Darcy se encontraba dando vueltas por la sala, un tanto inquieta, estaba de brazos cruzados y una expresión pensativa adornaba su rostro.

-Se están demorando demasiado.-Susurró molesta.

Se acercó a una de las ventanas, corrió la cortina y miró el jardín delantero de su casa tratando de divisar a sus amigos, aún no llegaban.

Darcy suspiró, cerró la cortina, sacó su IPhone del bolsillo de su jean y entró en el grupo de WhatsApp "The Amazings", arqueó una ceja al notar que Luke, Evan y Alison le habían clavado el visto en su último mensaje.

-¿Darcy?-La llamó su madre.

Hacía un rato que los padres de Darcy habían llegado del trabajo, sin embargo Darcy aún no les había contado lo sucedido más temprano, seguía firme en su postura de no poner al tanto a sus padres de la situación.

No quería que supieran que Harry Styles, Louis Tomlinson, Niall Horan, Liam Payne y Zayn Malik habían estado en la casa, mucho menos quería informarles que los cantantes de One Direction estaban en Manhattan porque Harry Styles quería hablar exclusivamente con ella.

Los nervios impulsaban a Darcy a mantenerse callada, no quería rememorar lo ocurrido, pensaba estúpidamente que si no hablaba del tema equivalía a que no había sucedido pero lo cierto era que si había sucedido y Darcy no podía autoengañarse.

-¿Darcy?-La volvió a llamar su madre saliendo de la cocina, la señora Hastings tenía un cucharón de madera manchado de salsa en su mano y un delantal puesto.-Ya casi está la comida.-Anunció con una sonrisa.-¿Terminaste de poner la mesa?

Darcy volteó a mirarla y esbozó una sonrisa de disculpa.

-No, ni siquiera saqué el mantel del cajón.-Avisó guardando su celular.

Su madre arqueó una ceja.

-¿Y qué estás esperando?-Preguntó soltando una risita.-Dale, apúrate que ya van a salir los ravioles.

-Okay.-Dijo Darcy y se encaminó a la cocina, abrió uno de los cajones, sacó el mantel y regresó a la sala.-Papá se está demorando.-Comentó mientras extendía el mantel en la mesa.

Hacía 20 minutos que su padre se había ido a un kiosko que quedaba a la vuelta de la casa para comprar bebidas y aún no regresaba, a Darcy le parecía extraño ya que el kiosco estaba cerca ¿qué tanto podía demorarse? inmediatamente supuso que el local debía estar repleto de gente.

-Aunque ahora que lo pienso... seguramente hay mucha gente por eso no llega.-Opinó mientras doblaba servilletas y las acomodaba en la mesa.

-Si, seguro que...-Empezó a decir su madre pero se quedó callada al escuchar el timbre.

Darcy no pudo evitar sentir un vuelco en el estómago, el sonido del timbre la transportó instantáneamente al momento en el que abrió la puerta principal de su casa encontrándose con los integrantes de One Direction y por primera vez con Harry Styles.

Unos repentinos y poderosos nervios invadieron a Darcy, rememorar la situación que había vivido hacía un par de horas provocaba que se sintiera de esa manera por lo que intentó apartar aquellos recuerdos.

No quería recordar la discusión que había tenido con Harry, no quería pensar en las palabras tan fuertes y shockeantes que le había dicho el cantante de One Direction.

De hecho no quería volver a verlo, esperaba que Harry no se atreviera a buscarla nuevamente, el timbre volvió a sonar sacando a Darcy de su trance.

-¿No vas a atender hija?-Preguntó su madre desde la cocina, había ido a controlar la salsa.

Darcy tragó saliva, miró la puerta de entrada con cierto temor durante unos segundos, negó con la cabeza y caminó hasta detenerse en el umbral de la puerta de la cocina.

-Es que estoy... ¿ocupada?-Se justificó en tono no muy convincente mientras se recostaba en el marco de la puerta de brazos cruzados, su madre volteó a verla con una ceja arqueada.-Si, si, estoy ocupada, eh... poniendo la mesa, eso.-Afirmó.-¿Puedes atender tú mamá?-Pidió al tiempo que juntaba sus manos en una señal de ruego y hacía un puchero, tirándose un lance para no ir.

