Al llegar al territorio Gremory, todos se sorprendieron ante el tamaño de la mansión Gremory, no fue tan grande como la mansión Phoenix, pero seguía siendo de tamaño considerable. El número excesivo de sirvientes y sirvientas abrumó a todos, quienes se sintieron intimidados ante el reconocimiento, cuando todos los sirvientes con los que se cruzaron bajaron sus cabezas en signo de respeto.

Cuando llegó la cena, para los nuevos integrantes en el peerage de Rias tuvieron una impresión errónea de los padres de Rias cuando la cena fue extremadamente incómoda, cuando una constante tensión llenó el comedor por alguna razón y la silenciosa cena fue como estar en un juego de tenis con sus miradas yendo de un lado a otro.

A la mañana siguiente, aliviando el ánimo y ambiente incómodo en la casa Gremory apareció el Maou Sirzech con un pergamino de los ancianos del inframundo. A su llegada Rias y el resto de su peerage se sorprendieron por la noticia que les dio.

"El matrimonio entre Raizer y Rias fue anulado." Dijo con una sonrisa jovial, a la vez que entrego el pergamino en sus manos a Rias. Leyendo el contenido, esté mencionaba como era que los ancianos del inframundo estaban de acuerdo con revertir el matrimonio entre la heredera del clan Gremory y el segundo hijo de Phoenix tras demostrar lo decepcionante de su fuerza al perder contra un demonio de clase baja.

Casi quiso llorar de alegría ante la noticia, pero el sentimiento de inferioridad al tener que ser ayudada por su hermano, hizo que se encontrará reprimiendo sus emociones, únicamente bajando su cabeza en respeto. "Gracias onii-sama." Bajar su cabeza hizo que el sentimiento de inferioridad que sentía al estar cerca de su hermano se enmarcará en su corazón aún más de lo que ya lo era.

Ignorante para Rias y su grupo los padres de Rias que observaron la escena nada complacidos por la decisión de su hijo. Al final no se pudieron quejar u oponerse, pues entre los demonios el más fuerte tuvo la última palabra y para lord y lady Gremory no fue secreto que su hijo era mucho más fuerte que una decena de demonios de clase suprema.

Al final solo pudieron resignarse y esperar las provocaciones del clan Phoenix. Sirzech fingió no verlos, algo desvergonzado para un súper demonio al que no se le podría escapar un solo detalle o presencia en una distancia no menos pequeña que la mansión Gremory. Despidiéndose aún no había terminado sus planes, ya había intimidado a los ancianos, mientras que Grayfia debería estar terminando el papeleo con el que romperían tratos comerciales con el clan Phoenix de manera oficial y elegante.

El líder del clan Agares, lord Agares observó el informe en sus manos dado por uno de los demonios de su familia perteneciente al grupo de ancianos. Al finalizar hizo una mueca de molestia. Inevitablemente esto fue un problema para todo el inframundo independiente de que lado del conflicto se posicionó. Con la facción de los Maou, inevitablemente tomó una posición de súbdito, al ser de los clanes más adinerados del inframundo, inevitablemente verían a su clan como mosquitos hambrientos verían a una vaca gorda. Con los Phoenix nunca tuvo una buena relación, los demonios competitivos como lo eran, no ayudó que ambos clanes se disputará el puesto número uno del clan con más recursos, sin embargo unirse con ello lo dejaría en una posición de iguales, no le agrado que simplemente lo vieran como alguien para suministrar sus bolsillos.

En el inframundo hubo una regla no escrita, mantener las lucha políticas bajo la mesa y en las peleas no se usarían potencias como lo eran demonio de clase suprema. Esto fue por qué las potencias eran una parte importante del inframundo y tomó cientos de años para que un demonio de clase suprema apareciera, si se mataron en peleas absurdas dejaría sus fuerzas muy débiles en caso de una guerra, a su vez como los clase alta solo solían ser hijos eh hijas de demonios de casas nobles no los arriesgaron en luchas políticas, eso solo dejo a demonios de clase media y en raras ocasiones se involucraron demonio de clase alta que eran seguidores de los clanes. Si los Maou que eran los demonios más fuertes del inframundo comenzarán a someter a clanes claramente más débiles con el uso de su fuerza simplemente no serían diferentes a la facción de los verdaderos descendientes de los antiguos Maou que habían derrocado en la guerra civil del inframundo hace mil años. Si se diera la imposible ocasión de que un clan se dejará someter, cosa que su orgullo no se lo permitiría. El Maou simplemente estaba rompiendo esa regla no estipulada y dio paso a que se diera la posibilidad de que otro Maou hiciera lo mismo con otro clan.

