- ¡Misti! ¿Te encuentras bien?

- ¿Todos se encuentran bien?

Los Elegidos, uno a uno, comenzaron a reaparecer del bosque para volver a reunirse en los restos del campamento, dónde estaban los demás chicos que no salieron de ahí. Todos actuaron de inmediato en cuanto recibieron el mensaje de Misti.

- Pero… Misti, ¿Por qué nos enviaste mensajes a cada quien por privado?

- … - la chica entró al campamento inhalando y echa aire varias veces, mostrando un gran cansancio por haber corrido dentro del bosque después de haber visto… a aquel ser extraño…

- Misti… no quiere preocupar a los demás - comenzó a hablar Lopmon, quien estaba junto a su compañera - Tsuyo y los demás no saben sobre el ataque de los demonios, ni de nuestra decisión de salir de aquí… Y… no quiere decirles a los demás sobre este mismo ser extraño…

- Pero, a ellos se le podría aparecer. - habló Vale con seriedad que no había mostrado en mucho tiempo.

- … - Misti se quedó en silencio, aún respirando profundamente, mientras su mente pensaba en eso mismo que estaba haciendo: « Se supone que tengo buena condición física… En los entrenamientos de Ginkakumon lo demostré… Entonces, ¿Por qué?… »

- Creo que lo más importante… es que estamos aquí - declaró Niko, mirando a los demás chicos, quienes revisaban en sus teléfonos el repentino mensaje de Misti, y a los demás chicos que habían entrado al campamento.

- Pero, Misti… - habló Mizuki acercándose a su compañera por Digivice - ¿Le tomaste una foto a esa cosa?

- ¿Qué? ¿Querías que le tomara una foto? ¡Estas loca! - hablo rápidamente Lopmon ante la declaración de la chica - ¡Esa cosa si que da miedo! ¡Me dejó completamente congelada, mientras Misti trataba de salvarme de aquel monstruo!… ¡Fue un espectáculo digno de ver!

- … - « Me sorprende la capacidad que tiene Lopmon de cambiar las historias… »

- Aún así… no quiero parecer pesimista ante este tema ni nada - habló Gotsumon - Pero… No nos has dicho cómo eran aquellas cosas… Su apariencia física, para después poder distinguirlos si los vemos en algún otro lado… Dinos, ¿Cómo eran esas cosas?…

- … - Misti aún no era capaz de recobrar el aliento. De verdad el cansancio de su cuerpo era algo que hace bastante tiempo no había sentido. Esto, sumado al hecho de que hace poco se había encarado con un ser maligno que emanaba la muerte con su sola presencia, además de que había sido perseguida por él y le había entregado un artefacto extraño que traía guardado en una de las bolsas de su pantalón a modo de que no se viera para los demás chicos.

- ¡Era espantoso! - al ver que su compañera aún estaba en shock por haber estado frente a ese ser extraño, Lopmon comenzó a describirlo - Bastante alto, como… el chico ese que se revuelca con Kino…

- ¿Eh?

- ¡Takeshi! ¡Si, era tan alto como él! - los chicos de inmediato se sorprendieron, ya que Takeshi era el chico más alto de todos ellos - Usaba una capa negra, llena de hoyos como… como un queso…

- ¿Queso?

- Si… su manta era igual que un queso finamente fileteado… También llevaba una capucha, que solamente hacia relucir su lado emo…

- ¿Emo?

- De hecho, ni siquiera creo que tenga cara. Era tan oscura la sombra de la capucha que no se le veían ni siquiera ojos… Montaba en un poni gigante…

- ¿? ¿Un poni gigante?

- ¡Claro que sí! Según lo que me dijo Misti cuando estábamos en el Mundo Humano, coincide exactamente con las características - continuó Lopmon - Un poni muy alto, de un color negro casi sin brillo, con bastante cabello en su cabeza, cola, y en la punta de sus patas; un cuerpo bastante musculoso, y un relinchar potente y siniestro, junto con una actitud bastante rebelde… ¡Un ser bastante siniestro! ¡Siniestro!

- ¿No estás hablando de… un posible corcel negro? - preguntó Maya con algo de timidez, aferrándose al brazo de Heishi después de escuchar toda la descripción. Por su parte, Misti despejó su miedo al escuchar la descripción de Lopmon.

