No tengo escusas, solo disculpas, la verdad es que la unica responsable de no saber organizar el tiempo soy yo, pero ya que hoy pude encontrar un poco de tiempo les traigo este capitulo, la segunda parte del especial, en el siguiente capitulo retomaremos la historia en el presente, la relación entre Sasuke y Kiba se desarrollará más, mientras que las dudas de Naruto no pararán de crecer. Sin más que decir, Disfruten :3

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2 años atrás....

Itachi sonreía complacido al ver el cambio que sufrió su hermano en tan solo 1 año, mentiría si dijera que ahora estaba rodeado de amigos o que hablaba más abiertamente con las personas, jamás, Sasuke Uchiha era un bastardo engreído y aunque fuera su hermanito y lo quisiera con todo su ser nada era capaz de cambiar su personalidad, pero, aun así, ahora tenía a tres amigos, un tanto raros, pero amigos al fin y al cabo, Juugo, un tipo muy pacifista y de cabello naranja, se supone que era conocido por tener un temperamento bastante inestable y explosivo, aunque estando cerca del Uchiha era controlado completamente; el segundo era Suigetsu, un chico un tanto extrovertido en una forma muy peculiar, lo más extraño de él es que sus dientes parecían muy afilados, casi como los de un tiburón; y la última del grupo, una chica pelirroja llamada Karin, ella fue la primera en llamarle la atención, debido a que si no mal recordaba, ella era parte del club de fan de su hermano, y en más de una ocasión había escuchado a Sasuke de muy mal humor decir su nombre, pero parecía que ahora que había superado su enamoramiento, se transformó en la principal confidente del Azabache, la mayor peculiaridad de esta chica era su apellido, Uzumaki.

Apellido que igualmente le pertenecía al actual dolor de cabeza de Sasuke, Naruto Uzumaki, al principio le pareció un poco extraño la obsesión que tenía con su hermano, pensando de que luego de que este terminara sus tutorías (las cuales fueron muy beneficiosas para el rubio, aunque siempre terminaban discutiendo por la dificultad de la materia) esperaba que estos se separarán, todo lo contrario, Naruto prácticamente exigió que Sasuke fuera su maestro personal, a regañadientes Sasuke acepto, pero no sin antes conseguir algo a cambio, a pesar de su prodigioso cerebro, había algunas materias que eran más intuitivas en las cuales por desgracia, el rubio era todo un experto, así que ambos terminaron como profesores del otro.

Con el tiempo, Naruto quiso seguir conociendo a su hermano, en casi todos los aspectos posibles, y aunque el Azabache no lo admitiera, él igual parecía impaciente por conocerlo, demostrando su impaciencia en algunas ocasiones cuando se supone que el rubio vendría a buscarlo para irse juntos a la academia, pero el muy cabeza hueca se atrasaba y ambos terminaban llegando tarde, o cuando el rubio sin previo aviso lo seleccionaba como compañero en las investigaciones y Sasuke fingía estar molesto (para él era totalmente obvio que su hermano preferiría hacer equipo con Naruto que con cualquier otro estudiante). La situación solo empeoró cuando Naruto se enteró de que su hermano también era bueno en los deportes, más específicamente en el baloncesto, convirtiéndose en enemigos autoproclamados.

La relación entre ambos fue muy extraña, para cualquier persona parecía que ellos se odiaban, pero para alguien como Itachi era muy fácil darse cuenta de que por ridículo que pareciera, esa era la forma en la que ambos habían decidido comunicarse, en un principio esto le estaba asustando un poco, es decir, a su parecer Naruto solo era un idiota que estaba aprovechándose de su hermano para mejorar sus calificaciones, sin embargo, con el tiempo fue capaz de comprobar que este poseía un auténtico interés en el Azabache.

Si, la relación entre ambos se fue llevando de manera muy extraña.

-Oye, deja de verme y sonreírme, me estas asustando - Itachi se percató de que ambos estaban tomando desayuno juntos mientras que él estaba muy absorto en sus pensamientos.

-Solo estoy pensando porque alguien querría tener un corte de cabello que se asemeja al trasero de un pato.