También estuvo el hecho de que los Phoenix aún que fueron el cerillo que encendió la pólvora, la verdad fue que no hicieron nada que otros clanes no hubieran hecho antes. El mismo admitiría haber usado la extorsión e intimidación a otros clanes para que se sometiera a él. Los odiaba pero esta vez no hicieron nada malo y aunque muchos de sus negocios eran fraudulentos o explotadores, aún tuvo un código de cosas que simplemente no haría. Pero esto lo dejo en la encrucijada de hacer lo correcto o seguir a los Maou, cómo eran común al punto de ser un instinto para los demonios seguir al más fuerte.

Lord Agares no era el único líder de clan que pensó igual, usando a los ancianos de sus familias que estaban en el concejo, se enteraron de la noticia sobre compromiso entre el segundo hijo de la casa Phoenix y la heredera del clan Gremory había sido anulado fue insignificante o intrascendente en el mejor de los casos, a diferencia de la noticia del clan Phoenix y Maou Lucifer rompiendo cualquier tipo de vínculo que se extendió como la pólvora ardiente por el inframundo. Los treinta líderes de distintos clanes, ya fueran grandes o pequeños prestigiosos o despreciados todos tuvieron un pensamiento en común. "Otra vez no."

Al salir de la mansión Gremory todos sin excepción abrieron sus ojos en asombro a la vez que exclamaron al unísono, llamando un mismo nombre en una perfecta sincronía. "¡Azazel!" Ver al líder de los ángeles caídos fuera de la mansión de Gremory acompañado de un dragón de veinte metros de alto, con escamas de color rojo vino, casi púrpura y escamas rosa pálido en su pecho, en su cintura un cinturón de metal uruk y un par de hombreras hechas de orichalcum. "Veo que al fin salen, me tuvieron esperando fuera de la mansión toda la mañana."

"¿¡Por que el líder de los ángeles caídos está aquí!?" Exclamo Rias haciendo voz de los pensamientos de sus sirvientes con un tono un poco más agresivo de lo que había planteado hacer en un principio.

Azazel pareció no darle importancia a su arrebato, en cambio mostró una sonrisa divertida. Rias tomo esa sonrisa como un mal presagio y ese presagio se volvió realidad tras las palabras de Azazel. "Para ti soy Azazel sensei." Tras sus palabras, la sonrisa de Azazel creció más eh inmediatamente el poco ánimo que aún le quedaba  a Rias al saber que su compromiso había sido roto desapareció. "El Maou Sirzech me pidió un favor para que los entrenará y como fui removido de mi autoridad como líder de la facción de los ángeles caídos tenía algo de tiempo libre, también le pedí ayuda al ex-rey dragón Tanning." Dijo el cadre señalando con una de sus manos al dragón gigante parado a su lado.

"El primero eres tú Sekiryuutei, entrenaras con el ex rey dragón Tanning." Dijo Azazel aburrido antes de devolver su mirada a la tablilla en sus manos.

"Saludos Draig."

"Tiempo sin verte Tanning."

"Pensar que me tocaría entrenar al Sekiryuutei, tu portador es algo..." Tanning dejó morir sus palabras en su boca pero Azazel y Draig entendieron el sentimiento detrás de ellas.

"... No te tendrás que esforzar demasiado, solo necesita algo de guía para usar mi habilidades al menos tiene algo de resistencia para usar la armadura."

"... Si estás seguro no seré yo quien discuta tu decisión."

Esta vez incluso Azazel no entendió el significado detrás y para ser sinceros no creyó que hubiera uno. Lo descarto como unos buenos amigos hablando después de tanto tiempo sin verse.

