Sinceramente, este sentir está haciéndolo sentir mal de varias maneras casi al punto de querer romper ese lápiz que sus dedos han estado jugueteando desde hace media hora.

Oh ¿Qué a qué se refiere? Fácil, amado lector:

La relación de Seojoon y Taehyung.

Hace cuatro días que Seojoon fue presentado como novio de Taehyung a Yeonjun y a él, o sea que, fue hace cuatro días que Jeongguk estuvo en la peor cena que ha tenido en su vida, la cual además de ser un poco aburrida para él, fue incómoda de llevar al estar viendo aquellos toques que Seojoon le daba a su mejor amigo sobre sus cabellos, manos, mejillas e incluso sobre sus costados.

Agh.

Venga, ni él entiende cómo fue que pudo soportar ser testigo de la manera en cómo otra persona que había llegado a su vida hace poco más de un mes, pudo hacerlo sonreír, sentir cómodo y sobre todo, convertirse en su pareja y en esa persona que él ama de manera romántica.

Mierda, no otra vez.

Cuatro días habían pasado, hace cuatro días que se volvió a darse cuenta de que sus sentimientos románticos por Taehyung no habían desaparecido y no volverían a desaparecer a pesar de que en su corazón, ya haya alguien ocupándolo.

Cierto, ese no era el problema principal (lo cual es tonto porque en realidad es parte de los problemas principales que tiene hoy en día), si no aquellas citas que tanto Seojoon como Taehyung, han estado teniendo en estos cuatro días.

En el primer día, se supone que como Taehyung y él ya pudieron resolver aquel problema que les prohibía hablar entre ellos, los dos podrían volver a su rutina. Pero, el alfa no se esperaba que al dar vuelta en la cuadra en donde se hallaba la casa de su mejor amigo, fuera testigo de aquel abrazo que Seojoon le brindaba por detrás al castaño para después adentrarse a su auto.

Así que sí, él llegó solitariamente a Model y tarde gracias al maldito tráfico en el que quedó atascado y todo por quedarse pensando en la manera en cómo sería su vida a partir de ese momento.

Sin embargo, cuando Jeongguk arribó a Model a eso de las diez de la mañana, Taehyung se levantó de manera inmediata para encaminarse hacia él. Jeon al ver aquella acción, dedujo que algo había pasado o su mejor amigo estaba por disculparse y haberse ido con Seojoon en su coche.

Pero, no fue por lo primero ni por lo segundo, ya que solo necesitó ver la presencia de Seo para darse cuenta del por qué su mejor amigo le miraba con una sonrisa en manera de pedir perdón.

Aunque antes de contestar a aquella sonrisa, Jeon se preguntó algo de manera mental:

¡¿Qué demonios hacía Seojoon ahí?! ¡¿Es que el grandulón no debía ir a trabajar?! ¡Porque si era así! ¡ESE ALFA ERA MÁS IRRESPONSABLE QUE ÉL!

Así que encaminándose hacia su oficina y luego de dar un pequeño hola a los dos tórtolos, Jungkook volteó hacia ellos y solo mencionó a Taehyung que el trabajo y las relaciones amorosas en ella, no deben porqué ser mezcladas y él más que nadie lo sabe.

Minutos después y entre las cuatro paredes de su oficina, el mismo alfa que imponía presencia frente a ellos, estaba muriendo de vergüenza sobre su sofá al recordar que él mismo, fue el idiota que arremetió contra ella en varias ocasiones.

Entonces el día transcurrió, al final siendo un poco triste cuando se dio cuenta que Taehyung acabó de manera inmediata sus deberes para poder salir con Seojoon. Pero no pudo decir nada y menos cuando los acabó de manera perfecta, siendo el plus aquella boxy smile que le dio al despedirse de él.

El 2do día estuvo peor ya que tuvo (desgraciadamente) el placer de ser testigo de aquel par de besos que los dos se dieron en el estacionamiento de Model.

¿Qué por qué nadie lo escuchó al arribar? Porque ese día su amado Mercedes negro se averió y aunque tenía otro coche en su cochera, él se había decidido por irse caminando ya que ya no tendría por qué ir por Taehyung a partir de ese día.

