- ¡Sakeno-kun!

De entre el montón de Elegidos que rodeaban a Shutumon, salió Misti tan solo para poder ver al chico que tanto había estado esperando. Así, ambos cruzaron miradas, y, en primer lugar, se notaba en ambos cambios notables: Sakeno tenía su cabello un poco más largo, y se le podía notar un poco vello facial; por la parte de Misti, su cabello se veía un poco más largo (tal vez un par de centímetros), y de alguna forma mostraba un aura de mayor madurez. A pesar de ellos, los 2 lograron reconocerse, en especial Misti a Sakeno. El chico que tanto le gustaba… ella nunca sería capaz de olvidarlo; pero, también tenía muchas ganas de volver a verlo y escucharlo.

- ¡S-Sakeno-kun! - sin pensarlo 2 veces, la chica corrió a los brazos del chico que recién había llegado.

- ¡! ¡Misti! - antes de que reaccionara por completo, la chica ya había llegado hasta él. Y, con todas las fuerzas que tenía, Misti rodeó a Sakeno en un abrazo, el cual tambaleó un poco al chico - ¡!

- ¡S-Sakeno-kun! - inevitablemente, sus ojos azules comenzaron a derramar lágrimas de felicidad y tristeza - ¡Sakeno-kun! ¡Te extrañé tanto! ¡Ahhhhh! - apoyó su cara en el cuerpo de Sakeno, pero por su altura le llegaba poco más arriba de la boca del estómago - ¡Tenía tantas ganas de volver a verte! ¡De volver a oír tu voz! ¡Waaaaa!

- ¡Y-Yo también! - Sakeno sintió profundamente los sentimientos que transmitió la chica, y le devolvió el abrazo - Yo también quería verte…

- ¡S-Soy una tonta! - declaró ella, al tiempo que le salieron más lágrimas - Nunca debí salir del campamento… ¡Te perdiste por culpa mía!

- ¡Hey! No digas eso… - Sakeno se separó del abrazo y miró cara a cara a Misti - No importa que hagas… Yo voy a estar ahí para ayudarte… Y, de ser necesario, lucharé por ti…

- ¡!

- Además… Una vez me dejé golpear por ese Bahatminmon, solamente para cuidarte… ¡Haré cualquier cosa por ti!

- ¡S-Sakeno-kun! ¡Ahhhh! - nuevamente las lágrimas salieron de los ojos de Misti, y volvió a apoyar su rostro en el cuerpo de Sakeno, mientras el chico sobaba la cabeza de Misti de manera paternal.

- Oigan, chicos…

- ¡Qué bonito es el amor! - de entre las casitas de bambú, apareció Vale y se reunió con los demás Elegidos.

- ¡Tienes razón! - comentó Sol.

- ¡Un momento! - Taiki intervino al notar que la chica aparecía por primera vez después de un largo rato - ¿En dónde diablos estabas? ¡Estuvimos en una pelea contra los demonios, y hasta ahora se te ocurre aparecer, y ya tienes un Digimon!

- Eh… tiene razón, Vale… - detrás de la chica, apareció Biyomon, quien la asustó levemente - ¿Por qué no participamos en esta pelea?

- Eh… eh… - Vale miró a otro lado, mientras buscaba una excusa - ¡B-Buen trabajo chicos! ¡Han logrado superarse a si mismos! ¡Sigamos así, y seremos capaces de destruir el Inframundo Digital!

- … ¿Eh?

- ¡Ah! ¡Sakeno-kun! - de dónde estaba, apareció Lopmon con bastantes heridas en su cuerpo después de haber sido pisoteada por Black-SaintGalgomon - ¡Mi Sakeno-kun ha venido a rescatarnos a mi, a Moosemon y a Misti! - mientras movía sus orejas de un lado a otro con emoción, Lopmon hablaba con una voz que combinaba felicidad con risa - ¡Si no te pones las pilas Misti, yo me lo quedaré!

- ¡O-Oye! - se quejó Misti desde su posición.

- ¿? ¿Moosemon?