Para Draig y Tanning fue simple. La situación del emperador dragón rojo. Katsuo Hyoudou fue el primer portador del Sekiryuutei en convertirse en demonio, ningún portador había sido tan estúpido para servir a los demonios. Por lo general cuando sus portadores desbloquearon el Boosted Gear hubo un ligero cambio, que los volvió arrogantes y confiados y aún que algunos vivieron por un par de decenas de años más de los que tuvieron derecho a hacerlo ninguno dejo su humanidad de lado dispuestos a unirse a alguna facción. Ahora que esté portador se había vuelto un demonio estuvo obligado a soportarlo hasta que su vida útil se terminará lo cual fue demasiado tiempo incluso para un dragón teniendo en cuenta que los diablos vivieron por la eternidad. Así que tuvo que hacer que lo mataran prematuramente para no tener que soportarlo. Quería que Tanning le enseñará a dejarse llevar por el odio para obtener poder, con suerte usaría la Juggernaut Drive y terminaría consumiendo su esperanza de vida moriría rápidamente, así podría dormir libremente hasta que volviera a ser despertado dentro de otro portador. Lo único que podía hacer dentro del engranaje sagrado para su desgracia.

Tanning entendió o al menos comprendió lo que Draig le estaba pidiendo y para uno de los dos dragones celestiales y en especial después de lo que le había sucedido al rey dragón Vritra estuvo dispuesto a tener al menos ese poco de misericordia a un compañero dragón que había caído en desgracia.

Tomando a Katsuo con una de sus garras voló al límite del territorio Gremory a unas montañas desoladas tanto de vida silvestre o de flora dejando únicamente roca masisa. Ver volar al dúo de dragones lejos hizo que dejarán de prestar atención y devolvieran su mirada a Azazel.

"Ahora tu princesa carmesí." Azazel llamó a Rias por su título. Dijo Azazel mirando a sus papeles donde había apuntado las observaciones que había hecho sobre Rias. Haciendo conjeturas sobre el mejor entrenamiento que podría proporcionarle a la princesa Gremory. Demostró ser problemática por el hecho de ser talentosa en muchos campos, su fuerza impulsada por el poder de la destrucción de la familia de su madre, el clan Bael. Su fuerza estuvo al final de un clase alta, ya había dado el primer paso para alcanzar el nivel de un clase suprema, la única razón por la que había sido vencida por Raizer era por su falta de experiencia y su regeneración el counter perfecto para su poder de la destrucción.

Después de haber analizado su pelea, Rias tenía suficientes reservas mágicas para llevar la lucha a una pelea de desgaste cuando las reservas mágicas de Raizer se agotaron al regenerar su cuerpo o las de Rias al atacar a Raizer. Y estuvo en un setenta por ciento seguro de que Rias ganaría la pelea. Fue su falla al ser demasiado sobreprotectora con sus sirvientes y la inexperiencia de los mismos en una pelea, con la intervención de Asia Argento ese porcentaje sería aún más grande.

Ah Rias no le gusto recibir más ayuda de su hermano de la que ya le había prestado hasta ahora aún así tener la ayuda no solo de un ángel caído al nivel de su hermano, también un investigador, si no el mejor, de los mejores investigadores de engranajes sagrados que podría ayudar a desarrollar la fuerza de sus siervos.

"Tú ya tienes un buen nivel en tus capacidades físicas y mágicas, además de un entrenamiento físico, necesitas mejorar en tus estrategias y toma de decisiones." Tras las palabras de Azazel, Rias fue enviada a la biblioteca Gremory para estudiar, no solo juegos de clasificación, también todas las estrategias usadas por el clan Gremory y Bael durante la guerra civil de las que se tenían constancia.

"Akeno debes aceptar la sangre que corre por tus venas y explotar tu potencial desperdiciado." Las palabras de Azazel hicieron que la expresión de Akeno mostrará el claro desagrado a la mención de su sangre de ángel caído. "Usando el poder de los ángeles caídos podrás mezclar tu trueno con luz para crear rayos, esa montaña es lo suficientemente grande, ahí crear tus rayos debería ser un reto suficientemente grande para que haya algún avance considerable al final del entrenamiento". Dijo el gobernador mientras señalaba una montaña tan grande que dejaría el monte Everest como una pila de rocas mal puestas a su lado donde las nubes se arremolinaban a su alrededor bloqueando la vista de la sima.

