Capítulo único
Chanyeol
Busqué mi cartera abriendo el primer cierre de mi mochila. No había nada y comencé a ponerme nervioso. ¿Había vuelto a perder alguna de mis cosas? Dediqué una sonrisa poco ansiosa al taxista quien comenzaba a mirarme con el ceño fruncido. Busqué en el siguiente compartimento y mentalmente agradecí no haber extraviado nada esta vez. Kyungsoo siempre decía que era más despistado que alto. Pagué lo más rápido que pude al conductor, pero no alcanzó a responder mis "gracias" debido a que había emprendido su camino nuevamente. Doy media vuelta y puedo observar la majestuosidad del teatro de la ciudad.
Ah... Kyungsoo.
Kyungsoo quiere ser actor, desde que lo conozco, ese ha sido su más grande sueño.
Cuando me lo contó por primera vez no podía parar de reír mientras él me miraba con ojos molestos. Pero antes de que salgan las artochas de parte de su club de fans, compuesto actualmente por mi hermana y mi madre, déjenme explicar por qué.
Digamos que no tenía fe en Kyungsoo, porque es literalmente la persona menos expresiva que conozco. ¿Cómo puede alguien con sus características ser un actor? Él solo tiene dos rostros: la cara neutral y la enojada. Puedes verlo directamente a los ojos y pensar que es incapaz de reaccionar a las situaciones. Como la vez que un tipo le arrojó un vaso con cerveza en la fiesta 20 años de Lucy. Yo me siento rojo de coraje, quiero ir a golpear a diestra y siniestra. Mientras que él, así quitado de la pena, enjuaga su camisa blanca en el lavado del baño de la cumpleañera. La verdad creí que nunca podría demostrar sus sentimientos. Al menos eso pensaba antes de poder leer mejor las facciones de Kyungsoo que la palma de mi mano. Kyungsoo contrae los labios y el mentón cuando se siente cohibido. Existe una minúscula arruga en su frente cuando algo le preocupa demasiado y cuando se siente nervioso hace un tintineo imperceptible con el dedo anular. Aunque ya sabía que no tenía corazón de piedra, aun era escéptico respecto a lo de la actuada. Eso hasta la primera vez que lo vi actuar. Él es una supernova. Absorbe toda la energía y la atención de la puesta en escena. Sus movimientos son precisos y todos absolutamente calculados. Sus palabras, su tono de voz, su expresión... Todo es... Desearía poder describirlo y hacer justicia, pero me temo que me veo incapaz. Lo único que puedo hacer es asistir a sus eventos, presumir que la estrella del show es mi mejor amigo y aplaudir como si el mañana no existiera.
Esta vez Kyungsoo interpretará a Dorian Gray, alguien cuya alma se corrompe poco a poco, pero cuyo rostro se mantiene intacto; le dije que estaba hecho para el papel de un malvado con cara de inocente y tan solo me sonrió de vuelta. Me ruborizo de solo pensar en su sonrisa. Ingreso por fin al establecimiento, la fila para la compra de los boletos era enorme afuera, por lo que me emocioné aun más, tenía los boletos que el propio protagonista me había dado hace 3 semanas.
