Cynthia's POV

En cuanto recibo los primeros rayos del sol, no dudo en levantarme de un salto de mi cama. Me siento bien y de buen humor, contemplo la hora.

9:27 am.

8- December 1980.

Me amarro el cabello mientras me pongo mi bata, lo hago con pequeños pero apresurados pasos, necesito arreglarme lo más rápido en seguida.

John se ve tan lindo, como un angelito durmiendo en la cima de una nube. La luz de la mañana le da directamente en su cabello perfectamente teñido, pero debo despertarlo.

—Amor, dormilón, despierta.

—Oh... Cyn—pone una almohada sobre su cabeza—, solo cinco minutos más.

—Nada de cinco minutos—le pego con la cobija— ¡Ya arriba, flojo!

Todo esto lo digo con una enorme sonrisa, abro las ventanas y así puedo ver nuestro enorme jardín. En 1978 conseguimos una casa en Nueva York después de lograr nuestra estadía en el país, no tuvimos grandes problemas para legalizarnos americanos.

Serví mi café y John se lavaba los dientes. Aún sigo leyendo el periódico. Tanto los americanos como los ingleses hablaban solamente de una cosa en particular: El gran regreso de las Beatlegirls en 1981.

Eso era una mentirilla, la verdad es que vamos a dar un concierto en Navidad, excelente y perfectamente planificado. Será el 25 de este mes, pero nuestro nuevo disco saldrá en enero del siguiente año.

¡Wow! No puedo esperar más, me siento tan emocionada. La verdad es que todo esto lo hicimos con el simple propósito de que Brian dejará atrás ese concepto suyo de que "sería el peor manager de la historia". ¡Claro que no! Nosotras ya sabíamos perfectamente que íbamos a regresar, solamente que cada una le dijo distintas cosas por las que creíamos que el re-encuentro era algo imposible, pero terminamos aceptando. No queremos decirle nada, que se quede con su visión de que fue el héroe de la historia.

Él será nuestro nuevo representante, queremos que tome inspiración y vuelo para tomar a chicos o chicas y hacerlos su nueva banda, se lo merece, es un hombre de negocios excelente, sin duda sacara a una gran banda.

Me visto rápidamente, solamente me pongo una camisa negra, una chaqueta de cuero y unos pantalones de mezclilla, John se viste de manera similar a la mía, pero se pone un collar de oro que le regale hace cinco años. Nuestros hijos son una maravilla, en serio no puedo creer que haya sido tan mala con ellos.

La relación que tengo con Julia es reñida y neutral, se lleva mejor con su padre y eso es obvio, eso pasa con los primeros cuatro, pero con los últimos tres, en especial con Priscila he intentado dar lo mejor de mí. Ahora ella tiene 12 o Julia 18 a la par que sus otros hermanos. Pero intento dar lo mejor, algo digno, un bonito recuerdo para ellos.

—Listo, estoy preparado—dijo John con felicidad.

La razón por la que las Beatlegirls no se reunirán más rápido fue que queríamos terminar nuestros nuevos proyectos. Jane ha sacado unos discos fenomenales y sus giras han sido fantásticas, al igual que Maureen y Pattie, siempre nos hemos mantenido en contacto y es lo mejor del mundo. Yo debo terminar el nuevo disco que saque con John, se llama Double Fantasy y aquí les dejo la portada final:

Pero este fue el póster promocional:

Obviamente, en ninguna de las dos fotografías reflejaba nuestro rostro actual. Ahora ambos hemos envejecido, lo tengo bien consciente y claro. Pero no le temo a nada, no le temo a la vejez... ni siquiera a la muerte.

Eso sí. Me gustaría vivir a una edad madura, sólo con John. Y no tengo miedo a morir. No sé cómo se sentirá en ese momento. Pero estoy preparada para la muerte porque no creo en ella. Creo que es solo salir de un coche para subir a otro.

Antes de ir a los estudios, aprovecho para tocar un poco el piano:

"Grow old along with me

the best is yet to be

when our time has come

we will be as one

god bless our love

god bless our love

Grow old along with me

two branches of one tree

face the setting sun

when the day is done

god bless our love

god bless our love

Spending our lives together

man and wife together

world without end

world without end

Grow old along with me

whatever fate decrees

we will see it through

for our love is true

god bless our love

god bless our love"

—Precioso Cyn—John es una nena, se tarda tanto en arreglarse— ¿Puedes tocar algo para mí?

