lo más grotesco que había visto en parte por ver a su hermano perder una multitud de extremidades a lo largo de los reating games, el ver cómo un demonio asesino a sus compañeros sabiendo que eran sus aliados la aterró incluso de estar cerca. 'No había forma que alguien colabore con un demonio así'

"Hmph... supongo que eso soluciona las cosas." Dijo con naturalidad atrayendo la atención de Ravel que lo miro horrorizada.

"¿Por qué haces esto issei?" Ravel  se sintió afligida y en parte traicionada aún que el sentimiento de enojo superó cualquier tristeza que se estuviera formando.

"¿Por qué, preguntas? ¿Tu hermano no me ha dado suficientes razones para hacer lo que hago?" Issei miro en la dirección de la rubia su expresión mostrando de clara forma lo molesto que estaba pero Ravel aún que se sintió intimidada no se echó para atrás. "¿No es suficiente que tú hermano haya asesinado a mis padres?" Ante sus palabras Ravel no supo que responder, cualquier cosa que hubiera que quisiera decir murió en su boca. Al ver cómo Ravel buscaba algo con lo que refutar sus palabras issei continúo con reproche. "¿No? qué tal que los demonios sean los responsables de que mi mejor amigo y maestro haya muerto ¿¡Si no es suficiente dime qué lo es!?" Ravel entendía lo ingenua que había estado siendo todo este tiempo, su caballero no solo odiaba a sus hermanos, los demonios también se habían encargado de arrebatar algo y incluso así esperaba que la protegieran.

"Ha ha ha que niña tan estúpida mira que confiar le tu seguridad a un demonio cuyos padres fueron asesinados por tu hermano." El demonio Bune divertido por la situación no perdió la oportunidad de burlarse de la chica Phoenix.

Ravel no podía negar sus palabras tuvo razón que mantener a alguien que odiaba a los demonios cerca suyo fue un error, y no haber visto esta traición fue estúpido, resignada a su destino sus ojos qué habían adquirido un brillo cuando pensar que la salvarían se volvieron vacíos y lágrimas comenzaron a caer. 'Mi hermanos tuvieron razón todo este tiempo era una inútil eh ingenua niña demaciado estúpida para comprender cualquier cosa.'

"Muy bien tenemos que marcharnos antes de que los Maou se percate de nuestro plan" Oubis camino hacia Ravel y la tomo por el cabello y la levantó del suelo.

"Ahg, ahhh." pateando y rasguñando Ravel trato de liberarse, Oubis apretó su puño y lo levantó listo para golpear a Ravel, quería escuchar más los gritos de esta mocosa que había estado actuando de forma petulante hace unos momentos.

*Slash*

Oubis detuvo su golpe cuando issei se movió a gran velocidad y apuñalo su espada en su abdomen haciendo que soltará a Ravel, antes que tocará el suelo Issei la tomo por la cintura y salto lejos del demonio que llevo ambas manos a su abdomen donde sangre comenzó a escapar.

"Si solo hubiera sido Raizer no tendría ningún problema en que lo usarán para sus planes y ahora viendo lo visto no puedo permitir que le pongan un dedo encima." Mirando como su caballero le sonreía con rasgos de culpa en su rostro observo confundida por sus palabras.

"¿Issei que haces? Acaso no me odiabas." Atónita fue poco no supo por qué su caballero ahora la iba a proteger.

