Rosemary College | Manchester
Desayuno

Caminando entre las bancas de la cafeteria distintos grupos de chicas chillan con emoción al obtener una que otra mirada de Ramiro a lo que él solamente ríe sin entender que es lo que realmente ven en el pues a su parecer no es tan interesante.

—¡Dude!—un saludo varonil después de una palmada de manos—¿escuchaste sobre el entrenamiento de elecciones?

—Algo así...—apenas escuchándolo responde pues su atención está fija en una rubia a lo lejos

—seguro dejará a más de uno en la banca, como todos los años. Como sea haremos tu jugada—señala para después unir sus puños y sin necesidad de decir palabra alguna el de rulos llega a su lado esperando a que tome el desayuno para entonces recibir un par de ojos en blanco

—¿que quieres Ramiro?

—Estudiar, realmente necesito graduarme y tú eres la única que puede ayudarme—habla sincero bajo la chaqueta deportiva—Si sigues molesta por lo que dije, no me retracto, tienes problemas—ella frunce el ceño

—idiota—continúa su camino obteniendo cientos de miradas puesto que ahora es el tema de conversación de cada chica que alguna vez a soñado con conocer a la gran Stella B.

—Dijiste que lo resolverías hoy, tenemos examen de francés en 20 minutos y sabes perfecto que no puedo reprobar ninguna materia

—Hola Ramiro...—una castaña guiña un ojo en forma de saludo coqueto a lo que él solo responde con un movimiento de cabeza sin importancia—hola Yam—la de ojos avellanas la ignora

—eso haré

—¿Cuando? ¿Después o antes de tirar eso al cesto de basura?—señala el desayuno en sus manos con mal genio a lo que Yam reacciona con gran molestia y de un segundo a otro la charola impacta sobre el pecho del varón escuchándose en toda la cafetería un par de risas y algunos "Uhh"

Nina se levanta divertida lista para seguir a su amiga, no sin antes tomar una fotografía a Waldorf quien tan solo hace una mueca de molestia. El de rulos sale por la segunda entrada en busca de un cambio de ropa mientras sus amigos continúan charlando burlescos.

—Eso le pasa por meterse con mi chica—Simón responde con naturalidad al mismo tiempo que lleva a su boca un bocadillo

—¿Tu que?—jazmín aclara su garganta envuelta en una risita—¿están juntos?

—Pff después de ese beso que nos dimos...ya lo creo—responde relamiéndose los labios—fue como hacer el amor en la cima del monte Everest, romántico y salvaje—Delfina hace una mueca de asco ante la descripción del varon

—Te envidio—la pelinegra golpea el pecho de su novio pues le es disgustante que apruebe las palabras de Simón—auch—responde con un puchero para después obtener un beso

—Deberías estar feliz, ahora que Yam y yo somos pareja podrás conocer a Stella, ya sabes mi suegra diseñadora de modas...—dejando sus palabras en el aire su amiga suelta un suspiro falso

—Te creeré hasta que la vea sentada justo aquí—delfi señala un lugar vacío a lado de jazmín para después continuar con una charla menos interesante

Del otro lado de la cafetería Ámbar mantiene sujetando su bandeja con gran presión puesto que el nudo en su garganta comienza a crecer al notar a Matteo compartir sitio con Emilia quien hace un juego de miradas con la de ojos azules y un pequeño puchero, pero no hay nada que pueda hacer pues Ámbar le hizo prometer que no charlarían hasta que estuviera lista.

Minutos después Ramiro vuelve con una nueva camiseta caminando justo al mismo tiempo en que ámbar decide dejar su desayuno de lado e ir a un aula para estar en privacidad es observada por Matteo quien continúa con el peor humor del mundo hartando a Emilia por completo. Ella se levanta y vuelve a la mesa con su hermano y el resto de chicos que apenas soporta.

—Ugh que día de mierda—de mala gana deja su móvil sobre la mesa a lo que jazmín aprovecha para tomarlo entre sus manos divertida—¿¡qué crees qué haces!?