-¡¿Qué?! ¡mi corte no se parece al trasero de nadie!

-solo fue un pensamiento, si tú te sientes identificado no es culpa mía - demostrando desinterés dio un pequeño mordisco a su pan tostado mientras desviaba la mirada.

-Olvide lo molesto que era estar contigo

-en el fondo de tu negro y emo corazón sé que me amas hermanito.

-si claro, bah, el dobe ya se está tardando - comentó mientras daba un ligero sorbo a su jugo de Naranja.

-Tal y como lo había pensado....

Luego de unos segundos, sintió como el móvil de Sasuke sonaba, con fastidio el nombrado leyó el mensaje y una pequeña y arrogante sonrisa se formó en sus labios, desapareciendo en milésimas de segundos, Itachi ya podía imaginarse sobre quien se trataba.

TEMEEEE ME QEDE DORMIDO, MAS VALE Q NO TE AYAS IDO SOLO!!!!

-Hmp, Dobe.

-¿Eh? ¿dijiste algo?

-¿ah? Solo dije que tienes un corte de mujer

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-Maldición, sabía que ver ese maratón de películas de terror era mala idea, aún no puedo creer que esté basada en hechos reales - Naruto corría como poseído en busca de su bastardo amigo, ya se le había hecho costumbre ir a recogerlo varias veces camino al instituto, y las veces que no lo hacía se aburría demasiado, siempre era más divertido molestarlo en el camino para ver sus expresiones o sus cambios de humor, y ya que el Teme tenía esa enferma costumbre de irse muy temprano, casi nunca podía acompañarlo, por lo que se comprometió a ir en su busca con la condición de que le esperara - Mierda, tengo miedo de lo que vaya a hacerme cuando me vea, la última vez que llegamos tarde no estaba muy feliz que digamos - el miedo comenzaba a recorrerlo al pensar en lo vengativo que era el azabache, lo más probable es que ahora él termine como una de esas historias de terror que había visto.

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-¡Dobe porque rayos tardaste tanto, vamos a llegar tarde de nuevo!

- Lo siento, es que tuve problemas para dormir hoy, y no seas exagerado, no nos pasara nada por llegar un día tarde.

-¡Usuratonkachi, es la quinta vez!

-cuatro, cinco ¿Cuál es la diferencia?

-¡ES LA QUINTA VEZ EN ESTA SEMANA, CABEZA HUECA! - No llevaba ni cinco minutos de llegar y ya le estaba colmando la paciencia

El rubio solo se sobo la cabeza en señal de disculpa mientras reía nerviosamente.

-Si gustan, puedo darles un aventón, aún es temprano para que comiencen mis clases

-Itachi San eres el mejor, te lo agradeceríamos mucho.

-No hay problema, solo déjame advertirte que la próxima vez que mi hermano llegue tarde, tu tendrás que venir a buscarlo en sillas de ruedas ya que tus piernas sufrirán un pequeño accidente ¿nos estamos entendiendo? - Como era de esperarse, Itachi se jactaba de ser una persona cuyas emociones eran equivalente a un tempano de hielo, pero cuando tenían que ver con su hermano era capaz de convertirse en el mismo demonio.

-Cla... Claro Itachi San - Naruto con el tiempo fue capaz de desarrollar un gran respeto y temor por el hermano de Sasuke, después de todo sus amenazas realmente daban miedo, y con esa cara de seriedad eran una combinación aterradora.

-Bien, ya que nos hemos entendido podemos irnos.

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-Jamás podré entender a tu hermano, a veces realmente pareciera que cumplirá con alguna de sus amenazas- ya ambos se encontraban en el receso luego de una aburrida clase de biología.

-Pues deberías creerle, la gente que él amenaza suele desaparecer.

-Jeje, buena broma... ¿Es broma, cierto?

-Quien sabe...

-...

-Hola chicos, disculpen por la tardanza - Un nuevo integrante aparecía en la terraza, lugar donde los 3 chicos preferían juntarse para descansar de las clases.