Así que caminando media hora antes de su rutina habitual, Jeongguk se deleitó por aquellas calles en donde solía ir con Taehyung cada vez que los dos se decidían por caminar hacia Model. Claro que tardó un poco más de lo esperado, pero es que Jeon había tomado asiento en una banca en aquel parque, justo en donde ellos solían ir a jugar con un pequeño Yeonjun de cinco años.

Entonces palmeó ambas mejillas con fuerza, deteniendo aquellos recuerdos que yacían formados en busca de hacerlo sentir nostálgico y abrumado ante la falta de presencia de Taehyung ahora en su nueva vida. Sin embargo, seguidamente de aquella acción, se apresuró a levantarse e irse a paso rápido hacia Model, en donde a mitad de camino, una fuerte lluvia le atrapó pero no de manera tan terrible, aun así, el alfa tuvo que tomar refugio en el estacionamiento, en donde escuchó un par de voces y risas que llamaron su atención al punto de llevarlo a ver de dónde provenía y dándose cuenta al final que eran Taehyung y Seojoon mimándose el uno al otro

Ugh, si pudiera no volver a verlo o a recordar con tan solo darse 100 golpes en la cabeza, él con gusto lo haría.

Pero hey, el día pudo haber sido peor... porque de hecho así lo fue.

Luego de haber terminado un par de labores que había pospuesto hace días, Jeon decidió salir temprano para despejar un poco su cabeza de todo un poco, sin embargo y aunque ya no haya sido sorpresa que Taehyung hubiera salido temprano con sus deberes ya acabados, él seguía ahí escribiendo algo en la computadora que segundos después apagó.

El alfa le preguntó si hoy saldría temprano para volver a salir y él dijo que quizás hoy no ya que Seojoon estaba ocupado. Así que con la idea brillando sobre la cabeza del pelinegro, se aventuró a preguntar si le gustaría salir hoy con él.

Taehyung sonriente estaba a punto de decir que sí ¡Porque él iba a decir que sí! ¡De eso Jeongguk estaba seguro! Pero... pero ese hombre alto de cabellos negros y olor a menta, interrumpió al par de mejores amigos para decir al castaño que hoy había cancelado sus reuniones para llevarlo a casa y a salir por ahí porque al igual que él, necesitaba un descanso de papeles importantes.

El corazón de Jungkook dolió un poco y su sonrisa de igual manera quebró un tanto cuando Taehyung se disculpó con una pequeña sonrisa de lado, esa que decía "Lo siento mucho, será en otra ocasión" Esa respuesta silenciosa le dolió y aunque no se mostró del todo lastimado cuando Taehyung lo miró, lo hizo después de que ambos se fueran.

En la soledad de la sala de estar, Jeongguk tomó asiento en el sofá, viendo el atardecer naranja a su lado izquierdo mientras una soledad y una repentina tristeza comenzaban a mermar en él.

Aun así, el tercer día fue un poco mejor. Llegó temprano al trabajo y se propuso a seguir con su rutina habitual dejando de lado el hecho de que tuvo un viaje a solas en su auto y casi uno en el elevador a no ser por la presencia de San, el diseñador de la nueva línea de ropa que se modelará en una semana y en la cual todos han estado trabajando duro para que sea un éxito.

Se despidió feliz del chico beta y justo en ese momento, volvió a encontrarse con Taehyung quien con una sonrisa grande, le mencionó que todo iba de maravilla y que hasta podían adelantar la pasarela sino fuera por las invitaciones que ya enviaron hace un mes.

Ahí, Jeongguk aprovechó para hablar un poco con él ya que habían sido varios días en los que no habían cruzado una que otra palabra ajena al trabajo. Uno que otro chiste fue parte de ese pequeño viaje que tuvieron hasta la planta de arriba y las sonrisas estaban más que presentes sobre sus rostros.

Una boyante felicidad radicaba en Jeongguk y lo mejor era que Taehyung a su lado también se encontraba de igual manera que él. Sin embargo, solo fueron diez minutos lo que pudieron estar juntos ya que Taehyung recibió una llamada por parte de Yeonjun, diciéndole que tenía que venir rápido a la escuela para la entrega de calificaciones la cual se adelantó.