« ¿Un poni? ¿Cuando le hable…? Oh, ya lo recuerdo. El día que se metió en mi computadora, cuando dijo que desde ahí podría contactar a "Moosemon", según lo había dicho… Quien diría que terminaría buscando información de ponis… Ahora me pregunto cómo es que empezó buscando a Moosemon y terminó encontrando ponis… »

- ¿Que dices? ¡Obviamente no era eso! Un corcel negro es un… bueno, no tengo ni la menor idea de que es, pero lo que yo te estoy diciendo es un poni gigante…

- Entonces… - intervino Moosemon - ¿Estás diciendo que hay que preocuparnos por un hombre, vestido de queso, que no tiene cara, y anda en el bosque montado en un poni negro, que ni siquiera sabemos qué rayos es?

- ¡Por supuesto que sí! ¡Es un tema bastante delicado! ¡Eso, y el hecho de que nos dio una arma que supuestamente está maldita!

Tanto Misti como todos los Digimons de los Elegidos voltearon a ver a Lopmon con una expresión de asombro.

- ¿Que dijiste, Lopmon?

- ¡Lo que dije Misti! - exclamó Lopmon - ¡Un hombre, vestido de queso|

- ¡Eso no! De hecho, ni siquiera lo dijiste… - le interrumpió Moosemon - Acerca de la arma maldita…

- Oh si… ¡Que le dieron a Misti un arma maldita!

- ¿L-Lopmon? ¿C-Cómo sabes que está cosa lo es? - le interrogó la chica, mientras sacaba el artefacto de sus bolsillos, asustando a los Digimons.

- ¿Acaso no es obvio? Él te lo dijo… - comenzó Lopmon - Te dijo… "Esto es una cosa rara que está maldita" o algo así…

- ¿? ¿¡Cómo rayos le entendiste eso!? ¡Hablaba en susurros y en un idioma bastante extraño!

Los Digimons comenzaron a mirarse entre si, bastante confundidos.

- ¿? - Kokabuterimon se acercó, algo pensativo - ¿Acaso dijo… "Farfarktorisch kuruaetoori"?

- ¡! ¡Eso dijo! - exclamaron Misti y Lopmon al mismo tiempo.

- ¿Pero qué diablos? - se preguntó Moosemon para si mismo - ¿Quién diablos habla Daraemon en estos tiempos?

- ¿"Daraemon"? - preguntó Misti.

- Es un idioma bastante antiguo… - explicó rápidamente Kokabuterimon - Solían hablarlo los Demonios en el pasado, o algo así. Realmente no sé mucho de él.

- Pero, cuando fuimos creados, nuestro… ex-emperador nos obligó a estudiarlo, aunque realmente ya no se usa en la actualidad.

- ¿¡ !? Entonces… ¿¡Entendiste todo lo que te dijo!? - le preguntó Misti a Lopmon.

- Realmente no. Yo nunca me tomé en serio las clases de Daraemon, ahora que lo recuerdo - dijo Lopmon con una sonrisa en su cara - Lo siento xd

- … Entiendo… - habló Misti con algo de decepción.

- Aunque… hay algo que me sorprendió mucho… - habló Misti, dirigiéndose a Moosemon - Moosemon-sama… Moosemon-sama…

- ¿Qué quieres, Lopmon? - preguntó Moosemon con fastidio.

- Oye, Biyomon - le preguntó Tentomon al Digimon ave - ¿Porque estás toda llena de lodo y hojas?

- Luego les explicaré…

- ¿Que significaba "keioshk"? - preguntó inocentemente Lopmon a Moosemon.

Los compañeros Digimon presentes se miraron con caras de asombro e incredulidad.

- ¿Dijiste… "keioshk"?

- Si, esa palabra… ¿Alguno de ustedes se acuerda que significaba?

Los Digimons comenzaron a pensar largamente, mientras sus compañeros los miraban con algo de duda.

- ¿? ¿Acaso ninguno de ustedes lo recuerda? - preguntó Sol algo confundida.

- Hace mucho que estudiamos el Daraemon - explicó Terriermon, rascándose la cabeza - Además, tal como lo dice Lopmon; ninguno de nosotros prestamos suficiente atención.

- Esas clases eran demasiado monótonas, aburridas, y hasta forzadas… - continuó Pichimon, desde los hombros de Sol - A nadie le gustaban esas clases… Solo a Gabumon…

- ¡Lo tengo! - exclamó Gotsumon - ¡Significa "roca"!

