-Muy bien, los últimos dos equipos- solicitó Iruka ya casi al final del día y efectivamente era el equipo de Tenji contra el equipo de Genmaru.
Los seis bajaron y fueron a esconder sus banderas en los extremos del campo, pero Ryu los guió a una de las esquinas

-Interesante- dijo Iruka- pongan atención, ¿ya vieron lo que están haciendo? Una esquina será un poco más facil de defender

Pero parece que no convencía a nadie ese plan, nadie ponía atención...como siempre...así que él se dedicó a observar a los últimos participantes de la prueba mientras terminaban de preparar todo.

-🀄-

Ryu había dicho que él se encaraba de la bandera y los mandó a posicionarse para el ataque, él iría por el centro para dejar un espacio libre en los laterales, pero las piernas le temblaban, estaba nervioso. Apretó los puños, preparándose para la instrucción del profesor y finalmente ésta fue dada

-¡Pueden comenzar!

Inmediatamente corrió hacia la mitad del campo, donde se encontró con los dos secuaces. Ya había pensado cómo los provocaría

-Vaya, por lo visto necesitan dos para un simple pedazo de tela. Creí que con su experiencia en robos sólo haría falta uno

-¿¡Qué dijiste, idiota!?

-Sólo la verdad, no es mi culpa que sean unos ladrones

No pudo evitar voltear ligeramente a la izquierda mientras hablaba,  solo para comrpobar que Tatsumi avanzaba entre la maleza según lo acordado, así que seguiría distrayéndolos.

-¡Tonto!

Uno de ellos le lanzó un golpe que esquivó por milímetros

"-Sólo un poco más"-se dijo

-¡Vamos! ¡Pelea!- lanzó otro más que también esquivó

-¿Qué pasa?- exclamó el otro- ¿no puedes pelear?

-¿O es que a caso tienes miedo, ah?

-¿Te comió la lengua el gato?

-¡Vamos! ¡Defiéndete!

Ambos lo atacaban con puñetazos y alguna que otra patada, sin embargo, él se limitaba a esquivar. Tenía que ganar tiempo y tenía la desventaja numérica, perdería si los enfrentara, aún si tenía un nivel de taijutsu un poco más alto que el de ellos

-🧧-

Mientras tanto, Tatsumi había llegado al otro extremo (era un área pequeña dentro del campo), encontrándose a Genmaru custodiando el objeto buscado, la bandera de color rojo que ondeaba levemente detrás de él

-¿Tú? La verdad esperaba a Hyuga

Sin contestar, inmediatamente se lanzó, no al ataque, si no por la bandera. Pero el rubio se dio cuenta y se interpuso para no dejarle paso, aunque volvió a intentarlo obtuvo el mismo resultado. Ambos sabían que si seguía tratando así probablemente no llegarían a nada ya que se encontraban solos, así que el rubio tuvo una fugaz idea que lo llevó a sacar de la tierra el palo de la bandera ante la atenta mirada de la niña

-Dijo que no tenían que tomarla, pero no dijo que no podíamos moverla- y se echó a correr en dirección contraria, hacia el centro, hacia Tenji, hacia Ryu, hacia su bandera

"-Muy astuto, hay que admitirlo"- pensó mientras lo perseguía

Iruka observaba con una sonrisa, un equipo había armado un buen plan con una buena ejecución y el otro había encontrado el vacío legal en las reglas impuestas que nadie más había encontrado. Sin duda la creatividad es una buena cualidad para un ninja.
Escribió algo en su cuaderno de anotaciones y volvió a mirar, el rubio estaba a punto de llegar a la mitad del campo

-¡Hyuga! ¡Va hacia tí!- avisó Tatsumi

-¿Eh?- pero cuando el castaño lo notó, la bandera roja ya estaba fuera de su alcance

-¡Déjenlo! ¡Síganme!- ordenó Genmaru a sus amigos, y ellos sin dudarlo ni un segundo lo obedecieron con sonrisas burlonas en sus rostros

Los cinco corrían hacia donde estaba Ryu, pero Ikari era demasiado rápido, apenas podían mantenerle el paso, ni siquiera su propio equipo, pero no importaba porque ellos se asegurarían de detener a los oponentes si fuera necesario

"-No veo a ese tonto ni a la bandera por ningún lado, se supone que ya deberíamos estar llegando al perímetro del campo...a menos..."

