-- ¡No puedes hacerlo! ¡No aguantarás al parto, estás demasiado débil!

-- Yura tiene razón. ¿De qué te servirá tener otro hijo si acabareis muriendo los dos?

Me encontraba escuchando a escondidas la conversación que tenían mis tías con mi madre mientras veía al mismo tiempo a través de la rendija de la puerta.

-- Ya lo se, pero no lo hago por mi ni por el futuro bebé.

Ambas mujeres la miraron desconcertadas esperando una explicación.

-- Lo hago por Luffy.

-- ¿En que le puede benificiar al mocoso que tú te mueras por embarazo? ¿Acaso quieres traumarlo más de lo que ya debe estar?

Me quedé tieso al escuchar lo que dijo mi tía. ¿Mi madre iba a morir?

-- Luffy está enfermo y cada vez va a peor. Necesita más alimento, pero no tenemos más para darle de comer. Pensadlo, si el embarazo va bien dentro de poco tendré leche, podré alimentar mejor a Luffy. Podrá curarse.

Eso me dejó confuso y a la vez preocupado. No entendía de todo la situación, pero sí entendí algo: mi madre iba a morir.

Salí corriendo de allí haciendo tanto ruido que supuse que ya se percataron de mi presencia y mi expiación. 

Sin embargo en esos momentos lo único que quería era salir de allí y encontrar a Asahi. Necesitaba la compañía de mi amiga.

La encontré sacando las pocas patatas que habían cultivado del campo y me abalancé a abrazarla.

Se sorprendió ante mi gesto y se tambaleó un poco perdiendo el equilibrio y haciéndonos caer a los dos al suelo.

Comencé a llorar sin poder evitarlo. Ella se incorporó quedando sentada y me devolvió el abrazo haciendo círculos en mi espalda con una mano mientras que con la otra me acariciaba el pelo.

Al cabo de un rato me calmé un poco y la miré aun con la cara mojada. Acto seguido escondí mi cabeza en su pecho.

-- E... escuché hablar a las tías con mamá. -- Murmuré con dificultad. -- Di... dijeron que mamá va a morir. Pe... pero no entiendo por qué.

Absorbí los mocos que me caían y alce de nuevo la vista para verla a los ojos. Ella me miraba preocupada y a la vez interrogante por lo que proseguí.

-- Di... dijeron que estaba embarazada y que moriría en el parto. ¿Eso qué significa?

Sabía que no podría responderme, al menos no directamente, pero aun así necesitaba formular la pregunta que tanto rondaba mi cabeza. ¿Por qué mi madre iba a morir?

Asahi giró la cabeza buscando algo y entonces me señaló las espaldas.

Me giré para ver a mi madre que caminaba en nuestra dirección con su característica sonrisa.

Me giré de nuevo a ver a mi amiga al percatarme de que me estaba haciendo gestos. Se señalaba la boca con el dedo índice y luego señalaba a mi madre.

Tardé un poco en entenderlo, pero finalmente comprendí que quería que le preguntara a mamá.

Finalmente la mujer llegó a nuestro encuentro y nos sonrió.

-- Luffy, cariño ¿estás bien?

Me tiré sin pensarlo a sus brazos y ella me elevó para cogerme a colo con dificultad.

-- Asahi, cielo, tu padre dijo que volvieras ya para casa.

La niña asintió y se fue corriendo con el caldero lleno de las patatas que había recolectado. Mi madre por su parte me dejó en el suelo y tras cogerme de la manita nos guió de vuelta a casa.

***

-- Mami, ¿Qué significa estar embarazada y parto?

La mujer me miró sorprendida y luego sonrió.

-- Ya has estado espiando a escondidas Eh.

Me pellizcó la mejilla con cariño a lo que yo protesté molesto.

-- Pues verás Luffy, eso quiere decir que vas a tener un hermanito.

Parpadee desconcertado y la miré interrogante.

-- ¿Qué es eso?

La mujer rió y me revolvió el pelo.

-- Quiere decir que voy a tener un bebé Luffy y... -- Se quedó pensativa. -- ¿Sabes Terius y Lily?

Yo asentí al recordar a los dos niños que siempre jugaban y trabajaban juntos. --Pues ellos son hermanos. Un hermano es alguien por el que te preocupas, alguien con quien jugar y divertirte Luffy... Es como los amigos casi, solo que los hermanos están para siempre.

-- Entonces... ¿Asahi es también mi hermana?

Mi madre me miró sorprendida y luego soltó una carcajada.

-- Sí, supongo que podrías pensarlo así.

Sonreí al entenderlo, pero me puse serio de pronto al recordar un dato importante.

-- Mami ¿Y por qué vas a morir? ¿Es también porque voy a tener un hermano?

Mi madre se puso seria también y me miró con aparente duda de que responderme.

-- Luffy ¿Quien te ha dicho que voy a morir?

-- Os lo escuché decir cuando os espiaba.

-- Pues es... -- Se detuvo al percatarse de que no podría mentirme. -- Luffy cariño no pienses en eso ahora. Vas a tener un hermanito, deberías alegrarte por eso.

¿Debería hacerlo? No lo sabía, pero en esos momentos lo único que sentía hacia el futuro bebé que mamá había mencionado era desprecio y desagrado, porque por su culpa mi madre iba a morir.