- ¡Oh si! - Misti de inmediato recobró los ánimos, y separándose de Sakeno, le habló con una sonrisa - Encontré a mi compañero Digimon bestia…

- ¡Qué no soy bestia >:v!

Misti, al igual que todos los Elegidos, se quedaron perplejos al oír la voz chillona que emitió aquellas palabras, la cual era muy familiar para todos. Lopmon tan solo volteó para ver a su compañero, con una gran sonrisa en su boca.

De entre el agujero que había formado Black-SaintGalgomon, apareció una pequeña figura bastante familiar que se arrastró hacia la dirección de los Elegidos. Entonces todos vieron perfectamente bien de quien se trataba, y se asustaron en gran manera.

- ¿? ¿¡L-Lopmon!?

- ¡Aquí estoy! - anunció Lopmon abiertamente, con una gran sonrisa en su cara.

- No… M-Me refiero… a ese Lopmon… - dijo mientras señalaba a la figura del cráter.

Del cráter había salido un Lopmon, exactamente igual a la Lopmon de Misti, con lo cual la chica se asustó mucho.

- ¿Lopmon? ¿A quién|? - el Lopmon del cráter se molestó en cuanto Misti le señaló. Pero, al escuchar su voz y voltear a ver sus manos, comprobar la presencia de sus orejas, y ver cómo se movía su sombra, el segundo Lopmon soltó un grito y se abrazo a si mismo - ¡Ahhhh! ¿Pero por qué me ha pasado esto otra vez?

- ¿Qué? - Misti y los demás Elegidos estaban confundidos.

- ¡¿P-Por qué hay 2 Lopmon!? - los demás Elegidos se asustaron.

- Se los explicaré, simples Mortales - habló Lopmon con voz autoritaria y bromista - Moosemon no es un Digimon de nuestro nivel… Y, cuando digo "nuestro" me refiero a Terriermon, Biyomon, Gotsumon, y de los demás de quienes no me acuerdo su nombre.

- ¡No seas tan mala! - se quejó Pichimon.

- Moosemon es un nivel superior… es nivel Adult, y nosotros somos Child… Y, de acuerdo a su línea evolutiva… ¡El nivel Child de mi querido Moosemon-sama es nada más y nada menos que un Lopmon!

- ¡Una vergüenza para mí! - se quejó Moosemon-Lopmon, mientras se abrazaba de sus largas orejas - ¡Una completa vergüenza para mi existencia que sea un Lopmon! ¡Y que mi compañera divina seas tú, Lopmon!

- Tranquilo, tranquilo… - comentó Lopmon, abrazando a Moosemon-Lopmon - Algún día tendrás que aceptarlo… Yo, simplemente soy… Inevitable…

- ¡No me toques, Lopmon! - Moosemon-Lopmon se separó de Lopmon, mientras veía a su compañera con miedo - ¡Nunca seré como tú!

- No necesito que seas como yo… ¡Porque, en teoría, eres yo!

- ¡No! ¡Nunca lo aceptaré! - Moosemon-Lopmon corrió hasta llegar a Misti, de quién se aferró en sus piernas - ¡Por favor, Misti! ¡Te lo ruego! ¡Regrésame a mi forma de Moosemon!

- … De acuerdo… ¡No me podré nunca acostumbrar a ver 2 Lopmon a la vez! - Misti sacó su Digivice, y dándole una carga de datos hizo que Moosemon-Lopmon regresara a su forma de Moosemon, mientras que la chica se sorprendió mucho por la forma en que actuó Moosemon « Nunca lo había visto así… ¿Q-Qué tan malo es entonces que Moosemon esté en su forma de Lopmon?… »

- Uf… ¡Muchas gracias, Misti!

- Te has escapado está vez de mi, Moosemon-sama… - Lopmon se acercó a las orejas del gran Digimon - Pero, lamento recordarte que… soy inevitable…

- ¡N-No me toques! - exclamó Moosemon, al tiempo que lanzaba a Lopmon a un lado.

- Chicos, en serio…

- ¡Es culpa de Roci!