- No, eso no es - dijo Moosemon - "Roca" era… beerako…

- Que forma más fea de decirle a una roca… - comentó Sol.

- Entonces… ¿Significaba "pasto"?

- ¿No acaso era "Demonio"?

- "Daraemon" es "Demonio", Lopmon. Por eso se llama así el idioma.

- ¡Ay, es cierto xd!

- ¡Bola de tontos! "Keioshk" es el primero de los 16 sufijos que respeto que usa el Daraemon para referirse a otros Digimons de manera directa e indirecta. Su uso es exclusivo para entidades divinas superiores, y más o menos se podría traducir como "Majestad", "Superior", o incluso "Dios"…

Todos miraron bastante sorprendidos a Tentomon, quien estaba volando demasiado cerca de Nikoru.

- ¿Cómo rayos es que tú te sabes eso? - preguntó Kokabuterimon completamente confundido.

- A pesar de que las clases de Daraemon eran aburridas, es lo único que había que hacer en ese entonces, así que me la pasaba estudiando el idioma de manera ocasional… - explicó Tentomon, con tal seriedad y tranquilidad que asustó a los demás - Por cierto, Niko. Buenas tetas…

- ¡Hey! ¡No me mires, maldito pervertido! - Niko se cubrió, al tiempo que le soltaba un fuerte puñetazo al rostro y lo tiraba al suelo.

- Había olvidado que Tentomon sigue vivo… - comentó Gotsumon.

- Por cierto… ¿Me puedes mostrar eso que tienes en tus manos - preguntó Kokabuterimon, mientras se acercaba a Misti quien aún tenía el artefacto extraño en sus manos.

- Oye, Lopmon, ¿Por qué preguntaste acerca del "keioshk"?

- ¡Ah, eso! Ya se me olvidó xd.

- Si, toma… - Misti le dio el artefacto, y Kokabuterimon comenzó a estudiarlo cuidadosamente. Tras varios minutos, concluyó.

- En efecto… Esto es un arma maldita…

- ¡Ah! - exclamaron los Digimons, mientras se alejaban de Kokabuterimon que dejaba el llamado arma en el suelo.

- ¿? ¿"Arma maldita"? - los chicos estaban confundidos; en especial Taiki y Shoutmon.

- Las armas malditas son… herramientas que se crearon hace muchos años - comenzó a explicar Kokabuterimon - Su propósito era el de crear artefactos de guerra que tuvieran energía "infinita"…

- Para lograr ello, su poder se basa en energía oscura - continuó Moosemon - Y esta se adquiere de sentimientos malignos. Y normalmente expresan estas emociones en forma de maldiciones… De ahí su nombre.

- ¿Quién crearía algo tan horrible? - preguntó Sol, sorprendida de lo que escuchaba.

- Fueron creadas antes que nosotros, y… nuestro ex-emperador no nos habló mucho de ellas… - comentó Moosemon - Solo las cosas más importantes de ellas…

- Como por ejemplo: aunque tuvieran tanta energía malvada acumulada en ellas, eso es lo que las hace armas bastante poderosas… Recuerdo que mencionó que una sola de ellas sería capaz de destruir a ejércitos enteros de demonios…

- Algo así como… "Un gran poder conlleva una gran responsabilidad"…

- ¿? ¿En serio citaste a Spiderman? - preguntó confundida Niko a Heishi.

- En realidad… fue frase del tío Ben…

- … Se nota que no sabes… - habló está vez Mizuki hacia el chico, dejándolo un poco sorprendido.

- Bueno, hablando en el caso de que usarlas conlleva a la adquisición de una maldición… Si, diríamos que eso se cumple…

- Puedo sentir que tiene mucha energía oscura cargada esta cosa… - habló Kokabuterimon, mientras tocaba de manera delicada ciertos puntos del arma - Parece que ha estado acumulando mucha…

- Y, bueno… - habló Moosemon - con todo esto de la invasión demoníaca… es muy probable que siga acumulando más…

- ¡Y es por esto que tenemos que terminar con esto! - habló Terriermon - Terminar con el Inframundo Digital, sus planes de conquista, y también destruir estás armas…

- ¿? ¿Para que las queremos destruir? - habló Kokabuterimon - No nos han hecho nada malo…

- A nosotros… pero, he visto y oído del gran daño que le han hecho al Digital World… - habló con seriedad el conejo - Estás armas han sido fuente de dolor y sufrimiento.

