Prompt: Tristeza

Frambuesita Mala

Palabras: 978

En el Centro Manzana no existía la tristeza. Puede ser difícil imaginar como al intentar crearse el más leve ápice de dicha emoción, un pequeño sol rondante se encargaría de hacer sentir mejor a cada frutita sin excepción.

Pero ese sol existía y su nombre era Rosita Fresita, con su sorprendente don de repartir alegría con el mundo.

Y por otro lado, la nube de tormenta de nombre Frambuesita no se encontraba nada feliz al respecto.

-¡No entiendo como ella siempre puede ser así!- Se quejaba desde el interior de su camión/caravana -¡Siempre me esfuerzo tanto! Y ella... Ella solo...-

La joven repostera se sentó rebosante de tristeza en la esquina más oscura a llorar, no podía creer que alguien realmente pudiera siempre... Ser feliz.

Obra de un sexto sentido, la brillante repostera estrella sintió una perturbación en la fuerza.

-Frambuesita ¿Qué te pasó?- Preguntó desde la barra una voz conocida, la de ese dichoso sol.

La peli magenta miró sorprendida.

-Yo... ¡No tengo nada, largo!- Le gritó tratando de ocultar sus ojos llorosos.

Haciendo caso omiso, la peli rosa puso manos a la obra, entrando de un salto al camión y sentándose junto a la afectada.

-¿Pero qué?- La dueña fue interrumpida con un dedo en sus labios y un relajante shusheo.

-¿Qué es lo que te tiene de mal humor?- Preguntó suavemente Fresita.

-Ya te dije que no tengo nada, lárgate de una vez... Además ¿Por qué te importa?-

La de ojos verdes soltó una pequeña risa y se levantó frente a ella.

-¡Porque me importas! Todas me importan y quiero que estés feliz porque eso me haría feliz- Hablaba desbordando emoción con cada palabra.

"Es impresionante como mientras más hablaba, más se iluminaba el escenario a su alrededor"

Nuevamente se agachó para acercarse a la niña frambuesa.

-No importa cual sea tu problema, siempre voy a estar para ti para lo que necesites- Terminó la peli rosa con una amable sonrisa.

Sin saber como, la nube de tormenta se desvanecía mientras más la miraba. Estar con ella la hacía sentir bien y creaba una esponjosa nube color rosa que rápidamente se adueñaba de su corazón.

"Ella realmente es un sol"

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Nuevo día, nuevas alegrías o eso es lo que ella siempre decía.

La repostera favorita de muchos llegaba,  lista para cumplir su rutina guiada.

Nunca imaginó que con su peor enemigo se encontraría: Un Mal Día.

Cupcakes quemados, ordenes mal hechas y una señora muy grosera con una boca de profeta, pero lo peor de todo "Clientes insatisfechos".

No sonrisas, solo desechos.

Todos esos acontecimientos en tan poco tiempo terminaron por recubrir a la optimista sol.

Nubes de lluvia cubrieron el centro manzana, tanto como metafórica como literalmente.

El centro había perdido su brillo. Todas se vieron obligadas a cerrar sus negocios y entre todas las afectadas, una de ellas comenzaba a enloquecer.

-¿Por qué? ¿Por qué no puedo hacer nada bien?- Se decía para si misma la chica peli rosa quien se acurrucaba deprimida en la oscuridad de una esquina del interior de su camión.

Tantas cosas pasaban por su cabeza, era tan raro para ella sentir tristeza.

Era horrible... Tan horrible, que cierta frutita no fue capaz de ignorarlo.

Entre sollozos, Fresita escuchó como alguien tocaba su puerta.

-¿Q-quién es? Pase- Preguntó sin pensar, simulando una sonrisa.

La persona afuera abrió la puerta, no era nadie más ni menos que la repostera de frambuesa, tapada con una chaqueta impermeable.

-¿Frambuesita, qué haces aquí?-

La mencionada entró sin preguntar y se sentó junto a ella.

-Yo... Te traje pastel- Comentó nerviosa mientras le entregaba una rebanada de dicho postre, este tenía toda la temática de frambuesas como cabría esperar -No quería que se mojara o algo, así que te traje un poco-

-Gracias- Únicamente dijo la oji verde sin tanta energía como quisiera.

Pasaron unos minutos más y ambas permanecieron sentadas sin dirigirse la palabra.

Para Fresita esta situación era algo complicada, por un lado esperaba que Frambuesa se fuera para seguir llorando, pero por otro se sentía bien estar con alguien.

Por su parte, para Frambuesita...

-¡Muy bien, ya no aguanto esto! ¡Dime que es lo que te pasa!- Imperó un tanto agresiva la oji magenta al levantarse -¿Tuviste un mal día, cierto?-

La niña de fresa se exaltó ante su comentario.

-¿¡Qué!? ¡Nah, como crees, soy Rosita Fresita, alguien a quien le gusta ver el tazón medio lleno y no medio vacío, soy optimista siempre y le busco el lado buena a las cosas, no puedo tener un mal día, claro que no!- Dijo todo eso en poco más de 10 segundos -Todos dependen de mi- Eso último lo susurró.

Ante ese comentario, la peli magenta sintió nublarse su corazón.

-¡Y ahora por mi culpa estás triste!- Lloró la peli rosa.

-¡No cargues con la culpa!-

-¿Eh?-

-¡Siempre estás para todos nosotros! ¡Definitivamente tienes derecho a tener un mal día y a dejar que te ayuden!-

Fresita bajó la cabeza.

-Pero no me gusta... Estar triste-

-¡A mi tampoco me gusta verte triste!- Gritó brillante con lágrimas en los ojos -¡Eres maravillosa y hermosa y por eso quiero ayudarte, quiero ayudar a la persona que me ayudó a mi, a la persona de la que me enamoré!-

Al decir esto último, su rostro se tiñó de rojo vergüenza.

Por otro lado...

-Gracias Frambuesa- La repostera rosa se levantó y con fuerza la abrazó -Pero creo que queda claro que no soy la única que sabe como combatir la tristeza de los demás-

Tras separarse, la de cabellos magenta la tomó de las manos y la miró con una tierna sonrisa. Aun con la luz tan tenue se alcanza a distinguir lo hermosa que es.

En el fondo, ambas veían un cielo claro y despejado de pensamientos negativos.

-Creo que cualquiera puede brillar, pero yo quiero que tu seas mi sol-

DIOS mío AMO este reto x'D❤

Nunca pensé que algo que consumiera la mitad de mi tiempo en el día sería tan hermoso jsajsa

Idk, si lo se "mi sol" y "nube de tormenta" cuando en dos días toca tempestad ¡YO QUE SE, LO IMPORTANTE ES VIVIRLO! 😎

Por cierto, este drabble/viñeta se podría considera un "What if" del episodio del Blues del mal día, pero si la que ayudara a Fresita fuera Frambuesa y no la Tia Almendra jsjs

Y si preguntan por que el narrador se puso a rimar aleatoriamente, pues