Darcy estaba prácticamente segura que no era Harry quien había tocado el timbre, probablemente se trataba de Luke, Alison y Evan o quizás era su padre que regresaba con las bebidas.

La cuestión era que fuera quien fuera Darcy no quería correr el riesgo de ir a abrir la puerta ya que no quería reencontrarse con Harry Styles.

-No puedo Darcy, estoy cocinando.-Respondió su madre mientras mezclaba la salsa de una cacerola con la cuchara de madera.-A menos que tú mezcles la salsa.-Sugirió en tono amable y subió el fuego de la hornalla lo que provocó que la salsa empezara a burbujear.

Darcy miró la salsa con aprehensión.

-No.-Negó de inmediato, un poco asustada.-¿Viste como está burbujeando esa salsa? me va a salpicar, no quiero quemarme.-Dijo frunciendo el ceño.

Su madre se dio vuelta para mirarla y se apoyó una mano en la cadera.

-En ese caso ve a abrir la puerta.-Ordenó en tono determinante.-No puedo hacer ambas cosas Darcy.

-No pero puedes apagar la salsa para ir a atender.-Retrucó inteligentemente Darcy mientras sonreía, sin embargo la mirada que le lanzó su madre causó que su sonrisa se borrara.-Okay, voy yo.-Murmuró resignada y salió de la cocina.

Darcy se detuvo en la sala, tragó saliva y se armó de valor para ir a atender el timbre, lamentablemente no disponía de otra alternativa, atravesó la sala y se quedó de pie delante de la puerta principal, mirando el color de la madera como si tuviera algo interesante.

-Bien, aquí vamos.-Musitó para sí misma con la intención de darse ánimos.

Se secó la transpiración de sus manos en el jean y con mucha cautela empezó a extender el brazo para agarrar el picaporte, justo en ese momento el timbre volvió a sonar y esta vez de manera insistente lo que provocó que Darcy se alterara, como acto reflejo agarró la manija y abrió velozmente la puerta.

-Gracias hija.-Le agradeció su padre adoptivo con una sonrisa, al ver la expresión en el rostro de Darcy se preocupó.-¿Estás bien?-Preguntó con una ceja arqueada.

Darcy dejó escapar una risa histérica, el señor Hastings notó que se estaba comportando de manera extraña.

-Pff... claro que si, mejor imposible.-Respondió Darcy con ironía mientras se rascaba la nuca con una mano.

El señor Hastings tenía pensado decir algo pero la señora Hastings se le adelantó.

-¿Y?-Preguntó mientras aparecía en el hall de entrada y se detenía al lado de Darcy.-¿Por qué te demoraste tanto?-Inquirió mirando a su marido con confusión.

Darcy suspiró sintiéndose aliviada por el cambio de tema, echó un rápido vistazo a la calle comprobando que sus amigos aún no aparecían, frunció el ceño y se metió ofuscada dentro de la casa.

-Pon los vasos Darcy, por favor.-Pidió su madre adoptiva entrando después del señor Hastings y cerrando la puerta.-Yo ya dejé los platos servidos en la mesa.-Añadió.

Darcy asintió y se dirigió a la cocina, sacó una bandeja y la colocó arriba del mármol, luego sacó dos vasos de vidrio limpios del escurridor y se dispuso a ponerlos arriba de la bandeja sin embargo no alcanzó a hacerlo debido a que las siguientes palabras que escuchó que pronunciaban sus padres desde la sala la dejaron helada.

-No sé que es lo que está pasando pero el barrio es un descontrol.-Comentó el señor Hastings al tiempo que soltaba un suspiro y dejaba las botellas con Coca-Cola arriba de la mesa.-No te das una idea de la cantidad de adolescentes que había en el kiosco, todos hablaban de lo mismo, parece que unos famosos llegaron a Manhattan, son de una banda que se llama... no me acuerdo... One Republic creo que era.-Dijo no tan convencido.

-One Direction.-Lo corrigió su mujer con cariño.-Darcy, Luke, Alison y Evan son fanáticos de esa banda, son Directioners.

-Cierto, que tonto soy.-Se regañó el señor Hastings llevándose una mano a la frente.

