- ¿Qué Yoongi hyung hizo qué? - pregunta  Taehyung del otro lado de la línea.

El menor se había asustado al atender la llamada de su hyung de abultadas mejillas, ya que sólo podía escucharlo hipar furiosamente entre palabras.

- ¡Me b-besó! - se escuchaba como lloraba con aún más ahínco. - ¡Quiere que seamos amigos y me besa! ¡Me rechaza y me cela! ¿Tú lo entiendes, TaeTae? - el otro suspira. - Yo no.

- Bueno, está claro que él tampoco se entiende. - Jimin hace un sonido de queja. - No me malinterpretes, Jiminnie... No estoy defendiendo a hyung pero parece que él no tiene claro lo que quiere. - explica. - Tú mismo lo acabas de describir.

- ¿Y yo tengo que sufrir por su confusión? Jimin también tiene sentimientos... - le dice a Kim para luego suspirar. - No funcionamos como amigos hace años y no vamos a funcionar como amigos ahora, ya lo entendí.

- Hyung, ambos comparten muchas cosas... No pueden simplemente... - Jimin lo interrupe, suspirando.

- Debo intentarlo, Taehyung-ssi. Me prometí a mi mismo que si Yoongi hyung no me amaba de la misma forma que yo seguiría con mi vida sin mirar atrás. Es doloroso pero quizá sea momento de hacer algunos sacrificios y alejarme más de él.

- Pero Bangtan... - dice preocupado. - Puedo pedirle a Kookie que lo castigue si quieres pero no te vayas... - podía imaginar a su amigo haciendo un puchero.

- Yah, tonto. No estoy hablando de salir de la banda o algo así... - rueda los ojos aunque su amigo no lo pueda ver.

- Eres un idiota, Jimin... - le dice.

- ¡Hey, soy tu hyung!

- Oh, tienes razón... ¡Eres un idiota, Jimin hyung!

•

- Buenas tardes, Suga sunbaenim... - los trainees hacían reverencias y saludaban al mítico rapero cuando este ingresaba al edificio de Bighit.

Debía despejarse, debía detenerse antes de seguir arruinando todo lo que tocaba. ¿Qué mejor forma que, una vez más, sucumbir a sus viejos hábitos y recluirse en su estudio?

- Buenas tardes, Sunghoon-ssi... Jungwon-ah... - les sonríe como puede y camina directo a su estudio.

A punto de entrar a su refugio lleno de paz y ramen instantáneo, percibe por su lado al siempre enérgico Yeonjun un tanto decaído.

Tan decaído que fue incapaz de sentir su presencia.

- ¿Yeonjun-ah? - el nombrado voltea, sorprendiendose al ver a su sunbaenim allí. - ¿Todo bien?

Min Yoongi no podía poner en orden su vida pero pretendía ayudar al joven rookie, ¿no es eso irónico?

- Oh, Suga sunbaenim... - hace una reverencia. - Disculpe que no lo haya saludado, es que estoy...

- Algo distraído, puedo notarlo. - ríe. - Y ya te dije que puedes decirme Yoongi hyung, mocoso. ¿Quieres hablar del motivo de tu distracción?

- Si no es molestia, hyung... - contesta algo tímido.

- Ven... - Yoongi lo abraza por los hombros con un brazo. - Te invito un helado...

- ¡Dos! - exclama contento.

- No te aproveches de mi bondad, mocoso... - ríe mientras despeina los cabellos azules del menor.

Minutos después estaban camuflados bajo todo lo que una mascarilla podía esconder listos y dispuestos a comer su helado camino a BigHit otra vez.

- Entonces, lo que te tiene así es...

- Soobin. - Yoongi volteó algo impresionado por aquella respuesta.

- ¿Te peleaste con Soobin? - Yeonjun ríe.

- Me gusta, hyung tonto. - dice. - Me gusta Soobin.

Yoongi sonríe algo melancólico. Definitivamente si en sus manos estaba que aquél mocoso no cometa sus errores, le diría lo correcto.

- Eso es hermoso, Yeonjun. - le dice sincero. - ¿Cuál es el problema con ello? Qué te guste alguien es un lindo sentimiento...

Oh, claro que lo es. Y él lo sabía más que nadie, no encontraba nada negativo en su amor por Jimin.

Qué pudiese admitirlo en voz alta era otra cosa.

- Yo creo que a él le gusto también, pero tengo miedo de siquiera mencionarlo... - da una mordida a su helado. - ¿Y si PD Nim nos descubre y me expulsa de la banda? ¿Y si Dispatch se entera y mi carrera se termina sin empezar?

- ¿Yeonjun acaso sabes leer mentes? - dice inconscientemente.

- Uhm... ¿no? - Yoongi hace un gesto restando importancia.

Ese muchacho, ahora que lo veía bien, era más parecido a él de lo que pensaba.