Asiento con una sonrisa, pero no le digo. Preparo mis dedos para tocar y cantar algo así...

"You are my weakness, you are my strength

Nothing I have in the world makes better sense

Cause you're the fish and i',m the sea

When we're together or when we're apart

There's never a space in between the beat of our hearts

Cause you're the apple and i'm the tree

One day at a time is all we do

One day at a time is good for you

You are my man I am your woman

Nothing else matters at all, now I understand

That you're he door and i'm the key

And every morning I wake in your smile

Feeling your breath on my face and the love in your eyes

Cause i'm the honey and you re the bee

One day at a time is all we do

One day at a time is good for us two (you too)"

Después de que toque, me dio un poco de melancolía al ver las arrugas en mis manos, viendo que ahora necesito más maquillaje de lo normal, mi cabello ya no es rubio como antes, ahora la raíz tiene partes blancas... estoy envejeciendo, no hay duda de eso.

Pero ¿Cuándo se necesita maquillaje para el alma?

Hubo una canción, que ya no pudimos agregar al disco... pero sin duda la quería tanto, quería que estuviera ahí, así que tome mi grabadora y empezó a sonar mi demo casero:

"Well, I tried so hard to stay alive

But the angel of destruction keeps on houndin' me all around

But I know in my heart

That we never really parted, oh no

They say the Lord helps those who helps themselves

So I'm asking this question in the hope that you'll be kind

'Cause I know deep inside I was never satisfied, oh no

Lord, help me, Lord

Please, help me, Lord, yeah yeah yeah

Help me to help myself

Help me to help myself"

—Oh Cyn, eso suena tan deprimente—John ya estaba listo y se paró detrás de mí.

—Es que—apague la grabación antes de que él se diera cuenta—, me inspire. Eso es todo.

—No tengo corazonada—mira a la ventana—. En la mañana el día era fresco, el sol sonreía, las nubes se veían claras. Pero ahora, solo son las dos y... ya se nubló, tengo miedo.

—Tenemos que ver cómo van las ventas para Double Fantasy. Yo no creo en las casualidades, no creo en las corazonadas, todo pasa por algo.

—Mejor—se desliza suavemente sobre la cama—, quedémonos en cama todo el día... ¿Te parece?

—No, vamos, flojo—digo en tono de juego y lo levantó de la mano—. Quiero ver cómo va el disco en la lista de ventas. Anda, por favor, no me dejes ir sola.

—De acuerdo, Cyn—da un brinco—. Vamos, pero regresemos rápido, ¿Quieres? Siempre he sido un supersticioso de lo peor.

Salimos de la casa, hicimos un par de chiste y bromeamos, pero alguien nos asustó de repente.

—Ho... hola señora Lennon—era una mujer, tímida, rechoncha, usaba unos lentes de botella, de color café. Un gran abrigo que cubría todo, un suéter color carne, una bufanda roja y cargaba el libro: El guardián del centeno—. Siempre he sido una gran fanática de usted y de su música... he comprado su disco que ha hecho con su señor esposo, ¿podría firmármelo?

—Claro, ¿Por qué no?

John cargaba su cámara, antes de eso, tomaba un par de fotografías, del ambiente, de los árboles, de la luz en general. Así que aprovecho para tomarme una fotografía en aquel justo momento donde le firmaba el disco a la señora.

—Gra...gracias.

—Por nada—hago una sonrisa y tomo a John de la mano.

El disco se estrenó hace dos días, por lo tanto no sabíamos con exactitud qué tan bien iban las ventas. Quería sacarlo más tarde y aprovechar el regreso de las Beatlegirls para promocionarlo lo más antes posible. Pero no nos fue posible eso, lo acabamos antes.

—Como ven, todo está perfecto. Es una gran obra—dijo Charlotte Martín, que desde que las Beatlegirls se separaron, ella ha sido mi productora musical, al igual que la de Jane, Pattie y Maureen—. No pensé que te fueran a salir tan bien las canciones, John.

—Gracias—dijo apenado.

—En serio, si te atrevieras a sacar una carrera musical, serías una gran sensación... ¡Piénsalo!

—No, no, no—se sonrojó—, y-yo nunca podría ser un cantante... eso lo es mi esposa, y mi padre. Bueno, mis dos padres han sido artistas y cantantes, pero yo... definitivamente no saque su talento.

—No te subestimes—le dije con tranquilidad—, mmm... ¿Por qué no tocas con nosotros en el gran concierto de navidad? Será fascinante.

