Capítulo XVII
Niko estaba caminando con paso firme, mientras cruzaba el bosque. La forma en que se movía todo su cuerpo, junto con la tonalidad de los gritos que daba, la expresión que tenía en su rostro, y la manera en que sus extremidades se aferraban y movían en medio del bosque, se notaba que la chica estaba un tanto molesta.
- ¡Niko! - Terriermon corría continuamente hacia dónde se movía su compañera, tratando de alcanzarla.
- ¡Hikari! ¡Hikari! - ignorando que a sus espaldas estaba Terriermon, continuaba caminando, y gritando el nombre de su compañera pérdida.
- ¡Carajo! ¡Detente, Roci! - exclamó Gotsumon, mientras seguía caminando entre las rocas.
- ¡Que su nombre no es Roci! ¡Es Niko! - exclamó Terriermon.
- ¡Lo que sea! ¡Que se detenga!
Niko siguió adentrándose en el bosque, hasta que llegó a una roca un tanto elevada. Se subió en ella, se sentó, y siguió gritando el nombre de su amiga, mientras miraba a todos lados aprovecha la elevación de la roca.
- ¡Hikari! ¡Hikari! - volteó innumerables veces para tratar de encontrar el palo azul que caracterizaban a la chica, pero no halló absolutamente nada.
Por dentro de la chica, su mente estaba bastante agitada y molesta.
« Por qué… ¿Por qué tenía que pasar esto? ¿Por qué… él…? »
- ¡! ¡Niko! - ke gritó Terriermon desde la base de la roca en dónde se hallaba - ¡Niko, baja de ahí!
- ¡No! ¡Estoy buscando a Hikari desde aquí!
- ¡Niko! ¡Te vas a caer desde esa altura!
- ¡No! ¡No es cierto!
La chica permaneció arriba de ahí, mientras miraba en todas direcciones. Pero, en especial, su cabeza aún estaba con aquellos pensamientos.
« ¿Por qué… de todas las personas que existen en el mundo… De todos los chicos que he conocido a lo largo de mi larguísima vida… ¿Por qué él? ¡¿Por qué carajo tenía que ser él!? »
- ¡Niko! - con bastante esfuerzo, el conejo pudo subir por la roca hasta llegar a la chica.
- ¡Hey, Rocío! ¡No vuelvas a hacer eso! - subió Gotsumon al mismo sitio con menos esfuerzo que su compañero
- ¡! ¡Mi nombre es Nikoru! ¿De dónde sacas eso de "Rocío" o "Roci"?
- Es… porque tienes cara de Roci… - confesó Gotsumon, mientras se sentaba enfrente de la chica - Ahora, déjame preguntarte, ¿Por qué estás en "modo chica" en estos precisos momentos?
- ¿Eh? ¿"Modo chica"? - la tonalidad con la que Niko preguntó era bastante agresiva.
- ¡Hey! ¡Gotsumon, se más considerado! - Terriermon caminó hasta el brazo de Niko y lo abrazó con una de sus orejas - Discúlpalo, a veces puede ser bastante insensible…
- … Ya lo noté… Y ya me lo has dicho cómo 10 veces…
- … Es cierto… - comentó al darse cuenta de qué de verdad ya lo había dicho - Pero, Niko… - continuó, y ahora de manera tranquila y calmada - ¿Qué ocurre? ¿Por qué te ves tan… alterada y molesta?…
- … - Niko miró a otro lado, mientras lanzaba un largo suspiro de cansancio.
Los Digimons estaban mirando a la chica con bastante quietud y silencio, esperando a que les dijera al menos una sola cosa del por qué estaba actuando en ese momento así.
- … No… ¡No es nada! - exclamó Niko, mientras volteaba a otro lado con un leve sonrojo en sus mejillas.
Pero, los Digimons solamente se quedaron en silencio, aún con sus miradas fijas en la chica quien volteaba a verlos.
- … - ella miró a todos lados, como buscando a alguien, o más bien asegurándose de que no había nadie cerca. Entonces, habló - Tiene que ser él… ¡Él tenía que estar aquí!
- ¿? ¿Él? ¿Quién es "Él"? - preguntó sarcásticamente Gotsumon.
