Monstruos

Agus...

  Linda vino a mí para que la proteja de sus propios padres, no la culpo, Mar y Darío tienen un aspecto horrible, asi es como se deben verse porque ya están muertos.

  -¡No se acerquen más! -alzo la voz mientras tengo a la bebé en mis brazos -Está asustada. -agrego.

  -Pero... -Mar se acerca un poco más y Linda sale corriendo.

  -¡Espera! -exclamo, entonces desvío mi vista hacia la derecha -¡Fer! -corro hacia él y me arrodillo a su lado -Despertate, por favor. -murmuro mientras recuesto su cabeza sobre mi regaso. Cierro los ojos y lagrimas caen por mis mejillas.

  -No tenes que pedírmelo dos veces. -susurra él limpiandolas suavementes con sus pulgares.

  -Fer, estás bien. -lo abrazo con todas mis fuerzas.

  -Agr... no tan fuerte. -se queja mientras se sienta en el lugar -Héctor me dio una paliza. -habla mientras escupe un poco de sangre con saliva.

  -Mira lo que nos hizo a nosotros. -interrumpe Darío con una voz raspoza, seguramente sus cuerdas vocales están podridas.

  Mar se encuentra arrodillada en el suelo, cubriendo su rostro con las manos, sollozando, pero no hay lágrimas. Ya se secaron hace tiempo.

  -Mierda, ahora sí parecen que están muertos. -dice Fer un poco asustado.

  -Maldito. -Darío avanza hacia nosotros y lo toma del cuello con una sola mano hasta levantarlo un poco del suelo -¡Nada de esto hubiera pasado si vos no te habias llevado a nuestra hija! -mira con rabia a Fer mientras que él intenta soltarse.

  -¡Suelta a Fer ahora! -le ordeno tomando un hierro retorcido de los escombros y lo golpeo con todas mis fuerzas haciendo que lo suelte.

  -G-Gra-Gracias Agus. -habla Fer frotando su cuello.

  -Mataré a los dos y después voy a ir por Héctor. -murmura el rubio recuperandose, el golpe que le di fue tan fuerte que rompió su antebrazo dejando su hueso quebrado a la vista, eso me espanta y me da asco a la vez.

  Con un movimiento brusco, él corrige su brazo y avanza hacia nosotros pero se detiene a escuchar a Mar -Basta. -ella se pone de pie y quira su cabello negro del rostro -Debemos encontrar a Linda. -habla caminando a la dirección en donde la niña huyó.

  -Sí. -asiente Darío siguiendola.

  En unos minutos los perdemos de vista entre las tumbas y mausoléos del cementerio.

  -¿Estás bien? -me pregunta Fer mirandome de arriba a abajo.

  -Sí, tengo nada más que barro. -contesto quitándome los anteojos para limpiarlos con el borde de mi remera.

-¡¡AGUSTINA, AGUS!! -escucho a Walter llamarme.

  -No tenían que seguirme. -digo girando y al ver a Yeni con él.

  -¿Están bien? -pregunta ella preocupada.

  -Sí pero... nada está bien. Héctor sí está vivo, atrapó a Mar y a Darío, nos atacó y también hizo algo terrible. -les explico -Le enseñó a Linda que sus padres son monstruos y ella está muy asustada. -finalizo agachando la mirada.

  -¿Ya no lo sabía? -pregunta ella arqueando una ceja.

  -No entienden, ellos se convirtieron en una especie de zombis o algo así. -hablo angustiada.

  -¿Qué vamos a hacer ahora? -pregunta mi hermano y todos miramos a Fer.

  -¿Por qué me miran así? -habla intimidado.

  -¿Tienes un plan? Debés tener uno. -digo rápidamente, entonces respiro hondo y me tranquilizo. Sólo un poco.

  -La verdad... no. -responde sonriendo nervioso.

  De repente alguien lo golpea en la cabeza con un bastón, es Zaret -¡¿No aprendiste nada, Fernando?! -lo regaña mientras él frota su cabeza con recelo.

  -Sí, que debo usar un casco cada vez que estés cerca. -responde él ganándose otro golpe.

  -No, sobre lo que pasó con Héctor.

  -Entonces ya lo sabes ¿Cierto? Nos dio una paliza a todos. -habla cruzándose de brazos.

  -Eh... ¿Quién es la doña? -pregunta Yeni curiosa.

  -Sólo es una bruja de 400 años que hechó una maldición al rio y por eso está pasando lo que pasa. -les explico rápidamente dejandolos con los ojos bien abiertos.

  -Tiene sentido. -contesta Yeni después de un momento de estarlo pensando. Entonces todos prestamos atención a lo que Zaret va a decir -Héctor es muy fuerte, si peleas de nuevo con él, te matará. -eso no ayuda mucho.

  -Pero él debe tener un punto débil ¿No? -supone Fer rascandose la cabeza.

  -Todos lo tienen, averigua cuál es. -agrega la anciana sentándose lentamente en un banca de cerámico que se encuentra a nuestra derecha.

  -Piensa, piensa. -murmura Fer caminando de un lado al otro, en eso levanta la cabeza y me mira con una sonrisa -Ya sé, necesito la ayuda de todos. -toma mis manos y luego mira a los demás.

  -Héctor sólo es uno, nosotros más y juntos podremos acabarlo y rescatar a Linda. -nos explica.

  -Bien pensado. -habla Zaret asintiendo.

  -Entonces ¿Cuál es el plan? -pregunto.

  -No podemos hacerlo todavía porque necesito la ayuda de todos. -responde serio. Sea lo que sea que esté pensando, no va a hacer nada fácil.

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top