"Odio a los demonios, sobre todo a tu hermano, pero tú no eres Raizer no puedo aceptar y tampoco puedo culpar te por cosas que no has echo, eso solo me haría igual que mis hermanos hermanos." Culpable por dejar que la lastimaran incluso en una manera tan superficial le hizo sentirse como una escoria peor de como veía a sus hermanos. Ah estás alturas ya no hubo vuelta de hoja y sin embargo no se arrepintió, incluso si tuvo al mundo entero como enemigo entonces destruiría al mundo entero por ella como el demonio que era. "Un amigo me dijo que lo mas importante que tiene un caballero es su juramento, así que." Con una mirada resuelta y llena de una convicción inquebrantable issei se arrodilló frente a Ravel y la miro a los ojos. Ravel observo esto con asombro después de todo fue la primera vez que su caballero se dirigía a ella con tanto respeto, como su rey. "Juro que te protegeré con mi vida, te serviré y te protegeré como si tu vida fuera la mía y cargaré con todos los males del mundo si así puedo ver una sonrisa en tu rostro, ¡Este es mi juramento como el caballero de Lady Ravel!" Ravel no supo responder, '¿Está fue otra de sus tramas? ¿fue una alucinación o es que de verdad había escuchado a su caballero hacer un juramento? De cualquier manera las mejillas de Ravel se tiñeron de un suave color rosa ante las palabras de su caballero que sonaron tan reales.

"Si has acabado de palabrería innecesaria espero que estés satisfecho con tus últimas palabras." Oubis dejo de sostener su abdomen que había dejado de sangrar y se puso de pie. Issei también se puso de pie y tomo su espada, ya había matado a una docena de diablos este no sería diferente.

"¡Issei detente no es un demonio normal es miembro de los setenta y dos pilares!" Ravel advirtió un momento antes de que Oubis comenzará a crecer y su piel se tornará de un color marrón que se iba volviendo cada vez más oscuro con forme crecía y se empezaba a cubrir de escamas.

El clan Bune era uno de los 72 pilares del inframundo que tuvo  estrechos lazos con los dragones tuvieron una habilidad especial que solo se manifestó en demonios de clase suprema que consistió en una transformación parcial en dragón. Oubis como un demonio de clase alta su mayor aspiración fue alcanzar la mayor habilidad de su clan y las serpientes de Ophis no solo le proporciono poder, la energía pura de una diosa dragón cambio su origen mágico transformando su cuerpo mayormente en el de un dragón.

Si bien había sido entrenado para ser inexpresivo Issei no pudo evitar mirar con asombro por el demonio convertido en dragón, por primera vez observo un verdadero dragón bastante similar a como los retractaron en historias, videojuegos, anime o manga. Con cuatro patas con articulaciones inversas, cubierto de escamas marrón oscuro, un par de alas que extendidas que  tendrían unos dieciséis metros de largo y su altura como mínimo era de ocho metros, fue como estar frente un edificio de dos pisos. '¡A la mierda!' fue el pensamiento del castaño, tal vez no emitió la sed de sangre tan intimidan te como kokabiel o exudo un poder insondable como vali pero no dejo de ser un jodido dragón de ocho metros de altura cuyo poder era comparable con un demonio de clase suprema a inicios de camino.

"Alégrate, dejaré que cumplas tu juramento como caballero y no le tocará un pelo a tu rey. No hasta  matarte primero." El miembro del clan Bune hablo con un tono de voz gutural antes de levantar una de sus patas en lo alto. Issei abrió sus ojos ante el movimiento de Oubis que amenazaba con convertirlo en una estampilla. Vajando su pata las garras como espadas cortaron el aire y abrieron profundas grietas en el suelo cuando su pie golpeó el lugar donde estaba parado issei

"Grr..." Saltando del lugar donde estaba parado momentos antes, apenas logro esquivar el ataque gracias a su velocidad aún así no pudo evitar gruñir por el dolor cuando sintió como la presión del aire causada por el golpe de la pata de Oubis lo golpeó con fuerza

'Apenas pude esquivar su golpe, pero mientras pueda verlo todo debería estar bien.' Pensó el castaño quien aceleró el exceed de Red Queen cubriendo la hoja de llamas con intención de atacar al dragón, su intención solo había llegado hasta ahí cuando el castaño abrió grandes sus ojos cuando vio la pata Oubis delante suyo, utilizando su espada para protegerse en el último segundo  el golpe lo impactará de lleno. Las garras de oubis cortaron a Red Queen en cuatro partes sin esfuerzo pero la espada logro absorber suficiente del impacto para que issei no quedará como una mancha roja en el suelo aún que poco faltó, pues arrojó a issei con tal fuerza que lo hizo rebotar en el suelo un par de veces antes de por fin detenerse, sus piernas y brazos se doblaron en ángulos extraños mientras que su tórax, coxis, cráneo  estuvieron rotas mientras estuvo completamente bañado en su propia sangre. No hubo forma de que un demonio de clase media a mitad de camino pudiera esperar compararse en cualquier cosa con un demonio de clase suprema a finales de camino, ya fuera velocidad, fuerza o magia issei fue una hormiga a su lado en términos de poder.

