Preocupado, esa era la palabra perfecta para describir lo que estaba sintiendo Namjoon en ese preciso momento, porque en verdad lo estaba, estaba tan preocupado por Yoongi que hasta parecía ser una locura, jamás se había sentido de aquel modo, sabe perfectamente que Yoongi no es alguien que no sepa lidiar con las personas, y por supuesto, Yoongi sabía muy bien como defenderse de alguien como Park Jimin, pero eso no quitaba el hecho de que él se sintiera preocupado por lo que estaba pasando.

La escena que presencio fue tan extraña, mirar a Yoongi retener esa molestia dentro suyo sin siquiera hacer algo más para cerrarle la boca a Jimin por sus comentarios, era tan extraño, en cierta forma, Yoongi se trata de una persona que se deja llevar mucho por sus impulsos, pero eso le había servido durante mucho tiempo, porque nadie se atrevía a meterse en su camino, todos ya sabían lo que pasaría si es que Yoongi se molestaba, y casi siempre se dejaban de lado los insultos, y todo se iba a un punto mucho más agresivo, y no era que a Yoongi le molestasen las peleas, de hecho las evitaba, pero cuando se trataba de personas odiosas, las cosas eran distintas, muy distintas.

Pero ahora que Namjoon había visto el comportamiento de Yoongi, se le había hecho tan extraño, sabe que Yoongi esta jugando con Jimin, sabe que su amigo lo único que quiere es darle un buen trago de su propia medicina a ese imbécil, pero eso no quitaba el hecho de que parecía ser que Yoongi poco a poco estaba bajando cada vez más la guardia, y eso era de preocuparse.

—¿Ahora dejas que él te hable así? —la voz de Namjoon hizo que Yoongi dejase de prestar más atención a su bebida, estaban en la cafetería, la cual casi se encontraba vacía, Yoongi se había pedido una malteada de chocolate, mientras que Namjoon simplemente había pedido un sándwich y un té de hierbabuena.

—¿De qué hablas? —pregunto Yoongi.

—De Jimin —dijo en concreto, no se iba andar con rodeos—, de él es quien hablo, y también de lo que escuché y vi hace un rato.

Yoongi rodo los ojos y soltó un pequeño resoplido.

—No estoy de humor como para hablar de él.

—Lo sé —se encogió de hombros—, pero estoy definitivamente muy sorprendido —Yoongi elevo una ceja al escucharlo—, es que —sonrió levemente mientras negaba con la cabeza—, no puedo creer lo que vi, es todo.

Sí, quizás era un hecho increíble, porque Yoongi siempre juro odio eterno hacia Park Jimin, y ahora permitir que inclusive ese pedazo de mierda le hablase de esa forma, era algo de no creer, Yoongi lo sabe perfectamente, pero no era como si cada que lo viese simplemente quisiera patearle en los testículos, no, no siempre va querer hacerlo, quizás otras veces le pueda regalar un puñetazo en el rostro o quizás en el abdomen, pero había días en los que ni eso quería hacer, y mucho menos cuando se encuentra en un pequeño estado de tristeza y de malhumor.

—Sólo no estoy de humor para hacerlo cerrar la boca —se encogió de hombros, restándole importancia al asunto—, es todo... —llevo sus labios a la pajilla que se encontraba en su bebida y comenzó a sorber, de inmediato el sabor dulce inundo sus papilas gustativas.

Namjoon miro a su amigo, él sabe que algo anda mal, tan mal, que inclusive puede que Yoongi termine por acceder a todo lo propuesto por Jimin.

—¿Estás seguro de que sólo es tu pereza de atacarlo? —Yoongi dio un asentimiento—. ¿O es que no quieres decir que te esta empezando a gustar Park?

De inmediato Yoongi dejo de sorber de su bebida, y miro a Namjoon, sus ojos se abrieron en grande, mostrando la evidente sorpresa que le había causado aquella pregunta tan inesperada, trago el liquido que todavía mantenía en su boca, sintiendo de paso como el nudo en su garganta se destensaba ligeramente cuando trago, y luego soltó un resoplido, ¿acaso Namjoon se estaba volviendo loco? ¡Él jamás en su vida le gustaría un tipo como Park Jimin!