- ¿De quién hablas? - preguntó curiosamente Terriermon.
Niko lanzó un largo suspiro, mientras hablaba en voz alta.
- Él es… - suspiró nuevamente, antes de volver a hablar - Tiván… Él es el chico de quién me había enamorado cuando tenía 10 años…
- ¿¡Qué!? ¿¡Es él!? - preguntó completamente sorprendido Terriermon, quién conocía por los labios de la chica su historia: cuando tenía 10 años, más o menos, ella se había enamorado de un chico, quien solamente la usó para lo que él deseaba. Eso le había roto totalmente el corazón a su compañera.
El único que no entendía las palabras de Niko era Gotsumon. Pero, la duda también llegó a la cabeza de Terriermon ya que había algo que no conocía del todo. Ambos pronunciaron la misma pregunta al mismo tiempo, expresando cuál era el dato que faltaba en el rompecabezas.
- ¿Tiván? ¿El quién es?
- Tiván… era el chico que tenía el Digimon gigante tipo lobo… El último que peleó contra el Shoutmon ese…
- ¿El Black-MirageGaogamon?
- Si… Ese chico es Tiván…
- ¡Un momento! - exclamó Gotsumon - ¿Estás enamorada de uno de los Elegidos de la Oscuridad que llegaron hace bastante rato a pelear contra nosotros?
- ¿No me estás escuchando? Acabo de decir que estaba enamorada de él cuando tenía 10 años… ¡Eso fue hace 4 años!
- ¿? ¿No tienes ya 15 años?
- … Cierto… Antes de venir al Digital World, fue mi cumpleaños… ¡Así que fue hace 5 años! ¡Obviamente ya no lo estoy!
- … - Gotsumon estaba en silencio - ¿Entonces qué vas a hacer?
- ¡Gotsumon! ¡Ten un poco de tacto!
- ¿Tacto? ¿Me estás diciendo que está bien que no haga nada solo porque… su hermano y su antiguo interés romántico ahora quieren cazarla? ¡Es absurdo! ¡Tienes que crecer, para que entiendas que ya-no-son-nadie para ti! ¡Ahora son tus enemigos! ¡E-NE-MI-GOS!
- ¡No seas duro con ella! - exclamó Terriermon - ¡Deja de ser tan desconsiderado y sinvergüenza, por favor!
- ¿En serio? ¿Me lo dices a mi, un Digimon hecho de roca? ¿De verdad?
- … - Terriermon quedó en silencio, haciendo que Gotsumon se bajara de la roca.
- Bien, quédense ahí y autocompadézcanse. Yo iré a buscar a Hikari, que para eso es que estamos aquí…
Gotsumon descendió, y comenzó a caminar entre los arbustos y bajos árboles de alrededor.
- Tch… - comenzó a hablar en susurros que solamente él podía escuchar - De veras, si ella es mi compañera, tengo que encontrar la forma en qué deje de lado sus dichosos miedos y temores… - los ojos del Digimon de repente se iluminaron - Creo que… lo tengo… - se adentró más en el bosque, mientras iba gritando el nombre de la chica.
Niko y Terriermon se quedaron en la roca, mientras ella se abrazaba a si misma.
- Discúlpalo Niko… Te recomiendo que no te tomes muy personal sus palabras. Siempre ha sido cara dura, y no es común que se lleve bien con los demás…
- … - Niko estaba en silencio, cosa que hizo que Terriermon se acurrucada a un lado suyo, mostrando su apoyo.
Pero, el motivo por el que Niko estaba en silencio no era por las palabras de Gotsumon. Sino porque un recuerdo cruzó su cabeza, y que había permanecido dentro de ella desde el momento en que Terriermon había mencionado su cumpleaños…
[ La fiesta de cumpleaños que habían organizado los chicos a Niko era bastante sencilla. Un poco de música, adornos por la habitación, y comida muy genérica. Cómo no conocían del todo a la chica, no tenían manera de saber que le gustaría comer, por lo que prepararon cosas muy básicas. Pero, al ver el afán con que Niko se comía el pastel de chocolate que había traído Valeria, deducieron que el chocolate es una de sus cosas favoritas.
