Una fuerte mirada se posaba en los acusados, aunque ambos podían sentir como una mirada de furia los recorría mientras caminaban, era claro a quien iba dirigida.

T/N, al sentir curiosidad se volteo un instante para averiguar de quién era tal mirada, encontrándose con Dib algo rojo de furia, que miraba atentamente a su acompañante como si lo fuera a matar con la mirada.

Zim, por su parte, solo se dedicó a caminar, no dijo ninguna palabra, no artículo algún sonido, solo dio pasos con rapidez para salir del salón antes de que alguna mirada le atravesase el alma, parecía estar enojado, pero más que todo, tenía un aire de miedo en su cara.

Al salir del aula de clases, un gran suspiro salió del de tez verde, que sin dudarlo volteo a mirar amenazante a su compañera, cuando ya se encontraban algo lejos del salón.

— ¿Eres tú, verdad? — menciono en voz baja, con algo de frustración en sus palabras.

— Eh, ¿Dijiste algo? — pregunto atentamente, parecía que otra vez pregunto algo que no debía, la cara de su compañero se llenó de un terror que no le permitía verla a los ojos, observó como este bajo la mirada arrepentido, mientras su respiración cada vez se hacía más agitada.

— Eres la “nueva de los Membrana”, No... Yo, lo siento, por gritarte. — fue lo último que pronunció antes de seguir con su camino.

Ambos, caminaban en silencio, hacía la oficina del director, los pasillos se encontraban en completo silencio y lo único que se oía era el caminar de los mencionados.

Este día había estado de mal en peor, parecía que todo lo que decía causaba problemas a los demás, ahora Dib y Gaz están molestos que con ella, la maestra demostraba que no le había agradado para nada, y en su primer día, ya había hecho mandar a uno de sus compañeros a cordinación, sobretodo porque este parecía terriblemente incómodo a su lado.

— Este, oye...  ¿Te encuentras bien?

— Ah, sii, claro que sí, ¿Por qué lo preguntas? — respondió alegre de tener una conversación buena en todo el día, pero se arrepintió de lo dicho cuando vio que el otro ni siquiera volteaba a mírarla.

— Pareces algo triste, si fue por culpa mía, yo- — se cortó al notar las estupideces que decía, ¿como podía acobardarse de una insignificante humana como ella? Hace, solo un tiempo era uno de los más hábiles Irkens.

Todos en la armada lo admiraban, incluso los más altos parecían tenerlo en consideración. Pero luego de haberlo mandado ha este insignificante planeta, se dió cuenta de que las cosas no eran como el pensaba.

¿Por qué le harían algo así? No tenia sentido, al llegar estaba tan confiado de que invadir este planeta sería el inicio de su gran victoria, pero sigue aquí.

Para su mala suerte, el sigue aquí, y nadie vendrá a rescatarlo...

— No, no es tu culpa, que nos mandaran a cordinación fue todo mi culpa, no te preocupes — trato de alegrar, cortando cualquier otro pensamiento deprimente por parte del Alien — es solo que, ahora estaré en problemas con el Dr. Membrana-

— ¿E-el Dr. Membrana? — trago en seco al escuchar tal nombre, ¿La humana estaría en problemas con el? El sentimiento de culpa lo invadía y sentía que debía de hacer algo — Ven, sígueme.

Sin esperar respuesta se encamino hacia la salida del colegio, ignorando cualquier otra pregunta de la contraria, que le pedía explicación de lo que se refería.

— Oye, ¿hacia donde vas? la maestra dijo que teníamos que ir a coordinación —  dijo la chica al ver cómo este había salido del colegio, y por alguna razón ella lo seguía, la verdad no sabia donde quedaba la oficina, y no tenía ganas de averiguarlo.

— Vamos, debemos escapar antes de que alguien nos encuentre — respondió el, con alta determinación parando justo en la entrada — ¿Vendrás conmigo o prefieres recibir el castigo?

— ¿Castigo? ¿De que estás hablando? No podemos irnos sin autorización, además no se donde queda coordinación... Si nos vamos ahora nos meteremos en más problemas, no creo que sepas realmente lo que haces — dijo la chica algo intranquila, por su tiempo con ella, y su forma tan buena de actuar, pudo suponer que está humana, no era peligrosa.