Tomo asiento en una de las primeras butacas y comienzo a buscarlo con la mirada. No le avisé que vendría, de hecho, no le dije a nadie porque tal vez Yoora se me pegaba y tocaba invitarle su entrada. Quería venir solo para poder charlar con él, felicitarlo por su obra, pero sobre todo para poder charlar con él. Lo último que le dije... en realidad, lo último que le grité, fue que lo sentía, que lo sentía en serio, pero ya no me escuchaba de lo lejos que había corrido y tampoco volteó hacia atrás. ¿Por qué tuve que intentar besarlo? ¿Por qué esos ojos y esos labios magnéticos me atrajeron de esa manera tan colosal? Sí, es mi mejor amigo, pero hace tiempo que siento que respiro diferente cuando está presente. Que me sorprendo sonriendo cuando decimos algo al mismo tiempo, o cuando es tierno conmigo. Como cuando se estrenó No Way Home y yo tenía que terminar el proyecto de Mr Smith una noche antes porque me encanta procastinar a lo tonto hasta que me queda nada de tiempo para entregar mis tareas. Te ayudo, me dijo con indicios de una pequeña sonrisa. ¿Estás seguro? le preguntaba porque no se me hacía del todo justo que me ayudara cuando él era de los primeros en entregar sus deberes siempre. Nos quedamos hasta las 3 de la mañana pero esa ha sido mi nota más alta del curso y al día siguiente pude ir a ver a los 3 spiderman antes que todos. A veces siento que la conexión que siento con su persona es mutua. Que él sabe... muy en el fondo... que existe una pequeña parte suya en mí y una pequeña parte mía en su interior. Yo estoy aquí, le dije mientras enjuagaba sus ojos con mi camisa y pasaba mis brazos alrededor suyo. Me está contando que discutió otra vez con sus papás sobre la idea de actuar. Ellos como era de esperar, nunca lo apoyaban y menos con la idea de ser actor. Se desvivían en recordarle que ese "oficio" no le daría el sustento económico necesario, pero no se tomaban el tiempo necesario para asistir a alguna de sus obras. Su pecho subía y bajaba de manera irregular. Comienzo a darle palmadas en la espada y recién noto lo cerca que está de mi corazón, que no se acelere, que no se acelere, y es lo primero que pasa. Él se aleja unos cuantos centímetros y me mira a los ojos, pienso decirle que todo va a mejorar, bromear con que siempre tendrá un hogar en mi casa, que mi mamá y Yoora lo adoran, pero en lugar de eso veo sus ojos y sus labios los cuales me hipnotizan en milésimas de segundo y... Todo salió mal, supongo que malinterpreté todo, que no era el momento, que estaba debil, vulnerable y yo cabeza de chorlito, tomé su mentón y lo dirigí hacia el mío, fue entonces cuando todo se hizo tangible, cuando expuse lo torpemente enamorado que estoy de él, que él notó por primera vez la forma en la que lo veo desde hace meses y que me rechazó tan confundido como nunca antes lo había notado. No había una arruga en su frente, ni un movimiento periódico en su dedo, solo un vacío en sus ojos que no pude soportar. Te-tengo que irme, dice buscando su mochila con su reconocible ceño fruncido. ¡No! Oye, quédate, ¿si? No pasó nada. No lo volveré a hacer. Kyungsoo no me escucha y toma el bicaporte de la puerta y sale así sin más. Sin voltear a verme. Corro hacia la puerta y le grito lo mas fuerte que puedo, lo siento. Lo siento mucho. No recibía mis mensajes, ni mis llamadas, quise buscarlo en casa, pero no estaba seguro... su madre no me agrada mucho y yo tampoco a ella. Desde que supo que había tenido un novio, se desentendió conmigo por completo, y estoy seguro de que le pidió a su hijo terminar con nuestra amistad. Pero Kyungsoo me veía como yo era en realidad, nunca solo una parte. Nunca demasiado gay, nunca demasiado cringy, nunca demasiado gamer. Solo yo. Solo Chanyeol.
ㅡPrimera llamada, primera llamada.
Me reclino sobre el asiento porque comienzo a sentirme nervioso, me sudan las manos y reclino mis muñecas sobre el borde del asiento. ¿Qué le diré? ¿Cómo puedo convencerlo de que no fue nada cuando para mí pudo ser el comienzo de algo hermoso? Lo único que quiero es que sigamos siendo amigos, como hasta ahora. Por supuesto que puedo tragarme estos sentimientos desbordantes, ¿o no?
ㅡ¡Chanyeol! ㅡescucho mi nombre a lo lejos. Volteo a todos lados hasta que la encuentro. La persona que menos esperaba encontrar hoy. Intento hacerme el despistado, pero ella levanta la mano para señalarme su presencia. Tenía puesto un bello conjunto rosa, blanco y azul, un suéter y una falda corta. Se acerca hacia mi asiento y me saluda con una venia efímeraㅡ. ¿Cómo has estado? ¿Puedo sentarme?