—Lo pensaré Cyn, lo pensaré.

Seguimos platicando un poco y ofrecimos una entrevista para la Rolling Stone, hablamos de lo bien que nos haría estar en las Beatlegirls. Querían tomarme una foto, pero yo insistí en que John debía aparecer a mí lado.

Él estaba vestido, yo me desnude. Estábamos acostados en el piso, frío, pero de color naranja débil. Él se acostó y yo lo seguí, era una posición rara, pero el punto es que no salieron ninguna de mis partes al desnudo, por el enfoque de la cámara.

—Creo que—mencionó—, no me gusta el disco. A puesto a que todos pensarán que es nuestro intento por hacer un RAM, como lo hicieron Paul y Jane.

—Esas son tonterías—aseguré—, me has apoyado más de lo que se espera o se cree, en toda mi carrera artística. No es necesario este Double Fantasy para darte créditos por todo lo que has hecho por mí.

—Oh, Cyn, te adoro con todo mi corazón.

—Te amo—dije, mirándolo de frente a los ojos.

¿Te amo? ¿Q-qué es eso? No... no entiendo... esa palabra no está en mi vocabulario.

— ¿Q-qué? — cuestionó intrigado.

—John, antes tenía duda, pero ahora te amo.

—Me dices te amo... después de 22 años juntos.

—Lo siento, John—tomé su mano con delicadeza—, no me puedo desarrollar fácilmente. Sabes que ese no es mi estilo, te amo con todas mis fuerzas. Cuando veo tus ojos en la mañana, cuando te peinas como diva, te amo en toda la expresión de la palabra. No es un amor cualquiera, es un amor real.

Me dio un gran abrazo y luego me cargo tan fuerte que yo alcé mis pies en el aire. Él siempre me decía te amo, amor de mi vida, eterno amor, entre otras cosas cursis, yo no respondía ante sus palabras. Sentía que hoy, que ahora, que en este justo momento, era tiempo de decirle Te amo.

—Vamos a cenar—pidió.

—De acuerdo—asentí.

A las 9 de la noche nos encontrábamos en un restaurante de la más alta categoría. No era nuestro aniversario de bodas, ni siquiera del primer matrimonio. Simplemente éramos dos novios cenando, celebrando, riendo y besándose, como todas las parejas que se aman. Tomamos un poco de copas y nos emborrachamos, yo iba gritando a los cuatro vientos:

— ¡AMO A JOHN LENNON!

A lo que él respondía:

— ¡AMO A CYNTHIA POWELL!

—LENNON, ¡CARAJO!—corregí entre risas.

—Como sea—volvió a abrazarme—, amo a la mujer más malditamente hermosa de este jodido planeta.

—Vamos a envejecer juntos—dije en mi plena embriaguez.

Nos besamos apasionadamente entre las paredes por fuera de mi casa. Con nuestros hijos, se quedó Julia, la madre de John. Hemos tenido una buena relación las tres, la señora es sorprendente, tiene un gran corazón y una eterna facilidad para perdonar, no sé cómo pude ser tan mala antes.

Me cargó otra vez, y de mi bolso cayó mi grabadora.

—Oh vaya—John me dejó en tierra firme y recogió el objeto anterior—. Se te ha caído, ¿Qué es?

—John Winston Powell Lennon—hice referencia a de cómo se cambió el nombre en 1974—, prométeme que nadie, nunca en el maldito mundo, va a escuchar esta grabación, esto que me escuchaste hablar en la mañana, ¿me lo prometes?

—Claro Cyn, te lo prometo con mi alma. Nadie nunca la escuchará, más que yo. Y este cassette va a morir con mis manos, en mi tumba.

—Gracias. Tengo un secreto que decirte—le susurré en el oído.

—Dime—su aliento olía a vodka.

—Te amo.

Seguimos besándonos, pero como ya empezó a llover, llegó el momento en donde debíamos entrar a casa.

—Voy a abrir la puerta—caminó entre tropezones y abrió la puerta.

Yo iba más lenta, estaba jodidamente ebria, mis tacones me pesaban y la lluvia me empapó totalmente. Eso, provocó un apagón en toda la calle, que por mi estado de salud, era mucho peor de lo que esperé.

Pero dos luces me dieron directamente a los ojos, no era una lámpara o que haya regresado. Eran de una camioneta, pero no de una camioneta normal, sino de una negra, de la que salía alguien de arriba. Con una... ¿Bazuca?