— Como te atreves a suponer algo así  —  contesto el alien ya ganando confianza, ella le fastidiaba, pero en cierta razón aun no tenía intención de no ayudarla —  todo fue mi plan para... para emmm ha! para salir de esa horrenda prisión de “niños humanos”.

— ¿Y... Por qué querías salir? además aun no respondiste mi duda, ¿Por qué Dib te trata así..? 

//

Mientras ambos caminaban en rumbo a la casa de Zim, sin que la chica se diera cuenta, el le conto todas sus mentiras, que a la interpretación de T/N eso parecía tener sentido.

— Espérame, déjame ver si entendí —  dijo la chica con el seño levemente fruncido — ¿eres alérgico a la carne y al agua?...  ¿Tu piel es verde por una enfermedad? ¿Y por eso tampoco tienes orejas?

El alíen lo pensó un momento, la verdad no sé sorprendería de que cualquier insignificante humano diera por desapercibido su apariencia, sin embargo nunca pensó que una humana llegara de la nada a hablarle, y después mostrara cierta curiosidad por el de piel verde.

— Así como lo escuchaste curiosa huma- niña, niña. —  se corrigió al instante y la miró de reojo — me pregunto porque has decidió estudiar aquí... Llevo bastantes años en ese asqueroso colegio- realmente tenías otras opciones. — dijo haciendo una pequeña mueca de disgusto y siguió con su camino.

— Eres bastante raro... Me agradas — dijo la chica con una sonrisa que el alíen no pudo ignorar, ella era... Interesante.

Zim no respondió mas, simplemente dio una pequeña sonrisa invisible a la vista de cualquiera, pero no para el pequeño robot que se encontraba abriendo la puerta de lo que parecía ser una casa.

— ¿Quién es ella? y ¿Por qué sonríes? — dijo un pequeño robot apuntando primero a la chica y luego al de verde con una mirada acusadora, parecía algo asustado de verla. 

— Ella, Gir es T/N; una “compañera” de la escuela.

— ¡La escuela¡ —  le respondió el robot con terror y salió corriendo a quien sabe donde, mientras la humana confundida pregunto:

—  ¿Espera un momento, ese era un robot, y esta es tu casa? — a lo que Zim asintió  —  pero ¿como fue que llegamos a tu casa! —  grito la chica viendo hacia todos lados, ¿como el tiempo paso tan rápido?

— Bueno, joven T/N, es claro que por tu nada avanzado sistema de pensar, debo suponer que no estas consciente del gran peligro que corres. Para tu fortuna, yo, el gran Zim, he decidido ayudarte en tu escape. — Hablo con ironía rodando los ojos.

Pero la chica no lo estaba escuchando, el miedo se interno en ella; primero la llevan a dirección y envés de obedecer y no causar mas problemas se escapa de la escuela con un chico que apenas conoció, era un desastre y para colmo de la pobre chica, empezaron a caer pequeñas gotas de lluvia, Zim al sentir una en su frente entro en la casa desesperado y al voltear y ver que la chica solo miraba arriba mientras empezaba a caer mas lluvia, la tomo de la mano y la jalo hasta su casa.

— Ay no, ¿Que hago? Yo, podría quedarme en tu casa mientras pasa la lluvia —  dijo ella en desesperación y claramente el alíen no se podía negar ¿o si?

—  si...

...

Capitulo 5

¿Que tiene el Zim que anda con cara de traumado todo el tiempo?

¿Que clase de castigos da el Dr. Membrana? Jhs-

¿Cómo es posible que la
T/N sea tan tonta como para pedir quedarse en la casa de un desconocido?

No hagan eso chicos kjjsjsjak

Este capitulo para mí no tenía sentido cuando lo subí, pero reescribir todo el cap era algo tedioso

Al menos, espero haber arreglado algunas partes estúpidas que ni recuerdo por qué las escribí así ksjsj

Pero bueno

Nos vemos en el siguiente cap