La fiesta avanzaba con cierta lentitud, mientras los chicos estaban reunidos hablando cálidamente con Niko. Los chicos trataban de evitar lo más que podían el tema de los Digimons, debido a que Heishi, Hikari y Akira eran quienes no sabían nada acerca de ellos, por lo que no los querían asustar o involucrar… en lo que sea que los chicos se estaban metiendo.
Todo ellos estaban cálidamente hablando, hasta que Akira habló en voz alta.
- ¡Bien! ¡Es momento de que Niko abra sus regalos!
- ¿En serio? - pregunto la chica con cierto tono de pregunta algo serio
- ¡Si! ¡Vamos, levántate! - exclamó Akira, mientras tomaba a la chica de uno de sus brazos y la levantaba del sitio.
Akira la acercó a la mesa de los regalos, que estaba depositada tranquilamente a algunos metros de dónde los demás chicos estaban sentados.
- Bien, en total son… 6 regalos - dijo, mientras señalaba las cajas y bolsas decoradas que estaban en la mesa - Toma uno al azar, y ábrelo.
- Okey, okey… - declaró Niko, mientras se tapaba sus ojos, y tomaba una pequeña caja al azar.
Abrió sus ojos, y miró que se trataba de… un libro envuelto en papel de color amarillo. Se sorprendió mucho.
- ¿? ¿Qué es esto?
- ¡No lo sabrás hasta que lo abras! - declaró Valeria, sentada junto a Misti.
- Está bien, veamos… - tomó el objeto, y de manera un tanto cuidadosa, combinando la sorpresa que sentía, le quitó la envoltura y sacó el objeto. Se trataba de un simple cuaderno, con hojas de color blanco, bastante sencillo. - ¿? ¿Eh?
- ¿? ¿De quién es el regalo? - preguntó Tsuyo abiertamente, mientras todos volteaban de un lado a otro.
- ¡Oh, es mío xd! - declaró Heishi, mientras se paraba y hablaba dirigido hacia Niko - Bueno… literalmente no te conozco, así que… compré una libreta y la envolví para dártela…
- Okey, pero… - habló Niko - ¿Por qué una libreta blanca?
- No lo sé… Pero, cuando te vi, antes de salir a comprártela, pensé que eras una… chica que le gusta dibujar…
- ¡Corrección! - habló Hikari - Esa es Sol. Sol es la que dibuja…
- Si, Sol es quien le gusta dibujar - le acompañó Tsuyo.
Simplemente Niko se quedó un tanto consternada por la explicación breve de Heishi.
- O-Okey… - habló, mientras dejaba el regalo en la mesa e iba a dirigirse hacia un segundo regalo… ]
« Era una simple libreta… » pensó Nikoru, estando en la roca y mirando hacia los lados levemente, con Terriermon abrazado a un lado suyo « Aún así… fue el regalo que más me gustó esa noche… ¿P-Por qué? Es una simple libreta… »
Su teléfono vibró repentinamente, alarmando también a Terriermon.
- ¿? ¿Qué es eso?
- Me mandaron… un mensaje… - tomó su teléfono la chica y lo prendió - Déjame ver qué es esto…
Terriermon se asomó al dispositivo, y también pudo visualizar lo que venía en la pantalla:
…
Misti
_____________________________________
Hoy
Hola chico o chica, o Digimon que esté viendo este mensaje.
Si te llegó, entonces es importante que lo leas todo.
Hay una especie de fantasma transitando por el bosque. Acabo de encontrarme a uno cara a cara.
Es importante entonces que vayas al campamento con tu Digimon, si están en el bosque, para estar protegidos y discutir la situación.
Es muy urgente que cumplas esto.
…
- Okey… - comentó Niko un poco asustada - ¿Es mi imaginación? ¿O el mensaje habla sobre un tal fantasma?
- Entonces yo no estoy loco tampoco… Vámonos rápido.
- Tienes razón. Hay que hallar a Gotsumon y salir de aquí…
…
- ¡Hikari! ¡Hikari!
- ¡Hikari!
