Marcel.

"Hey chicos, ¿de que se ríen?" Una voz resonó por la sala haciendo que me asome por encima de mi hombro cuando vi a Harry caminando hacia los chicos riendo. Seguí caminando tratando de alejarme lo más rápido posible,pero los gritos en voz alta me llamaron la atención. Me di vuelta y vi a Harry regañándolos sin parar.

"¿Está defendiendo a un nerd Harry? Eso no es muy de ti"

"He crecido y así deberían hacerlo ustedes" Escupió y rodaron sus ojos, tratando de parecer ignorantes y distantes causando a Harry enojarse.

"Estoy cansado de la gente que molesta y acosa a los demás, te juro que si alguien le está haciendo daño a Marcel una vez más maldita sea que los voy a aplastar ¿de acuerdo?" grito enojado. Todo el mundo salio del camino evitándolo y todos ellos miró hacia otro lado para evitar su mirada enojada. Sentí un calor en el interior, Harry me había defendido y tengo un nuevo amigo, Avery. Sonreí mientras caminaba hacia mi salón.

Avery.

"Ellos eligieron sus asientos?" Sophia preguntó con los ojos abiertos y yo asentí. Le hablé sobre mi día. Acerca de mi nuevo amigo Marcel y lo de Amanda.

"¿Como te sientes?" Le pregunté y ella se encogió de hombros.

"Mejor, yo sólo tenía algunos dolores de cabeza, pero estoy bien ahora así que voy a estar lista para la clase de mañana" Asentí mientras me senté en mi cama.

"Bueno, pero tengo una pregunta, ¿está demasiado enferma como para ayudarme?" Ella sacudió la cabeza, vi qué curiosa estaba cuando se sentó y me miró con el ceño fruncido y los ojos grandes.

"Tenemos que hacer algo al respecto Amanda"

"Duh, ahora es que se te ocurre eso Sherlock" Ella se rió y me uní como negué con la cabeza.

"No, pero realmente tenemos que hacer algo, rápido" ella asintió y nos sentamos en silencio, ya que pensamos acerca de las ideas. ¿Cómo podemos acabar con ella, no podemos ir y decirle al director, porque créanme que he tratado de llevarla por ese camino, pero no, no funciona en absoluto, no podemos intimidarla ya que siempre se vengara y no creo que gane en su retorcido juego.

"Podemos hacerle una broma para dejarla humillada", dijo Sophia y yo negué con la cabeza.

"Necesitamos algo que le haga mucho mas daño, lo que significa algo que la haga callar" ella me miró y me frunció el ceño.

"Avery, ¿qué es lo que estoy oyendo. Suenas como una pequeña malvada perra" Ella se rió y yo me uní a ella. Bueno no me puedes culpar, he sido aterrorizada por ella por un largo tiempo. Ella me arruinó por completo y no quiero sonar como una maldit a per ra, pero ella se merece todo lo que va a venirle a ella.

"Pero, ¿cómo vamos a sacarla afuera?" Preguntó y yo me encogió de hombros mientras dejaba escapar un suspiro.

"Para sacar a un maestro necesitamos a un maestro", le dije y ella asintió.

"Pero ninguna de las dos somos maestros de la intimidación" Ella dijo.

Un nombre apareció en mi cabeza, pero yo no quería decirlo en voz alta, ya que la persona que poseía ese nombre estaba muy cerca de mi corazón ahora y yo no iba a darle a esa persona ese título. Me acosté, mirando hacia arriba en el techo.

"No y no conocemos a nadie, ya sea que es como Amanda o peor" Ella dejó escapar un gemido y nos quedamos en silencio otra vez. Ambos de nosotros tratando de averiguar una idea.

Después de unos treinta minutos las dos nos dimos por vencidas ya que no se nos ocurrió nada de lo que debería tener algún efecto sobre Amanda. Sophia pidió pizza y luego la comimos mientras veíamos una estúpida película de amor. Harry y yo estábamos enviándonos mensajes de texto. Me dijo que había regañado a los idiotas que se reían de Marcel. Sonreí ante sus palabras y tengo una sonrisa en mi cara cuando me di cuenta de que Marcel lo tendría más fácil, nadie lo molestara mas, espero.

"Uf, estoy cansada, me voy a la cama" dije después de dejar escapar un bostezo. Me puse mi pijama y Sophia apago el ordenador y también fui a la cama.

"Buena noches amor!" Ella dijo y me sonrió.

"Buenas noches bebe" Nos reímos entre dientes y antes de cerrar los ojos registré mi teléfono por última vez y vi un texto de Harry. Sonreí ante el texto y me sonrojé.