-Que tal mapache ¿Cómo te fue en el hospital? - Preguntaba Sasuke luego de que Gaara se sumara a la platica

-Nada en especial cacatúa, solo un chequeo de rutina, ¿eh? ¿Por qué estás tan pálido Naruto?

-.....

-No me digas que tu hermano volvió a amenazarlo

-es un llorón, además fue su culpa por llegar tarde

-Aun no entiendo porque no son capaces de venir cada uno por su cuenta

-Pregúntale al Dobe, él fue el que insistió en que lo esperé

-¡Gaara Sálvame de Itachi! - Finalmente el rubio salía de su trance, corriendo a abrazar al pelirrojo, quien escapaba de su afecto de manera olímpica

-¡De qué forma debo decirte que pares con tus estúpidos abrazos! ¡Sasuke as algo! - Ya estaba irritado mientras se escabullía de las muestras de afecto del Rubio.

-A mí no me metan en sus estupideces - el Uchiha solo se mantenía como espectador, divirtiéndose al verlos a ambos.

-Maldición - el pelirrojo maldecia internamente la poca colaboración de su amigo, hasta que una maliciosa idea surco su cabeza - Oye Naruto ¿Qué tal si abrazas a Sasuke? -ya se estaba cansando de esquivar al rubio.

-......

-......

-......

Los tres se habían quedado totalmente estáticos ante semejante comentario, el Azabache permanecía quieto, interrogante del porque los demás se habían congelado, sus sentidos se agudizaron al notar como el pelirrojo lo veía mientras disimulaba una sonrisa, pero el miedo no apareció hasta que Naruto desviaba lentamente su cabeza en dirección al Uchiha, mientras que una maliciosa sonrisa surcaba sus labios.

-¡¿Qué.... qué rayos planean hacer par de idiotas?!

-Creo que es momento de que sepas como me siento cacatúa - Ahora era el turno de Gaara de mantenerse al margen y disfrutar el espectáculo.

-¿Qué...? ¡ALEJATE DOBE! - Amenazaba Sasuke mientras se escabullía del rubio.

-Ven teme, solo pienso darte amor...

-¡APARTATE MALDITO MANIACO DE LOS ABRAZOS!

Ahora el par de idiotas se mantenían corriendo de un lugar a otro, mientras que Gaara solo trataba de mantenerse serio con una sonrisa de victoria, aunque en el fondo hacia todos sus esfuerzos por no morirse de la risa ahí mismo - Ahora sabes por lo que paso a diario, tal vez para la próxima si me ayudes...

Finalmente, el receso terminó, siendo la campana de alarma lo que distrajo al Uchiha, mientras que Naruto aprovechaba esta oportunidad.

-Arg... ¡Dobe Suéltame! - Exigía Sasuke mientras sus pies se despegaban del suelo al ser alzado por el rubio.

-Jejeje ¡te tengo! Teme sigues tan ligero como siempre - Canturreaba feliz por su logro, mientras se acercaba más al rostro de su amigo - No eres tan rápido como el gran Naruto Uzumaki.

Sasuke ya se estaba incomodando por la excesiva violación a su espacio personal, además del tener al rubio respirando contra su rostro no ayudaba en lo más mínimo - ¡Quítate, te matare si no me sueltas!

-Ui, que miedo - se burlaba mientras lo pegaba más a su cuerpo estando consiente de lo incomodo que era eso para el azabache - solo te soltare si me lo pides por favor.

-¡JAMÁS!

-Pues entonces estarás junto a mi todo el día

-¡Usuratonkachi! - Sasuke usaba toda su fuerza para zafarse del agarre, pero ya dándose cuenta de que era totalmente inútil, y gracias a lo incomodo que se estaba volviendo la situación lo mejor sería obedecer - Te prometo que te romperé hasta el último de tus huesos.

- ¿Y bien? - Se mantenía expectante de la respuesta de su ahora rehén - Creo que ya no alcanzaré a ir a clases, Bah no importa, después Gaara me pasará la materia - Después de todo el pelirrojo ya había desaparecido en dirección a su salón de clases en cuanto sonó la campana.

