Sus pasos son lentos, suaves y silenciosos en espera de no despertar a nadie, confía que, de esa manera nadie abvertira su presencia y así, podrá observar lo que sucede todas las noches en que él, solo se queda en cama escuchando de lejos, los tarareos que se escabullen de la habitación de la señorita de la casa.

Observar a SooMi en brazos de Yeol es un verdadero sueño, es hermoso notar como Chanyeol arrulla entre sus grandes manos el pequeñito cuerpo de su hija, mientras su voz grave y varonil, se hace suave y gentil para poder cantarle hermosas canciones que la hacen viajar al país de los sueños.

Hay un amor infinito en los ojos de su esposo cuando lo mira a él, pero la forma en que mira a SooMi lo hace sentir más que feliz y afortunado, porque sabe que, su pequeña bebé siempre tendrá todo el amor de las personas que la han traído al mundo.

Yeol besa la frente de su pequeña con la delicadeza de quien trata una flor preciosa y sonrie cuando ella se remueve entre sus brazos ante el sutil contacto.
Sus pequeños deditos se estiran para alcanzarlo y es su esposo quien da uno de sus dedos para sostenerla mientras le sigue cantando con ternura que hace a su corazón latir aún más rápido.

Él no puede evitarlo y en un segundo más, une su voz a la de su amado, acercándose a ellos para observar juntos al pedazito de persona que crearon, la cual los mira como si tuviera un par de luceros brillando en la obscura noche.

Sonríen, porque estos son la clase de momentos en que desean detener el tiempo y no dejar que terminen, porque son inmensamente felices de esa manera.

SooMi termina dormida en una parte del pecho de Chanyeol mientras él está también recargado en el área libre, acariciando el cabello azabache de su niña, mientras ambos se miran con amor.

Hay suaves besos que comparten en silenció, la mano de su gran esposo acaricia con parsomia su espalda mientras él suspira sobre sus labios, separándose unos segundos para ver las facciones que tanto ama.

"cuando dicen que el amor no tiene límites, es totalmente cierto"

Ambos sonríen, pero es el alto quien sigue con la conversación.

"cuando te conocí, supe que quería enamorarme, que...queria un futuro junto a ti, aun si la jodi tanto al principio..."

"el vocabulario Park"

Chanyeol sonrie y asiente.

"... Aun si erré tanto al principio, yo...despues de todo lo que pasó, supe que por ti construiría medidas de amor que nadie más podría haber alcanzado, pero todo eso evolucionó cuando supe que SooMi vendría, porque de ella me enamoré sin conocer su rostro o sus manos, supe que quería protegerla de todo, que por ella sería todo con tal de verla feliz...
Junto a ustedes dos supe que el amor no tiene límite y que si, alguna vez tuvo alguno, mi corazón no los tiene pues ustedes son y serán lo que mas ame día con día"

"tambien te amo Chanyeol"

Sonriendo unieron sus labios una vez más, sintiendo los minutos avanzar suavemente mientras ellos se mantenían en su burbuja de felicidad.

...

Lo primero que observó Sehun cuando despertó y fue a pedir desayuno, fue la habitación principal vacía.

Extrañado de no ver a ninguno de los dos esposos ahí, camino a la habitación de su sobrina, quien se encontraba en medio de sus dos padres, quienes provocaron una sonrisa en el más joven.

SooMi estaba bastante cómoda, mientras que Kyungsoo estaba prácticamente pegado a la pared que estaba junto a la cama, y Chanyeol con medio cuerpo pendiendo de esta, a punto de caer.

Convencido de que tenía que ser un buen cuñado, se acercó sigiloso y recargo con suma delicadeza su mano en el brazo de Chanyeol que estaba cayendo de la cama.

El resultado fue el esperado.

Chanyeol se había caído con una expresión de susto que realmente alegro su mañana.

Tapando su boca con su mano para no hacer más escándalo del que había provocado, miró a Kyungsoo quien lo observaba aún algo perdido y buscando a su marido quien estaba gruñendo desde el suelo.

Afortunadamente para los tres, la pequeña de la casa, tenía un sueño bastante pesado, por lo que sólo se había removido un poco cuando su padre cayó, sin hacer mayor caso a su al rededor cuando no hubo mayor ruido.

Fue Kyungsoo quien la recostó en su cuna, aprovechando para peinar un poco su cabello y negar mirando a su hermano mientras esté trataba no reír a todo lo que podía.

Ya estando los tres en la cocina, Sehun más calmado se disculpo con su cuñado.

"es que no pude evitarlo, aparte, tenía que darte la bienvenida a la familia Do, así que si... Hola cuñadito"

Kyungsoo viró los ojos, sin embargo una sonrisa curvo sus labios mientras preparaba la fórmula para SooMi quien está cerca de su hora de comida.

"yo te voy a dar la bienvenida a la familia Park, cuñadito"

La sonrisa en los labios del menor de los tres se borro casi por completo y siendo el niño pequeño que su hermano recordaba, se levantó y abrazo a Soo por al espalda haciendo pucheros.

"no vas a dejar que maltrate a tu hermanito, ¿verdad Soosie?"

"depende de si me toman de buenas cuando hagan sus travesuras en la casa"

Ambos adultos lo miraron con ojos de cachorro ante esas palabras haciéndolo sonreír.

"A veces pienso que voy a cuidar a tres bebés y no solo a SooMi"

"no soy un bebé"

"pues deja de comportarte como uno Park"

"yo si soy un bebé, así que cuidame como uno"

Se quejo su hermano acentuando más su puchero haciendo reír a los dos mayores quienes sólo negaron ante su actitud.

Y así... Era una mañana en la familia Park