De: Harry

¿Quieres venir aquí y dormir conmigo? Te echo de menos, tengo frío y estoy solo en mi habitación. ¿Qué opinas? Te amo

Sonreí como sabía muy bien lo que quería decir con "frío". Quería acurrucarse que se convertiría en otra cosa muy rápido y realmente quería tanto como yo necesitaba dormir. Yo le envié un mensaje de vuelta antes de encontrar una posición cómoda y pronto me quedé dormida.

De repente me desperté de un profundo sueño y grité Sophia al despertar. Ella no se despertó ella sólo se volvió hacia su espalda y siguió roncando. Dejé escapar un gemido antes de acercarme a ella. La sacudí y luego dejó escapar un gemido.

"¿Qué quieres Avery?" Ella preguntó sin abrir los ojos.

"¡Tengo una idea!" Dije mientras caminaba de regreso a mi cama. Se sentó y se frotó los ojos, pero pronto gritó mientras encendí la luz.

"Apágala!" Negué con la cabeza.

"Entonces te volverás a dormir"

"Está bien, conocemos a alguien que sería perfecto para derivar a Amanda y para ser honesto, no tengo ni idea de por qué no pensamos en ella" le dije y ella frunció el ceño.

"¿Quien?" Sonreí y ella hizo su cara de 'oh no".

"Cara" su mandíbula cayó al suelo y yo me reí.

"¿Qué? Realmente vas a conseguir al diablo mismo? Y ¿cómo se puede incluso pensar que ella nos ayudará", preguntó y ella tenía un punto, pero si había alguien que pudiera hacer frente a Amanda, era Cara.

"No lo sé, pero al menos podemos intentar", le dije y ella asintió.

"Sí, pero ¿cómo vamos a ponernos en contacto con ella, siquiera sabemos en que universidad está asistiendo incluso si es que ella va a la universidad?" Me encogí de hombros. Tal vez Harry tenía su número de la escuela secundaria.

"Puedo preguntarle a Harry, creo que haría cualquier cosa por él"

"Tal vez algo sexual por él, pero si quieres perder tu tiempo podemos intentar, pero ¿podemos dormir ahora?" Asentí. Apagué la luz y pronto ambas estábamos durmiendo otra vez.

Me desperté por mi alarma. Lo apagué antes de estirarme en la cama y luego frotarme los ojos. Me levanté de la cama y me acerqué a Sophia.

"Hey despierta" gimió y después de unos minutos se incorporó. Me acerqué al pequeño armario donde teníamos nuestra ropa y me vistió. Me puse un par de pantalones negros pegado rotos que sabía que Harry amaba en mí y un suéter de lana baige y para completar el look un par de converse blancas y algunos anillos de plata. Me puse un poco de maquillaje natural, y mi cabello suelto.

"¿Ya terminaste?" Le pregunte a Sophia pero cuando salí se quedó en el medio de la habitación con sus pijamas.

"No, a menos que está bien si me voy de esta manera," dijo con una sonrisa y me reí.

"Voy a ir a hablar con Harry, pero te veré en clase?" Ella asintió.

"¿Vas a preguntarle sobre el plan?" Asentí con la cabeza con el ceño fruncido.

"¿Estás seguro de que es una buena idea?" Preguntó y yo me encogí de hombros.

"Espero que sí y en serio no creo que jamás diría esto, pero realmente necesito a Cara en este momento" Me quedé muy sorprendida por mis propias palabras. Nunca en un millón de años pensé que iba a decir eso.

Caminé hacia la escuela y pronto cuando entré en el interior vi a Harry y los chicos. Me acerqué a ellos y Harry me saludo con un beso en los labios. Los chicos empezaron a silbar haciéndome reír.

"Harry necesito hablar contigo", le dije y él asintió mientras su rostro mostraba una expresión de miedo, no Harry no voy a romper contigo o gritarte. Tomé su mano mientras caminábamos hacia una zona menos concurrida. Como me di la vuelta y lo enfrenté, sonrió. Puso sus manos en mi cintura y comenzó a besar mi cuello.

"Yo no sabía que cagabas donde comías Avery" su voz muy familiar resonó en mis oídos.

"Deja de acosar a mi novia Amanda!" Harry gritó, pero yo le dije que se calmara. Amanda se alejó después de decir algunas cosas groseras hacia mí, como siempre lo hace. Ella siempre tiene que ser la última en hablar, a pesar de que no encajaba en la conversación.

"Harry, como he dicho, tengo que preguntarte algo" Él me miró con el ceño fruncido.

"¿Qué?"

"Me preguntaba si todavía tienes el número de Cara?" Él miró sorprendido y muy confundido.

"¿Porque lo preguntas?"

"Realmente tengo que pedirle que me haga un favor" Su mandíbula literalmente cayó al suelo.

"Yo no lo tengo pero puedo conseguirlo si quieres loca mujer", dijo y reí.

"Te amo", le dije y él sonrió antes de decirlo de nuevo.

"Dame un poco de azúcar nena" Nos reímos y lo besé.

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