Taiki y Shoutmon se movían continuamente en el bosque, evitando las ramas bajas que podrían golpearlos, los arbustos molestos en el suelo, y uno que otro Digimon pequeño que corría en el suelo. Pero, sorprendentemente, tanto el chico como su Digimon se cansaron más de lo habitual, por lo que Shoutmon habló hacia su compañero.
- Hay que… sentarnos un momento.
- Tienes razón…
Ambos llegaron hasta una roca elevada, y tomaron asiento para descansar un poco.
- Es sorprendente que… nos cansemos con esta facilidad…
- Bueno; Thoma, Koshirou, Jian, y todos ellos, si es que realmente su teoría es verdadera, entonces esto debería ser bastante normal.
- Tienes razón… Me gustaría contactarme con ellos de una vez para preguntarles por esto.
- Pero podemos hablar con ellos :v… Por medio de nuestro brazalete.
- Pero, bueno… siempre he pensado que hablar con ellos estando en nuestra misión es muy arriesgado y peligroso. Podríamos… ser descubiertos. A ti Kino te escuchó hablando con Jian…
- … Es cierto. Había olvidado completamente eso… - habló levemente Taiki, mientras estiraba sus brazos.
- Tenemos que asegurarnos… de que no vuelva a ocurrir algo así.
- Pero… - comenzó Taiki - ¿Entonces qué haremos con lo de Izumi? Que usó su evolución de Shutumon para ayudarnos con los demonios…
- … Entonces habrá que discutir con ella que… no podrá hacerlo tan deliberadamente de nuevo. Podríamos ser descubiertos totalmente solo con ella.
- Bien. Cuando regresemos al campamento, la buscaré y me encargaré de hablar con ella…
El silencio se hizo presente entre los 2, hasta que Shoutmon habló nuevamente.
- ¿Crees que sea verdad?
- ¿? ¿Qué cosa?
- Lo que nos dijo "él"… sobre Hikari y Tsuyo…
- … - Taiki lo pensó largamente, con una expresión bastante seria. Finalmente, solo soltó un suspiro - Me gustaría creer que no. Pero… no tengo pruebas que lo nieguen…
- Pero, si realmente son ellos|
- Si son ellos, tendré que actuar en el momento en que no nos veamos afectados. - declaró firmemente Taiki - No podemos actuar tan deliberado como Masaru lo ha estado haciendo… Podríamos llegar a|
- Si, lo sé - habló Shoutmon - Caos y destrucción en todos lados. Pero… me gustaría realmente poder hacer algo de una vez.
- No te preocupes, Shoutmon. Llegará nuestro momento - Taiki acarició amablemente la cabeza de Shoutmon, con una sonrisa de lado. Pero, en su mente otros pensamientos surgieron « Me gustaría realmente actuar y hacer algo para terminar todo esto de una vez, pero… Por algo, Wizardmon me asignó aquí… Y, por algo "él" nos dijo aquellas cosas en ese momento… Pero, la cuestión más importante que quiero saber no es cuando será el momento adecuado para actuar… Lo que quiero saber más que nada es si tendré las fuerzas y la voluntad necesaria para el momento en que deba actuar… »
- Por cierto… ¿Cuando tiempo estarás separado de Akari?
- ¿? ¿Separado? ¿A qué te refieres con eso?
- ¡No me digas eso! - exclamó el pequeño dinosaurio - Sabes de que hablo. En todo lo que llevamos de nuestro viaje aquí, en el Digital World, no has hablado con ella ni siquiera para preguntar la hora.
- Bueno… no me he visto en la necesidad de|
- ¿Necesidad de qué? ¿De hablarle? ¡Ella es tu novia! ¡La chica que luchó junto a ti en las Xros Wars, con quién juntos estuvieron al momento de que Quartzmon quiso conquistar el mundo, y ahora aquí: evitando el gran desastre que ocurrirá en nuestros mundos! ¡Ella tiene mucho historial cómo para que la dejes de lado!
- Pero, nuestra misión… sabes que es demasiado rigurosa y explícita. No puedo mantener algo con ella debido a esto…
- … - Shoutmon lucía bastante molesto - ¿Esa es tu excusa? ¡Eres bastante tonto!
