Finalmente, luego de tanto estrés y trabajos escolares llegaba el tan ansiado fin de semana, y la verdad es que era el primero en demasiado tiempo que se sentía como tal, no tenía ningún reporte o tarea para la próxima semana, no había exámenes de los que preocuparse, era uno de esos pocos días en los que solo podía enfocarse en descansar.

-Genial, además el día esta maravilloso tebbayo - Naruto se estiraba luego de estar unos minutos recostado sobre su cama escuchando algunas de sus canciones favoritas, ya había desayunado y estaba dispuesto a salir, pensó que lo mejor para olvidar tantos problemas estar afuera y correr un poco, era agradable sentir los rayos del sol sobre su piel canela, mientras que el viento revolvía su cabello - Además hoy no tendré que preocuparme por Sakura chan, si no mal recuerdo hoy saldría de compras con su madre, y siempre se toman su tiempo.

Ya con la ropa adecuada, dándole un pequeño beso en la mejilla a su madre se despidió para aprovechar el día, ya fuera de su hogar se tomó solo unos cuantos segundos para apreciar la vista, inflando de aire sus pulmones comenzó con un trote ligero, saludaba alegremente a varios de sus vecinos, quienes ya aprendieron a tomarle cariño luego de todas las travesuras que hizo cuando pequeño.

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- No entiendo por qué me pediste que te acompañara a comprar hasta el supermercado, creo que ya estas grandecito como para necesitar escolta - se quejaba Sasuke yendo a paso lento mientras su acompañante solo ignoraba sus reclamos.

- Imagino que al señor "soy tan Dark" no le molesta ir solo a todas partes, pero para la gente común es muy aburrido, hay ocasiones que hasta yo odio el silencio - refutaba Itachi, cargando con la mayoría de las bolsas del supermercado, hoy tenía planeado una pequeña junta con sus amigos en su casa y como buen anfitrión le encantaba tener todo perfectamente preparado - Además de que necesitaba alguien que me ayudara a cargar todo esto...

- Es solo cosa de acostumbrarte... ¿no crees que compramos demasiado? La mayoría de tus amigos apenas y comen - comento pensando en todos los compañeros de su hermano - el más tragón el Kisame y solo come pescado - dijo haciendo en gesto de asco al recordar la vez en que tuvo la mala suerte de encontrarlo comiendo un pescado crudo, alegando que era más proteico que cocido - Demonios de solo recordar su aliento se me revuelve el estómago.

- Siempre es mejor que sobre a que falte, si luego de que terminemos sigue sobrando comida puedes llamar a Naruto, él también tiene un gran apetito... - Tan ensimismado estaba el mayor pensando en que debería cocinar primero que ni se percató de que su hermano ya no lo estaba siguiendo - ¿eh? ¿Qué sucede?

-¿eh? No es nada - se apresuró en responder mientras seguía pensando en su relación con el ojiazul y en el último comentario de Sakura - solo que no creo que quiera venir a nuestra casa

- No me digas que volvieron a discutir por alguna estupidez

- ¡No discutimos por estupideces!

- ¿enserio? Si no mal recuerdo su último conflicto fue acerca de que, si las vacas podían bajar las escaleras, aun no comprendo cómo terminaron hablando de eso

-La verdad es que ni yo lo recuerdo... - Una pequeña sonrisa apareció al recordar esos tontos momentos - pero esta vez no fue una estupidez, creo que es algo más serio - comento pensativo desviando su mirada a una pareja recostada en el césped se veían demasiado acarameladas para su gusto, no fue capaz de reaccionar hasta que sintió un golpecito en su frente.

- Sasuke tu sabes que pase lo que pase cuentas conmigo ¿cierto? - Itachi había dejado algunas de las bolsas en el suelo mientras enfocaba toda su atención en su hermanito, dedicándole una de esas sonrisas que siempre lo llenaban de seguridad.

- No es nada grave, no tienes que preocuparte, yo puedo arreglarlo - respondió ahora más tranquilo gracias al apoyo de su hermano - aun así, gracias Itachi - ahora ambos levantaban las bolsas dispuestos a continuar con su camino, no fueron capaces de dar cinco pasos cuando Sasuke se sorprendió de sentir un brazo rodeando su hombro, a causa del molesto sol no pudo ver bien su cara, solo pudo reconocer unos cabellos dorados, aun se estaba cuestionando si conocía a algún rubio importante o si podía moler a golpes a ese tipo por su osadía.

- Vaya, que sorpresa topármelos por aquí.

- Ah, hola Deidi - saludo desinteresadamente el mayor sin siquiera voltearse, ya se había percatado de su presencia detrás de unos árboles cuando charlaba con Sasuke.

- ¡¿Cuántas veces debo decirte que dejes de llamarme así?! es un apodo de niña.

- Oh así que es Deidara - Pensó ya más tranquilo para ejecutar su próximo movimiento.

- ¡Auch! ¡Oye maldito mocoso eso me dolió! - se quejaba adolorido Deidara que descansaba ahora en el suelo, luego de que el azabache interpusiera uno de sus pies haciéndolo caer.

- Aprecio mi espacio personal - respondió Sasuke continuando con su camino.

- Son unos desgraciados ¡al menos podrían esperarme bastardos!

El menor Uchiha fue el primero en detenerse, a paso lento se devolvió hasta donde estaba Deidara quien lo miraba con los ojos brillosos pensando que finalmente le había hecho caso - Itachi, ahora tienes un acompañante - Dijo mientras dejaba las bolsas junto a un deprimido rubio - yo me largo - y sin esperar aprobación alguna, desapareció en dirección contraria a ambos jóvenes - No quiero estar en casa con tanto ruido.