Desgraciadamente, el alfa no pudo ir con él ya que tenía varias cosas que atender hoy, pero horas después se felicitó por no ir luego de ser comunicado por parte de Taehyung que iba a adelantar su descanso. Jeon estaba preocupado y justo cuando estaba a punto de preguntar el por qué, escuchó al fondo de la llamada a Seojoon hablar, así que mejor prefirió que su amigo siguiera hablando:

"Yeonjun sacó otro bingo de dieces. Así que quise felicitarlo llevándolo a comer pero no tendré tiempo más al rato así que ¿Puedo adelantar mi hora de descanso? Solo será por hoy, en cuanto a los pendientes que tengo, podré resolverlos en la hora de almuerzo de Model ¿Qué dices? ¿Puedo tener permiso?"

Jeongguk no refutó ante ello y menos cuando Yeonjun tomó el teléfono para amenazarlo de manera graciosa que le diera ese permiso a su papá. Así que accedió a ello, alejando su móvil y sonriendo cuando escuchó las gracias del omega, pero lo que no se esperaba, era la risa pequeña de Taehyung del otro lado de la línea y aquella invitación a unírseles a la comida de Yeonjun, haciéndolo sonreír un poco más mientras sus mejillas adquirían un color rosa.

Sus ojos brillaban y todo gracias a su imagen imaginada en su mente de los tres comiendo y conviviendo como una familia tal y como solían hacerlo antes de que cierta persona llegara. Desgraciadamente, despertó de su pequeña ensoñación cuando escuchó de nuevo la voz de Taehyung preguntándole si todavía seguía en la línea, Jeongguk tosiendo y respondiendo que se había ido a recibir un par de papeles sonrió, explicando que aunque quisiera ir, no podría ir porque aun tiene cosas qué atender pero lo harían en algún momento.

La voz de Taehyung sonó un poco más apagada cuando escuchó a Jeon decir que no podría ir a comer con ellos y aunque el alfa pensara que aquello solo fue imaginación suya, no le restó importancia y le prometió a Taehyung que reservaría un día de estos para ir los tres a comer en el mismo lugar de siempre y a salir de paseo.

Taehyung sonó un poco mejor y le agradeció muchas veces. Jeon sonreía aceptando las gracias, estando más que feliz cuando al colgar, un día de estos, Taehyung y él junto a Yeonjun volverían a salir juntos como la familia que eran.

Aunque sus sentimientos románticos por Taehyung fueran retenidos de nueva manera.

Bien.

El cuarto día (o sea ayer) no vio a Taehyung llegar temprano y eso lo espantó. Llamó a su teléfono y del otro lado de la llamada, el beta le dijo que estaba en casa de Seojoon ya que el alfa se encontraba enfermo y debía cuidar de él.

Jeon al escuchar, solo mencionó que no tardara mucho ya que aun faltaban cosas que arreglar para la pasarela que sería en tres días. Taehyung al oír esto, le dijo que iría en unas horas y si tardaba de más, él trabajaría toda la noche si era posible.

Ese día o mejor dicho, en toda la tarde, Taehyung no apareció lo cual aparte de estar preocupando a Jeongguk, también lo había hecho enojar porque no había recibido ni una llamada por parte de su mejor amigo explicando su ausencia de aquel día.

De no ser por Yeonjun arribando a Model, él hubiera hecho la peor idiotez en su vida, yendo a reclamar a Taehyung hasta su casa por haberle mentido y decirle un par de cosas al idiota de Seojoon. Sin embargo, eso se evitó cuando el omega de ahora cabello negro, le explicó que su padre no pudo regresar a Model gracias a la caída de un par de edificios viejos que hubo a unas calles de la casa de Seojoon, siendo el hecho que provocó el cierre de calles.

Seojoon se preocupó por su padre y decidió que era mejor llamarle a él para explicarle que no podría ir a Model pero las llamadas en ese lado fueron cortadas y el internet fue cortado al igual que la electricidad. Pero ante todo ello, Taehyung trabajó en sus deberes ya que llevaba (afortunadamente) su laptop y los archivos ya estaban descargados así que solo se debían acomodar y redactar un poco más.