- ¡Oye!
- Ella es tu mejor amiga, la persona que es más cercana a ti, y probablemente más que tú novia en un futuro… Ella merece más de lo que le das. Merece atención, cariño, protección, que tú estés para ella, y que le demuestres todos tus sentimientos cada que puedas hacerlo.
- ¿Lo dices realmente por mi, y por qué estás inspirado después de conocerla?…
- … Un poco de ambas cosas - respondió Shoutmon, con un ligero rubor saliente de sus mejillas - Pero lo que te digo no es nada más que la verdad misma.
- Ya veo… Aún así, en esta misión… ese objetivo será bastante difícil… Tenemos que fingir apariencias para evitar que algo salga mal…
- … ¡Tengo una idea! - exclamó Shoutmon.
- ¿?
- ¡Con esto, podrás estar más cerca de ella, mientras que al mismo tiempo cumplimos la misión que nos encargó Wizardmon!
- ¿Y de que se trata?
- … Vuelve a enamorar a Akari.
- ¿Qué?
- Actúa como si nada de lo que vivieron… el Digital World en las Xros Wars, el Digi-Quartz, todo eso… Como si todo eso nunca hubiera pasado. Tratala como si ustedes solo fueran 2 chicos completamente ajenos el uno al otro que fueron llamados a este Digital World por… "casualidad"… Y entonces, vuelvela a enamorar. Vuélvete a enamorar de ella, y trabaja para que la vuelvas a enamorar de ti… ¡Es un plan realmente brillante!
- ¿Qué cosas dices? - el castaño río un poco - Conocer a Lightmon definitivamente ha cambiado toda tu mentalidad.
- … ¡Lo sé! Aquella hermosa joya digital… ¡Definitivamente me ha cambiado de pies a cabeza! Pero, realmente es una lástima que no haya venido con nosotros a esta misión… Tenía muchas ganas de estar junto a ella.
- Pero, es justo lo que te he estado diciendo. Para cumplir nuestra misión de forma correcta|
- Ella no tenía que venir… lo sé… Aún así… - la duda invadió el rostro de Shoutmon - ¿Por qué… Wizardmon hizo énfasis en ella? ¿Por qué específicamente no quería que viniera Lightmon con nosotros?
- No tengo la menor idea… Probablemente… ¿Para evitar que te desconcentraras? Tan solo hemos estado hablando de ella por unos segundos, y a ti te veo totalmente perdido…
- ¿Y cómo no quieres que me pierda en ella, si estamos hablando de la perfección del Digital World? ¡Es realmente bella! ¡Sus valores y modales son bastante envidiables! ¡Todo en ella es como… como…!
- Te entiendo, Shoutmon… cada vez que hablo o veo a Akari, mi cuerpo siente aquellas mismas cosas…
- Entonces, deberías ahora mismo sentir muchas ganas de poder estar con ella. Abrazarla, tenerla protegida entre tus brazos…
- Por supuesto que sí…
- ¡Entonces tienes que hacer algo para cumplirlo! Yo, por mi parte, lo único que puedo desear es terminar nuestra misión aquí lo más pronto posible para poder regresar con Lightmon y decirle todo lo que siento por ella… Pero, en cambio, tu puedes hacer más cosas… ¡Aprovéchalo!
- … Tienes… Supongo que tienes razón… - « Viéndolo en cierta forma, haber venido con ellos al Digital World es una oportunidad para poder tener más y mejores momentos con Akari… Si que debo aprovechar esto… »
El teléfono del chico vibró, lo cual le preocupó un tanto.
- ¿? ¿Qué ocurre?
- Misti me mandó un mensaje… - entró al teléfono, mientras Shoutmon se paraba de su sitio y se asomaba al teléfono. Después de leer el mensaje, los ojos de ambos se llenaron de miedo.
- ¿T-Taiki?… ¿L-Leíste lo mismo que yo?…
- ¡Entonces no estoy loco! ¡Hay que regresar al campamento, y rápido!
Ambos se levantaron a toda prisa de su sitio, y de inmediato corrieron en la dirección sobre la que venían para regresar al campamento lo más pronto posible.