- ¡Qué mi nombre es Nikoru!

- ¡Como sea!

Mientras Moosemon discutía su asunto con Lopmon, Niko estaba siendo acusada por su compañero Gotsumon después de lo que había ocurrido.

- ¡Lo dije! ¡Modo chica!

- ¡No seas grosero con ella! - dijo Terriermon, al tiempo que dejaba caer una de sus orejas en Niko para tratar de consolarla - Ha pasado por mucho… ¡Su hermano le ha causado mucho daño! ¡Y ahora tiene que pelear contra él!

- Veamos… Si le ha hecho tanto daño… ¿Por qué simplemente no acepta pelear contra él? Sería como… vengarse…

- N-No podría… - susurró Niko, sin mirar a Gotsumon - ¡Es mi hermano! ¡Aún cuando me haya hecho daño, no podría atacarlo!

- ¡Pero debes entender que ya se declaró como un enemigo! - se quejó Gotsumon - Ahora mismo… ¡Sus lazos como hermanos ya están rotos! ¡Yo no son hermanos, son enemigos!

- ¡N-Nunca podría hacerlo! - Niko se abrazó a si misma, cubriendo su rostro en sus rodillas juntas.

- ¡Pff! Par de… - Gotsumon pensó en una palabra adecuada para describir a ambos, pero prefirió guardar silencio - La próxima vez que peleemos contra ellos… Roci, más te vale que me hagas evolucionar antes de que te pongas en tu modo chica, y después de eso no estorben que yo me encargaré de él…

Dicho esto, Gotsumon se levantó de su sitio y fue a caminar, lejos de sus compañeros. Terriermon trató de envolver a Niko entre sus orejas, mientras usaba sus manos para tomar la mano que dejaba ver Niko.

- Tranquila, Niko… Así es él; siempre ha sido insensible y poco sociable…

- Si, ya lo noté… - contestó a modo de susurro, con un toque de molestia que Terriermon apenas alcanzó a visualizar.

- Chicos… chicos…

De entre las casas de bambú apareció Maya y Mizuki, quienes estaban ocultas después de haber visto todo lo que ocurrió en la batalla.

- ¡H-Heishi-kun! - en cuanto la chica vio al otro que estaba cerca de Shutumon, ella salió corriendo hacia él. Heishi en cuanto la vio, una sonrisa dibujó su rostro.

- ¡Maya! - los 2 se hallaron en un abrazo amoroso, en el cual Maya dejó salir un poco las lágrimas.

- Heishi-kun… - su voz también temblaba - cuando vi que saliste hacia la pelea… y te vi ahí, con Kokabuterimon… C-Creí que…

- No pienses en ello - le consoló él, al tiempo que acariciaba amorosamente su cabeza - Solamente peleé un poco, pero estoy bien…

- ¡Querrás decir estamos! - apareció Kokabuterimon en medio del momento, lleno de heridas y mostrándose muy cansado - Yo literalmente hice todo el trabajo… ¡Agradézcanme también!

- ¡También tú! - anunció abiertamente Maya, al tiempo que levantaba y cargaba a Kokabuterimon en sus brazos - Ahora estamos bien… todos estamos bien…

- Y ahora que lo pienso… - comentó Heishi - ¿En dónde… está Tentomon?…

- ¿Qué tanto pasó aquí? - preguntó Mizuki, mientras se acercaba a la bola de Elegidos que estaban con Shutumon.

- Tuvimos una pelea… - le contestó Sol.

- No; osea, eso sí lo sabía pero… ¿Cómo fue que terminó tan mal el campamento? Digo… me quedé en la parte en que estaban peleando contra los que estaban llamando "Hermanos Mayores"…

- Oh, te refieres a Abigarmon y Bahatminmon… - comentó levemente Sol. Entonces, se puso a pensar un poco y siguió hablando - O, lo que pasa es que… al parecer, el Inframundo Digital también tiene Elegidos que llaman "Elegidos de la Oscuridad"…

- … Espera… ¿Qué?