Con la reina Gremory fue algo más fácil el escoger su método de entrenamiento, fue fácil de descubrir que la mayoría de problemas del grupo Gremory eran sólo psicológicos, una vez más todo fue culpa de Rias y su sobreprotección a sus sirvientes y en lugar de dejarles confrontar sus problemas los alejaba y protegía de ellos, al final solo retrasando el problema. Compartió su observación con Sirzech pero le pidió que encontrará una forma de entrenarlos sin que ese punto fuera algo obvio, eso fue una limitante algo grande, de lo contrario habría empujado al grupo Gremory a un abismo lleno de criaturas mágicas peligrosas de categoría C o B y los dejaría ahí hasta que cayeran exhaustos. Contrario a lo que cualquiera podrera imaginar el entrenamiento ayudaría a su resistencia además de ayudar a superar su traumas al hacerlos decidir entre su vida o su orgullo, miedo, banalidad o cualquier cosa que retuviera su progreso, y claro, su sentido de autoconservación no se lo permitiría. Al final se terminarían mintiendo así mismos como cuando dices que solo comerás una galleta más, solo para darte cuenta que el tarro está vacío. La reina Gremory no estaba exento de este hecho y conocía al ángel caído perfecto que le enseñaría a pulir sus habilidades.

Al llegar a la sima el oxígeno era escaso, el ambiente frío que incluso para un demonio resultó ser abrumador. Al llegar a la cima del monte fue recibida por uno de los líderes de Grigori, con apariencia ruda de mediana edad con el pelo negro, su barba tupida y descuidada además de una complexión grande. Un ángel caído que conocía demasiado bien. "Barakiel". Siseo la mestiza sus ojos púrpuras fríos y afilados.

Por lo general nunca le había importado o se habría molestado en mirar a su padre con ojo analítico pero por esta vez lo hizo y pudo ver cómo incluso con su rostro estoico fijo en una expresión de seriedad, podía ver cómo se retorcía por la frialdad de su mirada, debajo de su neutralidad podía notar que se retorcía en nerviosismo. Podía distinguirlo por que era muy similar a como actuaban algunos estudiantes varones cuando se le quisieron declarar, actuando con valentía pero tan rígidos que sus movimientos eran torpes. "¿Qué haces aquí?". Pregunto bastante más dura de lo que pretendía pero supuso que era algo automático al guardar tanto rencor por muchos años, simplemente no podía verlo sin desear escupir en su rostro. 'Que no agregue un insulto o dos a mi pregunta ya lo pudo considerar una cortesía de mi parte'. Pensó Akeno.

"Fue una orden del gobernador, no tenía idea que entrenaría a mi hija." Dijo de forma sincera. Tenía miedo que si alguna vez podía volver a hablar con su hija y ella descubre que mentía incluso en la cosa más pequeña como en el color de sus calcetines ella pensaría que no podría confiar en él nunca más. Sería tan sincero en todo lo que le preguntará, qué incluso revelaría planes secretos, lugares de alta seguridad o archivos confidenciales que sólo debían conocer los líderes si solo preguntará.

"¿Hija? No recuerdo tener un padre." Una vez más Akeno pudo notar como su padre se vio afectado por sus palabras. Cambiando su uniforme por su traje de sacerdotisa una vez más noto como su padre se vio afectado por la ropa que vestía y sus labios temblaron ligeramente antes de adelgazar sé en una fina línea.

Azazel una vez más observo sus notas, el caballero Gremory fue una patada en el trasero suficiente para ser igual o superior que la princesa Gremory. El chico estaba obsesionado con las Excalibur y no pudo simplemente pedir los fragmentos de Excalibur a la iglesia para que los destruyera, después de todo nadie aceptaría entregar cinco fantasmas nobles, incluso como rango: E, seguían siendo armas valiosas para los exorcistas. En el mejor de los casos se reirían en su cara. Por otro lado le habría gustado entrenarlo personalmente pero no era bueno con una espada y tampoco sintió que pudiera ayudar a expandir sus habilidades o crecimiento más de lo que cualquier otro espadachín podría hacer.

"Debes intentar mantener activado tu Balance Breaker más tiempo y aumentar tu resistencia." Fue todo lo que tuvo. El mismo tendría que superar su odio y superar sus traumas sin tener que destruir una de las leyendas más grandes cristalizada en siete espadas, a la vez que aumentó su habilidad en el arte de la esgrima. Sirzech ya le había prestado a su caballero Okita para re entrenar a su pupilo y caballero de Rias.

