Capítulo 52: Fiesta de Despedida
Estaba amaneciendo en Minnesota, ése era uno de los últimos días que Kendall, Carlos, Logan y Katie vivían allí ya que en breve se mudarían a Los Ángeles, habían sacado boletos de avión para el día siguiente.
Kendall había tenido la idea de organizar una fiesta de despedida en su casa, para su suerte, su madre le había dado permiso, con la condición de que sea algo familiar y pequeño, por lo que en ese momento Adam, James, Kendall, Carlos y Logan se estaban por ir a comprar bebidas alcohólicas para la noche.
Iba a ser una fiesta en el jardín trasero de la casa, en la pileta, con música, luces bolicheras, alcohol, espuma y demás.
Carlos: ¡pido adelante!
Gritó Carlos, él, sus tres mejores amigos y Adam estaban caminando hacia el lujoso auto del mentor de The Voice, James miró a Carlos con una ceja arqueada ¿y esa confianza? era el auto de su padre por lo tanto a él le correspondía ir adelante.
Carlos: ¡iuju! no dijiste que no James así que yo voy a ir adelante.
Celebró Carlos haciendo unos improvisados pasos de baile en el pasto, todos rieron, James negó con la cabeza, divertido, pensó "okay, por esta vez puedo dejar que Carlos vaya adelante", Adam soltó una risita y le apoyó una mano en el hombro a James.
Adam: no, mi hijo va a ir adelante.
Aseguró mirando a James y luego a Carlos, James rodó los ojos y se apartó de Adam.
James: nah, no jodás Adam, puede ir otro adelante que no sea yo.
Adam arqueó una ceja, James lo miró con confusión ¿ahora qué le había molestado? porque conocía perfectamente a Adam y sabía que algo de lo que había dicho no le había agradado, se notaba por la expresión de su rostro.
James: ¿por qué tenés esa cara de mierda? ¿qué te molesta ahora?
Preguntó irrespetuosamente, Adam se cruzó de brazos y lo miró mal, Kendall, Carlos y Logan se miraron entre ellos y silbaron, James no se inmutó por la molestia de Adam, estaba acostumbrado a faltarle el respeto, pensó "okay, quizás no debí decirle que tiene cara de mierda, me pasé un poquito pero bue".
Adam: ¿me estás cargando? me molesta tu modo de hablar y tu falta de respeto.
Contestó Adam como si fuera obvio, James arqueó una ceja y se cruzó de brazos.
James: ¿ah sí? explícate mejor amigo.
Adam elevó ambas cejas, no podía creerlo.
Adam: ¿amigo?
Preguntó y soltó una risita incrédula, James se rascó la nuca.
James: hum...
Adam dio un paso hacia él, James lo miró rápidamente.
Adam: okay, me voy a explicar mejor, no me gusta que digás tantas malas palabras ni que me faltés el respeto, no podés decirme "no jodás" mucho menos que tengo una cara de mierda, tampoco amigo...
James: sacate la gorra, no seás ortiva.
Pidió James volviendo a faltarle el respeto a Adam, sus amigos se alarmaron.
Kendall: James... basta ya.
Pidió Kendall con una mirada seria, Carlos y Logan asintieron.
Carlos: si, basta ya.
Dijo Carlos cruzándose de brazos.
Logan: aprendé a quedarte callado.
Le aconsejó Logan con tono de reproche, James rodó los ojos, Adam lo miraba con mucha seriedad, luego miró a Carlos.
Adam: podés subir adelante Carlos.
Le avisó dejando un poco confundido a Carlos, luego miró a James con seriedad.
Adam: James no va a venir con nosotros.
Avisó dejando a los mejores amigos de su hijo callados, sin saber que hacer ni decir ante esa incómoda situación, James abrió la boca, indignado.
James: ¡¿qué?! ¡no! ¡yo quiero ir a comprar!
Protestó haciendo berrinche, Adam negó y esbozó una sonrisa de suficiencia.
Adam: no, estás de penitencia por faltarme el respeto.
Dijo impasible, James dio un pisotón en el pasto, enojado, luego señaló a Adam.
James: ¡dejá de ponerme penitencias Adam! ¡tengo 18 años! ¡no soy un pendejo!
Adam apoyó ambas manos en su cintura y puso una expresión seria.
Adam: dejá de gritarme.
Sentenció empezando a perder la paciencia, James frunció el ceño y volvió a dar un pisotón en el pasto, Adam bufó.
Adam: y dejá de hacer esos berrinches, no te quiero ver hacer papelones, estás grande ya.
Ordenó con un tono más serio que antes, James lo miró desafiante.
James: dejá de darme órdenes.
Kendall, Carlos y Logan trataron de apaciguar la situación.
Kendall: dejalo venir Adam.
Le pidió Kendall al mentor de The Voice con una sonrisa mientras le apoyaba una mano en el hombro.
Logan: si, que James venga, ya no te va a faltar el respeto.
