- Stiles. ¡Stiles!- Exclamé. - Stiles ¡te veo! ¡Sigue! ¡No pares!-

Estiré mi mano y sonreí con lágrimas en los ojos viendo como cruzaba. De la nada la luz se apagó y fruncí el ceño.

- ¿Stiles?-

- Lia.- Scott me llamó mientras aún miraba el túnel.

- Estaba funcionando. Yo lo vi.- Me di la vuelta y ellos se miraron entre sí. - ¿Lo vieron?- Pregunté.

- No vimos a nadie.- Respondió Malia.

- ¿Lydia?- La miré y ella negó. - Pero...pero él estaba aquí. Lo sentí. Stiles estaba aquí.-

[...]

Entramos al búnker. Scott iba a cerrar la puerta pero alguien la detuvo.

- ¿Liam?-

- Tienes que ver esto.- Habló Liam.

- Sigues aquí.- Scott sonrió.

- Todos los demás se fueron. No queda nadie.- Habló Liam y suspiré. - Debes venir conmigo.- Insistió.

- ¿Qué pasa?-

- No puedo explicarlo. Tengo que mostrártelo.-

- Está bien. Quédense aquí por las dudas.- Nos dijo Scott.

- ¿Por si Stiles regresa?- Preguntó Malia.

- Si hay esperanzas, debes seguir intentándolo.-

Él salió con Liam y cerró la puerta.

Miré a Malia y ella puso su mano en mi hombro.

[...]

Malia abrió la puerta y Lydia y yo la miramos.

- ¿Qué haces?- Preguntó Lydia.

- Vamos a buscar a Stiles.-

- Scott dijo que nos quedáramos por si él viene.- Respondió Lydia.

- Stiles no va a venir aquí.- Habló Malia. - Si quisiera ya lo hubiera hecho. Pero no apareció. Lia cree que funcionó, ¿verdad?-

- Sé que funcionó.- Respondí.

- Y tus presentimientos siempre resultan ser ciertos.- Habló y alcé mis cejas.

- La mayoría de las veces.-

- ¿Y ahora?-

- Estoy 100% segura que no me equivoco. Puedo sentirlo, Stiles está aquí. Está en Beacon Hills.- Aseguré.

- Entonces, ¿qué hacemos paradas?-

- Busquemos a tu novio.- Habló Lydia y salimos del búnker cerrando la puerta.

[...]

- Se ven frescas.- Habló Lydia mirando las marcas de llantas.

Stiles se había llevado la Jeep.

- Son de su Jeep. No tiene mucho tiempo que se fue.- Sonreí.

- ¿Sin las llaves?- Preguntó Lydia.

- Siempre lo enciende con un destornillador.- Respondí. - Tenemos que decirle a Scott que está aquí.-

- También deberíamos contarle sobre eso.- Malia apuntó hacia una dirección.

Giré la vista y arqueé una ceja viendo la escena.

- ¿Vías de tren?-

[...]

Seguíamos las vías. Estas nos llevaron a la puerta de la biblioteca. Abrimos las puertas y entramos.

- ¿Qué demonios?- Murmuré al ver personas sentadas en bancas.

- ¿Por qué hay una estación de tren en medio de la biblioteca?- Preguntó Malia.

- Bueno, también hay una estación de tren en la Cacería Salvaje.- Respondí.

- ¿Qué probabilidad hay de que se relacionen?- Preguntó Malia.

- Yo diría alta.- Respondió Lydia.

- Sí, como de un 100%.- Añadí.

Caminé analizando a las personas y Lydia y Malia me siguieron.

- So hay una estación de tren, probablemente haya un tren.- Habló Malia.

- Sí, y este va a la Cacería Salvaje.- Resalté.

- Van a llevarse a todos.- Habló Malia.

- No pueden subir a ese tren.- Añadió Lydia.

Malia bufó y miró alrededor.

- Bien. ¡Presten atención todos! Tenemos que salir de aquí y tiene que ser ahora.- Exclamó Malia pero nadie se movió ni la miró. - ¡Es malo estar aquí! ¡Vámonos!- Exclamó.

