Narradora:
Dipper y Ford se encontraban recorriendo la estructura subterránea de la cabaña del misterio que conducía al refugio del cambia forma, Dipper, un poco asustado, seguía adelante mientras una y otra vez el recuerdo del cambia forma se reproducía en su mente.
Ford, por otro lado, recordaba el día de su desaparición de esta dimensión, cuando vio por ultima vez a la criatura, y lo que esta le dijo al partir:
-"Su sangre no sera de esta dimensión, y ya sea por cambio fuerte o a voluntad, sus familias en enlace eterno siempre van a estar, a menos que se haga el sacrificio, apagar la osa menor".

Esas palabras retumbaban en la placa de hierro de la cabeza de Stanford, que durante su estancia entre las dimensiones, trato de encontrar el sentido a esas palabras.
Dipper continuaba nervioso, y jugando con sus manos recordó algo también inquietante, lo último dicho por su padre antes del viaje.
"Busca los misterios, pero no te vuelvas parte de ellos"
Mientras analizaba esto tocaba el brazalete, al cual le brillaban las formas, específicamente los triángulos azules.

Su tío, no lo notó, estaba pensando en otras cosas.
Se escucho un ruido metálico, era la entrada.
Pedía una prueba dactilar, era obvio, una sola persona mantenía en este lugar, que era Ford.

Narra Dipper:
Posó su mano sobre el detector, abrió la puerta e ingreso, pero cuando iba a entrar, la maquina cerro la puerta y lanzo una pregunta:
-«sujetos no identificados, ¿desea identificar?»
Ford, me identificó, Dipper Mason Pines, 17 años.
La maquina sonó positiva, me había identificado, y me permitía estar en el sistema, pero al intentar entrar, lanzó una alarma roja y lanzo la pregunta:

- «sujeto no identificado, repito, sujeto no identificado; ¿desea permitir la entrada?»

Ford, reviso la maquina, tal vez fue un error y aun no me había registrado, eso hubiera deseado.

Desde el otro lado, (dentro del refugio) Ford estaba con una expresión de terror y desesperación, hundiendo cuanto botón tuviese a su alcance, mientras gritaba:

- "¡ABRE MALDITA SEA! ¡DIPPER, DIPPER!"

Para luego cambiar de palabras y decirme:

-"¡DIPPER, HAY ALGUIEN JUNTO A TI!"

No supe como reaccionar, estaba helado, tenia miedo, demasiado.

Narra Ford:
Gritar era mi único recurso, la maquina reconocía nos reconocía a ambos, pero se negaba a dejar pasar a Dipper, pues había una amenaza junto a el, ¿pero quien?

Mire a Dipper a través del vidrio blindado y protegido con cabellos de unicornio, estaba quieto, con una expresión de terror, pero no había nadie con el... O eso parecía.

De pronto, un tono azul rodeo a Dipper, y varias formas empezaron a aparecer junto a el, "¿Bill?", pensé, pero el no puede aparecer si un portal, y su aura es amarilla, no azul. ¿quien entonces?

Narra Dipper:

Vi como aparecía un aura azul a mi alrededor, y formas empezaban a definirse, triángulos azules, ¿Seria Bill?
Pero su aura es diferente, y esta es completamente nueva, un tanto atractiva.

Sentí un agarre en mi chaleco, una mano hizo un leve tirón y me dijo:

- ¿?: "Tu eres pino"
- Dipper: ¿quien eres?, no se de que me hablas.
- ¿?: Si eres pino, MI PINO, por fin te encuentro; dijo el misterioso sujeto y esbozó una sonrisa de satisfacción a lo que levanto su mano y ella se rodeo de agua, que fluía en forma circular, sin caer al suelo, ni la más mínima gota, mientras el decía:

- ¿?: Bien pino, nos vamos, despidete de 6 dedos.

- Dipper: ¡¿ESTAS DEMENTE?! ¡QUIEN ERES Y A DONDE ME LLEVAS?!

El extraño trato de abrir un portal, y a través de este se podía ver una mansión de color azul, luego, trató de obligarme a ir con el, pero, antes de poder tocarme... No pudo, algo lo impidió.

"¿Pero que pasa?" se preguntó, luego me miro enfadado y, su cabello cambio a un tono negro, para luego regresar a la normalidad:

- ¿?: Bien Pino, muy bien jugado, no preveni tu protección.

Luego en un movimiento rápido, me tomó de la barbilla y se me acerco de manera muy seductora y justo, mientras apretaba mi cadera y sus labios estaban a milímetros de los mios, dijo en un tono casi inaudible: -"Bienvenido a casa, Pino~" alargando esta última palabra mientras con la punta de su lengua toco mi labio superior e hizo una linea horizontal con ella hasta mi mejilla.

- ¿?: Ahora no Pino, pero pronto.

Dicho esto, entró al portal y como si de una cremallera se tratase, lo cerró.

Después de esto, las puertas se abrieron, luego Ford corrió hasta Dipper y lo jaló para que este entrara al refugio.