—Veamos que cosas sucias tiene tu hermanita—el de rulos suelta un suspiro sabiendo que se avecina una pelea. La rubia trata de recuperarlo pero jazmín ya está sobre la mesa

—Devuélveme mi móvil perra—la pelirroja suelta una risita mirando su contenido—¿harás algo?—dirige su atención a Ramiro quien achica los ojos pensativo mientras Simón la mantiene sujetada por el brazo

—Dejare que pelees tus batallas hermanita...—niega divertido y ella carraspea

—Tienes el mejor hermano, Emi—benicio se mofa obteniendo un fuerte empujón por parte de Ramiro

—¿Jazmín? Dame el móvil antes de que arranque esa cabeza hueca con la que naciste—logra soltarse de Simón quien no para de reír ante su reacción. Por otro lado delfi es sujetada por lo hombros por benicio quien sonríe ante la escena

—Ya está, ya está...nada interesante. Debí suponerlo

Aula F3 | Edificio B
Francés, tercer clase

Tomando sus libros necesarios del casillero Matteo suspira escuchando un par de comentarios sobre el pero lo mejor que se le ocurre en ese momento es ignorarlos o al menos intentarlo. Colocando su combinación forma una línea con sus labios al toparse con una Ambar sin anteojos y accesorios de moda

—Ámbar querida, aunque la mona se vista de seda mona se queda—Benicio se burla con malicia y por supuesto el aula entera lo apoya con risitas dolorosas pero nada más humillante que Matteo no reaccionar en lo absoluto ante su cambio de look

—Señor Millen—el profesor carraspea—todos a su sitio, nada sobre el escritorio excepto bolígrafo y papel—un joven de piel blanca se hace presente—camine Waldorf, vamos

[...]

—¡Señorita Brown despierte! ¿Se la está pasando bien?—la castaña a lado de la ojos avellana levanta su pulgar mientras mantiene el rostro adormilado sobre el escritorio

—Muy bien—si amiga niega con la cabeza sabiendo por qué se ha desvelado casi toda la noche. Dos bancas atrás ámbar apenas y puede concentrarse pues compartir banca con Simón obligatoriamente no lo hace nada sencillo

—Estarás feliz, no sé ni en donde colocar mi nombre—el de rulos habla en un susurro mientras el profesor ronda del otro lado del aula—voy a reprobar por tu culpa y nunca tendré una carrera deportiva profesional

—Ugh ya cállate—harta de sus comentarios termina el examen para después desear no arrepentirse al colocar el nombre de Ramiro en su hoja y cuando el hombre de traje marrón se distrae cambia los exámenes

—¿qué haces?—entrecejo—Hey, Blue

—te ayudo—responde entre dientes colocando esta vez su nombre en el que se encuentra en blanco, el timbre está a dos minutos de sonar por lo que se levanta de su sitio

—¡Yamila!—grita en un susurro sosteniendo su muñeca pero ella se suelta obteniendo una mirada confusa por parte de Simón y otra de intriga por Delfi

—Señorita Blue ¿Que es esto?—interroga al observar la hoja en blanco—Esto es impropio de usted

—Lo siento profesor. No tuve tiempo de estudiar, lo lamento enserio—sin mirar atrás sale por la puerta dejando a un Ramiro pensativo ante lo que acaba de suceder quien sostiene la hoja entre sus manos observando todas las respuestas a la perfección

* * *

—¡Yam!—la rubia cierra los ojos con presión al escuchar su nombre y sabe que no tiene más remedio que enfrentarlo por lo que se gira con una sonrisa falsa—¿que sucede? Tuve que salir antes de terminar el examen para poder charlar, estas rara desde nuestra cita

—Lo se...—rasca su nuca con timidez

—¿Yy?—Millen levanta ambas cejas en alto esperando su respuesta a lo que ella baja los hombros