- ¡Tenemos ahora más enemigos de qué preocuparnos! - exclamó Pichimon con sorpresa - No creía que los demonios harían lo mismo que mi hermana JunoKazemon…

- Ahora que lo mencionas… - comentó levemente Mizuki - ¿Qué tiene en mente JunoKazemon con esta… forma de introducirnos a esta pelea?

- Según recuerdo - continuó Pichimon - Ella no tenía planeado que termináramos en esta situación, pero… la invasión del Inframundo Digital, junto con el Exilio y la cacería que nos hicieron los Demonios… todo terminó siendo tal vez mera improvisación…

- … La forma en que dices "improvisación" me deja un poco asustada - comentó Mizuki.

- Oye, entonces… - habló Sol - ¿Qué ocurrió qué no viste lo que continuó en la batalla?

- ¡Oh si! Es que… me alejé por qué tenía que ir al baño… - comentó con una voz tan tranquila que Sol se asustó un poco.

- Oye… eso debería haber sonado con Ian voz de privacidad…

- ¡Y, después de que terminé, me encontré con esto tirado en el bosque, así que lo guardé en mi Digivice!

- ¿? ¿Eh?

Mizuki sacó su Digivice AE color celeste y me lo mostró. En la pantalla principal había una especie de huevo, el cual de vez en cuando se había más grande y luego regresaba a su estado original, como si estuviera palpitando. Pichimon se sorprendió mucho cuando vio aquella imagen.

- Es un… Digi-Egg…

- ¿Eh?

- O sea… un huevo Digimon…

- ¡C-Chicos!…

- ¿¡Dónde… putas… está… mi botella!?

- Oh, Shoutmon… - comentó Sakeno, viendo como el Digimon rojizo se retorcía y arrastraba en el suelo - Sigues con vida…

- S-Sakeno-kun… ¿Quién es… este Digimon? - preguntó Misti con cierta repugnancia al ver cómo se movía Shoutmon, cómo se vestía de forma tan mala y sucia, y el simple olor que emitía.

- ¡! - el Shoutmon de Taiki se acercó a Sakeno, ya que, a pesar de que había salido muy herido en la batalla, había captado su interés el hecho de que apareció un segundo Shoutmon - ¡Si, Sakeno! ¡Dinos quién es!

- … Está bien - suspiró muy pesadamente Sakeno, mientras sacaba de su vestimenta una pequeña botella negra - Chicos… Él es el Shoutmon que tanto hablaba Elecmon… mi compañero bestia…

- ¡Pito! - exclamó Shoutmon, mientras sacaba baba de su boca - ¡Mi botella! ¡Quiero mi puta botella! - estando en el suelo, Shoutmon comenzó a hacer berrinche, asustando un tanto al Shoutmon de Taiki.

- Aquí está tu botella… ¡Ahora, deja de molestar! - Sakeno se agachó hasta la posición de Shoutmon, y le extendió la botella. Él en cuestión de segundos, se puso de pie, abrió la botella pequeña, y tomó un largo trago de su contenido. Después de unos segundos, su cara volvió a su estado ebrio y sus sonrisa se volvió a formar en su cara.

- Oh fucking yeah… I have drunk muy fucking alcohol… Now, I can… I can… - se quedó trabado en sus palabras, quedando simplemente parado para poder mostrar por completo su mala figura corporal.

El Shoutmon de Taiki se asustó mucho al ver al Shoutmon de Sakeno, que se presentaba en esas condiciones tan deplorables.

- Oye, Sakeno… - preguntó curiosamente el Shoutmon de Taiki - ¿Estás seguro de que este es tu compañero? Digo… ¿No te habrá visto la cara Elecmon, y habrá agarrado un vagabundo de algún basurero que se encontró?

- … Me gustaría creer que así fue la historia - se lamentó Sakeno - Pero, estaba presente física y mentalmente el día que conocí a Shoutmon… Y no estaba en ningún basurero.

- Que lamentable… - comentó Shoutmon de Taiki con cierto tono de decepción.

- ¡! - Misti simplemente se quedó perpleja ante el hecho de conocer al compañero de Sakeno.

