- Taehyung... - junta las manos, implorando. - No te estoy pidiendo mucho.

- Ajá, si... Déjame ver si entendí. - hace un gesto pensativo. - ¿Otra vez hyung se volvió a arrepentir de lo que le hizo a Jiminnie? ¿Debo recalcar que esto ya pasó? - dice, ofuscado. - Así no funcionan las cosas hyung, no va a tener una oportunidad cada que se equivoque.

- Por favor, Taehyung-ssi. Ayúdame, es lo único que pido... Tú eres su mejor amigo...

- Y por eso no lo haré... Si quiere recuperar a Jimin tendrá que ser por cuenta suya, debe ganar su confianza otra vez...

- ¿Y cómo hago eso?

Kim suspira, cansado y se acerca a Yoongi para apoyar una mano sobre su hombro.

- Estoy seguro que encontrará la forma, hyung. - se retira del lugar y deja al rapero en completa soledad.

Recuperar la confianza que destruyó ciegamente no iba a ser fácil...

•••

Dos meses después...

En ningún momento en ese tiempo había hablado con su dongsaeng favorito. Había sido doloroso para él pero comprendió que las heridas que le causó al decepcionarlo debían sanar sin su insistencia.

De todas formas utilizó todos y cada uno de esos días ayudando o haciendo cosas por Jimin.

Le alcanzaba con una pequeña sonrisa una botella de agua al terminar de ensayar, le compraba esos dulces que sólo venden en Busan o lo reemplazaba en las tareas del hogar sin pensarlo dos veces cuando el menor estaba demasiado cansado. Pequeñas acciones que, día a día, esperaba ablandaran la dura coraza que él mismo construyó entre su amado y él.

Yoongi daba vueltas en los pasillos vacíos de BigHit, algo inquieto al cuestionarse a si mismo sobre lo que a continuación haría.

Doblando la esquina, se topa con Jimin que acudía a su llamado.

- Perdón por llegar tarde, Yoongi hyung. - se excusa. - ¿Sobre qué canción necesitaba mi opinión...? - el de mejillas regordetas pensaba que aquél encuentro se debía a sus trabajos como idols y compañeros de grupo.

- Oh, si... pasa Jimin. - abre la puerta de su estudio y deja pasar primero al menor. Cuando este ya había ingresado, Yoongi recibe un disimulado guiño de Yeonjun, quien iba camino a su sala de ensayos y observó todo lo que aconteció.

- Fighting, hyung... - susurra a lo lejos levantando los pulgares y guiñando un ojo. Se aleja.

Yoongi sonríe y entra al Genius Lab, cerrando la puerta tras su espalda.

- De hecho, Mochi, no hay canción alguna... - le dice. Jimin hace una mueca algo extraña.

- Lo imaginaba, hyung. Hace años no me pide opiniones sobre sus canciones y mucho menos pasa tiempo conmigo en general, mucho menos dentro de este lugar...

Yoongi se rasca la nuca algo avergonzado.

- Todo eso tiene una explicación.

- ¿Si? - replica con molestia. - Porque me encantaría por fin saber qué ocurre realmente con usted.

- Te voy a explicar todo, Jimin-ah. - se acerca a tomar sus manos y ambos se sientan el el sillón de dos cuerpos. Park duda sobre si quitar sus manos o disfrutar de las suaves caricias en su palma.

Tras la puerta de aquél estudio se encontraban dos atrevidos jóvenes intentando escuchar lo que sus sunbaenims hablaban, sin mucho éxito porqué...

- Yoongi hyung no mentía cuando dijo que el Genius Lab estaba insonorizado...

- Te dije, Binnie. - dice Yeonjun, rendido. - Ahora vámonos porque si hyung nos encuentra aquí estamos perdidos.

- ¡Pero yo quería escuchar...! - se queja Soobin.

Yeonjun toma la mano de Soobin y empieza a arrastrarlo lejos del lugar.

- Bebé, luego le pregunto a Yoongi hyung pero debemos irnos antes de que nos vean. - baja la voz cada vez más.

- No nos puede escuchar, Junnie hyung... - ríe. -La habitación está insonorizada.

De repente llega Hueningkai, quien había corrido por todo el edificio buscando a su mayor.

- ¡Yeonjun hyung! - grita. - ¡Le dije que no estire más mis peluches...! - grita aún más fuerte.

- Estará insonorizada, pero no contra los gritos de Hyuka... - empieza a correr llevando a Soobin de la mano mientras el maknae los persigue como leon a su presa.