…
- ¡Hikari! ¡Hikari! ¡Hikari!
- ¡H-Hikari! ¡Hikari!
Ambas buscaban de manera constante a la chica, gritando con voz muy alta y mirando a todos lados.
La peculiaridad de ambas es que… por parte de Valeria, ella se había alejado mucho de Biyomon, su Digimon. Desde el primer momento que apareció, que fue cuando ella lo "expulsó" de su cuerpo en una de sus reuniones de Elegidos en el Mundo Humano, Vale siempre ha actuado de manera muy "repulsiva" y evitando mucho a la Digimon, lo cual le preocupaba mucho.
« Valeria… mi compañera según la selección que había hecho mi hermana JunoKazemon… » pensaba largamente, mientras caminaba detrás de la chica « Ella… mi hermana… ¿Por qué me habrá seleccionado con ella? ¿Qué son los elementos que tenemos en común; nuestra compatibilidad, o lo que sea que haya visto JunoKazemon?… No tengo ni la menor idea de cuáles eran los parámetros que captó mi hermana para que ella sea mi Elegida… Tengo demasiadas ganas de saber por qué… » Un sentimiento de nostalgia la invadió « Al menos, me gustaría poder hablar con ella… Me ha evitado todo este tiempo, y me da… un poco de envidia ver cómo los demás se llevan bien con sus compañeros… Tentomon, Terriermon, Elecmon, Lopmon… Aunque, bueno, Lopmon se puede llevar bien con cualquiera… Quiero conocer algo de mi compañera… »
Mientras tanto, Valeria seguía buscando a su amiga, mientras en su mente varias cosas pasaban.
« Es realmente impactante el hecho de que Hikari se haya perdido muy fácilmente… Ya habíamos peleado una vez, que fue cuando llegaron a invadir Mephistomon al campamento, pero a ella no le había pasado nada… Ayudó a Lillymon a proteger a los pequeños Digimon y todo eso, pero no le había ocurrido nada de nada, entonces… ¿Por qué ahora? ¿Por qué hasta ahora le ha pasado algo a Hikari? Pero, hay una segunda cuestión que más me intriga…
» ¿¡Por qué la dichosa JunoKazemon me escogió un compañero Digimon pájaro?! No estoy en contra de los ideales de ella, ni de sus propósitos; de hecho, diría que la estoy ayudando a cumplirlos, pero… ¿Por qué un Digimon pájaro? ¿¡Por qué!? ¡Les tengo miedo! ¡Les tengo mucho miedo! ¡Ahhhh! »
Siguieron caminando en total silencio, mientras ambas gritaban el nombre de la chica. Aún así, el ambiente estaba en un silencio bastante prolongado. A pesar de los gritos, los sonidos del bosque, las ramas chocando con los pies de ambas, las ramas de los árboles sacudidas por los vientos, los cantos de los habitantes del bosque que le daban más vida a aquel bosque; aún con todo eso, la tensión entre Biyomon y Valeria era tanta que se le podría comparar con un profundo silencio.
Silencio que se cortó con las palabras de Biyomon.
- Entonces, Vale… ¿Q-Qué te gusta hacer?…
El silencio nuevamente se apoderó del ambiente. Valeria se sobresaltó un poco, aunque no dejó que Biyomon lo viera.
« M-Me habló… Mi Digimon pájaro me habló… ¡Ahhh!
» Pero… creo que… no debería ser tan mala con ella, o él. Debería al menos hablarle un poco, aún cuando no le vea a la cara… Creo que sería lo más… educado de mi parte… »
- … Soy algo bromista… - dijo la chica, con una voz bastante seria.
« Con esa voz alguien más creería que mientes… » pensó Biyomon, al notar el contraste entre la Valeria que había provocado con insultos que un ejército de demonios atacaran el campamento, y la Valeria que tenía justo a unos cuantos pasos frente a ella « Pero… creo que es un progreso que me dirija la palabra… aún cuando no me volteé a ver… »
- Y-Ya veo… - habló la Digimon.