Me puse frente q un pasajero y moví mi mano frente a su cara.

- ¿Hola?- Miré a la señora. - Señora, ¿Hola?- Sacudí mi mano frente a su cara.

- ¿Hola?- Lydia trató de hacer que otra persona reaccionará.

- ¿Hola?- Exclamó Malia frente a otra persona. - ¿Cómo hacemos que se vayan si no nos escuchan?- Preguntó Malia.

Miré alrededor y mi vista cayó en una persona.

- Tal vez alguien pueda escucharnos.-

Era Peter.

Malia se acercó.

[...]

- ¡Peter!- Exclamó Malia.

- Malia.- Suspiré.

- ¿Qué?-

Ella chasqueó sus dedos frente a Peter y miré a Lydia.

- El único modo en el que pudimos pasar a la Cacería fue con una conexión emocional.- Mencionó Lydia.

- Ojalá pudiera ayudar.- La miré con una ceja alzada. - No lo voy a decir. No voy a decirlo.-

- Bien, supongo que todos seremos olvidados y moriremos.- Me encogí de hombros.

Malia gruñó y miró a Peter.

- Papá.- Habló con un tono monótono.

- Dilo con sentimiento.- Insistí.

Malia suspiró y se agachó frente a Peter.

- Papá, despierta, por favor.- Suavizó su tono.

Peter alzó la mirada y dejó caer el periódico que tenía entre las manos. Las tres nos miramos entre sí. Él se levantó mirando alrededor confundido y luego miró a Malia.

[...]

- Atención a todos los pasajeros. El tren arribará en 12 minutos.- Se escuchó una voz.

- ¿Yo? ¿Quieren que yo los detenga? ¿Saben cuántos son?- Preguntó Peter alzando sus cejas.

- Sí, muchos, así que andando- Respondió Malia.

- Hay cientos de salas de espera en esta estación, que parece que ahora sirve también de biblioteca escolar. Es imposible.-

- Podemos intentarlo.-

- ¿De dónde sacaste este optimismo inverosímil?- Preguntó Peter.

- Sin duda, no de mi padre.- Respondió Malia.

- No hay tiempo para esto. Alguien tiene que escucharnos.- Habló Lydia.

- Creo que ya lo logramos.-

- Oh mierda.- Susurré al ver un Jinete Fantasma frente a mí.

Malia gruñó. Estiré mis manos haciendo que mis ojos brillaran.

- Detrás. No se llevarán a una Banshee.- Habló Lydia poniéndose frente a nosotras.

- ¿Estás segura?- Preguntó Peter.

Peter caminó hacia el Jinete y este intentó golpearlo con el látigo. Peter lo esquivó e intentó rasguñarlo pero no logro hacerle daño.

Peter sonrió nervioso y retrocedió un poco. Nosotras corrimos hacia otra dirección.

Un Jinete apareció frente a nosotras. Malia nos empujó a Lydia y a mí.

Caí al suelo fuertemente y solté un quejido. Malia fue golpeada por el látigo y soltó un grito de dolor.

- ¡Malia!- Exclamó Peter.

Me levanté rápidamente del suelo.

- Lia.- Peter me llamó mientras sostenía a Malia y asentí entendiendo.

Sostuve a Malia y caminamos hacia la salida mientras Peter peleaba contra los Jinetes.

Vimos como Peter lograba golpear a uno.

- Lo logró.- Habló Malia.

De la nada Peter fue lanzado al suelo y un Jinete lo tomó del cuello.

- Malia, ¡vete!- Exclamó Peter.

Corrimos hacia la puerta. Vi como Malia se detenía para mirar a Peter y rugió.

Me detuve.

- ¡Ve! Encuentra a Stiles, yo me quedaré con ella.- Habló Lydia y la miré. - ¡Ve!-

Seguí corriendo sola. Me detuve un momento mirando alrededor. Estaba aquí, Stiles estaba aquí. Seguí corriendo por el pasillo. Tenía que encontrarlo.

[...]