-Por.... Favor... - Sasuke ya muerto de la vergüenza no podía esconder el rubor por pronunciar aquellas horribles palabras.

Naruto ahora feliz cual niño pequeño soltó al Azabache, y no pasaron ni 2 segundos cuando ya se estaba arrepintiendo, principalmente al sentir un fuerte golpe en su estómago - TEME...

-La próxima vez que pienses en hacer una estupidez como esa te patearé las bolas

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-Temeeeee.... ¿Aun sigues molesto? - Picoteaba a su amigo quien solo lo ignoraba, ya habían terminado las clases y ahora los tres caminaban a un parque cercano para charlar un rato.

-¿De qué me perdí? - Gaara se sentía un tanto incomodo en esas situaciones, Sasuke jugaba a la ley del hielo y el idiota de Naruto caía redondito mientras hacia todo lo posible por llamar su atención.

-El teme se enojó solo porque lo abrace, debería seguir tu ejemplo, siempre te abrazo y nunca dices nada...

-Claro, y las amenazas e insultos no cuentan, tarado... - Divagaba en su mente el pelirrojo - ¿Y yo que hice para que me ignores cacatúa?

-Largarte como un cobarde luego de ver que el Dobe me había atrapado

-Pareces una niña pequeña - Suspiraba ya resignado, sabía que él no importaba en esta batalla, pero si Sasuke ignoraba únicamente al rubio e veria un poco raro

-Ya teme... ¿Cuántas veces debo decir lo siento?

-....

-¿20?

-.....

- ¿100?

-....

-¿Quieres un abrazo?

-¿Quieres una patada en los huevos?

-¡Ja, hablaste!

-Usuratonkachi...

-¡Ja, lo volviste a hacer!

-Aun no entiendo que carajos hago yo aquí, prácticamente parecen novios y yo aquí estoy como tonto tocando el violín - Gaara solo se mantenía pensando en las posibilidades de encontrar a nuevos mejores amigos - ¿Tal vez Sai? Nah, me hablaría de penes todo el día.

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Un mes después....

-Sasuke, sigo pensando que te estas volviendo muy permisivo con Naruto - Ambos Uchihas iban de compras en el Supermercado, acompañados por el anterior nombrado, que no paraba de lanzar cosas al carrito, mientras que Sasuke se encargaba de sacarlas.

-Créeme que, si lidiaras una semana con él, te darías cuenta de que mientras más le niegues algo, más estupideces hará para que se lo permitas, al fin y al cabo, el no entiende lo que es un no - respondía ya con dos tazones de ramen instantáneo en sus manos para dejarlos en su lugar.

-No creo que sea para tanto, si el rubio se te acerca tanto es porque tú se lo permites.

-Claro, a mí me encanta que este baboso este pegado a mí espalda todo el día.

-Eso no sonó muy bien que digamos.

Sasuke le hizo una pequeña mueca de odio a su hermano, mientras volvía la mirada hacia delante para evitar chocar - Cállate.

Itachi pudo percatarse que el comentario había puesto un tanto nervioso a su hermano - Sasuke, no sé si aún no eres consciente, o solo no te has detenido a pensar, pero creo que Naruto te afecta más de lo que tú crees.

-¿Me hablaban? - le extrañó un poco que ninguno de los Uchihas lo estuviera criticando - ¡Teme, sacaste todo lo que había echado!

-Claro que si idiota, por si no te has dado cuenta estamos comprando los víveres de mi casa.

-Pero... El ramen nunca está de sobra tebbayo, además, siempre que voy a tu casa no puedo comer nada que no sea verduras, ya estoy hasta aquí de tus tomates.

Itachi se rio un poco por el comentario, ni él sabia en que momento había comenzado a mal pensar todas las cosas.

-¡Teme, eso dolió! - como venganza, el menor uso todo el peso del carrito para aplastarle el pie al rubio - ¡ven que te estoy hablando Teme!