-¿En serio me estás diciendo que los integrantes de One Direction están en Manhattan?-Preguntó la señora Hastings sin poder creerlo, su marido asintió.-Darcy se va a poner muy contenta cuando se entere.-Agregó emocionada.

Los padres adoptivos de Darcy no tenían la menor idea que su hija ya lo sabía y no estaba precisamente contenta, Darcy sintió como su corazón se aceleraba debido a la impresión de saber que sus padres ya estaban, en parte, al tanto de lo que estaba sucediendo.

Involuntariamente aflojó el agarre que mantenía sobre los vasos causando que éstos resbalaran entre sus dedos y fueran a parar al suelo, rompiéndose en mil pedazos.

El alboroto llamó la atención de sus padres quienes aparecieron rápidamente en la cocina, preocupados.

-¿Todo bien Darcy?-Preguntaron ambos al unísono.

Darcy levantó la mirada de los trozos de vidrio que estaban esparcidos en las baldosas y esbozó un intento de sonrisa.

-Si, lo siento, se me resbalaron los vasos, mala mía.-Se excusó rascándose la nuca con una mano.-Pero no se preocupen, no me lastimé, ahora barro.-Dijo yéndose al lavadero para buscar la escoba.

Sus padres se miraron entre ellos.

-La noto rara.-Susurró la señora Hastings para que sólo su marido la oyera.

-Igual yo.-Musitó el señor Hastings estando de acuerdo con ella.

El timbre volvió a sonar, Darcy regresó corriendo a la cocina y se detuvo delante de sus padres, sujetaba la escoba con sus manos, su mirada denotaba lo nerviosa que estaba.

-Mamá ¿puedes atender?-Pidió ansiosa.-Yo voy a limpiar el desastre que causé.-Añadió y empezó a barrer los vidrios.

-Claro.-Accedió su madre y le lanzó una significativa mirada a su marido.-Acompáñame.-Susurró en voz muy baja.

El señor Hastings asintió y la siguió, una vez que ambos estuvieron en la sala, la señora Hastings se animó a hablar.

-No son suposiciones nuestras, Darcy está rara, algo le pasa.-Aseguró preocupada.

-Concuerdo, está como... alterada, nerviosa, ansiosa.-Empezó a enumerar el señor Hastings.

-Exacto, pero ayer estaba bien, no lo entiendo... estoy desconcertada.-La señora Hastings suspiró y se quedó pensativa unos momentos.-La empecé a notar así hoy al mediodía, cuando llegué del trabajo.-Comentó deteniéndose delante de la puerta principal.

-Ya vamos a averiguar que le pasa.-Le dijo el señor Hastings para tranquilizarla.

Su mujer asintió, agarró la manija de la puerta y la abrió, Luke, Evan y Alison estaban en el hall de entrada, susurrando algo pero cuando escucharon como la puerta se abría se callaron.

-Hola, que bueno que estén aquí, Darcy los estaba esperando.-Los saludó la señora Hastings con una sonrisa.

-Hola chicos.-Los saludó el señor Hastings, también sonriente.

Los chicos sintieron cierta impresión al ver a los padres adoptivos de Darcy y la causa era que ya sabían que ellos no eran sus padres biológicos.

No podían evitar preguntarse el por qué le habían ocultado la verdad a su mejor amiga, no entendían el motivo por el cual nunca le habían dicho que era adoptada, lo único que sabían era que los padres adoptivos de Darcy no habían tomado la mejor decisión al mentirle por dos motivos.

El primero era que mentir estaba mal, no era lo correcto y no llevaba a nada y el segundo que, gracias a esa mentira, a Darcy le iba a costar mucho aceptar su verdadera identidad cuando Harry hablara con ella porque nunca se imaginó ser adoptada.

-¿Todo bien?-Preguntó la señora Hastings al notarlos muy callados.

Luke, Evan y Alison salieron de su trance.

-Todo perfecto.-Mintió Evan esbozando una falsa sonrisa.

-Eso.-Lo secundó Alison asintiendo frenéticamente.

-Ajá.-Musitó Luke escondiendo los brazos detrás de su espalda y sonriendo falsamente.