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Naruto ya llevaba un buen ritmo, no había recorrido una gran distancia, pero lo estaba haciendo a máxima velocidad para aumentar su resistencia, sin embargo, sentía que no estaba dando su mayor esfuerzo, odiaba que hasta en estas situaciones apareciera el Teme en su mente, pero no podía hacer nada para corregirlo, y es que constantemente corría junto con el azabache ya sea para desafiarlo y que ambos se esforzaran hasta desfallecer, o solo para molestarlo y no hacer tan monótono el recorrido, se sentía como un estúpido al darse cuenta ahora de lo importante que se había vuelto Sasuke para él, y lo peor de todo es que al único que puede recriminarle eso es a sí mismo, siempre estuvo tan ensimismado con el azabache que trataba de involucrarlo en toda su rutina y ahora que ambos se habían distanciado sentía exactamente como si algo le faltara.

-¡Ahhhhh maldición! Debo dejar de pensar en tonterías - Y acelerando aún más el paso queriendo descargar toda esa frustración en una corriente de adrenalina, ya no solo consistía en correr, ahora evadía a las personas y saltaba los obstáculos que le aparecieran, pensó que, si hacia lo más difícil posible su recorrido se enfocaría más en su entorno que en sus pensamientos, así que, agudizando todos sus sentidos comenzó con su nueva meta, cambiando erráticamente de dirección, conociendo nuevos callejones y atravesando de manera irresponsable las calles, ganándose bocinazos y reclamos de los conductores, que ni caso les hizo, pero a pesar de toda la concentración que utilizo no pudo percatarse del joven que repentinamente apareció de la esquina de una calle, quedando ambos en el suelo.

Naruto fue el primero en levantarse, se giró dispuesto a pedir perdón por su torpeza cuando recibió semejante golpe en la cabeza... al diablo la educación, ese miserable no tenía derecho alguno a golpearle por un accidente, ya más dispuesto a insultarlo solo levanto la cabeza unos centímetros cuando recibió otro coscorrón.

-¡Fue un accidente capullo, no tienes que...! ¿eh?

-El primero fue por tirarme, y el segundo por ser tan irresponsable - Se defendió mientras se cruzaba de brazos.

-¡Gaara! ¿Qué haces aquí? - Muy sorprendido y feliz por ver a su amigo de infancia, olvido el dolor del coscorrón y arriesgándose a otro golpe se abalanzó sobre él para abrazarlo

- Creo que los golpes te sacudieron el cerebro ¡Sueltame!

- Vale, vale, pero respóndeme ¿qué estás haciendo aquí?

- Ultimamente mis hermanos han estado mas molestos que de costumbre, necesitaba un poco de aire, y creí que el parque sería el mejor lugar

- ¿el parque?

- tu sabes, el que está cerca de aquí, nosotros tres solíamos venir mucho, claro, hasta que cambie de instituto y ahora solo ibas con Sasuke.

- Ah, el teme... Bueno entonces vamos directo al parque

- ¿Qué? ¡No! La idea de esta salida era relajarme, contigo estoy seguro que me meteré en problemas

- Oh vamos, no seas tímido, estoy seguro que en el fondo de tu corazón estas feliz de que te acompañe.

- Bueno... ahora que lo mencionas... la verdad es que no.

- Pues te jodes, voy a ir quieras o no.

- Supuse que dirías algo así - fingiendo cansancio, opto por seguirle el paso al rubio y dejarle que le guie.

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-Parece que este es un buen lugar para descansar - pensó Sasuke mientras se sentaba en el césped, reposando su espalda en el tronco de un árbol que le brindaba una agradable sombra - el lugar no ha cambiado mucho, bueno, hace solo un mes que no vengo aquí - No era de extrañarse que se encontrara en el parque que hace un tiempo dejo de frecuentar con el rubio, sus pies automáticamente le dirigieron a ese lugar, estaba muy bien cuidado y era de los pocos lugares en la ciudad que se sentía en más armonía con la naturaleza.

Se distrajo unos segundos al ver a unos niños lanzándole una pelota a su mascota, un pequeño Shiba Inu, una raza de perro que siempre le pareció un tanto curioso, se veía muy torpe y pareciera que siempre estuviera feliz, características que, si tuviera que utilizar para describir a alguien, seria al dobe.

-En que estoy pensando, creo que el calor le está afectando a mi cabeza - moviendo levemente su cabeza de un lado a otro, en un inútil intento por hacer desaparecer sus pensamientos decidió enfocarse en el libro que siempre portaba en su bolsillo, prefería eso a leer en su móvil, solo una vez lo intento con una aplicación llamada "Wattpod" había historias bastante buenas, pero otras llegaban a darle escalofrió y eso que no eran del género de terror.

Ya más a gusto pudo avanzar unas diez páginas cuando fue interrumpido por su móvil, basto con ver el numero para sacarle una pequeña sonrisa - Hola

- Hello, my love

-... - y la sonrisa había desaparecido, cortando inmediatamente la llamada y comenzando a buscar entre las opciones la que más había utilizado, Bloquear contacto, no fue capaz de encontrarlo cuando otra llamada estaba entrando - Kiba si vuelves a decir esa estupidez te prometo que hare trizas tu móvil.

Unas cuantas risitas se escucharon por la otra línea - Vale lo siento, fue solo una pequeña broma.

- ¿Qué es lo que quieres?

- ¿Eh? Ah, yo solo quería hablar un poco contigo, estoy un poco aburrido ¿estás en tu casa?

- No, estoy en el parque, hoy mi hermano invito a varios de sus amigos, creo que la casa estará insoportable por unas cuantas horas.