Tanto Naruto como su hermano se adelantaron, volvían a discutir por estupideces, la verdad es que a Itachi le agradaba bastante ese ambiente, ver a su hermanito siendo humano con otra persona que no sea de la familia, sin embargo, siempre había un pero, y es que él más que nadie conocía a Sasuke y ya había aprendido bastante del cabeza hueca de su amigo, y sabía que si por algún motivo las cosas no se daban como él esperaba, el mayor afectado seria Sasuke.

-Como me gustaría poder cuidarte de todo Sasuke, pero esto es algo en lo que no me puedo entrometer, solo espero que alguno de ustedes par de tontos se dé cuenta.

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2 semanas después....

-¡Sé mi novio!

-....

-...

- ¡¿KHE?!

-Eso, quiero que seas mi novio - Tan directa como siempre, esa fue la no tan romántica declaración de una rubia que no paraba de acosar a Naruto.

-Pero... Shión, yo apenas y te conozco - Eso no era tan cierto, la verdad es que luego de un trabajo que debieron hacer en parejas ellos se habían vuelto un tanto más cercanos, bromeando en el receso y compartiéndose las tareas, Naruto la consideraba una buena chica (tanto que incluso intento integrarla a su grupo de amigos, pero cierto azabache se negaba rotundamente a acercarse a ella), bueno, al menos hasta la semana pasada, cuando comenzó a darse cuenta de lo obsesiva que podía llegar a ser, llenando su casillero de una infinidad de cartas de color rosado y con muchos corazones, o cuando lo espiaba en medio de los entrenamientos.

-Mentiroso, ya nos hemos contado muchos secretos, y casi siempre hablamos - bueno, esto si lo estaba exagerando la chica, pero para ella Naruto era su príncipe azul.

-Bueno... pero... - y este era el momento en el que usualmente su tan querido amigo Sasuke lo salvaba, ya que él se consideraba tan buena persona que jamás heriría los sentimientos de alguien, menos de una chica, lo que parecía un trabajo perfecto para el Uchiha, quien ya estaba acostumbrado a rechazar a gente a diestra y siniestra - Lo que pasa es que tu no me gustas, lo siento.

Y allí estaban las tan temidas lagrimas que el rubio quería evitar a toda costa - Pero tu realmente me gustas... si tan solo me dieras una oportunidad...

-¡Maldición! No puedo soportar ver a una chica linda llorar... - Naruto se jalaba los cabellos mentalmente, trataba de pensar en alguna forma de salir de esta - ¿Qué haría el Teme en un momento así?

....

-Sasuke kun, tu... tú me gustas...

-Pues me vale, no me interesas, así que lárgate.

-pero... Sasuke kun

-¿Qué? ¿sigues aquí? Vete, chú largo.

....

-Sí, probablemente eso haría el teme - Una gota resbalaba por su sien al pensar en lo frio que podía ser Sasuke.

-Aquí estas Dobe - y como si lo hubiesen invocado, Sasuke aparecía junto a los jóvenes, Naruto corrió para abrazar a su gran salvador - ¡Suéltame Usuratonkachi! - y con todo el afecto del mundo, el azabache incrusto su rodilla en el estómago de su amigo

-¡Teme eso dolió!

-¿¡podrías repetirme cuantas veces te he dicho que no me abraces!? ¡ya te he dicho que no soy como el mapache! - Sasuke trataba de que el contrario no vea su pequeño sonrojo, el cual no pasó desapercibido por Shión

-disculpa, pero estábamos en medio de algo importante y nos estas incomodando un poco.

La vena en la frente del Uchiha solo pudo crecer mientras volvía el tick en su ojo - Pues si el dobe este corrió para alejarse de ti no creo que sea algo realmente importante - Finalizo con su tan querida sonrisa llena de prepotencia y superioridad

Ahora era el turno de Shión para enfurecerse - No porque te parezcas a una anciana gótica tendré consideración contigo.

-Hija de... - estos momentos eran en los que el Uchiha se cuestionaba si sería tan malo ir a la cárcel por homicidio, bueno, en pocos momentos lo descubriría.