- C-Chicos… por favor, que alguien me oiga…

- ¡Ahhh! ¡Qué pesado!

El gritó procedente del pasto chamuscado por los demonios y los Elegidos de la Oscuridad hizo que los presentes voltearan hacia la dirección en la que había salido la voz.

Se llevaron una gran sorpresa al ver una pequeña masa de color rojo moviéndose entre el pasto, y asomándose como si acabara de caer de algún planeta lejano.

Todos se quedaron completamente sorprendidos al alcanzar a distinguir de quién se trataba la figura.

- ¿¡Tentomon!?

- Oh, vaya… - habló en la completa lela - Me siento… muy cansado… Dormir mucho al parecer hace daño a tal forma que te sientes cansado… Creo que debo dormir un poco más.

- ¡Tentomon! - gritó con firmeza Heishi, haciendo que de inmediato Tentomon volteara a ver de qué se trataba el grito.

- Oh, eres tú Sr. Aburrido… ¿Qué más cuentas?

- ¿¡D-Dónde estuviste todo este tiempo!?

- … Pues… dormido sobre el pasto. Para ser más específico… en este pasto… - dijo mientras tocaba el pasto quemado sobre el que estaba.

- … ¿Q-Qué?... ¿¡Acaso no sentiste la pelea que acabamos de tener!?

- … ¿Pelea? ¿Qué pelea?

- ¡Acabamos de pelear contra un par de demonios, y los Elegidos de la Oscuridad!

- … ¿Qué? ¿Demonios en el campamento? ¿Elegidos de la Oscuridad? ¡Sr. Aburrido, usted inventa demasiadas cosas!

- En realidad, no está mintiendo el pervertido... - habló Niko con seriedad.

- … No se porque me causa alivio que Nikoru me defienda, aún cuando me llame pervertido...

- ¿De qué hablan? ¡Aquí no ha...! - Tentomon volteó a los lados, y entonces conoció la condición deplorable en que había quedado el campamento después de la pelea contra los demonios. Se sorprendió bastante al ver la mayoría de las casas de bambú destrozadas, y a todos los Elegidos y a sus compañeros completamente heridos y agotados - ¿Pero qué ha pasado aquí?

- ¿Q-Qué rayos? ¿Cómo es posible que no te dieras cuenta de nuestra pelea en medio de tu sueño?

- Tentomon... siempre ha sido así... - declaró Kokabuterimon desde los brazos de Maya - Tiene el sueño muy pesado, y casi nunca se da cuenta de lo que ocurre a su alrededor.

- Pero… creo que lo más importante a resolver es… ¿Por qué no tiene ninguna herida en su cuerpo?

- ¿? ¿Eh?

- ¡O-Oigan! ¡Por favor escúchenme!

El gritó enérgico y lleno de enojo y molestia que produjo Lunamon hizo que de inmediato todos le prestarán atención a sus palabras.

Entonces pudieron ver a Lunamon que estaba con una postura de molestia, pero su cara estaba llena con más emociones: un ligero rubor en sus mejillas reafirmaba su enojo, pero las lágrimas pequeñas que salían de sus ojos… decían algo más que solo enojo.

- ¡Por favor escúchenme! - volvió a anunciar, mientras otra lágrima salía de su ojo derecho - Ayúdenme… ¡No encuentro a Hikari!

- ¿Eh? - las palabras los tomó a todos por sorpresa.

- ¿De qué hablas, Lunamon? - habló Sol - Hikari ha estado todo este tiempo conm|

Cuando la chica castaña volteó a su lado izquierdo para buscar a la chica, se dio cuenta que no estaba ahí.

- ¿Eh? - se sorprendió Sol - E-Estaba junto a mi, cuando comenzó la pelea contra… los Elegidos de la Oscuridad…

- N-No… - habló Pichimon, reflejando miedo en sus ojos - Hikari estaba presente solamente en el momento en que ayudó a Lunamon a evolucionar… Después de eso… No recuerdo haberla visto después…

- T-Tiene razón… - habló Taiki con el mismo sentimiento, pero en él estaba mayor remarcado aquel sentimiento - Ya no la volví a ver después de que llegaron los Elegidos de la Oscuridad…

- ¿Eh?