- Oh, bueno, yo estoy paseando un rato a Akamaru, hacía tiempo que no salía a hacer ejercicio y creo que ya está engordando un poco.

- Suena como si estuvieras hablando de ti y no del perro.

- ¡¿Qué!? ¡yo estoy en excelente condición física!... Si quieres, podemos quedar unas horas para que lo compruebes - ese tono sugerente le provoco más de un escalofrió al Uchiha, mientras que el Inuzuka sonreía feliz por los segundos de silencio, sabiendo que había cumplido con su objetivo.

- Vete al diablo pulgoso - ese insulto nuevamente provoco unas risas en el contrario, y el azabache comenzaba a desesperarse de que aquel idiota lo sacara de quicio sin estar presente.

- Bueno, cambiando de tema, ya que no estás en tu casa que te parece si voy a buscarte y me acompañas un rato, creo que Akamaru te echa de menos.

- Pues yo no, me gusta mi rostro sin baba de perro.

- A mí también - apenas pudo aguantar la risa durante el silencioso intervalo, para luego escuchar como finalizaba la llamada, soltó unas cuantas carcajadas para volverlo a llamar, pero esta vez escucho la voz de una mujer "el número que ha marcado lo ha bloqueado de sus contactos" - ¡No era para tanto Sasuke!

Mientras tanto el Uchiha sonreía victorioso, esa era una de las ventajas de hablar por móvil, ya nuevamente dispuesto a enfocarse únicamente en su libro, este fue arrebatado de sus manos, cabreado y queriendo repartir insultos a diestra y siniestra por los pocos segundos de paz que podía tener se levantó para encarar a aquella persona, pero al darse cuenta de quien era sus facciones se suavizaron para dar lugar a una expresión de molestia - ¿Qué haces aquí, mapache?

- Yo solo estaba dando un paseo cuando un tarado tropezó conmigo - señalaba a un rubio que saludaba agitando la mano un tanto tímido - y cuando finalmente llego al parque me encuentro con un amargado que quiere molerme a golpes por un libro, creo que al destino le gusta hacer estupideces.

- Molerte a golpes será lo mínimo que te hare si no me devuelves el libro ahora - y con una prepotente sonrisa recibió aquel objeto del pelirrojo que le imitaba - cuanto tiempo sin vernos, mapache.

- Tu eres quien no me visita cacatúa, al menos Naruto me llama de vez en cuando para quedar y jugar videojuegos.

- No seas tan melodramático, varias veces hablamos por whatsapp.

- Si, pero no es lo mismo.

- Eto... ¿Alguno recuerda que también estoy aquí, tabbayo? - Era el turno del rubio de unirse a la conversación luego de que se sintiera totalmente ignorado por sus amigos.

- ¿Qué tal si caminamos un poco Uchiha?

- Dudo que pueda librarme tan fácil de ustedes, así que vamos.

- ¡Son unos bastardos, no me ignoren!

Ambos solo se rieron un poco mientras esperaban al rubio, la mayor parte del tiempo se la pasaron charlando de cómo habían estado las cosas, claro que Gaara pudo notar como el ambiente no era el mismo, Naruto no se la pasaba molestando al Uchiha como lo hacía antes, e incluso Sasuke no le insultaba por sus comentarios infantiles, ambos se veían bastante distantes, ahora entendía a qué se refería su rubio amigo hace unos minutos antes de que se toparan con el Azabache.

-------------------- Flash Back --------------------------

- ¿y que me cuentas Gaara? ¿ha sido muy difícil este último año para ti?

- La verdad es que no, la materia siempre ha sido muy fácil, nos dan muchos trabajos, pero no es nada del otro mundo.

- ¡Que envidia, para ti siempre los estudios fueron sencillos, y yo que sufro con cada nueva materia!

- Solo es cosa de enfocarte un poco más - respondió desinteresado el pelirrojo - Y estar atento a cuando el profesor no está viendo para sacar el móvil.

- Yo no tengo esas facilidades, tu sabes que siempre me enfoco más en lo practico que en lo teórico.

- Bueno cambiando de tema, quiero hacerte una pregunta.

- Me imagino sobre qué, pero si quieres hazla - repentinamente el semblante del rubio cambio a uno más serio.

- Esta es la segunda vez que me topo contigo, y pareciera que tus problemas con Sasuke aún no se arreglan ¿Qué rayos fue lo que ocurrió entre ustedes?

- Sabía que era algo relacionado con el Teme, bueno, supongo que lo mejor es decírselo a alguien, últimamente he tenido bastantes problemas con Sasuke

- ¿Problemas como cuáles? Si no mal recuerdo eras tú quien siempre lo metía en problemas.

Al recordar esos momentos unas risitas se le escaparon a Naruto - no me refiero a ese tipo de problemas.

- ¿Entonces?

- Es solo que ya no somos como antes, ahora los dos tenemos distintas preocupaciones.

- Ok, esa es la respuesta de un tonto sabelotodo, ahora quiero escuchar la de Naruto Uzumaki

Una gota resbalo por la sien del mencionado, siempre le llamo la atención lo directo que podía ser su amigo - Bueno... como te lo explico... Digamos que el chico nuevo ahora está acaparando toda la atención del Teme y este no hace intento alguno por alejarlo.

- ¿Entonces el problema aquí es el chico nuevo?

- Si, bueno... no, la verdad es que últimamente Sasuke y yo nos hemos distanciado bastante

-¿Por qué?

- pues, por mi culpa supongo, últimamente he tratado de alejarlo, pero es tan condenadamente difícil, ya estoy tan acostumbrado a su compañía que se siente raro el que no esté ahí.