Jeongguk preguntó por su padre y Yeonjun dijo que estaba descansado en casa mientras que Seojoon cuidaba de él; esto último, siendo el principal problema por lo que no pudo ir a ver a Taehyung.

Así que ahora, es el quinto día, el quinto en donde de nueva cuenta Seojoon estaba ahí frente al escritorio de Taehyung para distraer su día de varias maneras y aunque sus ganas de ir a gritarle que se vaya a trabajar y deje a su empleado hacer su trabajo... simplemente no puede.

Es decir, Taehyung nunca fue así con él cuando traía una que otra cita a su oficina y quizás piense que fue porque él no es su jefe y Jeon sí lo sea de Taehyung pero... pero aun así no quiere. No quiere que esa sonrisa se deshaga y no quiere que él piense que odia su relación con Seojoon porque al final de todo, quiere a Taehyung de varias maneras y no piensa arruinar su amistad por sus estúpidos celos.

Celos, ah, hace mucho que no los sentía de sobremanera.

Pero regresando al tema, él está bien con las visitas de Seojoon si estas no afectan al trabajo de Taehyung, lo cual es más que claro que no afectan de mala manera a su mejor amigo. Al principio quizás tenía previsto que esto sería malo, pero Taehyung aclaró que no lo sería y él anivelaría las cosas para que no se disgustara con él.

Pero de todas maneras, aunque Taehyung no hubiera dicho aquello y aunque la presencia de Seojoon fuera de mala influencia en él, Jeon no podría hacer nada al respecto ya que Park Seojoon es dueño de la firma de contrato que hay en la empresa y que está dando demasiados frutos.

"Jeongguk ¿Estás bien?"

Cuando despertó de su pequeño viaje, el alfa se dio cuenta que la tarde había transcurrido y ahora las ocho de la noche marcaba el reloj sobre su escritorio.

"¿Ya podemos irnos? Yeonjun está en casa esperándonos" Taehyung dice con su saco ya puesto y con una sonrisa sobre sus labios.

Su enojo de la mañana se disipó cuando Seojoon se fue y cuando Taehyung le mencionó que hoy podrían salir a comer o a quedarse en casa para descansar un poco y convivir tal y como lo hacían antes.

Jeon accedió feliz y afortunadamente, todo salió de maravilla en el transcurso del día de hoy, así que ahora solo quedaba la noche, la cual disfrutaría al saber que volvería a aquella bella rutina nocturna de aquel miércoles.

*

Cuando arriban a casa, los dos siguen riendo por aquella escena en la que fueron testigos ahí en la tienda. Taehyung sintiéndose todavía mal por el chico que fue echado de la tienda al haber abierto un producto mientras que su acompañante seguía reclamando al dueño del establecimiento por aquella inocente acción que no tenía nada de malo porque al final él podría pagarlo.

Afortunadamente no se vieron envueltos y solo pagaron los alimentos. Los dos habían decidido pasar el rato en casa de Taehyung y Jeon volvería a dormir en su cuarto ¡Por fin! ¡Luego de casi un mes sin ir al fin regresaría!

Pero...

Pero al abrir la puerta, Jeon y Kim se encuentran con Yeonjun jugando videojuegos, lo cual sería algo genial para Jeongguk porque podría jugar con él mientras es regañado por Taehyung para ayudarle a cocina. Eso sería lo que pasaría, de no ser por la presencia de Seojoon al lado de Yeonjun, jugando entretenidamente mientras parece ser el ganador de esa partida.

Demonios ¿Es que no tendría una vida feliz o algo así? ¡Solo quería pasar la noche con Taehyung y Yeonjun! ¡SOLO UNA POR EL AMOR DE DIOS! ¡VAMOS ENTE DE LAS ALTURAS! ¡¿ES QUE NO TIENES PIEDAD CON ESTA PERSONA NO CORRESPONDIDA EN EL AMOR!?

