[Base de la fuerza armada Estadounidense, 1976] 

Los soldados corrían dentro de la zona para atender un nuevo caso que sea les había presentado. Cada uno hacía lo posible por ser más rápidos. 

—¿Porque tanto alboroto? — preguntó un hombre. 

—Coronel, han traído un paquete que encontraron hace unos instantes. 

—¿Dónde exactamente? 

—Dicen que en Canadá. 

Ambos hombres siguieron su camino. Aquel hombre mayor se dirigió hasta los adentros de la base, le permitieron la entrada al laboratorio donde varios de sus soldados atendían la urgencia. 

—¡Señor! — exclamaron todos al escucharlo. 

—Capitán, deme un informe de lo sucedido, el resto descanse. 

—Han traído un paquete importante, señor. Nos pidieron dejarlo aquí, el coronel aceptó. 

—¿De quién fue la idea dejarlo aquí? 

—Un tipo raro llamado Robert Mccall. 

El hombre quedó pensativo, no le sonaba aquel nombre. 

—¿Y que trajeron? — preguntó. 

—Parece ser un hombre que encontraron en el fondo del océano, desapareció hace trece años y lo dieron por muerto hace diez. 

—¿Sigue vivo? — preguntó nuevamente, mientras miraba por la ventana a un hombre pelirrojo acostado sobre una camilla, con un objeto redondo sobre él. 

—Es lo que parece, señor…