La única razón por la que había logrado esquivar el primer golpe era por qué Oubis no se esforzó ni siquiera lo mínimo pues no hubo manera posible en la que sobreviviera si Oubis decidía atacar de manera sería

La mirada de Ravel era de puro suspenso al ver como su caballero lo habían mandado a volar varios metros  solo para cambiar a una horrorizada cuando observo la apariencia de issei que estaba cubierto de su propia sangre

"Puahg..." Escupiendo una bocanada de sangre, Ravel no supo cómo reacciona al no saber si estar aliviada por qué su caballero estaba vivo o sentir ansiedad por el estado en el que se encontraba. Incluso si su caballero podía regenerarse tal cantidad de heridas no desaparecerían en un segundo.

"¿Aun respiras?" Oubis pregunto para si mismo sorprendido de que issei todavía respirará. "Creo haber escuchado que un demonio reencarnado había desarrollado una regeneración, supongo que ese eres tu y eso logro salvar tu vida." Con poderosas pisadas que hicieron vibrar el colegio entero, Oubis se acercó a issei quien lo miraba con una mezcla de dolor y ansiedad. "Haznos un favor a ambos y muere de una vez." Levantando una de sus patas Oubis se decidió a aplastar al castaño.

Con la sombra de una pata con filosas garras cerniéndose sobre él, se obligo a levantar su brazo que sangraba de más de un sitio y saco a Ridill que estaba oculta dentro de su Devil Breaker. La función de la daga en su Devil Breaker era disparar la daga que estaba aferrada a un cable que usaría para acercar a sus enemigos al alcance de su espada o llegar a lugares fuera de su alcance. Cuando la pata estuvo a punto de aplastarlo disparó la daga a la pata sobre él.

Al bajar su pata delantera para aplastar al castaño tuvo que detenerse y alejarse en un acto reflejo cuando sintió como algo lo había apuñalado. Sorprendido observo su pata la cual sangraba, no era una gran herida, no con su tamaño y fue más parecido a clavarse una astilla sin embargó era imposible que un demonio de clase media pudiera herir a alguien con la fuerza de un demonio de clase suprema fue imposible al punto de ser ridículo.

Mirando a dónde debería estar el caballero Phoenix lo vio luchando por mantenerse parado mientras sostenía una daga color esmeralda que desprendía una aura dragón slayer. De pronto los ojos de Oubis perdieron interés en el pequeño diablillo delante suyo, las armas dragón slayer siempre fueron la única y mayor debilidad de los dragones y aún que ahora que era uno debería tener precaución con dichas armas, pero simplemente no pudo tomarlo enserio cuando vio como el portador de una pequeña daga era un diablo que luchaba por mantenerse de pie fue algo de lo que no pudo tomarse en serio. "¿Que puedes hacer con esa daga en tu estado actual? Debiste dejar que te aplastará para tener una muerte rápida" Oubis no le preocupo que algún Maou fuera a aparecer, con el poder que las serpientes le habían otorgado y las reservas de poder que dejaron sentía que al menos podría llegar al nivel de un súper demonio y ahora iba a torturar al diablillo que se había atrevido a cortarlo.

Con una de sus garras golpeó a issei mandando lo a volar de nueva cuenta, el movimiento aún que perezoso fue tan jodida mente rápido para issei que solo noto que se acercaba la garra cuando ya estaba volando por el aire.