- … - Kokabuterimon, ignorando lo que dijo Terriermon, siguió estudiando la arma - Es más pequeño de lo que recuerdo en el registro, pero no hay duda. Se trata de Kenyudainao…

- ¿? ¿Kenyu qué? - preguntaron los chicos con duda.

- ¡Espera! ¿Es él? - Lopmon se interesó tanto en la afirmación de Kokabuterimon que corrió hasta llegar a él cara a cara - ¿Estás seguro de que es él? ¡¿100% seguro!?

- No te pegues tanto a mi rostro… Pero, si… Es Kenyudainao.

- ¡Oh si! - Lopmon saltó de alegría - ¡Gracias, acosador vestido de queso y montado en poni! ¡Nos has dado un excelente regalo!

- ¿? ¿Acosador? ¿Ya las estaba siguiendo desde antes? - Taiki se alarmó por las palabras de la Digimon, pero la emoción de Lopmon ocultó esos sentimientos.

- ¡Misti! ¡Nos han dado un regalo procedente del cielo! - Lopmon saltó hasta el cuello de la chica, y la abrazó. Aunque, el acto parecía más bien que Lopmon trataba de ahorcarla.

- ¿? No entiendo… por qué lo dices… - habló Misti, con el poco oxígeno que llegaba hasta ella.

- ¡Kenyudainao! ¡La legendaria espada infernal, forjada en las calderas provenientes del fondo del Inframundo Digital, donde se almacena un calor estúpidamente infernal! ¡Creada con los metales más resistentes del Digital World, tajada por los antiguos demonios metalúrgicos, conocedores por excelencia de estos metales, perfeccionistas a la hora de moldear el metal, y perfectos hechiceros que le pusieron su maldición! ¡Es una jodida espada capaz de cortar naciones enteras, partir ejércitos de millones, y hacer temblar hasta al Rey más poderoso del Digital World! ¡Es mi sueño hecho realidad! ¡Un arma capaz de vencer a tus enemigos en un solo instante, y no solo eso! ¡Se dice que su poder radica en el sentimiento de venganza de los soldados que viven con el sentimiento de vergüenza de la derrota, y aquellos que mueren por su filo, tienen sus almas atrapadas dentro del filo de está espada, trasladando así sus conocimientos, experiencia, y práctica en la Guerra, logrando así que está espada sea la perfecta para cualquier guerrero! ¡Es el arma de dioses, jodidamente destructiva, y genial! ¡Yo siempre la he querido tener, pero el estúpido de Moosemon-sama nunca me lo ha permitido!

- … ¿Y sabes por qué no te lo permito? - le preguntó Moosemon con fastido - ¿Sabías que la maldición que tiene es que su portador, conforme la va usando, va perdiendo de manera dolorosa fragmentos de su alma, hasta el punto de morir y dejar su alma atrapada en esta espada?…

- ¿A quien le importa? ¡Es la mejor arma que haya sido creada en la existencia!

- … No lo creo - habló Tentomon, acercándose a Lopmon - Reddohametsu también es una excelente arma…

- Ese no cuenta. Reddohametsu es una puta armadura indestructible, así que no es un arma capaz de hacer daño… - habló con algo de cordura el Shoutmon de Sakeno, sorprendiendo al chico.

Los chicos solamente se quedaron observando como, uno a uno, los Digimons Iban agrupándose en un pequeño grupo para discutir de aquellas armas (todos a excepción de Lunamon).

- Parece que están bastante emocionados con eso de las "armas malditas"… - le comentó Maya a Heishi.

- Si que si…

- ¿Que hacemos ahora? - preguntó Misti, acercándose a Sakeno.

- … Ni la menor idea… - respondió el chico.

En cambio a todos ellos, Lunamon estaba un tanto asustada y triste.

« Entonces… si esa cosa extraña está rondando por el bosque… ¿Que le pasará a Hikari? … ¿E-Estará bien?… »

…

La luz solar comenzaba a ocultarse detrás de las lejanas montañas que alcanzaban a ver los que estaban presentes en la caravana. Yuine, BanchouLeomon y Kudamon habían vuelto hace unas cuantas horas, y entonces Lu y Blanc les transmitieron su desición final.