- ¡H-Hikari!

De inmediato, todos los chicos y sus Digimons se pusieron a buscar a Hikari en todo el campamento. O, mejor dicho, lo que quedaba del mismo; quienes parecían tener más interés en aquella búsqueda eran Lunamon y Taiki.

- ¡Hikari!

- ¡Hikari!

- ¿Alguien ya revisó dentro de las casas de bambú? - preguntó Sol.

- ¡En eso estoy! - anunció Mizuki.

- … ¡No! ¡Aquí adentro no está!

- ¡! ¡T-Tentomon!

- ¡Saca tu cabeza de mi pecho!

- UwU…

- … No. Aquí tampoco está…

- ¡! ¡¿S-Shoutmon!? ¿¡Qué haces tocando el trasero de Nikoru!?

- ¡Hey! ¡Yo estoy aquí con Taiki!

- ¡S-Suéltame maldito pervertido!

- UwU

- ¡Hikari!

- ¡Hikari!

- Iré a revisar en el bosque… - anunció Heishi, acompañado por Kokabuterimon y agarrando a Tentomon entre sus brazos, con tal fuerza que no lo dejaba escapar.

- ¡No seas aburrido, Sr. Aburrido! ¡Aquí hay muchos sitios donde buscar! No he terminado de examinar todos mis… puntos de posible escondite…

- ¡Aleja a ese Digimon de nuestra presencia! ¡P-Pervertido! - le gritó Niko a Heishi con mucha molestia y toda su cara sonrojada.

- Okey… pero el pervertido no era necesario :'v

- ¡No! ¡Por favor, déjame ser libre! - comenzó a sollozar Tentomon, mientras los 3 salían del campamento, también acompañados por Maya que iba corriendo a un lado de ellos.

- ¡S-Shoutmon! ¡Aléjate de Misti!

- A-A-Ah…

- … ¿Sakeno? Who the fuck is this precious and sexy girl? - Shoutmon estaba abrazando las piernas de Misti, quien estaba tirada en el suelo después de ser "atacada" por Shoutmon. La forma en que movía las manos masajeando las pantorrillas de la chica hacia que ella se sonrojara bastante - She is… very soft…

- ¡S-Suéltala Shoutmon! - ordenó terminantemente Sakeno, también con un ligero rubor en sus mejillas al ver la forma en que estaba Misti en el suelo.

- S-Sakeno-kun…

- ¡Hey! ¡Shoutmon! - le gritó Elecmon, teniendo en su mano una piedra - ¡Una galleta!

- A cookie! - de inmediato, Shoutmon se despegó de Misti y corrió a Elecmon con una velocidad bastante sorprendente.

Le arrebató a Elecmon la piedra, y de un solo mordisco partió la piedra, de modo que comenzó a masticar el pedazo en su boca como si se tratara de una galleta real. Esto sorprendió bastante a Sakeno.

- Oye… ¿No tienes leche? Esta galleta está muy dura… - comentó Shoutmon. Pero, de inmediato, antes de que Elecmon hablara, siguió hablando - Bueno, me gustaría leche fresca, así gozaría más de esta galleta… Pero, esa chica de atrás, dudo mucho que me pueda dar siquiera un vaso, así que mejor me quedaré con esto.

- ¡O-Oye! - Misti, más que avergonzarse, se enojó mucho con Shoutmon - ¡N-No me mires de ese modo!

- ¡En serio! ¡Te pido una disculpa muy grande! - habló Sakeno con mucha pena, al tiempo que se acercaba a Misti para ayudarla a levantarse y extendía su mano - ¡T-Te pido muchas disculpas!

- E-Está… bien… - la timidez y pena de decir esas palabras inundó de inmediato las mejillas de Misti - M-Mientras esté… bajo tu control… entonces está bien… - y dicho esto, la chica tomó la mano de Sakeno, y así pudo levantarse. Ambos se quedaron mirando fijamente, y en cuanto sus mejillas se sonrojaron miraron en direcciones opuestas.

