Capítulo 18
En casa, Sousuke y Toru empujaron a Ryunosuke y Atsushi afuera, ambos chicos se miraron - ¿Eeeemtonces...?
- ¿no es aquí donde me llevas a muestra cita? – cuestiono, Ryunosuke sonrió
- Permíteme guiarte
Ryunosuke comenzó a andar, Atsushi lo siguió, su distancia era considerable, fácil eran 2 metros, cuando el azabache lo noto, volteo a verlo - ¿Por qué vas tan lejos?
- Caminas muy rápido, pareces nervioso
Ryunosuke trago saliva, extendió su mano, miro a otro lado ligeramente sonrojado - ¿Qué haces?
- To-toma mi mano, así caminaremos juntos y si avanzo más rápido podrás frenarme
Atsushi se sonrojo ligeramente, tomo su mano y quedaron parejos – entonces, ¿A dónde vamos?
- So-solo sígueme, es sorpresa
- Me gustan las sorpresas
Caminaron tomados de la mano, no hubo más preguntas, solo el viento que soplaba, y sus manos tomadas con delicadeza.
Mientras tanto en casa, Toru miraba a Sousuke cocinar – entonces, ¿Cómo nos conocemos karnal? Échate pa' ca y cuenta la historia completa como comercial para la cita pues
- De acuerdo – dijo sonriente – verás, fue algo divertido debo decir, fue como un omegaverse
- Amo esas historias, saca, saca
- Pues, estaba en un campo, había pasado por algunas dificultades, estaba muy triste
- ¿es historia triste? Esas no me gustan.
- Estaba triste pero justo vi unos monos pasar
- ¿monos?
- Si, creí que eran monos, pero eras tú entre las ramas
- Seguro buscaba monos, continua
Sousuke comenzó a reír – bajaste del árbol y me oliste, me abrazaste y dijiste que todo iba a estar bien y viendo tu sonrisa, lo supe, salimos del campo y tomé el autobús, no volví a encontrarte, pero siempre quise agradecerte, los abuelos me dijeron tu nombre, así que desde entonces te he buscado
- La última vez que fui a un campo tenía 10 años – menciono - ¿me has buscado por seis años?
- Y podría buscarte por mil años más, donde sea que pueda encontrarte. Destruiría los mundos por ti
Toru sonrió – no tienes que temer más, aquí estoy
- Si, por favor, nunca te vayas
- No, jamás... ¿quieres que te huela?
Sousuke comenzó a reír – todos los días por favor
- De acuerdo
Toru se acercó oliendo a Sousuke y, de hecho, se sorprendió, sonrió tiernamente – tenías miedo, estabas perdido y no sabías si saldrías antes del anochecer ¿verdad?
Sousuke sonrió – pero mi pequeño ángel me rescato antes
- Es fácil reconocer tu olor, eres fresco
- Me alegra que me reconocieras, por favor no vuelvas a salir de mi vida
- ¿Vamos al desfile juntos?
- Estaría encantado.
Atsushi y Ryunosuke llegaron a una pequeño rio que dejaba su agua caer a la bahía, Atsushi se asomó divertido, podía ver las olas chocar con las rocas y como el agua caía sobre estás bien – Ryunosuke, este lugar es impresionante ¿Cómo lo encontraste? – pregunto.
El azabache se había sentado sobre una roca, a la orilla del pequeño angosto rio. – lo encontré vigilando la ciudad, tenía que buscar lugares donde esconderme, y aquí hay demasiados árboles, rocas abajo, nadie vendría aquí, pero parece que a ti te gusta bastante
- Podrías asesinarme y nadie lo sabría, quizá Ranpo-san, pero incluso creo que le costaría
- No estas siendo lógico
- Ah, perdón. – se quedó callado y entonces - ¿vas a asesinarme?
- No idiota
Ambos comenzaron a reír.
- ¿quieres comer algo?
- Mm... quizá unos sándwiches
- ¿lo oliste?
- ¿también tienes arroz no?