-¡No hay nada!

-¡Ustedes vayan a la izquierda, yo iré al otro lado!

-¡Sí!- ambos dieron vuelta hacia la izquierda, como lo había indicado su líder

"-¡Rayos!"- pensaron ambos castaños, siguiendo al rubio que tomó el camino correcto hacia Ryu y aún tratando de alcanzar si quiera a tocar una fibra de ese pedazo de tela rojo, sin conseguirlo. Ese tipo corría rápido, hasta que el tercer integrante apareció de la nada delante de él, entonces ambos le cerraron el paso también

-Ríndete. Ya no puedes hacer nada- declaró el pelinaranja

Los tres lo rodeaban, expectantes. Ninguno se movió, los cuatro sudaban, Genmaru intentaba encontrar una solución pero su equipo estaba del otro lado, lo tenían acorralado con su bandera en la mano y él ni siquiera había visto la de ellos...como si fuera poco estaban esperando que les diera ese hueco para poder quitarle el objetivo, tenía que hacer tiempo hasta que Taro y Tsuba se dieran cuenta de que la que habían tomado era la dirección equivocada y volvieran para apoyarlo

-Propongo una negociación- soltó sorprendiendo a todos

-¿Eh?

Iruka también estaba incluído en ese "todos"

-Si, una negociación. Les doy algo y ustedes me dan algo a cambio- explicó

-¡Sabemos lo que es!

-Ustedes preguntaron- se defendió- como sea, propongo un acuerdo

-¿Esperas que creamos eso?

-Pues...sí

-Serás cínico

-Soy muchas cosas, sólo díganme si la aceptan o no

-No- negaron rotundamente Tenji y Ryu

-Bueno, yo sólo les doy una opción, antes de...

-¡Genmaru!

Los otros dos habían llegado. Sonrió ante el efecto de su plan

-Parece que ya estamos parejos. ¡No dejen que se acerquen!- indicó a los otros dos, quienes  se fueron sobre Tenji y Tatsumi y aunque no eran muy buenos peleando eran muy, muy, insistentes.
Por el otro lado, Ryu era el que iba perdiendo contra el rubio. El taijutsu nunca fue su fuerte, y de Genmaru tampoco pero sus golpes eran fuertes gracias a tanta práctica de quitar almuerzos y meterse con otros, no e fue muy difícil derribarlo con un buen derechazo, dándose tiempo para reclamar la bandera azul

-Ésto terminó- declaró con aire victorioso y superior- Ganamos

-Jeje ¿Estás seguro?- preguntó Ryu, aún desde el piso, sin poder hablar bien debido al golpe-Fíjate bien

-¿Eh?- Se fijó inmediatamente. Lo que había sobre el palo no era una bandera, si no una sudadera de un color parecido- ¿Pero qué...?

Iruka miraba desde las gradas con una sonrisa, tenía alumnos prometedores, hacía años que no se emocionaba así con un duelo entre equipos de niños tan pequeños, no podía compararse con los exámenes chunin, pero estaba muy concentrado en lo que pasaría después

-¿¡Dónde está!?- exigió el rubio, enojado ante la sonrisa de Ryu

-Trata de averiguarlo- dijo ahora él con un poco de soberbia

...

-¡Iruka-sensei!- alguien jaló su chaleco - se están peleando

La niña señaló a dos de sus compañeros que estaban a punto de agarrarse a golpes

-¡Fue tu culpa!- gritó uno

-¡Claro que no!- defendió el otro

¿Por qué tenía que pasar justo ahora? Habían tenido todo el tiempo de las pruebas anteriores y apenas se les ocurría pelear

-¡Niños! ¡Paren!

-Pero sensei...

-Nada de peros

Eran su obligación, no podía dejar de lado su deber. Retomó la situación como normalmente haría, regañándolos, haciéndoles entrar en razón...