—No se quieres que diga Simón, nos la pasamos bien pero...—ligeramente muerde su labio inferior sin tener una pista de cómo explicar sus sentimientos—no lo se—replica frustrada—no se lo que sucede en mi cabeza y tú insistes e insistes cuando la verdad es que no se si te veo de la misma forma

—Claro que lo sabes, pero te da miedo admitirlo—ella niega—te propongo un trato: continuemos así sin presiones y ¿luego vemos no?—Yam provoca un sonido de duda a lo que él ignora por completo tomando su rostro entre las manos para plantar un beso demandante

—Dijiste sin presiones—coloca una mano sobre su pecho alejándolo de inmediato cosa que le provoca una risita pues Simón nunca sabe marcar sus límites

—Seguro—guiñando un ojo deja un último beso sobre su mejilla mientras Nina se acerca por fin cuando él ya ha doblado el pasillo

—¡Oh por Dios, oh por Dios, oh por Dios!—chilla tomando las manos de su amiga y dando pequeños saltitos sonríe en grande—esto se pone cada vez mejor. ¿Tú y Simón? ¡Wow!

—Nada de "wow" Nina—bufa caminando hacia su casillero mientras el timbre suena y todos los alumnos inundan los pasillos—no se que siento por Simón, a veces actúa lindo y otras veces me disgusta por completo

—Da igual

—No, no da igual—replica molesta a lo que Brown frunce el entrecejo—cuando sucedió lo de Cristian con mi hermana me dio igual y mira como terminó todo. Quiero hacer las cosas bien esta vez y me gustaría que estuvieras de mi lado

—Vale, vale—levanta las manos—perdona, me deje llevar—hace un puchero—te quiero y sin presiones lo tuyo con Simón, ya aclararás tus sentimientos solo date la oportunidad

—Ya...—suspira

[...]

Aula gimnástica | Edificio C
Entrenamiento de porristas

—Ya mostró su punto con el feto ¿podemos entrenar ahora?—harta de la pérdida de tiempo una castaña charla en voz baja mientras una tercera parte de las porristas ensayan en el centro—antes de que ocurra una tragedia

—Lunita no sabe admitir la derrota—la pelirroja gira la cabeza hacia la izquierda entrometiéndose en la plática

—Ali, Mindy. ¿¡Porque no utilizan los brazos!? ¡Hicimos ejercicios de resistencia para que esto no suceda!—la mujer rubia de la coleta alta levanta la voz desde el otro lado del aula puesto que la de ojos verdes se tambalea en la cima—¡Cinco, seis, siete, ocho, uno!—luna toma una pierna en lo alto siendo sujetada por su pierna derecha y dos chicas

—¿No sería genial si Mindy y Ali la dejaran caer?—delfi sonríe comentando un poco mientras jazmín mantiene un brazo apoyado en su hombro bajo aquel bonito conjunto de entrenamiento

—Lunita en el suelo—hace un puchero burlona—A menos que un alma noble salte y la atrape cuando esté cayendo—mira a su derecha encontrándose con Emilia—tú por ejemplo—entrecejo—te gusta mezclarte con los freaks

—Ya es suficiente—luna baja de la pirámide ante las palabras de la entrenadora—¡Delfina, Jazmín, Emilia. Fórmense!—llegando a sus sitios continúa—la Estrella debe ser perfecta, ustedes harán la apertura al juego de inicio de temporada para la liga deportiva de Manchester y el College debe dar la impresión de poder, músculos, perfección. Si no pueden darme eso, no participarán—suspiran sabiendo que los entrenamientos no son suficientes—Jazmín a la punta

—¿¡Que!?—delfi grita en un susurro indignada para sí misma pero no le queda de otra más que subirla en el aire con ayuda de Emilia

—Muy bien...—la pelirroja estira los brazos—siguiente posición, ¡Cinco, cuatro, tres dos...arriba!—creando la ilusión de una Estrella en la punta sonríe con superioridad pero la rubia siente sus venas arder de resentimiento por jazmin, lo cual Hemsley nota de inmediato

—Ni lo pienses—murmura pero Waldorf se relame los labios con malicia—¡Emilia no!