"Papá, Seo hyung volvió a ganarme a pesar de que llegaste~" musita Yeonjun con un puchero sobre sus labios "Oh ¿Qué tal, Jeon? ¿Sabes si Soob está en casa? Quería ir a verlo pero no contesta el teléfono~"

Jeon al entrar, solo asintió y sonrió levemente al alfa antes de escuchar como este último iba hacia Taehyung para abrazarlo y darle una pequeña bienvenida amorosa que él no estaba dispuesto a poner atención y agradecía la pregunta de Yeonjun para poder distraerse.

"Es la primera vez en el mes que vengo a tu casa y me preguntas por mi hermano. Eres demasiado malo, Yeonjunie~"

"Es que extraño a tu hermano y no a ti" el omega sonríe y aunque Jeon esté un poco enojado con su vida y los sucesos en ella que en definitiva no le favorecen, no se limita a colocar una mueca en sus labios ya que, por más que tenga ciertas peleas con Yeonjun (que la mayoría de las veces son por molestar de buena manera), no piensa desquitarse con él "Por cierto ¿Sabías que Seo hyung es mejor que tú jugando Mortal Kombat? Sacó una habilidad que no sabía que Sub Zero podía sacar y que tú nunca has sacado"

Se vuelve incómodo el ambiente para Jeon, porque aparte de que el par de tórtolos acabó de hablar, Seojoon caminó a su lado, rozando un poco su brazo antes de ir y sentarse en el sofá al lado de Yeonjun para después palmear el asiento vacío a su lado izquierdo con una sonrisa suave en sus labios.

"¿Quieres jugar, Jeongguk? Jjunie dice que eres bueno en esto"

"¡Sí! ¡¿Qué tal un Jeongguk vs Seo hyung en Mortal Kombat y con Sub Zero siendo utilizado por ambos?! ¡AH! ¡Quiero verlo, necesito verlo-!"

"Ah, no creo que sea necesario. De hecho, ya me iba. Solo vine a-"

"Pero, dijiste que te quedarías, Gguk"

Demonios. No hagas esa cara tierna Taehyung.

Definitivamente este día iba mal y aunque en sus adentros su otro yo esté gritando que es mejor salirse de ahí e ir a beber un par de cervezas con Namjoon o con algunos de sus amigos, él mismo se da ese valor para quedarse y enfrentar aquel hecho que será cotidiano ahora en su vida.

"A-ah, está bien"

Menciona y aunque quiere arrepentirse excusándose con el tono que llegó en su teléfono, Jeongguk no lo hace ya que Taehyung a parte de sonreírle tiernamente, le incita a sentarse a jugar con Seojoon y Yeonjun para pasar bien el rato.

No miente que se sintió más relajado y un poco feliz, pero... pero eso solo duró los primeros diez minutos ya que después tuvo que competir y eso fue peor porque de las diez rondas que jugó contra el alfa gigante, solo ganó dos y esas dos fueron gracias a la ayuda de Yeonjun a su lado.

Sin embargo y sin darse cuenta, Taehyung terminó de cocinar y con ello todos tomaron asiento alrededor de la mesa, Jeongguk sintiéndose un poco más incómodo cuando Yeonjun subió arriba por su teléfono al estar emitiendo sonido gracias a una llamada.

Solo fueron un par de minutos, un par de minutos en el que Seojoon y Taehyung estaban en la cocina sonriéndose pero sobre todo, el alfa mayor mimando a un sonrojado Taehyung que con nervios acomodaba sus anteojos.

Celos, Jeon, celos~ le decía su mente, a lo que él enojado respondía:

Sí, son celos hijo de puta. Ahora cállate y distráete en el teléfono con algo.

Porque sí, Jeongguk veía todo desde la mesa haciéndose el distraído con el teléfono. Aun así, la cena llegó y todos estaban agradeciendo y alabando a Taehyung por tan maravillosa cena la cual acabó hace media hora. Ahora todos estaban siendo oyentes de una anécdota que para Jeongguk es tonta, para Taehyung algo divertida y para Yeonjun la cosa más graciosa que había escuchado en su vida.

¿Cómo demonios el perderse en un Zoológico sería divertido?