- ¡Hay que encontrar a Mamá Hikari antes de que regrese Papá Tsuyo! - exclamó Vale con mucho miedo - ¡Nos castigará a todos!

- … - los demás se quedaron en silencio, mientras seguían buscando.

- ¿Qué? ¿Por qué nadie se ríe?

En los ojos de Taiki se podía ver una gran preocupación. De inmediato su Shoutmon fue a ayudarlo en su búsqueda, mientras hablaba con él.

- Taiki…

- Hay que encontrar a Hikari. Y pronto.

- … Pero… ¿Crees que afecte? Digo… Seguimos dentro…

- … No estoy seguro de lo que pueda ocurrir. Pero… Después de lo que ocurrió ese día, no quiero averiguar si puede esto afectar o no…

…

- ¡Ayuda!

Hikari gritaba con todas sus fuerzas, esperando que algún Digimon que se encontrará en el inmenso bosque pudiera escuchar su alarido y acudiera en su ayuda. Sin embargo, sus esfuerzos se volvían segundo a segundo menos efectivos; el principal motivo era la velocidad con la que se movía.

Atada de los brazos, y con un cinturón que la mantenía sobre la parte trasera del gran corcel negro que se movía a gran velocidad, esquivando y moviéndose entre los árboles y arbustos del bosque, la chica realmente no pida hacer nada de nada, sino simplemente gritar.

- ¡Ayuda! ¡Por favor, ayúdenme!

- … Haitaita… Hikari keioshk…

- ¡C-Cállate, maldito secuestrador! - continuamente se movía en sus ataduras, esperando al menos liberarse del cinturón - ¡D-Déjame ir de aquí!

- Haitaita…

- ¡! ¡N-No! - en un salto que dio el caballo sobre una rama sobresaliente, le dio a Hikari la oportunidad de poder salir del cinturón, y ser "libre". Una vez que se liberó, cayó sobre el pasto, que estaba cubriendo una parte rocosa del suelo, por lo cual el golpe le causó bastante dolor. Aquel ser extraño, cubierto de una manta negra, sintió cómo su montura se liberaba de carga, y de inmediato detuvo a su caballo.

- ¡! ¡Madarate! ¡Madarate! - por primera vez en todo el trayecto, el ser extraño y misterioso se veía agitado.

- ¡Ahhhh! ¡Ayuda! - como pudo, Hikari se pudo de pie y comenzó a correr en dirección opuesta hacia donde se había dirigido el caballo.

Sin otra opción, el jinete descendió de su caballo, y desenfundando la espada que tenía guardada a un costado de su caballo, de inmediato comenzó a correr hacia donde se dirigía Hikari.

- ¡C-Chicos! ¡Lunamon! - Hikari corría a gran velocidad, mientras gritaba incontables veces los nombres de los chicos - ¡Alguien ayúdeme!

- ¡Hikari keioshk! ¡Madarate! ¡Arrwe nepherte ou Hikari keioshk!

- ¡Ayuda! - « ¿C-Cómo fue posible…? » los pensamientos de Hikari comenzaron a agitarse « ¿P-Por qué me olvidaron ellos?… ¿Por qué todos los Elegidos… se olvidaron de mi? »

- … Zhumiraii…

- … - « ¿¡Por qué!? » las lágrimas comenzaron a abundar en los ojos de Hikari.

- Doromitte! - de inmediato, el jinete apuntó la punta de su espada hacia la posición de Hikari, y de su espada salió una pequeña luz negra que impactó de lleno en la espalda de la chica.

- ¡! - tardó unos segundos en disolverse la luz y haciendo que Hikari cayera de rodillas al suelo.

- ¿Por qué?… - preguntó una vez más Hikari, mientras sin poderoso sueño se apoderó de ella « ¿Por qué…? » sus ojos se sintieron bastante cansados, y apenas llegó a recordar lo último que había pensado « Tsuyo… ¡T-Te necesito…! »

ASFD