- ¿Ven? Se los dije… Si seguíamos nuestro caminar sin parar, llegaríamos a este camino de piedra.

- Pero dijiste que sería antes de anochecer… Y ya es de noche…

- ¿Y no será acaso porqué nos detuvimos durante una media hora a mitad de nuestro camino?

- … Tienes razón…

El grupo de Tsuyo por fin había llegado al camino de piedra que tanto prometía el mapa del Xros Loader de Akari, pero no habían llegado en el tiempo que esperaban: era alrededor de las 7 de la noche, y ya estaba prácticamente oscuro todo el bosque en dónde ellos estaban.

- … Creo que… sería bueno descansar en la noche. Hemos estado caminando mucho, por mucho tiempo…

- … Tienes razón, Gabumon… - admitió por primera vez Coronamon a su amigo Digimon - Deberíamos descansar… pero, lejos del camino de piedra del Castillo de JunoKazemon… Es un lugar muy visible y poco protegido; fácilmente alguien nos vería…

- ¿Camino de piedra del Castillo de JunoKazemon?

- En eso tienes razón Coronamon. Deberíamos descansar a un lado del camino pero no en el camino…

- Aquí parece ser un buen sitio - observó Gaomon un pequeño grupo de bultos de hierbas normales que estaban distribuidos en varias partes de aquella pequeña área.

- Buena observación Gaomon. Pues, aquí nos quedaremos a dormir…

Los chicos instalaron una especie de pequeño campamento (abultando las hierbas a modo de crear un pequeño muro alrededor de ellos, y acomodando lo demás para formar varias camas pequeñas), y entonces se sentaron primero a descansar de toda su caminata.

- Bien, ya que estamos aquí… me gustaría poder decirle algo acerca de nuestros siguientes pasos… - hablo con algo de seriedad Gabumon, sorprendiendo a los Elegidos.

- ¿Y de qué se trata?

- No es tan importante, no deben ponerse así de atentos. Pero, es sobre el camino de piedra que está frente a nuestros ojos: mi hermana construyó un montón de esos caminos por todo este bosque, de modo que se unen en un mismo punto: el Castillo de JunoKazemon. Así que, a partir de mañana, lo único que debemos hacer es seguir la dirección correcta por este camino, y entonces llegaremos con nuestra hermana.

- Ya veo… - comentó Tsuyo - Entonces… ¿Todo este tiempo hemos estado caminando para encontrar este camino de piedra?

- … Algo así… - confesó el Digimon con un poco de vergüenza - La verdad, no creí que nos tardaríamos tanto tiempo en encontrar uno de estos caminos… Una disculpa de mi parte…

- ¡Tonto! - Merrick le soltó un leve golpe a la cabeza de Gabumon.

- ¿Y cómo sabremos cuál es la dirección correcta? - pregunto Akari con curiosidad.

- El camino mismo lo dice… las piedras están acomodadas de forma que indican el camino… Ahora, será difícil verlo porque es de noche, pero mañana por la mañana les indicaré cómo se ven estás marcas.

- De acuerdo.

- Ahora… ¡Es hora de que todos durmamos! Mañana nos espera una caminata larga por este camino de piedra… De casualidad, Akari… ¿Tu mapa dice que tan lejos estamos del Castillo?

- Lo siento mucho chicos. Mi Xros Loader no es capaz de resistir tanta capacidad, ya que todo este lugar es realmente enorme, asi que no les puedo decir con seguridad si estamos cerca…

- … Entonces no te preocupes. En estos días estaremos andando en este camino, así que seguramente dentro de poco llegaremos a un sitio donde tu mapa pueda resistir la cantidad de datos.

- Si… eso espero…

…

Los chicos se habían quedado dormidos, restaurando sus fuerzas para el día de mañana poder continuar con su viaje hacia el Castillo de JunoKazemon. Los Elegidos estaban en sus camas improvisadas de hierba, los Digimons descansando dentro de sus Digivices, pero aún seguía una luz encendida, mostrando el rostro de su dueño: Akari.

Ella aún no podía conciliar el sueño; trataba de quedarse cansada viendo su teléfono. Específicamente la sección de fotografías: aún mantenía algunas fotos que se había tomado con Taiki hace algún tiempo. Entre ellas, pudo encontrar al inicio del álbum una fotografía donde salían ambos, él sorprendido como casi todas las fotos, y ella con su sonrisa, y de fondo la torre SkyTree. Ella aún conservaba esa foto que dictaba de cuando habían viajado al Digital World por primera vez; le traía varios recuerdos nostálgicos.

- Aún lo recuerdo todo… - comentó para si misma, con algo de vacío en sus palabras - Recuerdo cuando éramos más jóvenes, casi adolescentes, que solamente pensaban en la escuela, o en tu caso ayudar a los equipos de fútbol, baloncesto, y a cualquiera que se te atravesará a pedir ayuda… Eso era tan lindo de parte tuya…

La chica se levantó de su sitio, y caminó un poco por la zona, hasta cruzar el pequeño muro de piedra, que apenas era de 30 centímetros de algo, que separaba el camino de piedra con todo el bosque. Se sentó en la orilla, a seguir mirando su teléfono, mientras la luz lunar iluminaba el ambiente.