—Santa mierda, Kim —menciono Yoongi de inmediato—, ¿acaso enloqueciste? ¡Agh! Ni siquiera en un mundo paralelo me gustaría ese imbécil.

Namjoon elevo ambas cejas ante esa respuesta.

—Sí eso es lo que crees, entonces ¿por qué dejaste que te hablará de ese modo? —volvió a insistir.

—Ya te lo dije, ¿o no te quedo claro? —menciono Yoongi sin dejar de apretar con fuerza los dientes.

—Me quedo muy claro —dio un asentimiento—, pero eso no quita el hecho de algunas cosas.

—¿Cómo cuáles?

—A ti no te gusta que te digan por apodos estúpidos como ese, ¿o me equivoco, gatito?

Quizás Namjoon había logrado dejar con la boca cerrada a Yoongi, pero eso no quitaba que Yoongi se sintiera furioso por aquellas palabras, frunció el ceño y cruzo sus brazos sobre su pecho, sin dejar de mirar a los ojos a Namjoon, bien, su amigo tenía razón, ¿por qué dejaba que Park le hablase de esa manera? Ni siquiera sus amigos más cercanos le dicen un apodo tan ridículo como ese, ni siquiera sus padres eran ni la mitad de cursis como para ponerle un apodo tan ridículo como ese que Jimin le puso, nadie se atrevía, todos sabían quien es, Min Yoongi, o simplemente Yoongi, nada más, pero ahora, dejar que Park Jimin, el chico que más detestas del país, te dijera de esa forma, era sobrepasar sus propios límites, y dejar que ese tonto los pasase sin pena ni gloria, era demasiado.

—No quiero decir esto —hablo Namjoon—, pero creo que le estás dejando el camino libre a Park para que haga lo que quiera contigo.

—No es así —menciono Yoongi—, un estúpido apodo como ese, no significa nada.

—Tal vez para ti no, pero te aseguro que para él sí —Yoongi rodo los ojos—, Yoongi, estás bajando demasiado la guardia, no deberías de hacerlo.

—¡No estoy bajando la guardia! —lo interrumpió de inmediato—. No lo hago, jamás lo haré, sé como es él, y jamás dejaría de bajar la guardia con él cerca de mí, entiéndelo, Nam.

—¿Acaso no lo ves? —Namjoon soltó un resoplido—. Él esta logrando que poco a poco bajes la guardia, Min, tarde o temprano, no solamente será ese apodo, después dejarás que te abrace, o te bese, y después... —apretó los labios levemente—, ni siquiera puedo decirlo.

—Te equivocas —dijo Yoongi—, no soy tan imbécil como para ceder ante él, jamás dejaría que me toque ni, aunque mi vida dependiera de ello.

Yoongi no lo quería admitir, pero sabía perfectamente que estaba dejando que Park Jimin tuviera el camino más fácil, pero no puede evitarlo, ese imbécil lo había visto inclusive en sus pequeños lapsos de tristeza por sólo recordar al idiota de Jungkook, y por supuesto, se estaba aprovechando de la situación, Yoongi sabe perfectamente que no debe dejarse llevar, porque todo es un simple juego de Jimin, pero...

Apretó con fuerza la mandíbula, estaba molesto, con Jimin por ser quien lo quiere tener a toda costa, con Namjoon por ser quien descubrió que poco a poco estaba bajando la guardia, y consigo mismo, por seguir hablando con Jimin, detesta todo esto.

—Sólo ten cuidado de que no te haga algo, gatito —menciono Namjoon.

—Púdrete con tu gatito, Nam —Yoongi no estaba dispuesto a seguir escuchando a Namjoon, era como tener a tu progenitor al lado dándote el regaño de tu vida solamente por no obtener una calificación perfecta en matemáticas.

Ahora lo único que quería y necesitaba, era estar solo.