- Bien, junto con Lúmina hemos tomado una decisión. Saldremos en cuanto la arena del desierto esté fría.

- ¿? ¿En serio? - preguntó Yuine con curiosidad.

- Si. Por lo mientras, hay que descansar en caso de que ocurra alguna invasión inesperada.

- Mejor… contabilicemos nuestros recursos - prefirió Kudamon, en los hombros de su compañera - Trajimos muchas cosas del bosque, pero no estamos seguros si todo esto va a alcanzar para todos.

- Tienes razón - respondió Blanc - Yo los ayudaré a hacerlo.

- Está bien. Yo me quedaré con Luminamon a hacer un poco de guardia… - habló Lu, pero rápidamente fue interrumpida.

- Preferiría que lo hicieran BanchouMamemon y BanchouGolemon… - habló Yuine - Después de lo que… hicieron, creó entonces que deberían nuevamente aprender a hacer guardia.

- ¡Estamos escuchando! - gritó molesto el más pequeño de los BAN-TYO.

- ¡Entonces, si es que me escuchan, salgan los 2 a hacer guardia de inmediato! - exclamó la chica, haciendo que los 2 se levantarán y se adentraran rápidamente en el bosque.

- Vaya. Me sorprende que muy fácilmente puedas "controlarlos"… - comentó Lu, mientras se sentada en el suelo y entonces ayudaba a los demás a contar los recursos.

- Después de tratar mucho tiempo con nosotros, ha conseguido entendernos más - respondió BanchouLeomon, sentándose junto a Yuine.

- ¿Cómo fue que los conociste a todos? - preguntó con curiosidad Blanc.

Yuine soltó un largo suspiro pesado, como si todo lo que vivió le cayó en la mente en un solo segundo. Posó su mirada sobre Lu y Blanc, y comenzó a hablar.

- Realmente es una larga historia…

- Tenemos suficiente tiempo en lo que terminamos de contabilizar todo esto… - entró a la plática Luminamon, mientras tomaba en sus manos unas pequeñas bayas.

- Bueno, creo entonces que debemos ponernos a gusto en dónde estamos - comentó Kudamon.

Entonces todos, incluido BanchouLeomon, pusieron atención a las palabras de Yuine.

- Bueno… nosotros 2, Kudamon y yo… Bueno, antes de contar mi historia con el BAN-TYO, creo que debería hablar de mi historia con Kudamon.

- Tienes razón - habló Lu con total calma.

- No recuerdo muy bien cómo fue el primer día que tuve como Elegida - empezó la chica - Lo que recuerdo es el hecho de que, al día siguiente de eso, en mi Digivice había aparecido un Digi-Egg. Y, unas semanas más tarde, entonces nació Kudamon, en forma de Wanyamon.

- Era muy agradable estar en esa forma… - comentó Kudamon levemente.

- Entonces, vivimos juntos más o menos durante unos… 2 años…

- ¿2 años con Kudamon? - todos estaban sorprendidos de eso, en especial Lu.

- Si… estuvimos conviviendo pacíficamente en el… Mundo Humano, por así decirlo, durante 2 largos años.

- Después de eso… Yuine y yo escuchamos lavoz de una mujer que nos trajo al Digital World…

- JunoKazemon - concluyó Blanc - Si… tengo un leve recuerdo tuyo…

- ¿? ¿No la recuerdas completamente? - preguntó Lu a su compañera.

- Tengo leves recuerdos pero… es mi hermana quien suele conservarlos. Yo soy muy despistada, que ocasionalmente olvido cosas muy importantes…

- Ya veo…

- JunoKazemon, como ustedes le dicen, nos trajo al Digital World. Muy cerca de la Ciudad del Nacimiento…

- Caminamos unos días, hasta que llegamos a la Ciudad. Entramos, nos presentaron ante SaberLeomon, y entonces vivimos a su cuidado ya que… no tenía ni la menor idea de lo que era Yuine en ese entonces.

- ¿? ¿Quién es SaberLeomon? - preguntó Luminamon con curiosidad.

- Era el Rey de la Ciudad del Nacimiento. - habló BanchouLeomon - Después de eso que les dijo Yuine… No sé cuánto tiempo exactamente fue, pero el grupo BAN-TYO y yo llegamos hasta dónde la Ciudad del Nacimiento…

- Y entonces, después de ver cómo nos peleamos con la guardia real para tratar de entrar a la Ciudad, SaberLeomon de inmediato nos reclutó para su ejército.