Aseguró Logan con los brazos detrás de la espalda.
Carlos: eso, ya no lo va a hacer, además...
Carlos se encogió de hombros y añadió.
Carlos: queremos que James venga con nosotros, es nuestro mejor amigo y este es nuestro último día en Minnesota ya que mañana nos vamos temprano, queremos que nos acompañe a comprar las cosas para la fiesta.
Kendall: si.
Logan: eso.
Dijeron Kendall y Logan rápidamente, estaba contentos porque Carlos había dado un buen argumento, Adam suspiró.
Adam: okay, voy a ser más flexible y le voy a levantar la penitencia a James sólo porque este es su último día en Minnesota chicos.
Aún así James seguía indignado.
James: ojalá fueras flexible más seguido y no tan autoritario todo el tiempo.
Adam lo miró con una ceja arqueada, Kendall le pegó un codazo a James en el brazo en señal de advertencia, indicándole que debía callarse, James frunció el ceño, molesto y se sobó el brazo, sin embargo no dijo nada.
Carlos: bueno, vamos al auto.
Dijo Carlos para cortar la tensión que había en el ambiente, luego le palmeó la espalda a James.
Carlos: te dejaré ir adelante James.
James miró sorprendido a Carlos por su generosidad, luego le dirigió una mala mirada a Adam y volvió a mirar a Carlos.
James: nah, gracias, prefiero sentarme atrás con Kendall y Logan.
Comentó encogiéndose de hombros, Adam se dio cuenta que James estaba molesto con él, por eso quería sentarse atrás en lugar de ir en el asiento de adelante a su lado así que decidió hacerle la contra ya que él también estaba enojado.
Adam: no, vos te sentás adelante, a mi lado y punto.
Le avisó a su hijo sujetándolo del brazo, antes de que James pudiera replicar, Adam tiró de él en dirección al auto.
Adam: vamos.
Les avisó a Kendall, Carlos y Logan, quienes lo siguieron sin rechistar.
🎵🎵🎵🎵
Las luces bolicheras brillaban en la pileta, en el solárium y en el resto del jardín de la casa de Kendall, música especialmente seleccionada por Adam se escuchaba a través de los parlantes, tragos y tragos de alcohol eran preparados en la barra por un barman que habían contratado para la ocasión, la fiesta de despedida estaba en su máximo esplendor.
James: dame un fernet bien cargado amigo, gracias.
Le pidió James al chico de la barra, éste asintió, sacó un vaso grande de vidrio, lo apoyó arriba de la mesada de madera, luego le puso varios hielos al vaso y agarró una botella de fernet, llenó hasta la mitad el vaso y se dispuso a llenar la otra mitad con Coca-Cola Zero pero James lo detuvo quitándole la botella de la mano, el chico lo miró confundido.
James: ¿qué me ves cara de estar haciendo dieta?
Preguntó James soltando una risita, luego dejó la botella de gaseosa arriba de la barra, negó con la cabeza y añadió haciendo un gesto de indiferencia con su mano.
James: no, yo soy tradicional, ponele coca común.
Esbozó una sonrisa de suficiencia y agregó.
James: gracias.
El chico le sonrió en respuesta, llenó el vaso con Coca-Cola común y miró a James con fijeza, el castaño frunció el ceño, receloso.
James: ¿qué?
El chico se encogió de hombros.
Chico: nada, es que no puedo creer que seás el hijo de Adam Levine.
James bufó, estaba un poco cansado de ser el centro de atención, apoyó el codo arriba de la mesada y luego su barbilla en su mano.
James: si, soy yo.
Respondió simplemente, quiso agarrar su vaso de fernet con Coca-Cola pero alguien lo tomó primero por él, James elevó ambas cejas, desconcertado, se enderezó en su taburete y giró hacia un costado para averiguar quién se había atrevido a robarle su trago, era Adam.
Adam: suficiente alcohol por hoy James.
Dijo su padre con una mirada seria y sin previo aviso, volcó el contenido del vaso en el pasto, James emitió un gritito de protesta.
James: ¡hey! ¡mi trago!
Adam se encogió de hombros y luego sonrió con picardía, James se cruzó de brazos y lo miró mal.
James: ¿qué sos boludo? ¿cómo vas a desperdiciar una bebida así? ese trago tenía fernet del branca, no del vittone, y esa coca... ¡era Coca-Cola común! ¡mi favorita!
Adam rió, de repente, en una milésima de segundo, se acercó a James, lo agarró y lo cargó sobre su hombro, James quedó impactado ya que nunca antes Adam lo había alzado de esa forma, es más... se sorprendió de la fuerza que tenía su padre.
James: a la mierda... si que tenés fuerza Adam.
Dijo sorprendido, luego reaccionó ¿por qué Adam lo estaba cargando en primer lugar? levantó un poco la cabeza y visualizó a lo lejos a Kendall, Carlos y Logan, sus amigos lo estaban mirando, se reían a carcajadas y lo señalaban, James sintió su rostro rojo de la vergüenza.