Asiento rápido con las palabra "no" en la lengua, pero ya es demasiado tarde cuando la veo colocarse sobre el lugar y poner su bolso en sus piernas. Ella era todo lo que la mamá de Kyungsoo quería, status, belleza... heterosexualidad. Todo lo que yo no tenía. Conversamos un par de minutos hasta que el telón subió y se me revolvió el estómago. Era tiempo de brillar para Kyungsoo. Sentí que me elevaba en el aire al verlo salir a escena. Hubiese querido desearle que se rompiera una pierna o traerle flores, sus flores favoritas. Pero yo no era su novio. Joy sí. Recuerdo cuando me dijo que ya era oficial. Estoy en la biblioteca de la escuela, el único lugar donde no se puede gritar de celos, hacer una rabieta o romper cosas del enojo. Ya es mi novia, dice con unos ojos abiertos, llenos de luz. Yo sonrío, apenas, no puedo fingir mejor. Siento como el corazón se me apachurra hasta volverse una hoja hecha bolita. ¿Ah sí? ¿Cuándo... Cuándo pasó?, me desarmo la corbata para poder respirar mejor. Ayer estábamos tomando una malteada y... ella es en serio tierna, cariñosa. Es amable con los chicos de menor grado. Es muy inteligente. Se pasó varios minutos argumentando por qué era una gran persona, en pocas palabras, por qué era mejor que yo. Y yo lo sé, es estupenda, primera de la clase, es interesante, porque las veces que hemos salido puedes notar que es conocedora, que es madura, que le gusta platicar y debatir. Quisiera en serio no tener razones para despreciarla, pero el verla es un recuerdo constante de que jamás podré ser lo que ella es, tener lo que ella tiene, que jamás podré... Podré amar a Kyungsoo como sé que soy capaz de hacerlo y... me deprimo demasiado y me vuelvo un cretino que evita el contacto visual y cualquier charla sobre cualquier tema. A veces Kyungsoo, me pregunta por qué la hago a un lado y le respondí que era raro que me llevara con su novia, después de todo, era su mejor amigo. ¿Era? No tengo palabras, realmente se ven bien juntos. Son atractivos, buenas personas. En otra vida, con otros sentimientos, podría ser feliz de verlo con alguien más.
ㅡEs en serio bueno, ¿no? ㅡdice a susurros inclinándose un poco hacia mí. Yo asiento viéndola por un segundo. Después regreso mi vista al escenario.
Después de una hora de excelentes diálogos y expresiones, Kyungsoo se convierte en un asesino llegando al esplendor de su maldad e irónicamente el principio de su locura. Realmente transmite miedo, todos aquí estamos viendo a un hombre demente, perverso, malvado, pero guapo y elegante. La piel de gallina llegó a mí y supongo que a más personas cuando falleció. Cuando el telón bajó, todos aplaudieron, se escucharon silbidos y la gente estaba puesta de pie. Me conmoví mucho, mis ojos brillaban, Kyungsoo estaba evidenciando con creces el profesional que lleva adentro, aunque sus familiares se empeñaran en afirmar lo contrario. La adrenalina de verlo actuar se comenzó a disipar de poco a poco. Tendría que verlo a continuación, le pediría hablar y le diría que no tenemos porqué perder nuestra amistad. Quiero seguir a su lado, aunque sólo tenga lugar como un amigo, pero siendo alguien que aprecia y que entiende lo maravilloso que es.
Joy
Quiero ir a verlo a su camerino, felicitarle y demás, pero no sabía si debía esperar que se fuera o debía invitar a Chanyeol para que me acompañara. Kyung no lo mencionó en toda la semana, cuando hablar de lo que dijo, de lo que hizo, de lo que le pasó, de lo mucho que se divirtieron en ese restaurante-karaoke era lo que más le gustaba hacer. Aunque al final siempre se daba cuenta de mi cara de aburrimiento y encontraba la manera de relacionarlo con nosotros. Te-Te llevaré ahí el día de tu cumpleaños.
Como si no me diera cuenta. Como si fuera una tonta. No soy la única que puede notar que la manera en la que esos dos se llevan es muy íntima. Mi mejor amiga me lo advirtió en cuanto mencioné su nombre. ¿Do Kyungsoo? Quieres convertirlo... O... Sin embargo, yo estaba embelesada con su manera de hablar, sus actitudes políticas, su caballerosidad y el enigmático rostro inexpresivo que se carga. Le pregunté a Kyung cuando recién estábamos conociéndonos, que si... que si él se consideraba bisexual, aunque lo que realmente quería saber era si se estaba comiendo a su mejor amigo. A lo que reaccionó de manera efusiva y me pidió que nunca lo volviera a mencionar. Se ofendió mucho, demasiado como para no darse cuenta de que mantenía un bromance en sus círculo más cercano. ¿Por qué sigo aquí? Inercia o costumbre. No quisiera admitir en voz alta que en serio le tengo cariño, que espero que algún día me vea como lo ve a él cuando va cruzando el auditorio, que hable de mí como habla de él, como si yo hubiera inventado el formato EPUB o sci-hub. ¿Es demasiado pedir un chico tan hermoso y educado como él? ¿O de una vez por todas debía dejarlo ir?