- ¡! ¡BanchouStingmon! ¡BanchouLillymon! - los presentes, en especial BanchouLeomon, se alegraron mucho al ver al par, que anteriormente había peleado cara a cara contra Daemon, ahora estaban de pies nuevamente.

El Digimon león se levantó y abrazó a los 2, quienes ya no tenían muchas heridas y se notaban prácticamente ilesos.

- Chicos… ¡Realmente los extrañé!

- Nosotros también a ti, Banchou - habló pícaramente BanchouLillymon a su compañero - Bueno, dentro de nuestro sufrimiento, pudimos tener ese deseo de volver a verte tirado en el pasto, mientras duermes 22 horas al día.

- ¡Jaja!

- Si, ellos siempre han sido unidos - comentó Yuine, viendo como los BAN-TYO se abrazaban entre si - Incluso, cuando el Rey SaberLeomon le ofreció perdón a todos por la forma en que atacaron la ciudad, a excepción de BanchouLeomon por haber matado a un general muy importante, los 5 estuvieron dispuestos a pelear contra el Rey para defenderlo.

- Ah, no me recuerdes aquellos días oscuros - comentó BanchouLeomon - Cuando solo éramos un grupo que peleaba contra otros Digimon de manera bastante agresiva…

- Entonces, Yuine abogó por nosotros - continuó explicando BanchouStingmon - Aún recuerdo la expresión de los 5 cuando la vimos por primera vez. Nunca antes habíamos visto a una humana en el Digital World; ni siquiera sabíamos que no era Digimon sino hasta bastante tiempo después…

- Y gracias a su intervención, el Rey SaberLeomon nos dejó quedarnos una noche, para descansar, y al día siguiente nos iríamos de ahí.

- Pero, bueno… digamos que BanchouLeomon tuvo otra pelea contra la guardia real - comentó Kudamon - Y ese fue el colmo del Rey. Estaba a punto de mandarlos a ejecutar, hasta que Yuine nuevamente interrumpió.

- Y, después de muchas palabrerías y decisiones que sigo considerando estúpidas que ella tomó… nos convertimos los 5 en la élite de la Ciudad del Nacimiento.

- ¿Decisiones estúpidas? - preguntó curiosamente Luminamon.

- ¡Hey! No me miren con esos ojos - reclamó Yuine - Simplemente estaba haciendo lo que… me parecía correcto. Y para mí no era correcto permitir que ustedes fueran asesinados con tan buen potencial que llevan en sus venas…

- ¡Jajaja! ¡Tienes razón! - exclamó BanchouStingmon con alegría.

- Bueno, la designación llevaba una especie de condición h habló BanchouLillymon - y esa es que Yuine sería nuestra líder de entrenamiento hasta que llegáramos a ser independientes.

- Vaya… Si que has hecho muchas cosas en el Digital World, Yuine-san - comentó con mucha sorpresa Lúmina.

- Bueno, no es… para tanto - comentó con un ligero rubor en sus mejillas.

- Así estuvimos por un mes hasta que… llegaron…

- ¿? ¿Quiénes? - se sorprendieron Blanc, Lu y Luminamon al notar como el semblante de los demás sufría de una decaída sorprendente.

- El ejército demoníaco… comandado por los Royal Lords Shenmon y Kailmon… Realmente no tuvimos oportunidad contra ellos…

- Su ejército era infinito, y la guardia especial y real fueron completamente masacradas antes de que atravesarán las murallas de la Ciudad. Para cuando entraron, no había nada entre ellos y el palacio de SaberLeomon.

- Nosotros logramos contener a muchos de ellos - comentó levemente BanchouStingmon - Pero, aún así muchos corrían de nuestras manos y llegaban hasta el castillo. Así que Yuine nos dejó y fue al Castillo para defender al Rey SaberLeomon personalmente.

- Después de eso, recuerdo que… los 5 salimos de la Ciudad, ya que la gran muralla frente nuestra estaba cayendo estrepitosamente. Yuine nos alcanzó, y nos ayudó como pudo para escapar tanto de aquella muralla frente nuestra como de la Ciudad, que estaba completamente sitiada. Desde lo lejos, vimos nuestra nación, aquella que nos dio un propósito en la vida, se reducía a cenizas tras las llamas que consumían todo a su paso…

- Lo siento tanto… debe de ser muy doloroso para ustedes hablar de ese tema - concluyó Blanc, totalmente apenada apenada por haber preguntado estás cosas a la chica.