La peli blanca fue la siguiente, al igual que la reina Gremory no aceptaba sus orígenes aunque más por miedo que por odio. Tampoco tenía muchos maestros, nadie en el inframundo enseño artes marciales y los pocos que podrían estaban ocupados entrenando a sus propios discípulos o preparándose para los juegos de clasificación. "Debes liberar el poder que has sellado hasta que no logres aceptarte no podrás crecer". Inmediatamente Azazel vio la molestia en el rostro de Koneko. Ya había equipado el gimnasio en la mansión Gremory con todo lo que necesitaría para su entrenamiento así que solo podría ser examinada cada cierto tiempo por alguien.

Mirando a la ex monja, encontró agradable la facilidad el entrenamiento que ayudarían a su desarrollo. Y aún que desarrollar el Twilight Healing sería el mejor apoyo para los juegos de clasificación que tendría el grupo Gremory, el desarrollo en especial de alguien sin traumas psicológicos no demoraría tanto tiempo, y aunque dependería de la habilidad y talento del usuario sería un periodo de tiempo breve. "Tú falta de poder o habilidades ofensivas te hace una gran debilidad en el grupo Gremory y un objetivo claro al cual atacar". Asia se encogió en sí misma triste por las palabras algo duras a sus oídos. "Así que necesitas solucionar eso, para eso hay dos maneras una entrenamiento arduo en magia y armas oh..." Azazel hizo una pausa dramática asegurándose de que Asia le estuviera prestando atención, el par de esmeraldas fijas en él le dijo que lo hacía.

"¿Oh qué más? ¿hay algo para que pueda ayudar a Rias onee-sama?". Pregunto esperanzada.

"Contratar familiares". Las palabras de Azazel confundieron a la rubia que tenía la expresión más tierna de no entender nada que jamás hubiera visto. Sonriendo le arrojó un puñal dorado con una gema morada, la alfil Gremory golpeó la daga y hizo múltiples malabares tratando de no dejarla caer al suelo.

"Debes hacer un contrato con criaturas mágicas y convertirte en un domador de bestias. No solo podrás protegerte a ti misma, podrás ayudar protegiendo a tus compañeros".

"¿¡Y-y cómo puedo ser una domadora de criaturas mágicas!?". Exclamó en nervios la ex monja.

"Primero debes hacer un contrato con el rey dragón dorado, Fafnir". Después de la cumbre de paz había roto su contrato con Fafnir liberando el alma de su engranaje artificial, permitiendo que su alma volviera en su cuerpo, con eso en mente Azazel envío a Asia a la cueva donde actualmente descansaba Fafnir.

Firmar un contrato con una criatura mágica requirió un método diferente para cada criatura; Cuando fue un infante, si tuviste suerte de que su madre no estuvo cerca para hacerte pedazos, el método más sencillo fue alimentar o intentar formar una amistad con el pequeño, con una criatura mágica adulta que por lo general tenían un cierto grado de inteligencia necesitó entablar una conversación y llegar a un acuerdo en el que se estipulaba donde o en qué situaciones se tenía permitido llamar y cuando no. Habría algunos que no permitirían que los llamarán en medio de una batalla o otros no desearían ser llamados para tareas mundanas o insignificantes, por otra parte aceptarían ser llamados antes de una pelea o aceptarían ser llamados para una tarea de protección. Hacer que Fafnir un dragón poderoso, orgulloso y arrogante como él firmara un contrato con ella, hizo que firmar un contrato con cualquier otra criatura fuera una tarea fácil en comparación, formar ese contrato fue el entrenamiento de Asia.

"Luky tus reservas de poder mágico te hacen una excelente alfil, solo te falta practica, al igual que Rias solo necesitas entrenamiento básico, eso será suficiente".

Luky con ojos brillantes al enterarse que aprendería magia casi se fue dando saltitos inquieta por aprender magia, solo para ser recibida con un duro golpe de la realidad cuando en lugar de ser llevada a un lugar donde aprendería magia, donde podría ver cosas flotando y moviéndose solas haciendo cosas maravillosas e imposibles para la comprensión humana. Se dio con un canto en los dientes cuando el lugar al que fue llevada para entrenar fue a una biblioteca. Su ánimo desapareció ante la pila de libros mágicos con olor a humedad desgastados por el paso del tiempo.

Mientras Rias parecía centrada en los libros, absorbiendo la información en ellos. Terminando el libro que tenía en sus manos, lo colocó en una pila a su lado de libros de distintos colores y grosor.