- ¿Entonces por qué es que intentas alejarlo? - respondió desinteresadamente - por lo que me has dicho, tu eres el único culpable de lo que te está pasando

- oye, no te lo dije para que me restriegues la culpa en la cara, ya sé que he metido la pata, pero de momento solo puedo decirte que la situación es más complicada de lo que parece.

- Pues si no me dices todo dudo mucho que pueda ayudarte.

- El problema es que ni yo tengo todo claro - respondió pensativo mientras observaba a una pareja pasar junto a ellos - es por eso que no puedo contarte todos los detalles.

- Naruto, tu siempre fuiste despistado, pero es solo hoy que te veo tratando de hacerte el tonto.

- ¿Eh? ¿Qué quieres decir con eso? - sorprendido volteo a ver a su amigo, que solo mantenía la mirada enfrente.

- Creo que te lo dejare como tarea para la casa, además, mira quien está hablando por teléfono - señaló el pelirrojo a un azabache sentado junto a un árbol - ven, vamos a joderle la mañana.

-¡Tiene que ser una broma! ¡¿acaso todo lo que haga tiene relación con el teme?!

--------- Fin del Flash Back -------------------------

- Sé que me prometí no intervenir - pensaba Gaara viendo la incomodidad por parte de sus amigos - ¡Pero ambos son tan estúpidos! - le estaba fastidiando que esta fuera la segunda vez que tuviera que actuar de cupido, siendo la primera vez con su hermana y el tal Shikamaru, ya que la primera llegaba con unos cambios de humor brutales a causa del Nara - Bien, esta es la última oportunidad que les doy para solucionarlo todo ustedes mismos.

- ¿Eh? ¿Qué sucede Gaara? - Preguntaba Naruto luego de ver que este no respondiera ante sus comentarios, y ni que hablar del Uchiha que solo les mantenía el ritmo mientras miraba todas las cosas en el parque, bueno, todo menos Naruto.

- La verdad es que creo que se me hizo un poco tarde, hoy me toca a mí preparar el almuerzo.

- ¡¿Qué?! pero si acabamos de encontrarnos los tres, no puedes irte tan pronto.

- Pues ni parece que nos hallamos encontrado todos, pareciera como si cada uno se hubiera encontrado conmigo - Pensaba Gaara mientras se despedía de ambos jóvenes, luego de rechazar la oferta del rubio de acompañarlo hasta su hogar - Espero podernos encontrar de nuevo y que todo se haya arreglado.

La última frase llamo un poco la curiosidad del Uchiha - ¿A qué se refiere?

-No... No tengo idea - respondió apresuradamente Naruto mientras intentaba cambiar el tema - Oye están vendiendo helados ¿Quieres uno?

Ahora fue el turno del azabache de ponerse nervioso, luego de recordar el ridículo que hizo la última vez por culpa de su amiga Karin - No, gracias.

Ambos jóvenes se encontraban caminando en pleno silencio, uno bastante incómodo, usualmente era el rubio quien comenzaba las pláticas/discusiones, pero en este momento no cruzaba ningún buen tema a tratar con el azabache

-Eto... esta bonito el día ¿no crees? - con un pequeño sonrojo recibió como respuesta la mirada del Uchiha, la cual podía leer perfectamente "¿me estas jodiendo, enserio se te ocurre hablar del clima?" para luego volver a su rotundo silencio - Bueno... ¿Qué haces por aquí?

- Solo quiero despejarme un poco, últimamente estoy muy estresado y mi casa estará muy ocupada hoy.

- ¿estresado? ¿estas teniendo problemas?

- Claro que sí, y unos de mis más grandes problemas se llama Naruto Uzumaki

- ¿¡Qué!? ¡¿y se puede saber que hice yo ahora?!

- Existir - Pensaba el Uchiha viendo con cierta molestia al rubio, pero al ver su cara de incertidumbre volvió a relajar sus facciones - Al parecer Sakura no le ha dicho nada... supongo que no tiene caso desquitarme con él - Tras un suspiro volvió a enfocar su mirada hacia delante - Olvídalo, solo lo dije para molestarte, más importante aún ¿Qué hacían Gaara y tú por aquí?

Naruto, aún inconforme por la respuesta que le dio su amigo, prefirió dejarla pasar por esta ocasión - Pues, como te dijo, yo estaba trotando por las calles cuando accidentalmente me lo topé, y él tenía planeado venir hasta aquí así que lo acompañé.

- Hmp, que extraña coincidencia de que siempre nos topemos los tres - comentó mientras relajaba los hombros para restarle importancia.

- Querrás decir nosotros dos - Corrigió en su mente el rubio - tu sabes que cuando estábamos en el mismo instituto siempre fuimos muy unidos, y cuando logramos integrarte los tres éramos inseparables, supongo que es normal que siempre nos topemos.

- No entiendo que tiene que ver una cosa con la otra.

- Se podría decir que estamos unidos por un vínculo - respondió rápidamente el Uzumaki, aunque al darse cuenta de cómo sonó lo que dijo sus mejillas se tiñeron de un ligero tono carmín - ¡Me refiero a nosotros tres! - se corrigió lo más rápido que pudo.

-¿Un vínculo? - Aquella frase hizo que instintivamente llevara su mano hasta el collar que reposaba en su cuello para observarlo por unos segundos - Ya veo.

Naruto rápidamente se dio cuenta de aquella reacción y no pudo evitar que le llamara la atención - ¿De dónde rayos saco ese collar? Pareciera que es importante para él - curioso quiso sacarle más información al Uchiha, pero sabía que preguntar directamente no funcionaria.

- ¡Reacciona dobe!

- ¿Eh? ¿Qué... qué sucede?

- Te estoy preguntando que tanto ves.