James: ¿por qué me estás cargando? ¡bajame! ¡me das vergüenza ajena!
Renegó molesto, Adam rió.
Adam: te voy a tirar a la pileta.
Explicó divertido, James negó rápidamente.
James: ¡no! ¡no quiero mojarme! ¡me da pasta!
Con pasta se refería a pereza, Adam rió otra vez.
Adam: pero si la fiesta es una pileteada ¿cómo no te vas a meter?
Preguntó curioso, James bufó.
James: porque ahora no tengo ganas, quiero tomar, más tarde me voy a meter.
Explicó con paciencia, Adam empezó a caminar con su hijo a cuestas hasta la pileta, James se alarmó.
Adam: no, te vas a meter ahora, más bien... nos vamos a meter ahora, yo también me voy a tirar al agua con vos.
James abrió grandes los ojos.
James: ¡no!
Adam rió y empezó a correr hacia la pileta, James le pegó un puñetazo en la espalda, intentando que su padre lo bajara, al mismo tiempo empezó a patalear pero fue en vano, Adam saltó con él en brazos y ambos se zambulleron en el agua.
James cerró los ojos y sintió la fresca agua golpearle el cuerpo, luego salió a la superficie, se sacudió su mojado pelo con una mano para apartárselo de la frente y abrió los ojos.
Adam estaba frente a él, riendo, gotas de agua caían por su barbilla, James se enojó y le arrojó agua en la cara, Adam cerró los ojos y James rió a carcajadas.
James: ahora quien se ríe ¿eh? te lo merecés por tirarme.
De repente Kendall, Carlos y Logan también se tiraron en la pileta y empezaron una guerra acuática.
James: ¡ya van a ver!
Les gritó James a Carlos y Logan, metió la mano en el agua y la impulsó hacia adelante para arrojarles un buen chorro de agua, dándoles de lleno en el rostro, luego le tiraron agua a él desde atrás, James volteó dándose cuenta que habían sido Adam y Kendall.
Katie: ¡tomen!
Gritó sorpresivamente Katie arrojándoles agua a su hermano y Adam, James rió a carcajadas, nadó hasta donde estaba Katie y le hizo un choque de puños.
James: bien hecho Katie.
Katie: gracias James.
Contestó la niña con una sonrisa.
Carlos: ¡cuidado!
Gritó Carlos y se arrojó de bomba en el agua, salpicando a todos, quienes rieron a carcajadas.
James: ¿ah sí? preparensé.
Advirtió James con una sonrisa maliciosa, nadó hasta el borde de la pileta, apoyó ambas manos en el solárium y se impulsó para salir, cuando estuvo arriba de las blancas baldosas, corrió en busca de su pistola de agua.
Kendall: ¡oh no! ¡nos va a disparar con las pistolas de agua!
Avisó Kendall a gritos alarmados, dándose cuenta de las intenciones de James, Carlos salió rápidamente del agua.
Carlos: ¡hay que contraatacar!
Gritó divertido y corrió a buscar una pistola, habían varias en una mesada más allá, en la otra esquina del jardín, Kendall también fue en busca de una, Adam le pidió que le pase una.
Adam: ¡traeme una Kendall!
James regresó con su pistola y les disparó agua a Adam y Logan, luego rió a carcajadas, justo vino Carlos por detrás y lo empujó, arrojándolo a la pileta.
James: ¡maldito Carlos!
Grito James cuando salió a la superficie, luego rió, no por mucho tiempo porque Adam le arrojó un chorro de agua con su mano, James se atragantó porque tenía la boca abierta y empezó a toser, Adam se preocupó, nadó hasta él y le apoyó una mano en la espalda.
Adam: ¿estás bien hijo?
Le preguntó sintiéndose culpable, James no le contestó, en lugar de eso sacó del agua su mano con la pistola de agua y le disparó sorpresivamente a su padre en la cara, luego rió con malicia.
James: ¡nunca bajés la guardia papá... digo Adam!
Antes de que Adam pudiera decirle algo por haberse corregido a la hora de nombrarlo, se alejó nadando hacia el otro extremo de la pileta, Adam se retiró el agua de la cara con sus manos y miró con una sonrisa divertida a James.
Adam: ¡huye cobarde! ¡pero no creas que no escuché que me llamabas papá!
Comentó alegre, James le mostró el dedo medio desde su lugar en el otro lado de la pileta, rió y salió del agua para mojar con su pistola de agua a Kendall, el rubio le arrojó una pistola a Adam, el mentor de The Voice la atrapó en el aire y sonrió divertido, salió de la pileta y fue en busca de James para mojarlo con la pistola.
Y así, entre risas, juegos en la pileta, disparos con las pistolas de agua, música y bebidas, Adam, James, Kendall, Carlos, Logan y Katie pasaron una agradable fiesta de despedida.
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