Chanyeol parpadea y deja de verme cuando nota que lo estoy viendo. Siempre actúa así, como si yo le pareciera nefasta. Como si me viera con desprecio o me considerara inhumana. Soy quien debería tratarlo con la punta del pie, me roba a mi chico especial.
O quizá... Él nunca fue mío.
ㅡ¿Quieres ir a verlo? ㅡle pregunto porque estoy super segura de que jamás lo dirá. Jamás admitirá en voz alta que viene a verlo para pedirle que estén juntos o algo parecidoㅡ. Voy para allá, podrías acompañarme.
Sonrío lo más amable que puedo ser y parece que lo he convencido puesto que se pone de pie. Caminamos lentamente a través de la fila de las butacas hasta llegar a las escaleras y comenzar a andar por el pasillo.
ㅡ¿Puedo preguntar cuando te diste cuenta de que te gustaba Kyungsoo? ㅡsu cara de tonto me da ganas de reír. Su boca abierta, sus labios resecos y sus ojos descuadrados son toda una imagenㅡ. Antes de que trates de negarlo ㅡle digo a la par mientras vemos hacia el frenteㅡ, detente. Insultas mi IQ creyendo que puedes convencerme de lo contrario.
Mi voz suena molesta, tendría miedo si fuera él. Y eso no era lo que quería. No quería acorralarlo, quería respuestas.
ㅡPor favor, me gustaría saber. ㅡme ve de reojo intentando ocultar su debilidad.
ㅡEn abril. ㅡse detiene y se sienta en el suelo, contraespaldas de la pared.
ㅡ¿Fue cuándo...?
ㅡSí, cuando se hicieron novios.
Kyungsoo y yo llevábamos 6 meses, 1 semana y 3 días. Siempre creí que Chanyeol estaba enamoradísimo de él... Desde preescolar, quien sabe. Pero pensar que tuvo que verlo con alguien más, conmigo, para saber que tenía más sentimientos por explorar, me hizo flaquear. Me agaché, sosteniendo mi falda y tomé asiento junto a él.
ㅡ¿Vas a decirle? ㅡme preguntó con unos ojitos que se parecían mucho al del gato con botas. Quería decirle que sí, atormentarlo como él ha atormentado toda mi relación. Como me ha hecho sentir insegura e insuficiente. Pero a la vez recuerdo que no ha sido él. Ha sido Kyungsoo y su manía de jugar al señor heterosexual.
ㅡAunque quisiera, no lo haré. ㅡveo como se ensancha de hombros y también me relajoㅡ. No me corresponde decirle, pero deberías.
En cuanto lo menciono se levanta nervioso y enérgico.
ㅡNo debes callar lo que sientes por Kyung, ni siquiera sé si puedes continuar en silencio. Amar a alguien que no te ama, te va a carcomer por dentro. ㅡhace un pequeño mohín con la comisura de sus labiosㅡ. Como a mí.
Sé que no debería intentar persuadirlo, pero a estas alturas, ¿qué más da? Yo no perdí a Kyung hoy, o hace unos días. Yo nunca lo tuve, más que para encubrir las dudas que surgían, para un buen rato con una buena amiga que sabe escuchar y comprender. Alguien a quien puedes acudir siempre que necesites cariño o atención. Pero nunca amor. Porque ese espacio estaba cubierto, jamás me necesitó. Nunca me amó.
Me pongo de pie, aliso los pliegues de mi falda y lo veo de frente, no como él me vio estos meses.
ㅡ¿Me dejas pasar primero? ㅡme ve sin comprender ㅡ. Vengo a terminar con él.
Esta vez sus ojos sí se abren completamente, incluso hasta se pone de pie.
ㅡYo no... Yo no quise que pasara... Joy, nunca fue mi intención que él... Mhmm, que tú rompieras con Kyungsoo.
Lo sé, Chanyeol, quisiera decirle, quisiera en verdad creerle. Quizá no directamente, pero eso quería él, eso quería Kyungsoo, que me hiciera a un lado. Solamente yo estaba aferrada a esta relación y solamente yo podía salir de ahí.
Sonrío trémula, esta quizá sea la última vez que le abriré mi corazón a Chanyeol o a Kyungsoo. Estaba dispuesta a salir de la vida de ambos si solo así podía olvidarme por un momento de lo que aún siento por Kyung.
ㅡNo, es lo que yo quiero ㅡme doy media vuelta y abro la puerta de par en par.