Escuché disparos. Miré alrededor. El vestidor. La puerta estaba abierta y ahí lo vi.

Vi como un Jinete le apuntaba con su pistola.

- Sin tocar.- Moví ambas manos y lance al Jiente fuertemente hacia la pared haciéndole un hueco a esta.

Entré y me paré frente a Stiles.

- Yo también te amo.- Hablé.

Por fin lo había dicho. Una frase que me había costado tanto volver a decir pero que nunca la había sentido más que en este momento. Lo amaba.

- Lo sé.- Susurró y se acercó a mí.

Tomé su rostro entre mis manos y ambos juntamos nuestros labios. Sentí sus suaves labios, al fin lo tenía devuelta. El puso su mano en mi barbilla delicadamente.

- Sentí como si hubiera pasado una eternidad sin ti.- Susurré.

- No quiero pasar otro segundo sin ti.- Susurró.

Lo abracé fuertemente y me rodeó con sus brazos. Respiré hondo inhalado su aroma. Sentía la calidez de sus brazos. Me sentía a salvo.

[...]

Stiles y yo corríamos hacia la puerta tomados de la mano.

- Stiles.- Se escuchó una voz y él se detuvo. - Stiles, ¿eres tú?-

- ¿Mamá?-

- No es ella.-

- Lo es. Conozco su voz.- Caminó por el pasillo y lo seguí.

- Es la Cacería. La Cacería la trajo de vuelta pero no es real.- Traté de explicarle.

- ¿Cómo que la "trajeron"?- Preguntó confundido.

- Stiles.- Se escuchó la voz de nuevo.

Ahí estaba Claudia frente a nosotros.

- Sé cuanto sufriste. Sé lo mucho que quieres a tu padre.- Comenzó a caminar hacia nosotros. - Pero yo lo quiero más.-

Su cara cambió totalmente.

Era un monstruo.

- Aún desde la Cacería, de algún modo, lograste entrometerte en su memoria.- Habló molesta.

- Entrometerme es una de mis habilidades.- Respondió Stiles.

- Si tu padre te recuerda, ella se va.- Hablé y Stiles me miró.

- Es por eso que debes desaparecer.- Habló Claudia mirando a Stiles.

Ella comenzó a acercarse. Puse mi brazo frente a Stiles protegiéndole y estiré mi mano. Ella tomó mi mano y con la otra tomó mi cuello.

Sentí como me faltaba el aire.

- Suéltala.- Stiles me zafó del agarre de Claudia.

- No deberías tratar a tu madre así.-

Ella me soltó y tomó a Stiles del cuello. Caí al suelo y me arrastré tratando de recuperar el aire pero aún sentía que me ahogaba.

- Tú no eres mi madre.- Stiles la miró.

Ella lo estrelló contra una pared. Estiré mi mano intentando salvarlo pero sentí como mi garganta se cerró aún más y tosí fuertemente.

Intenté levantarme apoyándome de la pared. Me puse de pie y tosí de nuevo.

- Él cree en mí. Cuesta mucho matar lo sueños.- Aumentó la fuerza de su agarre en el cuello de Stiles.

- Pero no imposible.- Se escuchó una voz y luego un disparo.

El Sheriff.

- Noah, tus balas no pueden hacerme daño.- Habló.

Respiré aceleradamente y caminé hacia el Sheriff.

- Inténtelo de nuevo.- Hablé.

El Sheriff disparó y moví mi mano rápidamente. Mi magia oscura envolvió la bala aumentando la velocidad.

La bala se estampó en el pecho de Claudia y esta desapareció en una nube de humo verde.

Stiles tosió fuertemente y corrí hacia él.

- ¿Estás bien?- Tomé su rostro entre mis manos.

- Ahora lo estoy.- Sonrió poniendo sus manos en mi cara.

De la nada todo se sacudió. Las luces comenzaron a parpadear y Stiles me rodeó con sus brazos. Eran sonidos de tren y rayos.

- ¿Qué sucede?- Preguntó Stiles.

- Lo lograron.- Respondí . - Lo logramos.- Sonreí mirando alrededor.

[...]