Ante la vista de su senpai solo pudo suspirar y toma alguno de los libros en frente suya y comenzó a leer. La esperanza de ser recibida con dibujos o al menos diagramas de círculos mágicos terminaron por desaparecer cuando columnas de palabras simples y monótonas como las de un libro de historia la saludaron, resignada comenzó a leer.

"¿Qué hay de mi?". Ars pregunto al no ver quién sería el que lo entrenaría. "¿Quién me entrenará?". Azazel no tuvo que leer sus notas para decidir el entrenamiento del joven castaño.

"Tú y yo tendremos que hablar primero antes de darte tu entrenamiento." El tono serio de Azazel hizo que Ars se preocupara. Aún que quiso preguntar al ángel caído sobre el tema del que quería hablar, no tuvo oportunidad cuando el ángel caído camino al interior de la habitación haciendo un gesto para que lo siguiera al interior de la mansión.

Llegando a la sala común que estaba completa sola, Azazel le hizo un gesto al castaño para que tomara asiento mientras se aprovechaba de la hospitalidad de los Gremory ayudándose con un vaso de whisky de la reserva personal del patriarca Gremory en uno de los estantes cercanos. Tomando asiento en el sillón frente a Ars dejó su vaso en la mesa de centro antes de sacar un par de brazaletes de un espacio reservado y dejarlos sobre la mesa solo para buscar otra máquina de su espacio reservado. "Ponte los brazaletes, dijo mientras comenzaba a calibrar la máquina en sus manos.

Haciendo lo dicho por Azazel, se colocó los brazaletes. Un hormigueo  recorrió sus brazos ante de que un ardor algo desagradable a apareciera en su pecho y cabeza, ignorando esa sensación decidió preguntar el motivo por el que lo había traído a un lugar más privado para hablar "¿Sobre que era de lo que querías hablar-"

"¿Que es el poder de la furia espartana para ti?". Azazel interrumpe la pregunta de Ars y hace su propia pregunta, levantando sus ojos del artefacto analizó la expresión de Ars.

"Es el poder del antiguo fantasma de esparta dándome capacidades superiores incluso para un demonio o dios." Su expresión neutral mientras dice todo lo que sabe con la escasa información que conoce sobre el fantasma de esparta.

Azazel solo miro una vez más al artefacto. "Cómo lo sospechaba". Viendo las mediciones que le dio el artefacto confirmadas por las palabras de Ars hizo que solo pudiera dar un suspiro, reprimiendo lo mejor que pudo una mueca de desdén y decepción ante la descripción tan vaga y poco clara que había dado. Pensó por un segundo cómo podría explicarle su situación actual. "Si ese es el caso... Déjame explicarte". Levantándose del sillón tomo la botella de whisky antes de volver a sentarse y comienza a llenar su vaso casi vacío. "Si el vaso eres tú y él líquido es el poder del fantasma de esparta. ¿Que sucede cuando llenas el vaso más allá de tu capacidad?"

"Simplemente el líquido se derrama." Casi de forma simultánea el whisky comenzó a derramarse del vaso esparciendo el líquido sobre la mesa. A su respuesta Azazel colocó un círculo mágico sobre el vaso evitando que el líquido se derrame pero la botella siguió llenando el vaso. Los ojos de Azazel miran a Ars con ojos penetrantes ojos superando una nueva respuesta, una que no llegó cuando grietas aparecieron por toda la superficie. "Te equivocas en algo, en todo caso te pierdes de un detalle cuando el líquido que es el poder llena el vaso que es tu cuerpo, el espacio dentro de él que es tu magia desaparece, cuando tus reservas mágicas se agotan es el límite del poder del fantasma de esparta que tu cuerpo puede tener, si tomas más poder del que tú cuerpo puede soportar..." El mensaje fue claro y Ars solo pudo observar intrigado el vaso en la mesa del centro. "Debes dejar de usar el poder del fantasma de esparta o sufrirás daños de forma irreparable."

"Es ridículo mi cuerpo no es un vaso, me sano con el pasar del tiempo."

". . . . . ¿Quién ha dicho que tu cuerpo es el que recibe el daño?" Ars tocó la marca sobre su ojos y cayó en contemplación.

Eliminando el círculo mágico sobre su vaso de whisky y lo bebió todo de un sorbo solo para sostener el vaso frente a Ars. Explicar esto de la forma más suave para no perturbar a un niño después de decirle que su esperanza de vida había sido acortada fue difícil y no estaba planeando hacer esto nuevamente en un futuro cercano. "Estas heridas no son físicas están más allá, son más profundas, estas heridas están en tu alma y aún que se sanen esas heridas tu alma no será igual."