Naruto entrando en pánico al ver las intenciones homicidas des su amigo solo corrió para detenerlo, estaba seguro que Sasuke odiaba a todas las personas por igual, así no que no haría distinción en su sexo - Teme cálmate, no cometas una idiotez.

-¡Mira quién habla de idioteces! Y no te preocupes, solo voy a averiguar cuanto resisten esas asquerosas extensiones - estaba haciendo todo su esfuerzo por quitarse a ese idiota de encima de él - ¡Suéltame hijo de...!

-¡Con mi madre no te metas si no quieres una chancla del habanero sangriento!.

Un sudor frio comenzó a recorrer la espalda del Azabache, mientras tragaba pesado - ... Hijo de una hermosa y muy fuerte mujer.

-Oye Sasuke, entiendo que Naruto este bueno, pero él no batea para ese lado - Este comentario lo hizo sin pensar, solo con la intención de molestar al Azabache, y valla que lo consiguió.

-¡Te voy a matar pedazo de...!

-¡Claro que sí lo hago!

-¿¡KHEEEEE!?

Para variar Naruto usaba sus escazas neuronas para idear los planes más descabellados, pero geniales según él, por algo era considerado el idiota número uno en sorprender a los demás - De esta manera me librare rápidamente de Shión.

-¿De... de que hablas Naruto Kun? - La rubia fue la primera en quedar boquiabierta, y era solo porque Sasuke aún no era capaz de procesar la imbecilidad que salió de la boca de su amigo.

-Lo siento mucho Shión, pero aunque lo intentáramos no sería capaz de corresponderte - El rubio mantenía su pose de telenovela melodramática para darle más credibilidad a sus palabras - Joder, soy un genio.

-Idiota, Tarado, Cretino, zopenco, estúpido, imbécil, bobo, subnormal, anormal, retrasado, deficiente mental, lelo, atontado... - Sasuke podría seguir nombrando un sinfín de sinónimos que describían perfectamente a su amigo - Yo no...

Rápidamente su boca fue cubierta por la mano del rubio - Yo tampoco podría vivir sin ti, teme - dio una pequeña vuelta haciendo girar en contra de su voluntad al Azabache, solo para quedar de espaldas con Shión y poder suplicarle a su amigo que le siga el juego - ¿Ver...Verdad Sasuke?

Los nudillos del nombrado ya estaban blancos de tanta fuerza que usaba para controlarse y no saltar a asesinar a ambos, sin embargo, luego de ver la cara de odio de Shión y susurrarle a Naruto "Me debes una dotación de por vida de tomates" él acepto.

-¡Están mintiendo, a Naruto jamás podría gustarle alguien tan odioso como Sasuke!

Naruto solo contenía las carcajadas, mientras usaba un poco de fuerza para sujetar a su amigo quién había retomado sus ansias asesinas - Pero... es cierto.

-¡Demuéstrenlo!

Ninguno de los dos se esperaba esa respuesta, solo pudieron verse unos segundos antes de que el rubio volviera a abrir la boca - ¿Cómo?

-Un beso

-¡Jamás! - el primero en negarse fue Sasuke, mientras que el contrario solo planeaba como iba a salir de esta.

-¡Ja! Sabía que estaban mintiendo - dictamino con su dedo índice.

-¡No, claro que no! - Naruto apegaba a duras penas su cuerpo con el del Azabache quien hacia todo lo posible (sin exagerar) por alejarse, ni los múltiples susurros de "por favor" servían, y que solo le respondía con varios "¡Púdrete!"

-¡Suficiente, esto se te esta yendo de las manos, dobe! - el Uchiha como pudo deshizo el agarre y ahora se dirigía a la joven que aún permanecía expectante - ¡y tú, deberías saber cuándo un no es un no! Además... - No pudo continuar al sentir unos brazos que le rodeaban su cintura, totalmente tenso se giró para encarar al rubio, pero no pudo moverse al ver como se acercaba con una sonrisa en su rostro - ¡DOBE!

-....