"¡ERES TAN DIVERTIDO, SEOJOON!" decía Yeonjun cuando escuchaba la manera en cómo un Seojoon de quince años lloraba por estar perdido "¡ERES EL MEJOR! ¡CUENTA OTRA POR FAVOR!"

Yeonjun tenía un pésimo sentido del humor y Jeon estaba seguro de ello y hablando de aquel alfa, ese que solo sonreía y reía falsamente, queriéndose matar cuando escuchaba que Seojoon iba a comenzar con otra historia, estaba a punto de irse de ahí pero...

"Hey ¿Y si Jeongguk nos cuenta una anécdota? Él también tiene buenas anécdotas ¿Qué dices, Joon?"

"Oh ¡Bien! En ese caso, cuenta una anécdota, Jeongguk. Ya he cansado mi garganta" el alfa le sonríe achicando sus ojos, Jeon sintiéndose nervioso cuando el omega y el alfa le miran, pero ganando fuerza y confianza cuando Taehyung le mira tiernamente.

Pero Jeongguk sigue pensando en qué anécdota contar. Es decir, claro que tiene varias, pero en este momento no recuerda una en específico, lo cual hacía que el silencio fuera incomodo para casi todos, ya que el único que ponía atención en él, era su mejor amigo Taehyung.

"¿No recuerdas ninguna, Jeongguk?" pregunta el mayor, sonriendo de lado al ver que el mencionado no contesta ya que sigue vagando en sus recuerdos, esto siendo notado por Yeonjun y no por Taehyung quien preocupado, encima su mano sobre la del alfa frente a él, despertándolo de manera abrupta y mirando su mirada avellana, esa que brillante le hace recordar cierta ocasión especial hace 16 años.

"Bueno, en ese caso, contaré la vez en que-"

"Taehyung y yo nos dormimos en el autobús y sin querer llegamos hasta Busan"

El beta sonríe, el alfa frunce su ceño y el omega sonríe en grande.

Con esas expresiones, Jeongguk comienza a contar ese maravilloso relato.

Hace 16 años: Busan en pleno verano.

"¡Jóvenes!"

Sus ojos se abren rápidamente y frente a él, está el chófer de aquel autobús en el que se encontraban desde hacía... hacía... espera...

"¿Qué horas son y... y en dónde estamos?" pregunta confundido Jeon.

"En Busan, jovencito. Mi ruta termina aquí y como ustedes son los últimos, agradecería que tú y tu amigo bajen y paguen"

Un Jeongguk de 17 años veía al lado derecho de la ventanilla del autobús, dándose cuenta que la noche estaba por caer y que ambos estaban en Busan... ¡BUSAN!

"¡TAEHYUNG, DESPIERTA! ¡ESTAMOS EN BUSAN Y NO EN GYEONGGI!"

Cierto, los dos habían viajado para ir a ver a una banda de rock japonesa que se presentaba en Gyeonggi por primera vez en Corea del Sur. Sin embargo, los dos habían dormitado en el viaje y por obvias razones el autobús los llevó hasta Busan sin ellos darse cuenta.

"Ay no ¡NO PUEDE SER! ¡ES CASI DE NOCHE! ¡¿QUÉ SE SUPONE QUÉ HAREMOS AHORA, JEONGGUK?!" alterarse no servía de nada pero es que Taehyung apenas había despertado.

"¡PAGAR Y BAJARSE!"

Luego de pagar y bajarse, el autobús se marchó, dejando ahí a la deriva del mar al par de chicos que con los uniformes aun puestos, se miraron el uno al otro con cierta preocupación sobre sus rostros.

"¿Puedes llamar a alguien para que nos lleven de regreso a Seúl? Tengo que ir a casa a cuidar a Yeonjun, mi abuela no puede cuidarlo tanto tiempo, Gguk. Se supone que debía regresar hace tres horas pero ni siquiera ella me ha llamado ¡AH! ¡NO! ¡MI TELÉFONO ESTÁ MUERTO! ¡ES EL PEOR DÍA DE MI VIDA!"

Mientras Taehyung tenía su pequeña crisis, Jeongguk escribía algo en su teléfono vagamente.

