Observar es lo que mejor hacía Jimin, y eso es lo que ahora hacía, observar y analizar a aquel chico que lo había dejado en ridículo frente a una buena cantidad de alumnos de la escuela, detesta que lo hagan quedar como un idiota, y ese chico lo había logrado, había logrado que su paciencia se fuera a la mierda, pero no se dejaría vencer, la venganza es lo que lo hará sentirse más que triunfante.

Miraba como aquel chico de nombre Yoongi, se la pasaba conversando animado con sus amigos, con ese idiota que parecía ser más alto que él y aquel que se había follado más de dos veces, pero Jimin solamente mantenía su atención en aquel chico de piel pálida, miraba como de vez en cuando sonreía ladino, como parecía decir maldiciones, además de fruncir en muchas ocasiones el ceño.

Jimin tenía una idea para hacer que ese chico mantuviera la boca cerrada por el resto de su vida, y que no se metiera en asuntos que no le incumbieran, pero su idea requería de un plan sumamente elaborado, uno que definitivamente podría ser de los más grandes que se le hayan ocurrido. Consistía en dejarlo en ridículo en la graduación, que en pocos meses les daría un saludo y una despedida ese mismo día, Jimin había pensado en darle la mejor de las despedidas a Yoongi, y eso era simple, quería colocar un video casero de él teniendo sexo con Yoongi, por supuesto en vez de que la escuela proyectara el video de agradecimiento e historia de la escuela, verían una edición bastante buena de como el idiota que le había cerrado la boca, termino en lo mismo que su amiguito, ya se podía imaginar las risas y los comentarios y por supuesto la cara de Yoongi sería el espectáculo de todo.

—¿Podrías dejar de sonreír como científico loco que ha pensado en como revivir cadáveres? —la pregunta de Jungkook lo saco de sus pensamientos, aparto la mirada de Yoongi para observar por breves momentos a su amigo que se encontraba terminando su almuerzo.

—Cállate —rodo los ojos—, ¿todavía tienes esas odiosas cámaras pequeñas que te compraste para espiar a la vecina?

Taehyung no pudo evitar soltar una risa al escuchar la pregunta, mientras que Jungkook fruncía el ceño, eso era un secreto que solamente ellos sabían, aunque aquellas cámaras pequeñas jamás las llego a utilizar en realidad.

—Las tengo —menciono Jungkook mientras soltaba un bufido—, y te debo aclarar de nuevo que no las utilice para nada, la casa de esa chica sí que está asegurada.

—Bueno, de todas formas, eso no me interesa por ahora —Jimin cruzo los brazos sobre su pecho—, necesito que me prestes una de ellas.

—¿Para qué querrías una de esas cámaras? —pregunto Taehyung sin dejar de masticar el bocado en su boca, por lo que su pregunta casi no se había escuchado tan clara.

Jimin no evito sonreír ladino y mirar al frente para después levantar el mentón, indicando que señalaba a alguien, ambos de sus amigos miraron a la dirección en donde Park Jimin había señalado, y allí lo vieron, Yoongi se estaba riendo a unas cuantas mesas de ellos, parecía que le habían contado el mejor de los chistes, pero su amigo y antiguo ligue de Jimin, tenía el rostro sumamente rojo.

—¿Qué planeas? —pregunto Taehyung sin dejar de mirar hacia aquella mesa.

—Fácil, filmar un video casero —menciono Jimin para después encogerse de hombros—, le haré tragarse sus palabras.

Jungkook soltó una suave risa para después negar con la cabeza lentamente.

—Suerte con eso —las palabras de Jungkook hicieron que Jimin de inmediato lo mirase.

—¿A qué te refieres con eso, Jeon?

El mencionado mantenía sus codos sobre la mesa mientras que frotaba sus manos una contra la otra, soltó un suspiro y miro a Jimin quien esperaba por su respuesta.

—Me refiero a que, si piensas que Yoongi es uno más de tus malditos polvos, te equivocas.

—Cierto —menciono Taehyung—, pero nuestro querido amigo, no sabe que Yoongi no es tan fácil.

—¿Me están diciendo que yo, Park Jimin, no podrá llevarse a la cama a ese idiota? —sus dos amigos de inmediato dieron varios asentimientos como respuesta final y Jimin soltó una risa en un resoplido, no lo podía creer—. ¿Qué clase de broma me quieren jugar?

—No es broma, Park —dijo Jungkook—, Yoongi no es alguien a quien puedas tener en tu poder, debes entender que no todo el mundo se siente atraído por ti.

—Sí, esta vez tendrás que hacer algo más...

—No —dijo Jimin—, dejen de mentir, es obvio que ese chico no sabe lo que busca, además estará en mis garras más pronto de lo que creen.

Jungkook se encogió de hombros.

—Si tú lo dices...

—Dejando eso de lado, ¿irán a la fiesta que organizará Chanyeol? —pregunto Taehyung.

—¿El primo de Jimin? —el mencionado de inmediato le tiro un golpe sobre el hombro a Jungkook—. Oye, eso dolió —se quejó de inmediato llevando una mano a la zona afectada por el repentino golpe.

—Te he dicho un millón de veces que ese idiota no es mi primo —bufo—, solamente compartimos apellido.

—Sí, pero es de los pocos Park que rondan por aquí —dijo Taehyung—, pero ¿si irán?

—Cuenta con ello —dijo Jimin en respuesta y Jungkook dio un asentimiento.

Taehyung sonrió triunfante, y no sólo era por el hecho de que no estaría solo en la fiesta, sino que también era porque se había enterado de quienes más estarían en esa fiesta.

—Sabes Park, esta sería una grandiosa oportunidad para ti —sonrió ladino hacia el mencionado mientras levantaba ambas dejas un par de veces, Jimin frunció levemente el ceño extrañado por aquellas palabras dichas por Taehyung.

—¿De qué hablas? —pregunto Jimin.

—Es sencillo, sin querer escuche una plática de unas chicas que se sientan justo detrás de mí en el salón de clases, y ellas mencionaron algunos nombres de las personas que irían a la fiesta y entre ellos salió el nombre de Yoongi, Min Yoongi —dijo Taehyung para después relamerse los labios—, ¿no crees que es una buena oportunidad?

Lo era, era una oportunidad de oro, no podía desperdiciarla, y no lo haría, de inmediato miro hacia el frente, encontrándose con Yoongi, ese chico no le miraba, solamente se dedicaba a escuchar la conversación con sus amigos, y eso era bueno, pero Taehyung le había dado a entender que ahora mismo se le estaba presentando una oportunidad perfecta para poder conocer más a ese chico, y así poder llevar a cabo su plan.

Puede que Yoongi se haga el difícil por unos momentos, pero eso no le impediría que pronto cayera a sus pies, a Jimin le encantan los retos, y Yoongi era uno de esos retos grandes, no se dejaría amilanar por ello.

—Entonces, no perderé el tiempo —menciono Jimin para después sonreír ladino, esto sería más sencillo de lo que pensó.