- Nada, solo quería saber por qué siempre eres tan presumido

- ¡¿Qué?! ¿a qué demonios vino eso?

- Solo mírate, presumiendo tu elegante collar a la más mínima oportunidad

- ¿A qué diablos te refieres Usuratonkachi? Yo no estoy presumiendo nada

- Claro que no, estábamos de lo más bien hablando y de la nada se te ocurrió levantar tu collar para poder verlo mejor.

- Una cosa no tiene relación con la otra, dobe.

- Podría apostarte que esta cosa esta hecha de Platino, moldeado con sangre de dragón y bañado en baba de unicornio.

- Para que te des cuenta de lo tarado que estas siendo, esta cosa no costo demasiado, lo compramos en uno de los puestos de la feria... - Solo en ese momento, luego de tranquilizarse por la provocación del rubio pudo darse cuenta de que había revelado demasiada información - ¿lo habrá hecho apropósito? No... él no es tan listo.

- ¡Bingo! - Sonreía triunfante por su hallazgo, para luego cambiar su rostro a uno totalmente neutral, intentando procesar la información y finalmente uno de falsa molestia - ¡Teme! ¡¿Cómo que fuiste a la feria sin decirme nada?! ¡y yo que te había invitado y me rechazaste! - finalizando su última acusación pudo notar otra parte pequeña pero muy importante de lo que había dicho el Uchiha - ¿compramos? - y es que la falsa molestia ahora estaba siendo reemplazada por una verdadera, y es que los celos carcomían al rubio de solo imaginarse con quién pudo haber ido - Teme ¿con quién fuiste a la feria?

- Eso no tiene importancia alguna - Respondió Sasuke tratando de zafarse de la evidente discusión que se le venía.

- ¡Claro que tiene importancia! Y ni se te ocurra decirme que fue con Itachi, que tú mismo me dijiste que ha estado demasiado ocupado estas semanas

-...

- Ni con Karin, que estoy seguro que estaría presumiendo tal hazaña durante más de un mes.

-...

- Y dudo mucho que Suigetsu te haya querido acompañar sin Karin.

- ¡Fue Kiba! ¡¿Bien, estas feliz?! - respondió fuera de sus casillas ante el constante hostigamiento.

-...- en esta ocasión fue el rubio quien guardo silencio mientras dejaba de caminar, apretando sus puños intentando contener las ganas de golpear al primer fulano que se le atravesara - Créeme que siento de todo menos felicidad... - A paso veloz volvió a posicionarse junto al azabache que hacia su mayor esfuerzo por evitar un escándalo en ese lugar - ¿¡y por qué rayos salieron juntos eh!?

- Como si tuviera que darte explicaciones, Usuratonkachi - Tratando de acelerar el paso, pero sin correr, se alejaba lo más que podía de Naruto, esperando que de alguna manera dejara de insistir tanto - Como si eso fuera posible, este idiota no se da nunca por vencido - cambiando de plan, ahora busco el lugar menos poblado para poder arreglar las cosas de una vez por todas.

- Pues créeme que me gustaría escuchar una buena explicación ¿Qué fue lo que paso con la apuesta que tuvieron? ¡ese idiota dijo que no volvería a molestarte si le ganabas!

ambos ahora se encontraban nuevamente bajo el árbol donde hace unos cuantos minutos descansaba el Uchiha, afortunadamente aquellos niños que jugaban ahí ya se habían ido, y no había más personas por los alrededores - ¡Fui yo quien propuso la salida!

Esa frase le había dolido bastante al rubio, aún no estaba seguro del porqué, pero conocía perfectamente la sensación, era la misma que llevaba meses acumulándose, aquella sensación que comenzó a sentir desde que llego aquel idiota con aliento de perro, solo que amplificada por mil - no es cierto...

- ¿Qué?

- ¡Que no es cierto! - Grito una tanto desesperado el rubio, mientras miraba con recelo al Uchiha - eres un mentiroso ¡¿Por qué demonios harías algo como eso?!

- Yo... no lo sé - no quería admitirlo, pero en estos momentos se estaba sintiendo un poco intimidado por la mirada de Naruto, y aunque él sabía por qué lo había hecho, algo le decía que no sería buena idea explicárselo al rubio.

- Vamos teme... solo dime que fue una broma de mal gusto - trataba de convencerse el rubio, dentro de él presentía que si no escuchaba las palabras adecuadas por parte del azabache su mundo entero se vendría abajo.

- No - el Uchiha ya se estaba hartando de tantos malos entendidos, sin importar las consecuencias, debía ser claro y decirle todo a su amigo - Nosotros realmente salimos ese día.

- ¿Qué? pero... ¡¿por qué?! - La desesperación y el miedo la estaban envolviendo, un miedo que, aunque él sabía de qué se trataba, se negaba a aceptar - ¿acaso fue por lastima?

- ¡No! - toda su seguridad volvió con esa única palabra - en un principio yo también pensé lo mismo, pero...

- Sasuke... - Naruto ya estaba temiendo por lo que estaba a punto de escuchar, y quería, no, necesitaba que el Uchiha parara en este momento.

- Creo que ha comenzado a gustarme... - Respondió el azabache mientras miraba el collar que ahora estaba entre sus manos.

Un silencio absoluto reino entre ambos jóvenes, el cual sería roto por el Uzumaki - Mentiroso...

Aquella palabra llamo la atención del Uchiha, sin embargo, no fue capaz de reaccionar a tiempo cuando Naruto se abalanzó sobre él, apresando sus manos a sus costados y sujetándolos firmemente contra aquel árbol - ¡Que rayos te pasa Dobe!