Varios de sus compañeros están sentados frente al espejo, desmaquillándose, quitándose las pelucas y bebiendo lo que parecía cerveza. Me acerqué con desconfianza hasta el lugar de Kyung. La veces que había venido solía traerle un obsequio. Una rosa o un cupcake. Esperaba que lo notara, que la vibra que yo traía el día de hoy era diferente... pero no fue así. Tan solo me sonrió y me preguntó cómo había sentido la obra, ¿demasiado rápida, demasiado tediosa? Bien, le respondí, sin embargo, seguía dando pasos hacia su mochila, hacia su tocador, sin tener la mínima educación de verme. Qué tonta soy, jamás ha podido verme. No como su novia o su alma gemela.
ㅡ¡Kyung! ㅡgrito trayendo la atención de todos hacia míㅡ. Quiero terminar contigo.
Algunas burlas suenan, pero yo me mantengo firme. Quisiera repetirlo otra vez, pero el del club de drama siempre ha sido él. Su cara pasa de sonriente a seria, me pide que lo acompañe tras bambalinas para poder tener mayor privacidad y lo sigo lentamente, deseando no retroceder.
Kyungsoo
Conocí a Joy en una cafetería llamada "Café Drop", de la montaña a tu taza, decía el eslogan. Y el frappé que pedí era delicioso, me encantó que tenían sabores exóticos puesto que me toma mucho tiempo decidir si continuar comprando mi favorito, el de moka, o probar sabores nuevos. Como solo habían nombres raros, pensaba elegir cualquiera. Hasta que la escuché pedir el frappé de mora azul, cuyo nombre es "monster blue". Pedí lo mismo y me lanzó una sonrisa porque se había dado cuenta que seguí su influencia. Pensé varias veces si acercarme en la escuela era buena idea, así que mientas practicaba americano la vi sentarse en las bancas. Le pregunté a Ebon su nombre y cómo él conoce casi toda la escuela, me dijo quien era y en qué grado iba. Era menor pero nunca la subestimé. Es talentosa en todo lo que hace. Es bellísima. Es mi novia y estaba terminando conmigo.
ㅡ¿Por qué hoy? ¿Por qué ahora? ¿Por qué? ㅡle imploré una explicación. ¿De nuevo estaba dudando de si la amaba? Eso le pasaba cada cierto tiempo, me decía que no creía que lo nuestro fuera mutuo, que creía que en cualquier momento la dejaría. Lloraba y yo me ponía de rodillas para poder consolarla y decirle que... la amaba.
¿Sabes? Eso pasa con esas dos palabras de 5 letras. Es muy difícil decirlo la primera vez, pero después de que te acostumbras, es intuitivo, sale de manera natural. La primera vez que Joy me lo dijo, me tomó desprevenido, no sabía qué hacer o qué decir. Me sentía desorientado, incómodo, confuso y creí que lo mejor que podía hacer era decir que también yo la amaba. Lo mismo pasó cuando me pidió formalizar nuestra relación, aunque no estuviera seguro, eso era lo que seguía, lo que debía hacer. Todos se pusieron muy felices, ella, mi mamá, Chanyeol. Creí que era como las cosas habían resultado, como debían seguir.
Joy es una estupenda besadora, es adorable y considerada, ¿cómo no seguir con ella?
ㅡNo me digas no eres tú, soy yo.
ㅡSí eres tú ㅡdice implacablemente, pero yo podía notar en su rostro que se sentía débil, que no estaba seguraㅡ. Tú no me amas. Jamás he sido tu prioridad. Siempre ha estado el actuar, tu familia, la escuela...
ㅡ¿Qué tiene eso de malo? ㅡle pregunto alzando las manos y una ceja.
ㅡChanyeol... Y al final, yo.