- No te preocupes… - comentó Yuine, cambiando su semblante de tristeza a odio - Recordar la historia también nos hace recordar… que debemos vengarla. Iremos, y la liberaremos del poderío demoníaco… Así, habremos vengado el nombre del Rey SaberLeomon…

- También… Yuine tiene asuntos pendientes con uno de sus miembros… - comentó BanchouLeomon.

- Oh, es cierto… La dichosa "Elegidas de la Oscuridad".

- Orlyn Rose… No olvidaré su nombre - habló gravemente Yuine - Cuando llegué al Castillo, ella estaba esperándome… O bueno,  aveces le gusta pensar eso, pero dudo mucho que me haya estado esperando. Entonces, ella me puso un desafío: si la derrotaba, me dejaría pasar para proteger al Rey SaberLeomon. Pero, si no… bueno, literalmente me dijo "Veré que hago contigo…"

- Entonces tuvimos una feroz pelea… - continuó Kudamon - Ella con su LadyDevimon, y Yuine conmigo. En ese momento mi máxima evolución era Tyilinmon, y aún así logró darme buena pelea. Pero, cuando ella vio que muy probablemente perdería por la diferencia de niveles, logró hacer que su LadyDevimon evolucionara en Lilithmon… Y las cosas cambiaron bruscamente.

- Tyilinmon sufrió demasiado daño por parte de ella… Estaba al borde de la muerte… - comentó Yuine, con una voz entrecortada al recordar lo que había pasado - En los últimos momentos, me abracé a él, perdiendo las esperanzas de salir vivos del Castillo…

- Pero entonces… logré hacer una última evolución… Sleipmon… Me levanté nuevamente, y volví a enfrentar a Lilithmon… Pero, aún así… El Digimon de esa Orlyn es bastante poderoso, porque logró vencerme aún con mi nueva evolución.

- Pero, vernos pelear ferozmente le hizo enorgullecerse de nosotros… Nos dejó libres, diciendo que se inventaría algo por si regresábamos…

- Yuine salió con nosotros, escapamos de la Ciudad, y entonces corrimos en dirección contraria a ella… - habló BanchouLeomon - Hasta llegar al bosque dónde sabíamos que estaba el proclamado Castillo de JunoKazemon.

- Y bueno, varias semanas después de caminar sin rumbo por medio de él, fue entonces… cuando los coincidimos…

- ¡Si que es una larga historia! - comentó Luminamon, tomando lo que parecía ser una manzana negra, y dejándola a un costado.

- Si, es larga… Y más ya que Yuine omitió varios detalles - habló BanchouStingmon - Nuestros días de entrenamiento con ella tuvieron muchas anécdotas dignas de recordar…

- Tienes razón - habló BanchouLillymon, sonriente - Ver a Yuine tratando de controlar a BanchouLeomon era un espectáculo digno de ver… Una vez BanchouMamemon tomó asiento en cuanto empezaron a discutir.

- ¡Oh! ¡Es cierto! - habló sonriente BanchouLeomon - Yuine y yo éramos muy contrarios en ese entonces. Aunque, hubo algo que nos conectó después de conocernos mejor… Nuestro sentido de justicia…

- Actuar conforme a nuestros ideales, y no conforme a nuestros deseos o por los de otros… - habló Kudamon - Gracias a eso, es que todos ustedes están aquí… De no ser así, el Rey SaberLeomon los habría matado…

- No tienes que andar recordándolo, Kudamon - habló Yuine. Entonces, se dirigió a Lu - Entonces, chicas… Cuéntennos su historia…

- ¡! La nuestra, si… - comentó Blanc - De hecho, es mucho más corta, así que… espero que no se decepcionen…

- Bueno, pues… - comenzó a hablar Lu - En realidad, el mismo día que fui llamada una Elegida, también fui traída al Digital World… - « Vaya… Parece que han pasado años desde aquel día… Aún así, siento que el tiempo ha corrido muy rápido… »

- Mi hermana y yo la trajimos a nuestro Castillo - habló Blanc con tranquilidad - Pero, después de eso, los demonios atacaron mi Castillo por sorpresa. Uno de ellos, Murmukusmon, logró separarme en mis formas primitivas… Mi hermana y yo…

- Luego, creo que hice un sobreesfuerzo al sacarlas a ambas de mi Digivice, o… no recuerdo muy bien que ocurrió, pero me desmayé y desperté… un mes después…

- ¿¡Estuviste un mes en coma!? - se sorprendieron bastante los BAN-TYO y Yuine.