- ¡No vuelvas a decir eso! - Grito furioso el rubio, Sasuke había olvidado lo imponente que podía llegar a ser su amigo cuando estaba cabreado, o realmente era la primera vez que lo experimentaba ya que él jamás se había molestado a tal grado con el Uchiha.

-¡Suéltame Usuratonkachi! ¡yo puedo hacer lo que me dé la jodida gana! - a pesar de que Naruto realmente estaba intimidando al azabache, este no lo demostraría tan fácilmente, un agudo dolor rodeo sus muñecas debido a la presión ejercida sobre estos - ¡Ah! ¡Maldita sea, Dobe... me lastimas!

- No quiero que te vuelvas a acercar a él...

- ¡Eres un... te digo que me sueltes! - finalmente Sasuke apartaba su vista de sus manos al no encontrar una manera de liberarlas, encarando por primera vez al rubio directamente a los ojos, sin embargo, su sorpresa fue grande al notar que su mirada no reflejaba enojo como debería hacerlo, más bien era dolor, un dolor similar al que él había experimentado hace tanto tiempo - ¿Naruto?

- yo... - el rubio se acercaba con cautela, ya no estaba ejerciendo tanta fuerza sobre su amigo, solo la suficiente para que este no se escapara, aunque no parecía tener intención de hacerlo - no quiero que estés con otra persona... yo...

No fue capaz de terminar la oración, Sasuke pudo ver en cámara lenta como todo sucedía, de un segundo para otro Naruto ya no estaba sobre él, ahora se encontraba forcejeando en el suelo luego de ser derribado por una blanca entidad.

-¡No Akamaru! - de la nada ahora había aparecido el joven Inuzuka, Ignorando al azabache quién seguía apoyado contra aquel árbol aún sin saber qué hacer, fue el agónico grito de dolor de Naruto el que hizo reaccionar a Sasuke, para ver horrorizado como los colmillos de Akamaru estaban profundamente enterrados sobre el brazo de su amigo.

-¡Naruto! ¡Kiba quita a Akamaru! - Luego de que finalmente su cuerpo reaccionara, en ayuda de su amigo fue capaz de quitarle de encima aquella mascota que ahora se asimilaba más a una bestia, no dejaba de gruñirle a Naruto, mientras este gritaba de dolor y veía como la manga de su chaqueta se impregnaba de su sangre - ¡Rápido Kiba llama a una ambulancia! - Gritaba desesperado Sasuke mientras rompía la manga de su camisa para hacerle un improvisado torniquete y detener el sangrado - de algo que sirvan esas jodidas lecciones de primeros auxilios.

Una vez terminado y asegurándose de que la ayuda estaba en camino, se enfocó únicamente en tranquilizar al rubio, lo cual era un trabajo demasiado difícil, sobre todo si ni él estaba tranquilo, por primera vez en mucho tiempo tuvo miedo, miedo de imaginar que algo le haya pasado a Naruto por su culpa, de que las consecuencias sean permanentes - ¡Tranquilízate Sasuke, en estos momentos el dobe depende de ti!

Aunque Sasuke estaba hecho un manojo de nervios, Kiba estaba aún peor, no entendía como pudo suceder eso, hace solo unos minutos estaba camino al parque para ver si encontraba al moreno, no fue capaz de divisarlo cuando de la nada Akamaru comenzó a gruñir y alterarse, y luego de que rompiera el collar se abalanzo contra el Uzumaki, a quien pudo divisarlo junto al Uchiha, pero nada de eso importaba, si las cosas se agravaban aún más Naruto podía terminar con lesiones irreversibles, y si tomaban acciones legales podían hasta sacrificar a su mascota por considerársele peligroso.

Mientras tanto el rubio herido no podía hacer más que intentar contener los gritos de dolor, hasta que finalmente pudieron divisar una ambulancia que se dirigía hacia ellos, haciendo señas para llamar su atención aparcaron junto a los jóvenes, bajándose dos personas un poco mayores que ellos mientras habrían la parte trasera del vehículo para sacar la camilla junto a todos los instrumentos que necesitasen, una vez Naruto estuviera sobre esta se disponían a marcharse cuando se percataron de que el Uchiha se posicionaba junto al herido.

- Lo lamento, pero no puede acompañarnos

- Pero... yo soy su pareja.

- Lo sentimos, pero, aun así, es peligrosos que usted...

- Por favor, déjenlo que venga - Pronunciaba un adolorido Naruto mirando al personal paramédico - quiero que me acompañe.

A regañadientes ambos profesionales le permitieron subir al Uchiha, no podían perder más tiempo y tal vez ayudaría a calmar al paciente, mientras uno de los jóvenes se encargaba de deshacer el improvisado torniquete realizado por el Uchiha para revisar la gravedad de la herida, Naruto solo balbuceaba un sinfín de groserías a causa de la escasa sutiliza del joven.

-Es tu primer día ¿cierto? - cuestionaba el azabache mientras recriminaba con odio todo lo que hacía el "profesional" quien trataba al rubio como alguna especie de muñeco de práctica.

Solo obtuvo una mirada de molestia como respuesta, para luego comenzar a ser más delicado con el Uzumaki - La herida es un poco grande, afortunadamente parece que no es muy profunda, te suministraremos antibióticos para prevenir alguna infección y un fuerte analgésico para aminorar el dolor - dicho y hecho, luego de una inyección las expresiones del rubio parecían calmarse, mientras tanto el Uchiha volvía a relajar sus facciones. Luego de unos segundos comenzó a sentir un alivio en su mano, ni cuenta se dio de en qué momento Naruto la había tomado, y al parecer, la había oprimido con mucha fuerza pues poco a poco esta retornaba a su tonalidad inicial.

- Casi me dejas sin mano, dobe.