"¿A dónde quiere llegar?" La ansiedad y curiosidad por saber qué era lo que Azazel quería decirle comenzó a apoderarse de él.

"Has experimentado debilidad, fatiga y una disminución en tus poderes."

"¿¡Cómo sabe eso!?" Tuvo una mala premonición sobre la respuesta que le daría el ángel caído.

"Verás Ars en la teoría mágica no puedes usar más magia de las que tus reservas pueden soportar pero hay cientos de casos en los que como tú, usan más poder del que deberían ser capaces esto se debe a que en lugar de usar su reservas mágicas de aura, conviertes tu tiempo de vida en la moneda para usar más magia de la que seríamos capaces. Hablando claro cuando usas el poder de la furia espartana acortas tu tiempo de vida." Ars pareció que caería al suelo ante la dura noticia y hubiera sido así de no ser por qué estaba sentado.

Tragando saliva Ars estaba pálido como un fantasma, la noticia de que su poder lo estaba matando lo llenó de miedo ante la idea de no volver a usar el poder del fantasma de esparta.
Nunca se había imaginado que el efecto secundario tendría sobre su cuerpo, sabía que tenía algún efecto secundario, pero no se imaginó que era algo más grande que la debilidad de su cuerpo.

"¿¡Cuánto tiempo de vida me queda!?". Preguntó con inquietante curiosidad.

"Ha ha ha ha ha ha ha ha..." Azazel comenzó a reír ante la pregunta y la confusión se apoderó de Ars, esperanza ante una mala broma por parte del caído preferible a que en verdad no pudiera volver a usar su poder. Convertirse en un demonio sin gracia como su hermano, fue lo peor que se pudo imaginar que le sucediera. "Descuida descuida, solo has agotado mil años de tu vida para un humano puede ser mucho tiempo pero para un demonio apenas se  considera una pequeña porción del tiempo que vivirás." Aún que sus palabras fueron echa para reconfortar, no hicieron nada para calmar la inquietud que aún sentía con respecto a su poder.

"¿Qué sucede con la furia espartana?" Pregunto, el color volviendo a su rostro, de forma simultánea Azazel dejó de reír y volvió a su expresión seria.

"Cómo dije antes usarlo consumirá tu esperanza de vida." La expresión de Ars se oscureció, sus puños apretados sobre sus rodillas. "Pero esto solo se aplica si lo usas mas haya de tus límites,  debes aumentar tu fuerza física y mágica, mientras se cura tu alma hasta nuevo aviso tienes prohibido usar la furia espartana en tus entrenamientos".

Con Tanning

Al llegar a la cadena de montañas circundantes al territorio Gremory, Tanning soltó a Katsuo de forma brusca antes de aterrizar. "Tu entrenamiento consiste en sobrevivir en este lugar durante los próximos meses". Katsuo miro el descampado donde habían aterrizado en lo alto de una montaña, no había más que algunos matorrales secos y rocas. No hubo señal de vida o de una fuente de agua por ningún lado,  acercándose al borde busco una forma para bajar al pie de la montaña donde parecía ver algo más de vegetación junto una delgada corriente de agua que se filtraba desde dentro de la montaña, para su desgracia se encontró con un acantilado extremadamente empinado, lo suficiente como para no poder bajar la montaña sin saber volar. No se podía imaginar vivir aquí durante algunos meses, unos días ya parecían lo suficientemente desafiantes, dando media vuelta miró al dragón con intriga. "Eso sería suficiente para que domines tu Balance Breaker al final de tus días de entrenamiento. Pero podrías acortar ese tiempo a la mitad, alimentando al Booster Gear con tus emociones deberías poder lograr que el engranaje sagrado evolucioné".

"¿Cómo logro eso?" Preguntó ante la falta de comprensión de cómo lograr tal cosa.

"Hay muchas formas meditación, hipnosis y la más beneficiosa para ti es la pelea." Mientras decía esto Tanning encogió su tamaño hasta que tuvo dos metros de altura. "Usa tu armadura y lucha hasta que no puedas más." Katsuo tenía una expresión conflictiva pero hizo lo que dijo el ex-rey dragón y convocó su guante.