Ravel no pudo más que cubrirse la boca para evitar soltar un sollozo al ver a su caballero que dejaba una estela de sangre mientras volaba por el impacto. "No te preocupes, no está muerto contuve bastante mi fuerza." El rostro draconico de Oubis mostró sus dientes en lo que pareció una sonrisa. Intimidada Ravel retrocedió un paso pero antes de que la idea de escapar apareciera en su cabeza el suelo detrás de ella explotó en muchos pedazos cuando la cola de Oubis bloqueó su única ruta de escape. "No te muevas, odiaría romper mi promesa con tu caballero de no lastimarte hasta que esté muerto." Girando su cabeza en la dirección a la que había arrojado a issei el dragón se volvió a acercar, su cola deslizándose detrás de el cómo una serpiente.

Apoyándose sobre sus brazos para intentar levantarse. él simple echo de mover su brazo fue un tormento, aun así trato de ponerse de pie sin tener éxito al no tener sensibilidad en sus piernas, rápidamente se encontró rezando por qué el golpe no se las hubiera arrancado y evitó mirara debajo de su cintura por miedo a lo que fuera a encontrar, oh en este caso lo que no fuera a encontrar. Desconocía el límite de su regeneración pero dudaba que fuera como ese personaje de los cómics de traje rojo que era capas de regenerarse incluso si fue partido a la mitad. Sintiendo las pisadas del dragón que se acercaba se aferró con más fuerza a Ridill, si hubo o existió una mínima posibilidad de vencer fue con ayuda de la daga soltar la daga fue una muerte segura.

Acercándose, oubis incrustó sus garras en el suelo debajo del castaño y destruyó el suelo arrojando a issei cómo un muñeco de trapo junto con escombros. Golpeando el suelo como saco de papas el cuerpo maltrecho del castaño rodó varios metros hasta los pies de Ravel quien se arrodilló a su lado mientras parecía indecisa de si debía tocarlo o no pues sus manos vacilaron y se dabatio entre tocar a su caballero para comprobar que tan grave era su estado o no tocarlo temerosa de poder agravar aún más su estado. Con su nariz en un ángulo extraño, su rostro bañado en sangre con un gran corte en diagonal sobre su rostro,  su brazo izquierdo estaba doblado en una dirección que no debía doblarse mientras que el hueso de su antebrazo sobresalía, su brazo derecho parecía ser lo único de sus cuerpo intacto, a pesar de no estar roto y aún así tenían cortes, aún que delgados eran profundos, sus piernas mirando en la dirección contraria, en algún momento su columna vertebral fue rota y los huesos de sus piernas sobresalían perforando su piel, la única razón por la que Ravel sabía que seguía vivo fue por su respiración o mejor dicho sus jadeos entre cortados que le hacían expulsar sangre. Su cuerpo no podían seguir el ritmo pues reparando un hueso, el ataque de Oubis ya había roto otros cincuenta y si cerraba una herida otro ataque ya había destrozado múltiples órganos y rasgado decenas de músculos, la única razón por la que seguía vivo era por su regeneración que estaba trabajando para sanar las heridas más severas que amenazaron la vida del castaño

Aun a pesar de su estado lamentable, Ravel observo con desconcierto a su caballero tirado a sus pies que aún se aferraba a la daga color esmeralda y su brazo temblaba por la fuerza que ponía en él para intentar levantar lo pero sin éxito. "Está bien." Arrodillándose Ravel coloco sus manos sobre la de issei. "No hace falta que sigas, descansa." Sintiendo como issei relajo su brazo la conforto de cierta manera, después de todo ya había visto suficiente, su caballero incluso con sus heridas había tratado de ponerse de pie, sin importarle que tan fuerte era su enemigo él trataba de protegerla, no quería verlo morir por su culpa. "Detente iré contigo, solo déjalo vivir, te lo ruego." Mirando a Oubis dijo lo suficientemente alto para que la escuchará, en sus ojos y su tono se pudo apreciar lo decidida que estaba.

"Por qué debería hacer lo que dices, después de todo no estás en posición para negociar." Oubis simplemente la miro por un segundo antes de responder. Ravel apretó la mano de issei al escuchar la respuesta de Oubis buscando algún tipo de consuelo pero sus manos fueron apartados por el brazo de issei que aún que su cuerpo seguía cubierto de heridas ya había regenerado los músculos rasgados de su brazo y mirando a Oubis desde su posición en el suelo levantó la hoja a modo de amenaza.