- Jejeje, perdón teme

- Bien, ahora que están más calmado, una vez lleguemos al hospital el medico te revisará y limpiará la herida, luego te harán una radiografía, como te dije parece que la herida no es muy profunda, pero debemos descartar toda posible fractura a los huesos - la mirada del paramédico se posesionaba sobre el Uchiha al notar que Naruto parecía no prestarle atención en lo más mínimo - De casualidad conocen al dueño del perro, necesitamos saber si el animal tiene todas sus vacunas y descartar el posible contagio de la rabia.

- Tiene todas sus vacunas - respondió Sasuke - lo llamare para que traiga los documentos al hospital.

Una vez en el establecimiento llevaron rápidamente a Naruto por uno de los pabellones, mientras le señalaban al Uchiha que mantuviera la calma en la sala de espera, obviamente tuvo que llamar a la familia del rubio para explicarles la condición en la que se encontraba el rubio, apenas menciono el hospital la línea se cortó, asumiendo que los padres llegarían en cuestión de segundos, volvió a marca en su móvil, pero esta vez a su hermano para hacerle saber dónde estaba y luego de convencerlo de que no viniera y que lo mantendría informado de la situación del rubio este acepto a no acompañarlo, finalmente llamo a Kiba, quien afirmó que llevaba todos los documentos sobre su mascota y que estaría ahí en 10 minutos.

Todo era un caos en estos momentos, lo doctores aún no daban información alguna acerca de Naruto, en estos momentos Kushina estaba hecha una fiera al enterarse de lo que había pasado, y sin ninguna pisca de vergüenza fue directamente a abofetear al Inuzuka, gritando y recriminándole acerca de lo irresponsable que había sido y que todo era su culpa, Sasuke iba a intervenir, pero fue Minato quien alejo a su esposa de la discusión.

- Realmente lamento todo lo sucedido - se disculpaba aún con la mano en la mejilla para aminorar un poco el dolor.

- No... - esta vez fue el padre quien hablo - créeme que aún no lo lamentas, más te vale que nuestro hijo este bien - Ni Sasuke podía creer como esos ojos que denotaban tanta alegría al igual que su dobe amigo, se pudieron volver tan oscuros y cargados de ira.

- ¿Familia Uzumaki? - Finalmente aparecía el doctor encargado de la salud de su amigo, la primera en acudir fue Kushina, mientras que Sasuke se acercaba con un poco de timidez debido al cargo de conciencia - Bueno, a simple vista parece que la herida de su hijo no paso a mayores, tendrán que esperar unas semanas para los resultados de las radiografías, pero de existir algún tipo de lesión puedo garantizarle que esta será mínima, solo requerirá de un poco de descanso, además de que gracias a los documentos proporcionados por el joven pudimos descartar un gran número de enfermedades, en estos momentos el joven Naruto los está esperando en una de nuestras habitaciones, necesitara descansar aquí por lo menos un día - luego de aquella explicación sintieron como si desapareciera un enorme peso de encima - por políticas del mismo hospital solo podemos permitir la visita de dos personas a la vez, es para mantener el orden en el lugar.

Sin preguntar nada más, ambos adultos se adentraron para ser dirigidos por el médico, durante estos minutos Sasuke se acercó a Kiba en un vago intento por tranquilizarlo, él no era estúpido, y sabía que por muy generosos que fueran los padres de Naruto, si había algo que ellos jamás perdonarían es que alguien le hiciera daño a su hijo, en el mejor de los casos podían hacerlo costear el tratamiento de Naruto, y en el peor de los escenarios, podían sacrificar a su mascota, siendo esta última opción la más temida por el castaño. En estos momentos Sasuke sentia una enorme impotencia de no poder hacer nada mientras veía como su amigo sufría, fue sacado bruscamente de sus pensamientos al escuchar los gritos de Kushina.

- ¡Aun no entiendo cómo pudo pedirnos semejante estupidez! ¡acaso no se da cuenta de lo grave de la situación!

- Bueno, tú conoces a Naruto, no hay forma de hacerlo entender.

Kiba rápidamente se levantó de su asiento al percatarse que ambos adultos iban en su dirección, estaba muerto del miedo y de los nervios por lo que iba a pasar a partir de ahora.

- ¡No tienes ideas de la que te salvaste mocoso! - Kushina le apuntaba acusadoramente con el dedo índice - No puedo entender por qué mi hijo no quiere hacer nada en tu contra, pero escúchame, no te libraras tan fácilmente de esta, serás tú el encargado de pagar todos sus medicamentos y tratamientos ¿¡Me oíste!?

A pesar del escándalo que estaban armando, al Uchiha le pareció que el ambiente se había relajado un poco, ahora ambos adultos tenían un aura un poco más relajante, sin embargo, eso no impidió que la mayor tomará de la mejilla a Kiba y lo estirará mientras este solo asentía a todas las peticiones.

-Sasuke... mi hijo quiere verte unos minutos - no fue capaz de percatarse de en qué momento Minato se posesionó junto a él, pero luego de unos segundos solo asintió para ir hasta la habitación del rubio.

Luego de unos cuantos pasos ahora estaba frente a la puerta de la habitación con el número que le habían dicho, aunque no lo reflejara se sentía un tanto nervioso, ya sabía que la lesión no había pasado a mayores, pero tenía un poco de miedo de que Naruto le culpara por lo sucedido, sin más solo respiro profundo y procedió a entrar.

- ¡Teme, te demoraste una eternidad! - y como si absolutamente nada hubiese pasado, ahí se encontraba el dobe de su amigo, sonriéndole como siempre, y como si un acto de reflejo se tratase, Sasuke tomo una de las almohadas de otra cama para arrojársela en el rostro - ¡Ten más cuidado teme, no ves que estoy convaleciente!