—¡AH!—jazmín cae en cuestión de segundos sobre Emilia y Delfina derribándose una contra otra. La pelinegra muerde su mejilla interna pues el hombro duele mientras la otra se encuentra en el suelo retorciéndose de dolor—¡Agh ! ¡Mi tobillo!

—¡Joder!—Emilia imita estar lastimada por lo que dos chicas la ayudan a levantarse y uniendo miradas con delfi esta niega con la cabeza molesta. De inmediato jazmín es llevada a enfermería y con un pronóstico para nada positivo

Cancha de Rugby | Edificio C
Entrenamientos extra curriculares

—Joder con la freak—un varón ahoga una risa—muéstrame de nuevo—con gusto el castaño lo hace cosa que obliga a Ramiro a poner ojos en blanco ante la fotografía de ámbar con maquillaje y una falda más corta que de costumbre

—¡Muchachos reúnanse!—dejando todo de lado hacen la típica formación dejando al entrenador a la vista—como ya saben la liga deportiva nos dejará hacer la apertura de la última temporada y solo aquellos que muestren fuerza, agilidad, resistencia pero sobre todo...talento tendrán la oportunidad de ser seleccionados como parte de la Gold-List para reclutadores deportivos de la Ivy League

—Es muestra oportunidad amigo—benicio da un golpe varonil al de rulos quien asiente con el estómago revuelto

—Seis de ustedes quedarán en la banca, lamentablemente. Hoy tendremos pruebas completas para decidir posiciones y al final habrá reelecciones para el Quarterback

—¿que?—sin evitarlo Ramiro se hace escuchar obteniendo todos los ojos sobre él pues durante 4 años seguidos nadie ha podido ocupar el lugar del mariscal de campo—entrenador, creí que--

—Uno de los requisitos para participar en la temporada es una media de 4,7 o 5,0 en las materias recurrentes—baja la vista hacia una carpeta de colores azules negando con la cabeza hacia lo que lee—y promediando con el año pasado no llegas a un tres Waldorf, no puedes participar

—No me joda—susurra para si mismo revolviendo los rulos ante el estrés—Significa que me recorrerá a tercera línea

—No estás entendiendo Waldorf—Simón frunce el entrecejo escuchando con atención—puedes continuar con los entrenamientos para no perder tu rendimiento pero...no jugarás hasta alcanzar la media

—¿¡No estaré el la apertura!?—inevitablemente Millen sonríe sabiendo que es su oportunidad para tomar el lugar que siempre ha querido. Por otro lado el entrenador suelta un suspiro—ni siquiera me pondrá en la banca...creí que teníamos un trato

—Escucha muchacho, eres mi mejor jugador de eso no tengo dudas y tienes talento pero—Ramiro parpadea perplejo—yo no manejo las reglas institucionales de la Ivy League; lo siento

—Shit man—benicio está asombrado—tu padre va a enloquecer cuando no te vea a la mitad del campo—sus miradas se encuentran por un momento sabiendo lo que sucederá

—¡Formación a línea uno!—el de ojos chocolates da una palmada varonil insinuando un "lo lamento" y corre hacia su posición para comenzar el entrenamiento

—Gracias amigo—mientras Simón sonríe en grande sus palabras le provocan un entrecejo—quiero decir que...mala suerte pero era tiempo que le dieras oportunidad a quienes también lo merecen

—¿que carajos dices?—dando un paso hacia él y con los puños cerrados pregunta sin titubeos a lo que Simón hecha un vistazo y suelta una risa irónica

—tranquilo Waldorf, no olvides quien te saca de todas las mierdas de tu padre—guiña un ojo caminando a sus espaldas para al momento de estar lo suficientemente lejos correr a su posición

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Esto se pone mejor...sean pacientes que la historia se desarrollará pronto 💙