"Te la llevarás por encima de mi cadáver." Issei comenzó a filtrar su aura en la daga de color esmeralda que emitió un brillo más intenso mientras que su mano comenzó a temblar, sus ojos miraban con un clara intención de matar a Oubis quien miro perplejo al diablo medio muerto. Pensaba que después de la paliza que le había dado ya estaría, si no muerto al menos inconsciente a causa del dolor.

"Incluso si puedes dañarme con esta cuchilla en tu condición, cuanto esfuerzo necesito para matarte, mírate incluso te cuesta sostener la daga en tu mano." Oubis dijo con desprecio al ver cómo la daga en las manos de issei temblaba y cada vez parecía costarle más trabajo el sostenerla firme en su mano. Nunca se espero cuando la daga en las manos de issei salió disparada en su dirección con tanta velocidad que terminó por atravesar lo. Incluso si fue un dragón, si se cortará la vértebra en la cabeza pierde la capacidad de expandir sus pulmones o hacer latir su corazón y perderá toda la sensibilidad debajo del cuello, en el proceso. No hubo manera de sobrevivir si la columna vertebral fue dividida a menos que tuviera algún poder regenerativo.

Mientras sostenía a Ridill con su mano derecha contuvo el dolor que recorría su cuerpo eh incluso su respiración mientras luchaba por mantener la daga firme en su mano que se volvía cada vez más difícil con forme iba inyectando su aura en la hoja, de alguna manera Ridill pareció entender cuál y quién era su objetivo, la criatura por la que la habían creado en un principio y con su leyenda alimentando la hoja, una leyenda de un hombre cuyo único objetivo era el de ayudar y un dragón dorado. La hoja lucho cada vez más para cumplir su objetivo de asesinar dragones. Con la última gota de su aura puesta en la pequeña espada soltó el mango y está salió disparada al cuello del dragón, perforando las escamas sin importar cuan resistentes fuera, desgarro la carne y destrozó la columna vertebral antes de salir al otro lado bañada en la sangre de Oubis.

Su cuerpo perdió fuerza, cómo una marioneta a la que le habían cortado los hilos antes de que Oubis comprendiera lo que había sucedido un agujero del tamaño de una pequeña pelota había aparecido en su cuello muy cerca de la base de su cráneo. Estando de pie en un momento para que al segundo siguiente estuviera  en el suelo sin que su cuerpo le respondiera aturdió de sobremanera a Oubis. Mirando con furia a issei el cual seguía tirado en el suelo se pregunto que truco barato había usado ese diablo para herirlo de tal manera. Mirándolo con ojos penetrantes escaneo al castaño solo para percatarse que la daga que estaba en sus manos había desaparecido y solo un cable de acero que se extendió hasta él quedaba dónde una vez estuvo la hoja. Con sus últimos momentos cuando su mente comenzaba a volverse borrosa entendió que había sido la daga que había estado sosteniendo fuera cuál fuera esa arma dragón slayer entendió que fue descuidado y su enojo se convirtió en arrepentimiento. Cómo fue posible, ahora que había alcanzado la mayor habilidad de su clan tener un final tan decepcionante a manos de un miserable diablo de clase media fue algo que lleno de amargura su corazón.

Daba igual que tan fuerte fuera Oubis, Ridill era un noble fantasma y como cualquier noble fantasma no fue una arma normal, mucho menos convencional, su leyenda forjada y contada hasta ese día después de haber sido la hoja que corto la carne del rey dragón dorado Fafnir. Su leyenda le otorgó la propiedad de perforar cualquier armadura sin presentar la mínima resistencia. Un dragón que no llego al nivel de un rey dragón cuya fuerza era la de un súper demonio a finales de camino no tuvo una mínima esperanza de soportar el ataque mucho menos sobrevivir.

