Tsu sentía un nudo en su estómago al ver como la bazooka estaba lista, su cita con Verde fue arreglar la máquina y aunque probablemente fue la menos romántica de todas, el trabajar con el mayor se sintió... Íntimo de alguna forma que no sabía describir y ahora que su trabajo estaba listo y había armonizado con todos no existían razones para seguir en el pasado.

— Quizás... Me puedo quedar un poco más... Es decir aun no me he despedido. — Comentó jugando con un destornillador en sus manos apretando sus labios.

— Los demás ya hablamos de esto y decidimos que sin despedidas es mejor, después de todo solo es... "un hasta pronto" y para ti serán segundos. — Contestó el científico.

— Pero para ustedes serán años. — Refutó sintiendo la culpa por sus acciones ¿y si caían en discordia? No debío dejar que las cosas llegarán tan lejos...pero

— Ange. — Sintio la mano de Verde sobre la suya y dejó de mirar el destornillador para ver al mayor a los ojos. — Somos adultos, y ya tomamos una decisión, nada de lo que digas o hagas ahora cambiará eso, así que es ilógico retrasar lo inevitable. — Dijo el Científico y aunque sus palabras podían sonar frías para cualquier otro Tsu podía ver el cuidado y preocupación en ellas.

— Tienes razón. — Sonrió suavemente soltando la herramienta para tomar el rostro del rayo entre sus manos dándole un suave beso en los labios que ambos se tomaron el tiempo de disfrutar.

— Ahora, te aconsejo que te retires antes de que los demás no puedan controlar a Reborn. — Recomendó una vez se separaron.

— Pensé que todos estaban de acuerdo. — Rio tomando la bazooka.

— Circunstancias inesperadas siempre son de esperar. — Contestó con una leve sonrisa. — Por cierto Colonnello se vio en la necesidad de decir que te pasara el mensaje de que "Make it Big" Hizo que la banda popular Wham! Se ganara el signo de exclamacion. — Tsu elevó una ceja ante la referencia sin entender muy bien de que hablaba, quizás spoilarle Deadpool no fue tan buena idea..

— Hasta pronto. — Se despidió dejando que sus llamas llenarán la bazooka y si pequeñas lágrimas corrieron por sus mejillas antes de ser tragada por una bola de humo rosado nadie tenía por qué saberlo.

Al abrir los ojos, Tsu se encontró en un laboratorio conocido, aunque ahora este estaba vacío. Por un segundo el pánico corrió por sus venas pensando que quizás cometió un error y cambio la línea de tiempo temporal, o que estaba en otro tiempo... Estaba por salir en busca de respuestas cuando una fuerte melodia le llamó la atención, ¿de dónde la conocía? Con curiosidad se acercó a la ventana del laboratorio abriendo esta para poder mejor ver a la calle.

— Oh por Dios... — Murmuró tapando su boca con ambas manos mientras pequeñas carcajadas salían de sus labios.

En la calle debajo de ella, estaban sus elementos, con un rubio soldado sosteniendo un viejo estéreo que cantaba la vieja melodia de "Careless Whisper", la mejor referencia de Deadpool de la vida si le preguntaban a Ange. Pará mejorar todo esto la calle estaba inundada de pétalos de todos los colores, los que ella no limpiará...pero eran hermosos.

— Wham! — Exclamó con una sonrisa divertida y Confiada Colonnello, sacándole una fuerte carcajada, sin poder resistirlo más Tsu no dudo en lanzarse por la ventana siendo recibida en los brazos de su sol.

— Largo tiempo sin vernos, mi cielo. — Saludo Reborn y Tsu no dudo en darle un beso en los labios aferrándose a él, mientras sentía una felicidad burbujeante invadir  su pecho, la cual no creía poder contener y tampoco estaba segura si quería contener.

— ¡Hey! ¡Nosotros hemos estado esperando mas tiempo! — Intervino Lal haciendo que el sol la soltara para poder estrecharla entre sus brazos. — Dios... Hueles tan bien, te extrañe tanto. — Murmuró sobre su cuello besando este y haciendola estremecer ante el familiar toque.

— ¡Oye! ¡Hay que seguir con el plan! — Recordó Skull y finalmente soltaron a Tsu dándole su espacio a lo que ella les vio confundida.

— ¿Que pla—sus palabras murieron en sus labios al ver como todos colocaban una rodilla en el suelo.

— ¿Nos harías... — Comenzó Fon sacando una caja de terciopelo de su bolsillo.

— El gran honor...— Siguió Verde sacando su propia cajita.

— De ser nuestro cielo... — Dijo Colonnello mostrando el contenido de su cajita, un anillo.

— En las buenas y en las malas.... — Continuó Skull con un adorable sonrojo en sus mejillas.

— En la salud y en la enfermedad... — Lal Sonrió de una forma calidad que le hizo sentir sus rodillas como gelatina.

— En la riqueza y en la pobreza... — Viper parecía algo nerviosa por el leve temblor en sus manos y eso era demasiado adorable.

— Por el resto de nuestras vidas. — Finalizó Reborn con esa misma sonrisa que tenía el primer día que le vio, llena de confianza pero con sus ojos llenos cariño y amor... Viéndole como si fuera lo más precioso del mundo, quitándole el aire de los pulmones.

Tsu trago saliva sintiendo como un sollozo de felicidad quería escapar de sus labio, sus llamas cosquilleando debajo de su piel felices por la atención y estar rodeadas de sus elementos de seguro. Con el corazón en la boca y lágrimas que parecían pequeños diamantes cayendo por sus mejillas tan solo pudo responder lo primero que se le pasó por la cabeza.

— ¿Si saben que es ilegal que me case con todos ustedes cierto? — Pregunto con una ligera risa escapando sus labios.

— No estoy escuchando un no, así que lo tomaré como un si. — Dijo Reborn con ahora una sonrisa engreída.

— ¡Dijo que sí gente! — Se levantó del suelo Colonnello levantando en sus brazos  a Ange que tan solo Rio.

— ¡No dije que si tampoco!

— Shhh... No arruines el momento querida. — La callo Fon una vez que quedó en el suelo nuevamente. — Además, me parece que ya aceptaste.

— Si, acepte ser su cielo, no casarme con ustedes. — Explicó sin molestia en un tono más juguetón que otra cosa.

— Manzanas, peras, lo mismo. — Se bajó de hombros Lal quitándole importancia.

— ¿No estaba en una competencia para ser la esposa de la décima?

— Si... Eso era solo una excusa para pasar tiempo contigo.

— Jamás planeamos dejarte casar con míster rubiales.

— Buen chico, pero tu ya eres nuestra. — Explicó Skull y Tsu resoploso, asumía que debió ver esa venir.

— De todas formar no me casare con ustedes, tan solo tengo 17.

— ¿Entonces dices que tenemos que esperar a que cumplas la mayoría de edad?

— Nah, es más rápido pedir el permiso de Nana-San.

— En otros países la leyes del matrimonio son más flexibles.

— Sólo quieres una excusa para ir a las Vegas.

— ¡Oh vamos sería fantástico!

— Nos podría casar Elvis.

— Oh Daenerys.

— No te atrevas a mencionar Juego de Tronos, todavía no puedo superar el final.

— ¡Mi reina! — Comenzaron a discutir y al verlos pelear como niños con Wham! Aún tocando de fondo, Tsu estaba segura de que aunque en el futuro pudieran venir dificultades si tenía a esta banda de locos a su lado... Siempre encontraría su final feliz.

Fin...
......
....
?