Shión quedo totalmente de piedra al ver a ambos jóvenes, Naruto le dedicaba una zorruna sonrisa a ella, mientras apoyaba su mentón en un hombro de Sasuke, las manos del rubio descansaban firmemente aferradas bajo la espalda de su amigo, quien seguía en shock, incapaz de reaccionar - Bueno, no podemos darte un beso porque el teme es un poco tímido, pero la verdad es que lo amo aunque sea muy vergonzoso - a pesar de saber que era una falsa, ambos jóvenes sintieron un extraño calor al escuchar esas palabras.

Cuando finalmente el azabache fue capaz de reaccionar, empujo lo más lejos posible al rubio sin importarle si este se caía - ¡Eso fue pasarse de la raya Usuratonkachi!

Naruto seguía manteniendo su mejor sonrisa al ver que la rubia ya estaba cayendo en la mentira - Lo siento mucho Shión, pero como ves, yo no puedo ser tu novio.

Luego de unos segundos de silencio, la joven solo se alejó sin decir palabra alguna, dejando a ambos chicos totalmente solos, Sasuke fue el primero en comenzar a caminar, hasta que el rubio lo alcanzó,

-Te dije que mi plan funcionaria Teme.

-¿Todos tus planes incluyen agarrarle el culo a los hombres, tarado?

-Bueno, tu no querías darme un beso, así que...

-¡CLARO QUE NO TE IBA A BESAR, DOBE!

-Que exagerado, solo era un pequeño besito - comenzó a estirar la trompa mientras se acercaba un poco más al azabache.

-¡Aléjate Subnormal! - Posando su mano en el rostro del rubio para alejarlo - ¡Me debes una vida de tomates, retrasado, que no se te olvide!

Naruto solo sonreía ante el mal humor de su amigo - Oye teme, sabes, tienes las pompis de una mujer.

-.....

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-¡Que rayos le paso! - Gritaba desesperada Shizune, la enfermera de la academia que ahora revisaba a un rubio bastante herido que descansaba en la camilla.

-Pues... Digamos que lo ataco una bestia salvaje - Respondía Gaara mientras reprochaba discretamente con la mirada a Sasuke, quien solo observaba todo apoyado en el respaldo de la puerta.

-Eso le enseñará a no hacer doberias, hmp.

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2 Semanas después...

Naruto subía de dos en dos los escalones, estaba bastante animado el día de hoy, y quería ir a hablar con sus amigos - Chicos ¿Qué hacen? ¿eh?

Al llegar se percató de que sus dos amigos estaban ahí, pero se sintió un poco molesto al ver al azabache con el ceño fruncido y un poco avergonzado, mientras que el pelirrojo se mantenía indiferente - ¿Qué pasa?

-Nada, yo debo irme les dejo hablar solos - Gaara se despidió de ambos para luego retirarse del lugar.

-Teme ¿qué pasó?

-Nada dobe, ¿Qué quieres?

-¡Ah sí! Recuerdas a Sakura - Se podía percibir la alegría que desprendía el rubio al hablar de la chica pelirrosa, efecto totalmente contrario en Sasuke, que ya se hartaba de que su amigo no parara de hablar de ella desde que llego.

-No es como si su cabello fuera fácil de olvidar - como odiaba el rosado, lo único que le agradaba de esa chica es que no lo acosaba como el resto, lo cual agradecía, pero aun así preferiría que se trasladara de Instituto - ¿Qué sucede con ella?

-Que frio eres teme - respondía con un pequeño puchero, hace unas semanas descubrió que esos gestos siempre hacían reír al Uchiha, aunque este se esforzara para contenerse.

-Ya habla dobe.

-Nah, con esa actitud mejor me voy - Naruto hizo amañe de irse, sabía que algo que odiaba Sasuke era que lo dejaran con la interrogante en la cabeza, así que no pasaron ni 5 segundos cuando este ya lo había detenido del brazo.

-Dije que hablaras Dobe.

-Ok, con buenas palabras quien no entiende, pues, ¡ella acepto!

-¿Qué? a... ¿a qué te refieres? - el Uchiha sintió una pequeña opresión en su pecho, esperaba que el rubio no se refiriera a lo que él estaba pensando.

