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Se escuchaban pasos a lo lejos de mi escondite improvisado, esa cosa sin rostro me perseguía por toda la casa con toda la tranquilidad del mundo como si estuviese seguro de que me encontraría sin esfuerzo alguno.
Ya llevaba exactamente una hora en la misma posición, sentada en el frío suelo de una esquina del ático detrás de un enorme armario,con un martillo entre mis manos, esperando que me encontrará para atacar.
Lo único que escuchaba eran sus pasos en el piso de abajo y las gotas de lluvia que aún caían.
Mi nombre es Natasha Smith, tengo 21 años de edad y si se preguntan como acabe en esta situación, es algo difícil de explicar.
Hace una semana llegue a esta casa por mi nuevo empleo que sería cuidar un pequeño de 5 años.
Cuando llegue al lugar era una gran mansión de cuatro pisos contando el ático, me acerque a la puerta y toque, me abrió una señora mayor muy bien vestida.
Ella me invito a pasar sin antes presentarse, la casa tenía un hermoso toque rústico.
La señora me presentó a su esposo y me dijo que la siguiera para presentarme al pequeño que cuidaría, entramos a una gran habitación con muchos juguetes pero uno me llamo mucho la atención, la señora busco el niño pero ella ni yo lo vimos.
De un momento a otro la señora da un breve grito al encontrar al niño, pero mi sorpresa fue al percatar me de que el supuesto “niño” era el muñeco que me había llamado la atención hace un momento.
Ella en peso a cargar al muñeco como si fuera un bebé, yo me quedé extrañada sin entender nada de la situación en la que estaba, la dueña de la casa me presentó al niño al que ella llamaba James.
El muñeco era de exposición serena, de porcelana blanca
, con un traje formal de color negro, ojos negros como la brea y muy bien peinado.
Escuche como el señor llamaba a su esposa diciendo le de se apurara y la señora rápidamente me explicó todo sobre cómo cuidar al, '' niño '' luego ella y su esposo dejaron la casa, yo me pasé la tarde recorrido la, dejando el muñeco en la sala de juegos.
Entre a la que sería mi habitación durante el tiempo que esté aquí. Era amplia y no tan iluminada, con una gran cama y al lado de esta se encontraba el baño, dejé mis maletas al lado de la cama y me dispuse a tomar un baño.
Mientras me duchaba empecé a escuchar unos sonidos extraños, provenientes de la que ahora era mi habitación, cuando termine de ducharme me coloque una bata de baño y salí de este.
Al salir percibí un delicioso aroma, pero luego caí en cuenta de que se supone que estoy sola, rápidamente abrí la puerta encontrándome...
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