- Tendré que trabajar con Rashomon para que no puedas oler las cosas
- Es divertido adivinar, pero ¿robaste?
- Rashomon dejo el dinero en el puesto
- ¿le enseñaste eso a Toru?
- No
- Qué bueno
- Él ya lo sabía
Atsushi suspiro profundo. - ¿no te gusta? – pregunto el azabache – es la única manera que se hacer estas cosas...
Atsushi lo miro, juro que pudo verle orejas de perro caídas por la tristeza, sonrió tiernamente – no, es lindo
- ¿en verdad? – pregunto el azabache haciendo a Atsushi ver de nuevo esas orejas falsas en su mente
- Si – sonrió Atsushi – me encanto esto
- Me alegra
Si, Atsushi solo lo veía, podía verlo como una cola tranquila y feliz.
Se sentaron a comer, Rashomon dejo ver un par de cajas de jugos, ambos estaban contentos en el rio comiendo del sándwich – entonces, - empezó Ryunosuke - ¿Cuántos puntos tengo por esto?
- ¿puntos?
- Si, deberíamos tener un nivel para saber si hice una buena cita
- Mmm... ¿Por qué? – pregunto – digo, no sé qué punto está bien y cual está mal. Ahorita estoy feliz y me gusta, ¿tu estas feliz?
Ryunosuke se sonrojo – sí, estoy feliz
- ¿mañana que haremos?
- Bueno, debemos ir al tallar a terminar el carro alegórico
- Cierto, está bien – dijo sonriente
- Entonces, ¿mis puntos?
- Hoy te doy 79
- ¿Por qué tan pocos?
- Casi son 80, y será por día, al final, juntaremos todo
- Que tramposo tigre
- Volvamos a casa Ryu
- Si, vamos.
Regresaron sus pasos hasta el hogar de Toru, fueron en el camino platicando un poco, sobre gustos, experiencias, un poco de su tiempo libre. Ryunosuke estaba gozando de escuchar breves reseñas de algunos de los libros que el joven agente tigre ha leído a lo largo de los años en sus escapadas en el orfanato, y que ahora, su lugar favorito en Yokohama es la biblioteca pública.
Habían llegado a casa, Atsushi abrió con su llave, aunque tuvo que pelear con Ryunosuke que insiste en usar la ventana, (y que bueno que no lo hicieron)
Atsushi dejo las llaves, y fue a la cocina por algo de agua entonces se dio cuenta - ¿Dónde está Toru?
- Y Sousuke
Atsushi fue por el pasillo, - ¿Toru estas aquí? – pregunto y escucho un ruido en el cuarto del susodicho, más bien un grito - ¡Ryunosuke, ven!
El azabache subió, justo tiro la puerta viendo a ambos, Atsushi se puso totalmente rojo y aunque Toru se sonrojo comenzó a reír. Ryunosuke los miro, espero mientras Atsushi se fue casi huyendo mientras tapaba su cara - ¿me enseñan? – pregunto haciendo a Sousuke reí también.
Toru bajo viendo a Atsushi topado con los cojines de la sala – Atsu ¿estás bien?
- Él tenía su... en tu
- Lo sé querido, es algo que haces cuando estás enamorado
- ¿Qué? ¿por eso?
- Si
- Tus padres van a matarme
- Mis padres hacen cosas peores Atsu
Toru miro al menor, no tenía bulto, pero ese pequeño problema podía resolverse, ya que no era visto, aprovecho para quedarse de rodillas en el suelo, justo en medio de las piernas de Atsushi, sonrió y paso su lengua por encima de su pantalón, haciendo a Atsushi dar un enorme brinco y por lo tal un grito.
Toru volvía a reír mientras Ryunosuke y Sousuke llegaron - ¿Qué paso? – pregunto Ryunosuke
- Muchas cosas uuuuuh – explico Toru entre risas.
...
Este capítulo quedo en comedia pero habrá capítulo con lo que paso entre Toru y Sousuke con detallitos
¡Gracias por leer!
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top