Me mira con dolor y quisiera consolarla... como suelo hacerlo, pero al mencionar el nombre de Chanyeol, me desenfoco totalmente. A ese grandulón lo conocí en noveno grado, un chico tonto, alto, vicioso con los juegos y sumamente competitivo. Aficionado de la tecnología, de las donas de Krispy Kreme, de LOL, y de los animes. Y en general de todo lo que pueda comprarse, jugarse o comerse. Él era... mi lugar seguro, la única persona que jamás esperaba nada de mí, con quien yo podía ser quien quisiera. Hablar de lo que fuera. Hacer tonterías que no le iba a contar a nadie del equipo de futbol, o a mis papás. O a mi novia. Hacíamos cosas tontas todo el tiempo, como maquillarnos con los ojos cerrados, ver videos de risa con la boca llena de agua o embriagarnos hasta perder el conocimiento. Chanyeol estaba ahí, siempre para mí, yo... jamás me recuperaría de perderlo. Puedo tener a Joy y quizá hoy terminaremos, pero voy a salir ileso, como en mis demás relaciones. No voy a sentir temor de verme abandonado, como me he sentido la mayor parte de mi vida. Con los amigos que han perdido el interés en mí, o la ausencia de mis padres y lo fácil que es para ellos cagarse en mis sueños. Los abrazos de Chanyeol son el único refugio en el que puedo llorar, maldecir o simplemente respirar con tranquilidad mientras siento su olor y la curva de su espalda, un calmante natural para mis nervios. Pero todo cambió cuando quiso besarme... y yo incluso lo pensé. Pensé que estaría bien, que tal vez yo... yo lo deseaba. Imaginé por un segundo cómo sería besar sus labios. ¿Serían igual de suaves que los de Joy o quizá rasposos como se ve que son? Me asusté por completo, no quería que todo cambiara tan de repente, no quería tener que enfrentar una sexualidad que aún no conocía, que probablemente desataría un caos tanto en la escuela, como en mi casa. Me contuve como hago siempre por complacer a los demás y por prinera vez, no fui yo mismo con Chanyeol. Lo hice a un lado y huí y no he tenido el valor necesario para explicarle lo que me pasó o el porqué no he vuelto a verlo.
ㅡJoy... ㅡa continuación le diría porqué y cómo le he demostrado que la amo conociendo en el fondo que no es así. Que siempre estoy confundido sobre nosotros. Que no sé si debamos seguir juntos o no, pero que jamás se lo he dicho por lo insegura que se siente. Sin embargo, hoy estoy cansado de tener que actuar fuera del escenario, tener que actuar con ella como novio, con mis papás como hijo ejemplar, con la escuela como buen estudiante, y con Chanyeol como alguien que no se muere por besarlo y acariciar aquella curvatura de su bella espalda baja. Yo suspiro y ella puede notar que en realidad no tengo objeción, que no hay nada que pueda decirle, que sea verdad, que haga que se quede conmigo.
ㅡEstá bien, Kyung ㅡdice viéndome con sus ojos de siempre, los comprensivos, los que me confirmaban que ella sí me amaba de verdad y que yo nunca iba a estar a su alturaㅡ. Espero que seas feliz. Y... por favor, no me hables, ni me busques. Quisiera sanar antes de... poder ser tu amiga o tu conocida. No sé ㅡdice recogiéndose el cabello. Incluso ahora que ha terminado conmigo se ve hermosa.
Al regreso, tomo asiento en mi silla frente al tocador. Ya no habían tantas personas como antes, por lo que puedo verme al espejo y reflexionar los muchos aspectos de mi vida que he jodido por ocultar quién soy. Porque de seguro ahora tendría que ir a casa y decidir entre inventarle un pretexto a mi madre o decir que me encontraba actuando para que después pasemos horas y horas de chantaje emocional en el que al final siempre le prometo que lo dejaré, que estudiaré otra cosa. Pero una cosa de varoncitos, diría mi padre. Y yo asentiría muerto por dentro mientras camino a mi habitación a llorar y enviarle mensajes a Chanyeol sobre cómo estaba pasándola de mal. Solo que ahora no lo tenía a él, ni siquiera a Joy para desahogarme. Siento una lagrima caer por el borde de mi ojo y levanto la vista hacia el espejo, donde por un instante me parece ver a Chanyeol. Giro la silla y está ahí. Frente a mí, con un sueter de un solo color y sus pantalones de siempre, unos negros que ya ni siquiera se preocupa en cambiar. No puedo contener mis emociones y mis pies me llevan lentamente hasta tenerlo frente a mí. Mi corazón se desborda también y todo mi cuerpo se apresura en decirme, en anunciarme lo increíblemente feliz que está de tenerlo. En vivo y a todo color aquí. Lo abrazo, porque es lo que más me gusta hacer. Porque el no tener su olor y su cuerpo cerca de mí me ha abandonado en el peor de los abismos de la abstinencia. Rápidamente él sube sus manos para rodearme y yo cierro los ojos, donde siempre he sido feliz, donde estoy completo y donde sé qué no me faltará nada si está él.
Fin. Espero que les haya gustado, pero sobre todo espero que les haya hecho sentir. La inspiración de este os provino del libro "Temporada de huracanes" del que retomo el estilo de narración.
Con cariño, Soo_it.
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