"No te preocupes, Tae. Le dije a mamá que si puede enviar a Joe para que venga a recogernos hasta Busan y le mandé un mensaje a tu abuela para que no se preocupe por ti y que llegaremos en una hora"

"¿En serio?" el pelinegro de cabello alborotado le mostró el mensaje y aquella respuesta inmediata de su abuela diciendo que estaba bien y que podría regresar tarde si quería ya que Yeonjun estaba ya dormido "Bien... entonces ¿Ahora qué hacemos?"

Las gaviotas volaban sobre las aguas tranquilas del mar y aunque tuvieran bastantes ganas de ir y acercarse, los dos decidieron por solo recargarse sobre aquel barandal que daba una maravillosa vista del mar de Busan.

La noche estaba bajando poco a poco, comiéndose el color naranja del sol que hace unos momentos posaba de manera ostentosa y elegante ahí en medio, siendo musa de uno que otro artista que había llegado ahí junto a sus instrumentos de pintura para plasmarla sobre un lienzo que poco a poco fue coloreándose de un bello naranja.

"Ya no fuimos a ver a The Pillows" comenta Taehyung con un puchero, haciendo reír a Jeon a su lado "Perdimos el tiempo durmiendo"

"No creo que haya sido un tiempo perdido. Es decir, podemos ser testigos de esta bonita vista y podremos ir a comprar un par de cosas antes de volver a Seúl ¿Bien?" el alfa le sonríe, haciendo sonreír a un Taehyung de también cabello negro.

El lugar se vuelve fresco y el aire roza sus cabellos y rostros mientras son testigos de aquel color negro que ha opacado completamente ese color naranja de hacía unos momentos.

Es un excelente momento para entablar una conversación nostálgica o algo así, pero Jeongguk piensa que en realidad, es un momento exacto para hablar del futuro que hay entre ellos.

"¿Crees que seremos siempre amigos?"

"¿Por qué no lo seguiríamos siendo? ¿Te aburro mucho, Gguk?" inquiere divertido pero Jeon a su lado le sonríe de manera grande, arrugando su nariz y formando rayas en las orillas de sus ojos.

"Claro que no, Tae pero ¿Has visto las graduaciones? Todos dicen que volverán a verse y que seguirán estando juntos a pesar de estar juntos o separados pero al final no lo hacen porque consiguen nuevas amistades. Eso es triste y por eso pregunto"

Taehyung a su lado e impresionado, le voltea a ver, Jeon sonriendo de manera leve cuando nota que el chico no hace una expresión que le comunique que se encuentra disgustado o triste por aquel repentino comentario.

"Eso no pasará, Gguk. Somos mejores amigos ¿No?"

Claro que solo habían pasado dos años desde que se conocieron, pero aun así, Jeon estaba seguro de aquello que Taehyung mencionó ¿Cómo lo aseguraba? No tenía idea, pero él lo sabía y no estaba dispuesto a decir no a aquello.

"Sí, tienes razón. Somos mejores amigos ¿Para siempre?"

"Claro, para siempre"

Los dos se sonríen y cuando menos se dan cuenta, los estómagos de ambos suenan haciéndolos reír. Ese día, los dos disfrutaron de esa hora en Busan, comiendo y riendo ante chistes que Jeon soltaba a cada instante.

Fue un excelente día, una anécdota que vale la pena recordar y guardar en el corazón.

Pero... pero ahora solo era aquello. Un recuerdo que está en el pasado y que nunca volverá a pasar y aunque a la vez era feliz recordar, Jeongguk todavía seguía triste al pensar que él en realidad, no iba a preguntar aquello de si seguirían siendo amigos por siempre.

Sin embargo, antes de seguir hablando, hablemos de que Jeon salió de la casa de Taehyung hace casi una hora y ahora se encontraba en la soledad de su hogar, sentado sobre el sofá mientras pensaba en que gracias a aquella notificación en su teléfono, logró zafarse de la casa de su mejor amigo excusándose que tenía que ver a alguien que llegó de imprevisto a su casa.