- Si. Cómo aún no la habíamos instruido en el uso del Digivice, usó muchas fuerzas vitales, y terminó en coma…

- Entonces, pude conocer mejor a mis 2 compañeras Digimon… junto con May - miró hacia donde estaba la chica, inconsciente junto con Noir - Estaba muy feliz al saber que no era la única humana en el Digital World…

- Pero entonces… llegaron ellos…

- ¿Ellos?

- Un par de Elegidos malvados… creemos que son aliados de Yuine, o algo así… No estamos seguros de su origen, pero sabemos esto: llegaron al Castillo y comenzaron a atacar, para… matarnos a mi hermana y a mi - habló Blanc, con la voz un poco entrecortada - Entonces, fue cuando todos nosotros abandonamos el castillo, y comenzamos el viaje hacia la Ciudad Sagrada…

- Las 2 se quedaron atrás para distraerlos… - habló Lu, con la voz decaída - Dijeron que iban a pelear contra ellos el tiempo suficiente para pudiéramos alejarnos… pero, varias horas después, ocurrió una gran explosión en el lugar del Castillo… Y desde entonces, no habíamos sabido nada de ellas… Sino hasta que las encontraste, Yuine-san… Gracias a ti, estamos todas reunidas nuevamente.

- Ya se los he dicho, no hay necesidad de que me agradezcan. Hice lo que me pareció correcto…

- De todos modos, muchas gracias Yuine-san…

- Y luego de todo eso, y de varios días varados en el bosque… ¡Por fin todo terminó! - concluyó Luminamon - Bueno, terminó más bien la historia. Porque entonces los conocimos a ustedes…

- Ya veo - habló tranquilamente BanchouLeomon.

- Pero, tengo una duda… - se dirigió Kudamon hacia Luminamon - ¿Exactamente qué eres? Porque… bueno, recuerdo que… No recuerdo haberte visto nunca…

- Oh… yo… - comentó levemente Luminamon. Antes de que Blanc o Lúmina hablarán, la Digimon habló firmemente - Yo solo he sido una sirvienta en el Castillo de JunoKazemon… Toda mi vida he vivido bajo su techo, y he servido a ella con gran lealtad. Y, después de ver los valerosos actos de la señorita Lúmina, decidí que tenía que seguirla ahora a ella… ¡Ahora la señorita Lúmina es quien alumbra mi vida! - anunció felizmente, mientras abrazaba a la chica.

Blanc se quedó solamente en silencio, echando unas pocas miradas a Luminamon.

« ¿Por qué mientes, Luminamon? Recuerdo perfectamente que un día llegaste a nuestro Castillo por medio de los caminos de piedra… Además, nunca has sido extrovertida con respecto a tu pasado, y ahora dices esas cosas tan sencillamente… ¿Qué estás ocultando?… »

- Vaya, si que su historia es muy corta. - comentó BanchouStingmon ante el silencio que comenzó a formarse - Me hubiera gustado escuchar sobre algún giro dramático o algo así…

- Tendremos muchos en el viaje que se nos avecina… - habló decidida Lúmina - Estoy muy segura…

- Y así, también el final de la misión que nos dio la señora JunoKazemon se acerca! - comentó Luminamon bastante emocionada - ¡Ya casi! ¡Ya casi terminamos con esto! ¡Yay!

- ¡Esa es la actitud! - habló emocionado BanchouLeomon ante sus palabras.

Lu sonrió ampliamente al ver la emoción que tenían todos los presentes.

- Bien… - habló en voz alta, tratando de no eliminar el ánimo presente - Parece ser que las raciones que recolectaron son más que suficientes para todos… - dicho esto, dijo las siguientes palabras con una sonrisa bastante tranquilizadora - Partiremos después de que se oculte el sol… y, por como van las cosas, parece ser que será en un par de horas, así que alistémonos…

ASFD