-¡Ella acepto ser mi novia! - Efectivamente a eso se refería, mientras que Naruto tenía una sonrisa de oreja a oreja, Sasuke solo pudo sentir como esa opresión solo crecía y dolía más - Teme ¿estás bien?

Sasuke aún estaba un tanto ido, pero fue capaz de darle una pequeña orden a su cuerpo, sonreír, tenía que estar feliz por su amigo a pesar de que le doliera - No debería sentirme así.

-Ne Teme, ven hoy a mi casa, hoy te daré los detalles - Naruto era un tanto distraído, pero cuando se trataba del Uchiha él lo conocía como la palma de su mano, fue capaz de notar que algo le pasaba, y de esa manera podría sacarle un poco de información y averiguar a quien debería romperle la cara.

-Paso, hoy estoy un poco cansado.

-Pero Teme... - Fue interrumpido por el sonido de su móvil - ¿sí? ¡Ah Sakura chan! Si, bajo enseguida - finalizando la conversación guardo su teléfono dispuesto a continuar hablando con el Azabache - ¿Teme?

-Dobe estoy un poco cansado, otro día hablamos mejor - Sasuke solo se apoyaba en las barandas mientras observaba la vista, ocultando su rostro, y el rubio sabía que esto era una señal de que si seguía hablando solo haría enojar más al azabache.

-Bien, solo recuerda que para lo que necesites solo háblame ¿vale? - luego de un pequeño asentimiento el rubio comenzó a bajar los peldaños, dejando a su amigo solo para reflexionar.

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-¡Naruto! ¿Dónde estabas? - preguntaba una animada chica quien esperaba bajo el edificio a su ahora novio - ¿Qué tal si damos una vuelta?

-Claro - le dedico una sonrisa para no reflejar su preocupación - ¿Qué rayos le pasara al teme? - dio unos cuantos pasos, pero se detuvo en seco - ¿Eh?

-¿Qué pasa?

-Me cayó una gota - el rubio poso una mano en su mejilla para verificar esa pequeña gota, luego se dedicó a ver el cielo.

-Puede que comience a llover, las nubes están un poco negras

-eso parece - Luego de unos segundos tal y como lo predijeron, una ligera llovizna comenzó a caer, ambos sin tomarle demasiada importancia comenzaron a caminar.

......

Sasuke aún permanecía en la azotea, ahora estaba sentado apoyado en la baranda del edificio, observando como el cielo se ennegrecía, para llevar sus dedos hasta debajo de sus ojos - ¿Estoy... llorando?

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En el presente....

-No sé por qué estoy recordando eso en este momento - Sasuke se dirigía hasta su habitación con una toalla sobre su cabeza, se había dado un baño para evitar enfermarse luego de llegar totalmente empapado, sus padres le dieron una pequeña reprimenda, pero no fue la gran cosa, después de todo raramente el Uchiha socializaba.

Ya en su habitación se lanzó sobre su cama, no pasaron ni cinco minutos cuando el sonido de su móvil le alerto, solo basto ver la pantalla para sacarle una pequeña risa.

-¿Qué quieres pulgoso?

-Hola Sasuke - se podía escuchar un poco agitado en el teléfono, además de que el castaño hablaba muy bajo - Bueno, creo que este no es el mejor método para escribir mi testamento.

-¡SAL DE UNA VEZ MALDITO COBARDE! - pudo reconocer la voz de Itachi de fondo, ahora todo cobraba sentido.

-No me queda mucho tiempo, así que seré breve, por favor, cuando me vaya cuida de Akamaru.

-No te preocupes, estoy seguro que será una buena alfombra.

-¡No! Tu no serias capaz... ¿cierto?

-¿Quieres apostar?

-¡TE ENCONTRÉ BASTARDO!

-¡WUA! ¡Sasuke no olvides que te amo...! - Luego de eso la llamada se cortó abruptamente, lo último que pudo oír fue un fuerte estruendo.

-Ese pulgoso - Seguía con la mirada fija en su móvil,recordando la última frase y sonriendo - Talvez no fue tan mala idea no decirle nada al dobe aquel día.