Fon paso por un regimen estricto de entrenamiento desde muy joven, por lo que sus habilidades sociales al igual que las del resto de los Hibari dejaba bastante que desear... Pero a diferencia de su familia, el si intentaba ser mas amigable, o al menos parecerlo razon por la que no era extraño verlo con una sonrisa calmada en su rostro a pesar de sus antecedentes familiares, trabajo, amistades y elemento. Claro que por supuesto esta sonrisa no siempre estaba presente, como por ejemplo cuando peleaba, cuando ciertos compañeros lo sacaban de quicio, cuando lidiaba mucho tiempo con su familia, o como ahora, cuando Lal le presento a... La chica mas hermosa y linda que vio en su vida, por lo que su cerebro en un acto de cobardia decidio abandonarlo a su suerte, cerrando funciones casi por completo.

— ¿Fon? —  Pregunto Lal ligeramente preocupada, usualmente Fon seria el ultimo de sus compañeros por el que tendria que preocuparse, pero no era normal que luego de cruzar un par de palabras se quedara mudo con una expresion en blanco o que mirara fijo a las personas como ahora estaba mirando a Ange luego de que se la presentara... Esperen un segundo, detengan la imprenta, ¿Podia tomar esto como que a Fon le interesaba la viajera del tiempo? Bueno la castaña era bastante bonita, y de su tipo si tenia que ser honesta, pero que Fon de todas las personas encontrara a otro ser humano lo suficientemente atractivo como para parecer victima de un aneurisma, eso era algo totalmente nuevo.

— ¿Estas bien? — Por mera costumbre Tsu al ver a Fon actuar tan extraño levanto su mano para colocarla sobre su frente y asegurarse de que no tuviera fiebre, cosa que el artista marcial de esta epoca no sabia, y por lo tanto no estaba preparado para recibir.

No fue de extrañar que Fon hiciera corto circuito ahi mismo, y colocandose mas rojo que un tomate en el momento en que la mano de Tsu toco su frente, el azabache dejo que sus intentos mas basicos tomaran el control, optando por huir del lugar. Esto habria sido infinitamente mas facil si el cerebro de Fon hubiera tenido la decencia de recordarle que se encontraba en el segundo piso de la casa que usaban para sus reuniones, y que usualmente la gente preferia usar las puertas para salir en lugar de las ventanas.

—¡Fon! — Grito sorprendida Tsu al ver a su futuro maestro huir de su toque, saltando por una ventana, muy cerrada, y desaparecer de su rango de vision.

Un pequeño silencio se formo en la habitacion, con dos mujeres bastante confundidas hasta que Lal fue la primera en salir de su estupor y comenzar a reir como si no hubiera mañana sujetando su estomago mientras reia a mas no poder, confundiendo aun mas de ser posible a Ange que sinceramente estaba empezando a pensar que todo esto era un extraño sueño inducido por comer algun postre de Bianchi por error.

—¿El que salio por la ventana era Fon? —Una nueva voz les llamo la atencion y ambas se giraron para ver a un confundido Colonnello. —¿Lal? Pense que te fuiste a bucar a Reborn y a Verde.

— Olvido su cartera. —Señalo Tsu la cartera que se interpuso entre ella y un buen plato de comida caliente.

—Oh... ¡Espera! ¡¿Quien eres tu Kora?! —Bueno al menos este no parecia tan diferente a su version del futuro, aquello le dio cierta paz mental a Tsu.

— Una conocida de Verde, es nueva en la ciudad y le estoy mostrando el lugar. — Explico Lal normalizando su respiracion para parecer ser un humano funcional nuevamente.

—¿Y donde esta Verde?

—Lo mandamos de compras. — Se bajo de hombros Tsu. —Pero tuvimos algunos... Inconvenientes por lo que decidimos comer afuera, ¿quieres venir?

—Seguro, kora. —Sonrio, para ser conocida de Verde no parecia nada sospechosa, y si Lal se ofrecio a darle un tour por la ciudad debia ser alguien que valia la pena.