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Katsuo golpeó su oído un par de veces cuando un montón de estática llego a sus oídos junto con un montón de murmullos chillones, que lo abrumaron sus sentidos por un segundo. "Mocoso me estás escuchando." Espero el dragón ante la falta de respuesta.

"Ah qué yo no, no, no te escuché." Ante sus palabras Tanning soltó un gruñido de irritación.

"Estás listo para empezar." Repitió exasperado.

"Ah... Sí."

OMAKE

 Luky se movió en su lugar haciendo rechinar el sofá de cuero sobre el que leía los libros, había estado tanto tiempo sentada que sus pompis comenzaban a doler. "Ejem." Con su garganta reseca acercó su mano a la taza de Té que un sirviente extremadamente guapo  le había traído a ambas, cometiendo un descuido golpeó una pila de libros que hizo que cayera golpeando otras pilas de libros derribando otras pilas que cayeron sobre la taza de Té, la taza echa de porcelana produjo un traqueteo ensordecedor en la habitación tan silenciosa como lo era la biblioteca, haciendo malabares con una mano para evitar que más pilas de libros cayeran mientras con la otra quitaba los libros de la mesa evitando que se mojaran por el líquido aún tibio.

Cuando por fin logró medianamente equilibrar todo en las esquinas de las mesas evitando que los libros se mojaran, desvió su ojos al otro lado de la habitación donde aún estaba Rias impasible leyendo su libro. Aún con su garganta reseca, decidió que lo mejor era esperar a la comida para calmar su sed, comer mientras estudiaba no era lo más seguro, tomando su libro lo acercó a su rostro mientras se asomaba por encima corroborando que Rias lo le estuviera enviando miradas de molestia. "¿Rias-Senpai?". Preguntó ante la duda si de verdad podía escucharla por la falta de respuesta a su presencia poco discreta.

"Si, Luky." Respondiendo con neutralidad antes de pasar la página de su libro.

"¡Nada!" Exclamó al interrumpir a su senpai. devolviendo sus ojos al libro se percató que lo estaba sosteniendo al revés. Mirando una vez más a Rias espero que no la estuviera mirando, al confirmar que no había movido sus ojos de su libro, rápidamente  giro su libro antes de mirarla una vez más para ver qué seguía igual, suspiró en alivio cuando Rias no había notado su pequeño descuido y devolvió sus ojos a su libro para seguir con su entrenamiento. 'Después de todo solo tenía un par de meses de entrenar y debía esforzarse en estudiar magia.... Aquí..... En la.... Biblioteca..... Todos los días..... Durante los próximos..... Meses.' La reflexión de Luky no hizo no hizo más que terminar de matar su deseo por aprender magia de Luky. "Rias-Senpai."

"Mjum."

"Ha... ¿Cuánto tiempo llevamos en la biblioteca?"

Rias miro el reloj en la pared por un momento antes de responder. "Treinta minutos." Dijo y la cabeza de Luky golpeó la mesa provocando que las pilas de libro cayeran sobre su cabeza. Luky se limitó a dar un gemido, en parte por dolor y parte por tener que soportar esto durante meses, para alguien que fue una excelente deportista y una pésima estudiante, no moverse de este sillón fue insoportable para ella. 

Fin de capítulo

Odio escribir capítulos sobre el grupo Gremory y los hermanos de issei. Más les vale dejar su voto por el esfuerzo que puse en este capítulo.

¿Una vez más pensaron que se trataría de issei estando en Londres?

Pues lamento decir que tendrán que seguir esperando y tengo que decir que me duele mas a mi que tengo que escribir estos capítulos que ustedes que desean ver a nuestro protagonista en Londres aprendiendo magia.

Por ahora les toca espera una semana hasta que publique el próximo capítulo.

ADIOS

PD: DEJEN DE PONER COMENTARIOS TAN LARGOS COMO BIBLIAS, SI TIENEN TEORÍAS QUE SEAN BREVES, O QUE SUS COMENTARIOS TENGAN ALGUNA RELEVANCIA Y NO SOLO DECIR "SOY EL PRIMERO" NO TIENEN IDEA DE QUE TAN DIFÍCIL ES RESPONDER/LEER 500 COMENTARIOS. ME MOLESTA UN POCO POR QUE ENTRE TODOS ESOS MENSAJES SE PIERDEN COMENTARIOS QUE EN VERDAD TIENEN DUDAS O DEJAN COMENTARIOS INGENIOSOS.