Pero, nuevamente, el silencio invadió el sitio. Siguieron buscando a Hikari, mirando lado tras lado, gritando su nombre, adentrándose más y más en la densidad forestal, pero… no conseguían nada. Lo único que les pasaba era un cansancio y agotamiento físicos que tras vraios minutos se hizo notorio en Vale.
- Me… sentaré… - Vale se sentó en una pequeña piedra. Al igual que ella, Biyomon lo hizo, pero permaneciendo unos cuántos pasos de distancia.
Se quedaron en silencio, sin cruzar las miradas en ningún momento.
« Me preguntó… ¿Por qué me rechazas, Valeria?… »
- ¿? - frente suyo, vio unos cuantos arbustos moverse. Al acercarse a ver, sus ojos captaron la presencia de un pequeño Digimon con forma de ave comiendo algo que estaba tirado en el suelo. Se asustó tanto que soltó un gran grito - ¡Ahhhh! ¡Un ave!
- ¡Ahhhhh! - el pequeño Digimon en el suelo se asustó con el grito que soltó la chica, por lo que de inmediato echó a correr lejos de la chica.
- ¡! - Biyomon alcanzó a observar aquello, también asustándose por la forma en que había gritado su compañera.
Pero, lo que más le sorprendió fue el hecho de que se asustara la chica con el pequeño Digimon, que lucía tan indefenso, inofensiva, y en especial muy pequeño.
« Ese Digimon… era un Deramon… Completamente indefenso y probablemente sea difícil que ataque a algún Digimon, o simplemente se le acerque a alguien sin sentir miedo… ¿Entonces… por qué a ese también…? »
El Digimon comenzó a pensar y pensar largamente, dando vueltas sobre si misma, caminando unos metros y regresando, sin tener una respuesta rápida.
« Será que… ¿A Vale… le asustan los Digimon? No, ha estado en contacto con todos nosotros por bastante tiempo, así que no creo que ea eso… ¿Entonces, tal vez Vale sea bastante asustadiza? No, menos. En ese caso, no habría desafiado a Mephistomon cuando atacó el campamento… Entonces… » Su mente tuvo una pequeña iluminación momentánea « ¿A Vale… será que tal vez no le gusten las aves?… »
- ¿? - el teléfono de la chica vibró y ella sacó el artefacto. Lo miró un poco y entonces encontró el mensaje que le había mandado Misti sobre el fantasma del bosque. Se asustó la chica y se levantó de su lugar - Hay que regresar al campamento…
Comenzó a caminar de regreso al sitio, pero sin observar a su compañera, a quién había perdido de vista.
« No debería actuar de este modo… » La indiferencia que sintió por un momento le remordió la consciencia a la chica « Tengo que llamarla al menos… La llamo, un vistazo rápido para comprobar que me escuchó, y listo. »
- Biyomon…
Volteó en busca de su compañera Digimon, y entonces se encontró con una escena muy extraña: la Digimon ave tenía el plumaje rosado cubierto de lodo y tierra, y en su cara estaban pegados, tal vez con lodo, un par de hojas bastante grandes, con agujeros bastante grandes para que la Digimon pudiera ver.
- ¿Si, Vale?
Ambas se quedaron mirando. Biyomon, esperando que Valeria no se asustara ni se desplomara por su nueva apariencia. Y Valeria esperando a que la Digimon le explicara la situación, junto con una gran sorpresa en su mirada.
- ¿Y bien? ¿Qué pasa? - « ¡No me rechaces! ¡No me rechaces! ¡Por favor, no lo hagas! »
- Ja… - fue lo único que pudo pronunciar Vale. Más que encontrarlo sorpresivo, la espontaneidad le llegó como un buen chiste - ¡Jajajajajajajajaja! ¡T-Te ves muy graciosa! ¡Jajajajajajajajaja!
- ¡! ¡Jajajajaja! - rápidamente, la Digimon también comenzó a reírse junto a su compañera; más que por darle risa lo que dijo, o la risa de su compañera, la risa que expulsó era dirigida al hecho de que había logrado que su compañera la mirada fijamente por más de 5 segundos, y había logrado que le dirigiera la palabra directamente.
« ¡Si! ¡Lo conseguí! »
ASFD
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