Dejando caer su brazo por fin pudo respirar cuando vio el cuerpo de Oubis en el suelo y aún que por sus ojos que lo seguían mirando podía decir que todavía estaba vivo aún que saber que no pudo mover un dedo fue suficiente para que pudiera relajarse y con la adrenalina del momento desapareciendo comenzó a percibir el grotesco dolor de su columna vertebral quebrada, rota, destrozado o cualquier otro sinónimo que se le pudiera ocurrir en ese momento era el dolor más agónisante que jamás había podido imagina que podría llegar a sentir. Había escuchado que había personas que habían muerto en torturas, no por que hubieran sido gravemente heridos si no por el intenso dolor que sentían hizo que su cuerpo tomará la decisión de acabar con su vida, ahora pudo entender de mejor manera como era eso posible o que tanto dolor tenían que pasar esas personas para que sus cuerpos se suicidaran antes de seguir experimentando tal dolor.

Acomodando las astillas de sus huesos, uniendo los huesos soldando los en su lugar y recolocando las vértebras en sus sitio no hizo que fuera menos doloroso pero tener la columna destrozada que era la responsable de conectar la red de nervios al cerebro fue mejor que sentir como el resto de su cuerpo gritaba de dolor por la una multitud de lesiones.

Mirando el cuerpo del dragón Ravel no supo reaccionar, pensó que sería el fin tanto de su caballero como el de ella sin embargo aquí estaba frente el cuerpo de Oubis Bune cuyo cuerpo se había convertido en el de un dragón con una fuerza superó a la de su hermano mayor Raizer, ya fuera fuerza velocidad o magia el abismo que separó a un demonio de clase alta con el de una de clase suprema fue enorme al grado de ser insoldable pero delante suyo, un diablo de clase media con su cuerpo roto y ensangrentado logro derrotar a alguien que su hermano seguramente no hubiera podido hacer daño y ese demonio era su caballero el cual había jurado protegerla y en contra de cualquier posibilidad había cumplido con su juramento. Si en el evento de las espadas sagradas issei ya le había demostrado que tenerlo en su nobleza no fue tan malo como había pensado en un principio, ahora solo pudo sentir que no hubo mejor candidato disponible. Incluso ver lo lejos que llegaría por ella fue suficiente para que hiciera a su corazón latir.

Aun con su apariencia deplorable, Ravel se inclino hacia adelante y antes de que issei se percatará de lo cerca que estaba Ravel juntó sus labios con los de su caballero.

Cómo un cuento de adas, el caballero después de salvar a la princesa de un temible dragón, la princesa le agradeció con un beso.

Con los ojos abiertos como platos issei dejo de sentir el dolor en su cuerpo y en cambio sintió la suave sensación de sus labios y los de Ravel unidos en un beso.  Cuando se separaron, no existieron palabras para describir lo que sentía en ese momento pero ver cómo Ravel le sonreía cálida mente le hizo sentir que por primera vez en mucho tiempo había echo algo bien, sin mencionar que su primer beso con alguien tan hermosa como lo era la pequeña Phoenix hizo que tener todos los huesos de sus cuerpo roto fuera un precio bajo con tal de ver esa sonrisa en su rostro llena de felicidad y admiración no pudo evitar decir las siguientes palabras. "Te amo." Las palabras salieron de su boca de forma casi involuntaria cuando por fin entendió por qué había arriesgado su vida, no una si no dos veces, por qué le enfurecía verla hablar con otros hombres o por qué hizo cualquier cosa por ella y solo se había dado cuenta después de ese besó y así de rápido como se había percatado de sus sentimientos dejo escapar esas palabras.

El rostro de Ravel se coloreó de rojo el rostro de Ravel mostró vacilación, las dos únicas palabras que pronunció su caballero la hicieron sonrojarse al punto que casi salió humo por sus oídos, pero su boca no pudo hayar palabra alguna y todo lo que salio fueron balbuceos. "Hum.. ¿¡pero que haz!? ¡No es que! Lo de hace un momento solo fue... Yo no, bueno tú no me, digo no es que no me gustes pero es repentino además eres mi caballero... No está bien, digo no es que me moleste."