—Idiota—era... oh... no... ¿QUÉ?

¿ROBERTO?

—. ¿Crees que podías huir así de la nada y verme la cara de imbécil? ¡NO! —me apunta con el arma— Aprende esto Cynthia, la verdad es que nuestro plan no era asesinar a Jane, ¡sino a ti! Y salió perfectamente bien. Vi que las Beatlegirls se van a reunir, pero ¿Cómo lo harán si su principal líder? Las Wings ganaron, Yoko me envió la dirección de tu casa, ¡La misma a la que te había llegado la invitación para su boda!

Y disparó.

Yo sabía que no debía confiar en ellas...

La muerte es tan diferente a como todo el mundo la pensaba, sentí el dolor más fuerte del mundo y el ruido que tanto me dolía y zumbaba entre los oídos. Eran el de las balas, fueron siete, puedo sentirlo.

No sé si las luces habrán vuelto, pero todo volvió a tener color, blanco, destellante como el flash de una cámara. Mi cuerpo cayó ante un charco de agua mientras la camioneta de Roberto huye a toda velocidad. La luz de las estrellas se refleja en mi rostro, siento mi cuerpo empapado.

Me cuesta trabajo respirar, mis manos están extendidas por toda la acera. John corre de inmediato hacía mí, pero se cae en el transcurso, por su estado de ebriedad. Veo como Julia está alterada y saca el teléfono de inmediato, procurando que ninguno de mis hijos vea este terrible escenario.

Entonces, es en este momento cuando toda mi vida pareciera ser una película de retroceso, los años que fui buena madre por primera vez, cuando me case "exprés" con John. Incluso, ese mal nacido de Roberto aparecía, de cómo me obsesione con él. Los discos con las chicas, el principio, las tocadas en la Caverna, en Hamburgo, los ensayos frustrantes, mi primer baile con John, mi relación con Barry, de cómo rompía mis vestidos para salir con ropa negra y corta, de cuando me peleaba con mi mamá. El divorcio de mis padres, cuando papá me contaba cuentos, cuando posaba para las fotografías de cinco años y luego, todo se iba en un espacio profundo.

John llegó, se arrastró hasta donde yo estaba, con unos ojos rojos y un cabello empapado intentaba revivirme, pero era estúpido.

—Papá...—veo el rostro de mi progenitor, alzarse frente a mí mirada.

—N-no... Cyn, despierta, ya vendrá la ambulancia, por favor... ¿Quién ha sido?—pide con horror.

—Freda...—mencione su nombre, también veo su rostro elevarse hasta el cielo.

—No, no ha sido Freda. Por favor... ¡DIME! ¿Quién te hizo esto?—se alteró totalmente— POR FAVOR... CYN...

—Astrid...—mi mejor amiga extendía su brazo derecho, alcé el mío para tomarla firmemente.

—Te amo Cynthia...

En este momento, solo venía a mi mente, como suave música de ambiente, mi canción que decía así:

I don't believe in Priscila

I don't believe in Beatlegirls...

i just believe in me

John and me

And that's reality

The dream is over

What can i say?

The dream is over

Yesterday

I was the dreamweaver

but now i'm reborn

I was the walrus

but now I'm Cyn

And so dear friends

You just have to carry on

The dream is over

La lluvia cesó, entonces me sentí mucho mejor, me levante brevemente, como si fuera la mañana de un día cualquiera. Al parecer, eso pasó en la madrugada, porque ahora se acabaron las gotas de lluvia y se veía el tremendo solazo de un nuevo día. Ya no me dolía nada, mi cuerpo estaba perfecto, era... ¿Un milagro?

—John—voltee para darle la buena nueva, pero...

Él seguía inclinado, sosteniendo... ¿¿MI CUERPO?? No dejaba de llorar, he sido tan injusta con él, siempre lo hice llorar, lo hice sufrir y enojar, no lo merecía como esposo. Ahora tiene que vivir esto.

Es... mi alma, lo que estoy usando yo es mi alma. De pronto, una nube se presentó frente a mí... su luz me señaló, como si fuera un reflector de una obra de teatro, entonces así fue como mi espíritu descendió por el cielo, le decía adiós a John, aunque él siguiera... intentando despertarme.

Pero no debe preocuparse, ahora yo estoy mejor. Al entrar al siguiente coche, pude sacar las conclusiones de lo que me había pasado

Simple y sencillamente...

El sueño, ha terminado.