Y ahora, volviendo al tema principal, el alfa seguía pensando en aquella anécdota que contó en casa del beta. Es decir, él solo contó de manera divertida hasta cuando arribaron a Busan, cortando la conversación de su amistad con Taehyung que él todavía mantenía fresca hasta el día de hoy para después entremeter las tonterías que hicieron mientras esperaban al chófer de la familia Jeon.

Pero... pero en sí, Jeon no fue lo único que hizo aquel día ya que contó un poco mal lo que hizo en realidad:

Para empezar, él despertó en el momento en cuando el autobús hizo la parada en Gyeonggi. Sonrió cuando notó que fue a tiempo pero a su costado, la cabeza de Taehyung yacía sobre su hombro derecho mientras se encontraba profundamente dormido.

Ante esto, sus mejillas se sonrojaron y sus dedos no se detuvieron a acariciar la mejilla expuesta de su amigo. Desde esa distancia, él podía ver la suavidad de su piel, la belleza de sus párpados cerrados y lo esponjosos que lucían sus labios rojos.

Dios, gracias a esto, Jeon volvió a recargar su cabeza sobre la de Taehyung, aspirando y sintiéndose bien cuando el olor a manzanas de Taehyung comenzó a enredarlo y a hacerlo dormir de manera profunda hasta llegar a Busan.

La otra parte que omitió, fue que cuando estaba con la mirada frente al mar, Jeongguk estaba a punto de aplicar la de I wanna ruined our friendship, we should be lovers instant pero no lo hizo gracias a esa historia que Taehyung metió de alguna manera que hoy en día sigue sin entender.

Él conoció dos mejores amigos que eran súper amigos, pero uno se enamoró del otro y se declaró ¿Qué sucedió? Que ambos amigos dejaron de hablarse gracias a la incomodidad y al fin del día, ninguno volvió a dirigirse la palabra hasta hoy en día.

Jeon tratando de no sonar obvio, así que rio y sonrió golpeando con su codo a Taehyung mientras decía:

"¿Ah? Me estás diciendo esto porque quieres eso conmigo, osito ¿Es por eso que me cuentas esa historia?" dice divertido y Taehyung mirándole le responde:

"No, ni en tus sueños. Yo solo quiero tu cariño y tu amistad. Solo eso" dijo volviendo su mirar hacia adelante "Además, no quiero que también se vuelva incómodo, por eso prefiero ser tu amigo"

Jeongguk también volvió a mirar al frente, riendo y sonriendo pero esta vez con un agrio sabor a rechazo y dolor. Es decir, quizás Taehyung no lo había rechazado directamente, pero con esa anécdota y ese punto de vista por parte de él, le decían que Taehyung ya tenía una respuesta preparada por si él iba a hacer lo mismo con él.

Eso sucedió hace 16 años, o sea, 16 veranos escondiendo sentimientos románticos a Taehyung, el chico que ahora ya tiene pareja, que tiene un hijo adolescente y que ahora puede formar una familia real con su alfa.

Ah, de solo pensar que él podría haber cambiado el curso de su vida confesando sus sentimientos a él, le dan bastantes escalofríos al no saber qué es exactamente lo que hubiera pasado. Pero si es sincero consigo mismo, él piensa que si hubieran cortado su amistad en esa época, todavía pudiera haber estado a tiempo para superarlo y volver a empezar.

"No como ahora, que es cuando batallo con tantos sentimientos enterrados y no Morgan Wallen, me entristece saber que fue hace 16 y no 7 veranos. Agh"

Está triste pero no al punto de llorar.

¿Será por la canción de 7 Summers de fondo? Quizás lo sea, pero esto no le es de impedimento para que vaya a abrir la puerta de su hogar y encontrarse con cierta persona que no veía desde hace mucho.

"Oh... ¿Qué haces aquí?"

"Vine a salvarte, Jeon Jeongguk"

"¿Salvarme? Pff, cuando seas multimillonario y te parezcas a Tony Stark, puedes venir a salvarme-"

"Sí, lo que sea. Tony está muerto pero ¿Adivina qué?"

"¿Qué?"

"Cha Eunwoo está vivo y vino a ayudarte con tu problema de friendzone"

Bien, al parecer, nada estaba perdido.

¿O sí?

*

gracias por leer