-Me alegro mucho.-Dijo la señora Hastings sin darse cuenta de absolutamente nada y volteó para mirar dentro de la casa.-¡Darcy! ¡son tus amigos!-Le avisó a gritos para que escuchara.

Con algo de torpeza, Darcy dejó la pala con los vidrios rotos que había recolectado y la escoba en el lavadero, luego corrió hacia el hall de entrada y se abalanzó sobre Luke, Evan y Alison para que la abrazaran, los chicos la recibieron un tanto impactados y la envolvieron en un abrazo grupal.

-Que bueno que estén aquí.-Se descargó Darcy en voz muy baja para que sólo sus mejores amigos pudieran escucharla.

Luke, Evan y Alison estaban preocupados por Darcy, rara vez se quebraba de esa manera, pasados unos segundos Darcy se sintió un poco mejor por lo que se apartó de sus amigos y sonrió.

Los chicos sintieron un escalofrío ya que no pasaron desapercibido el hecho de que Darcy había heredado la sonrisa de Harry, a ella también se le marcaban hoyuelos en las mejillas, ahora que sabían la verdad no pudieron evitar analizarla de pies a cabeza comprobando que efectivamente Darcy era la hija de Harry, tenía demasiados rasgos similares al cantante.

Un ejemplo además de la sonrisa era el color verde de los ojos, exactamente del mismo tono que los de Harry y el pelo castaño, también de Harry.

Los chicos pensaron que probablemente Darcy se parecía también a su madre, ellos no la conocían como para compararlos aunque aseguraban que el pelo lacio lo había heredado de Emily, podían intuirlo.

Se sorprendieron al caer en la cuenta de que Darcy no sólo poseía rasgos físicos de Harry sino también genes musicales que obviamente los había heredado de él, ahora comprendían la razón por la cual Darcy cantaba tan bien y con tanta facilidad, además no sólo cantaba sino que también tocaba la guitarra.

Al igual que Harry, era claro que Darcy había heredado el talento de su padre biológico.

-¿Quieren quedarse a comer?-Preguntó la señora Hastings sacando de sus pensamientos a los mejores amigos de su hija.-Preparé muchos ravioles.

Los chicos estaban por negarse de manera educada pero Darcy se les adelantó.

-Vamos a salir a comer mamá pero gracias por la oferta.-Comunicó con un intento de sonrisa.

-Oh, bueno está bien, diviértanse.-Dijo la señora Hastings.

-Pásala bien hija.-Pidió el señor Hastings.

Luke, Evan y Alison no pudieron evitar arquear una ceja al escuchar como el padre adoptivo de Darcy la llamaba "hija", sintieron cierta molestia, les pareció que su comentario había sonado hipócrita.

Estuvieron tentados de encararlo, querían explicaciones y las querían en ese preciso momento, ansiaban y exigían saber el motivo por el cual le habían ocultado a Darcy la verdad.

A ellos no les parecía que estuviera mal que hubieran adoptado a Darcy sino que les parecía mal que le mintieran durante tantos años, en su opinión deberían haberle dicho la verdad desde un principio, su mejor amiga no se merecía que le mintieran de esa manera.

Otra vez pensaron que los padres adoptivos de Darcy no habían tomado la decisión correcta al mentir ya que si hubieran dicho la verdad, a Darcy se le haría más fácil enterarse que Harry era su padre ya que sabría con antelación que era adoptada y que existía la posibilidad de que su verdadero padre se presentase pero eso ya no podía suceder.

El problema actual era que Darcy no estaba enterada que era adoptada por lo que se le haría más difícil asimilar que era la hija de Harry Styles.

-¿Están bien?-Les preguntó Darcy a sus amigos mirándolos con extrañeza.-Tienen la mirada perdida ¿qué tanto piensan?

-Nada.-Respondieron Luke, Evan y Alison al unísono, poniéndose a la defensiva.

Darcy frunció el ceño, le pareció que los chicos se comportaban de manera sospechosa pero finalmente decidió no ser tan paranoica.

-Okay.-Dijo encogiéndose de hombros.-Ya vengo, voy a buscar las llaves del auto.-Anunció y se metió dentro de la casa.