-🗡️-

-¡Idiota! Dime dónde está

-¿O si no qué?- preguntó Ryu, aún sintiéndose poderoso por haber engañado al bravucón de la clase, pero para su sorpresa éste saco de entre sus ropas un kunai. Primero pensó que era de juguete, alguno de esos de plástico barato y mal cortados que siempre había querido tener, pero no, el plástico no refleja la luz de la manera en que ese lo hizo

-¿Gen...? ¿De dónde lo sacaste?- preguntó uno de sus amigos

-Me lo encontré cuando veníamos- le dijo, sólo para intimidar- Dime dónde está.

Ante el silencio de Ryu, que más que anda era por miedo, se acercó a Tenji y le apuntó con el arma bastante cerca y directo al cuello. No para lanzarlo, si no para apuñalar.
Era tanta la probabilidad de que sí o hiciera, que el castaño no podía moverse por el miedo, le temblaban las piernas y comenzaba a respirar difícilmente, cosa que los amigos del rubio aprovecharon para inmovilizarlo y comenzar a golpearlo sin que pudiera defenderse. ¿Por qué? Para desquitarse de lo que les había dicho antes

-¿Qué hacen? ¡Déjenlo!- pidió Ryu, pero fue ignorado y ahora Genmaru se giró hacia Tatsumi y también le apuntó con el arma

Sus piernas ya no tenían fuerza, tuvo que apoyarse en un árbol que tenía detrás mientras en su mente se repetía una escena en particular. Sus padres siendo apuñalados una y otra vez con un kunai. Sus pupilas se contrajeron, las lágrimas comenzaron a caer por su rostro, su respiración era agitada y sus piernas ya no soportaron más su peso, cayó sentada frente al rubio, quien empezó a girar el arma en su dedo.

-Oye ¿qué vas a hacer?- le preguntaron los compañeros, esta vez asustados también

-Ustedes sigan con él. No me detendré hasta que me de la bandera

De repente el kunai se salió de sus manos, clavándose en el árbol, a unos milímetros de la castaña, dejando únicamente un rastro de sangre procedente de un pequeño rasguño que había alcanzado a hacerle.

-¡Te la daré! ¡Te la daré! ¡Detente!- exclamó Ryu con lágrimas cayendo por su rostro también. Se levantó la playera, dejando ver que la verdadera bandera estaba enrollada al rededor de su torso

Genmaru se quedó pasmado unos minutos que parecieron segundos, no quería lastimar a nadie. Sólo quería intimidar, pero realmente no quería que nada grave le pasara a nadie. No estaba pensando cuando lo hizo, no estaba...
Su respiración comenzó a acelerarse también, pero antes de que sus piernas terminaran de hacerse pesadas, una nube blanca apareció frente a ellos, revelando a su sensei

-Ustedes cuatro. Al salón. Ahora- Iruka estaba realmente serio, muy enojado

-¿Cua...tro?

Ahora se daban cuenta, los compañeros de Genmaru ya no estaban. Ellos habían llamado a Iruka-sensei cuando supieron que no podrían manejarlo entre los seis

-Sí. Los cuatro

Genmaru hizo el esfuerzo para caminar aún sin sentir las piernas, sin decir nada. Los otros tres no se podían ni mover, uno por los golpes y los otros dos por el shock

-¡Sensei!- Ryu estaba abrazando su pierna mientras lloraba

El adulto sólo lo abrazó

-Todo estará bien- revolvió su cabello y el niño secó sus lágrimas entre sollozos. El hombre se acercó a Tatsumi y le puso la mano en el hombro- ¿Estas bien?

No obtuvo respuesta, tenía la mirada perdida. Él comprendió el por qué y se limitó a abrazarla, haciendo que reaccionara.
Lloraba en silencio, así que limpió sus lágrimas y se puso de pie como pudo

Y finalmente se acercó a Tenji, que estaba tendido en el suelo. No se veía muy golpeado, pero considerando sus edades si le habían dado una buena paliza. Le ayudó a levantarse y e dejó apoyarse en él, igual que a los otros dos

-...Au...

-Vayamos al salón...