- Mala hierba nunca muere, dobe - y relajando el ambiente ahora era el turno del azabache de sonreír, dando unos pasos para ubicarse junto a él - ¿Qué quieres?

- oh perdón, solo supuse que mi amigo estaría preocupado por mi salud ¿acaso estoy interviniendo en tu ocupada agenda?

Ese absurdo comentario fue capaz de sacarle unas pequeñas risas al azabache, mientras que Naruto solo hacia un puchero, aunque en el fondo se sentía bien estando acompañado por Sasuke - ¿Cómo te sientes dobe?

- Bueno, ya no me duele, pero parece que me quedara una horrible cicatriz.

- Lo dudo, tu siempre has cicatrizado bien ¿recuerdas los primeros años cuando te la pasabas golpeando a los demás?

- si lo dices así, haces que me sienta como un matón, teme.

- Pues es la vedad, dobe, aunque... ahora que lo recuerdo siempre te metías en problemas por defender a alguien.

- Pues soy un héroe, que más se le puede hacer.

- Eres un tarado, eso es lo que eres - Haciendo otro pequeño puchero ante el comentario de su amigo, Naruto solo desvió la mirada con un chasquido de la lengua - ¿Por qué lo hiciste?

Ahora todo el ambiente se volvía un poco tenso, el rubio capto inmediatamente que se refería de su decisión con respecto a Kiba, se mantuvo viéndolo directamente a los ojos por unos segundos para luego relajar sus hombros - supongo que lo hice por ti.

- ¿Por mí? - El azabache había estado preparada para cualquier respuesta excepto esa, mirándolo con un poco de incredulidad espero a que continuara.

- Supongo que todo lo sucedido fue un accidente, y como no fue nada grave no vi necesario complicar demás el asunto - junto con una pequeña pausa ahora debió voltear su mirada hacia la ventana enfocándose únicamente en ver el movimiento de las nubes, era un poco vergonzoso lo que estaba a punto de decir - sé que él es tu amigo, y también sé que si él sufre tú también lo harás - con el rabillo del ojo pudo notar como el Azabache iba a discutir eso - Aunque eres tan orgulloso que estoy seguro que no lo aceptaras.

Trascurrieron unos segundos en silencio hasta que el mismo Sasuke lo finalizo - Hmp, eres un dobe sin remedio - las carcajadas no se hicieron esperar, aunque fueron muy leves - gracias.

- No tienes nada que agradecer, después de todo eres mi pareja - y nuevamente la mirada azulina se posesionaba sobre un abochornado Uchiha - ¿Cierto?

- ¡Eres un... eso solo lo dije para que me dejaran subirme tarado!

- Pero aun si lo dijiste, vaya teme, ni recuerdo cuando fue que te me declaraste

- ¡Cállate! Ni en una situación como esta puedes comportarte maduramente - cada palabra iba acompañada de una carcajada de Naruto, estaba seguro que en el mundo no existía mejor analgésico que molestar a su teme amigo.

- Vamos no te lo tomes a mal, era solo una pequeña bromita.

- Si claro, pareciera que fuera cierto, siempre estas celoso de Kiba - y con este último comentario las risas cesaron, ahora eran ambos quienes estaban abochornados - Creo que... lo mejor será que me vaya, recupérate dobe.

- No, espera... - No fue capaz de terminar cuando la puerta comenzó a abrirse dando paso a la novia de Naruto, quien rápidamente y preocupada se acercó al nombrado para abrazarlo, ni cuenta se había dado de la presencia de un tercero - ¡estaba muy preocupada!

- Sa... Sakura ¿Qué haces aquí?

-tus padres me llamaron para decirme todo, disculpa no pude llegar antes - fue en ese momento que la joven se dio cuenta de la presencia del Uchiha - Sasuke ¿Qué haces aquí?

-Yo solo pasaba a ver si el dobe estaba bien, no te preocupes ya me iba - dedicándole un ultimo vistaso a su amigo, quien le suplicaba con la mirada que no se fuera, pero que fue incapaz de decirlo a causa de su novia - Cuídate, volveré mañana cuando te den el alta.

Alejándose de aquella habitación al primero que visualizo fue a su amigo, mientras este solo le esperaba sentado - acompáñame al segundo piso por una soda, en el camino te explico todo - asintiendo se levantó para acompañarlo a subir por las escaleras.

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- ¿Entonces, solo tendré que comprar sus medicamentos? - Preguntaba aún incrédulo el castaño luego de que Sasuke le reafirmara lo que había dicho Kushina - pero si el me odia ¿Por qué hace esto?

- Naruto no es un mal tipo, puede que no le agrades, pero eso no significa que te odie - ambos esperaban el ascensor pues estaba más cerca de la salida, el azabache daba un pequeño sorbo mientras las puertas se abrían para ingresar.

- Supongo que lo juzgue mal, debería darle las gracias personalmente, pero creo que este no es el mejor momento para hacerlo - a pesar de que Kiba ya sabía que las cosas no se pondrían peores aun sentía ese nudo en su estómago, además, en su mente aun rondaba la posibilidad de que Naruto se arrepintiera y que sí presentara cargos, todos esos pensamientos se fueron cuando sintió un ligero pellizco en su antebrazo.

- Naruto no hará nada, cuando toma una decisión jamás se retracta, no pienses en tonterías - Nuevamente como si leyera su mente Sasuke sabia precisamente que hacer o decir, ganándose una sonrisa del castaño, volvió a tomar otro sorbo mientras se abrían nuevamente las puertas, mostrando una silueta fácilmente reconocible para él - ¿Qué haces aquí?