Mirando a Ravel que estaba nerviosa a causa del efecto de sus palabras, issei no pudo evitar sonreír de forma apacible y algo divertido por el espectáculo tan extraño como lo era ver a una avergonzada Ravel que no actuaba con rudeza como era costumbre y en cambio parecía un poco tímida.

Viendo cómo su caballero la miraba divertido respiro hondo una vez para recuperar su compostura y sonreír más relajada, siempre tuvo el mal hábito de pensar demasiado las cosas pero esta vez decidió decir simplemente lo que pensaba en ese momento. "Yo también te amo." Poniéndose de pie su cuerpo gritaba de dolor ante las lesiones que aún tenían que sanar sin embargo extendió su mano hacia Ravel para ayudarla a levantarse del suelo, antes de remplazar su sonrisa por una  expresión de seriedad

"Ravel prométeme una cosa." Ravel miro la mano de su caballero confundida por un momento, aun que solo hizo un gesto de asentir queriendo escuchar lo que tenía que decir su caballero el cual la miraba con seriedad. "Nunca me vuelvas a decir que me detenga." Las palabras de issei la aturdieron por un segundo. "Siempre que algo sea injusto para ti, are cualquier cosa para cambiarlo así que no me detengas por qué simplemente parece imposible o peligroso, en cambio quiero que confíes en mi." Los ojos de issei que reflejaban su resolución como cuando había echo su juramento la habían intimidado ligeramente como si le reprocharán su intento de sacrificio. "Cuando de digo que cargaré con todos los males del mundo si es por verte sonreír lo digo muy en serio." Ravel no supo que decir al respecto su caballero estaba diciendo, ¡No! estaba mostrando el alcance de su resolución y sin embargo aquí estaba ella que no había dicho o echo nada para demostrar el cariño que tenía a su caballero. Simplemente no pudo ser un rey tan lamentable y aún que no fuera mucho Ravel se arrojó a su caballero en un abrazo y parándose sobre las puntas de sus pies volvió a besar a su caballero

"Gracias" Ravel apretó más su abrazo sobre issei que le sacó un gemido de dolor al castaño sin embargo también le devolvió el abrazo.

"Que romántico." Una voz de la cual no pudieron distinguir su ubicación fue escuchada por ambos demonios. Algo en esa voz hizo que una alarma de peligro se disparara en la mente de issei que recupero a Ridill el cual seguía conectado a un cable de acero directo a su Devil Breaker. El cable de acero corrió devuelta arrastrando la hoja de color esmeralda que fue recuperada por issei quien movió a ravel a su espalda.

Afilando sus sentidos al máximo solo fue capaz de percibir una única pisada liviana y velos a la vez que sintió como algo se acercó de forma rápida por su espalda. Empujando a Ravel de donde estaba parada interceptó el ataque con Ridill mientras que al mismo, en un rápido movimiento en el que ambas hojas estaban probando el filo de otra espada.

"¡Kyaa! Issei que sucede por que-" Ravel que había caído al suelo de forma repentina le pidió una explicación a Issei solo para quedar silencio cuando vio a su caballero bloqueando una espada de alguien que no supo cuando había aparecido

"No esperaba que pudieras reaccionar a tiempo." Al tomarse un segundo para observar el ataque de quién había detenido se encontró con un joven muchacho de unos 20 años de cabellera rubia y ojos azules con unos lentes de medió marco vistiendo de forma elegante

"¿Quien eres tu?" Siseo issei entre cerrando sus ojos. Infundíendo de mas poder a su espada trato de empujar más la espada mientras chispas saltaban por la fricción entre ambas.

Fin del capitulo

¿Que les pareció este capitulo?
Apuesto que nadie vio venir nada de lo que sucedió en este capítulo aún así quiero escuchar sus opiniones y teorías 

En un principio el capítulo iba a ser más largo sin embargo creo que dónde lo dejé fue lo idoneo para dejar a todos en suspenso no sin entregarles un momento romántico que también sirvió como pequeño respiro de toda la acción/tensión

No sé de olviden dejar su voto y comentario

¡¡ADIOS!!