- En ese entonces… éramos tan felices… Tal vez, yo pude haber empezado algo con él y… - la chica comenzó a divagar, hasta que sacudió la cabeza indicando respuesta negativa - No, nunca hubiéramos podido ser pareja si no hubiéramos ido al Digital World…

Siguió en ese estado, mirando con bastante sentimiento de nostalgia las fotografías que estaban en su celular, y recordando varios momentos que había vivido en el pasado, con Taiki y los demás chicos: Kiriha, Nene, Zenjirou, Yuu… todos ellos…

De repente, se topó con una foto de ella estando con Kiriha. Al momento recordó de qué se trataba: cuando habían organizado una fiesta sorpresa para el cumpleaños del chico castaño.

- Claro que lo recuerdo… Ese día estuvimos de arriba para abajo, en especial con Taiki mandando a cada rato mensajes de "Ya voy para allá", "Alguien necesita mi ayuda. Me retrasaré", "Me cancelaron a última hora, voy de regreso" y todo eso… - la chica siguió mirando la foto, y pasando las mismas, hasta llegar a una con otros chicos distintos: uno peligris, otro con gorra, una chica rubia, y en medio de ellos un castaño con un mechón rojo.

- Tagiru… y los Hunters… Cuando me enteré de todo lo que estaba pasando en mi… "cita" con Taiki… y casi nos atrapa SuperStarmon… Fue algo lindo en su momento… También obtener mi Xros Loader naranja y así poder ayudarlos en sus misiones… - con su otra mano, tomó el aparato que tenía a un lado suyo, mirándolo por un segundo - Esto también me acercó más a Taiki…

Siguió pasando las fotografías, hasta llegar a una en específico: una foto de ellos, Taiki y ella, en un autobús: ella estaba con una de sus sonrisas traviesas, tomando una foto al chico que estaba sentado a un lado de ella y completamente dormido. Otra sonrisa se asomó por sus labios.

- Aquel día… que él habló con Hiroki, fuimos hasta el otro distrito, y entonces supimos todo lo que había pasado con los Digimons… todo por lo que estamos luchando ahora mismo…

Apagó la pantalla de su teléfono, lo guardó en su bolsillo, y entonces lanzó un suspiro que arrojó una pequeña nube de vapor, lo que hizo que la chica reaccionara al frío de la noche y soltara un temblor, el cual también provocó que se abrazara a si misma.

- Realmente me gustaría en este momento regresar a los brazos de Taiki… Hemos estado fuera por 2 semanas, y lo extraño mucho… Veamos si puedo hacer algo…

La chica volvió a sacar su teléfono, buscó en la sección de contactos, y entonces marcado con un par de corazones el número telefónico del chico. Sin dudar un segundo, tocó el icono de llamada y comenzó una llamada al chico. Se acercó el teléfono a la oreja, y pacientemente esperó a que contestara mientras sonaban aquellos pitidos de espera.

- Vamos… responde, quiero hablar contigo por un momento… vamos…

- ¿? ¿Hola?

- ¡! ¡Taiki!

- ¿Estás tratando de contactarme? Lamento decirte que por el momento estoy ocupado, fuera de línea, o mi teléfono no está conmigo. Si necesitas algo urgentemente, deja un buzón de voz y yo te responderé cuando pueda… ¡Aquí viene el tono!

- Bien… gastaré mi saldo por él… - la chica habló para si misma con un poco de molestia, antes de que sonara el largo pitido. Entonces, la chica comenzó a hablar más fuerte - Taiki… Soy yo, tu  novia, Akari Hinomoto. Escucha… últimamente, esta misión, ha hecho que… nos tengamos que separar… Pero creo que está mal… Como novia, mejor amiga, y amiga de la infancia que soy… Vaya, si que tengo muchos títulos y mucho con que reclamar… ¡Lo que quiero de ti es que recuperemos aquello que estamos perdiendo!… Sé que te pido mucho, considerando nuestra misión, pero ya no me importa… Estaré disponible por estás horas, las siguientes noches, hasta que te avise, así que… quiero que me hables todas las noches, y quiero quedarme pegada al celular escuchando tu cálida voz hasta que el sueño caiga profundamente sobre ambos… Y, dicho esto, me voy…

La chica terminó la llamada, pero de inmediato la duda y miedo le asaltaron.

- ¿Acaso fui muy dura con él? ¿Demasiado exigente? ¿Insensible? ¿Si habré dicho las palabras correctas? ¿D-Debería llamarle de nuevo para pedir disculpas? ¿O dejo las cosas así? ¡No sé qué hacer!…

Akari se cubrió las manos, ocultando su sonrojado de pena que cubría completamente sus mejillas.

- … No, dejaré todo como está… - comentó con voz decidida - Estoy dispuesta a recuperar lo que tenía con mi Taiki…

Entonces, la chica escuchó dentro del bosque como si una rama se quebrara, lo cual la hizo asustarse mucho y voltear de inmediato a ver qué era lo que había detrás.

- ¿? ¿Hola? - habló en voz alta, de modo que quien sea que estuviera ahí le escucharía y tal vez hablaría. Pero, el silencio regresó a el sitio.

O, eso era lo que creía. Estando en completo silencio, y prestando más atención a lo que estaba ocurriendo a su alrededor, Akari pudo identificar algo proveniente del camino de piedra: pasos. Pero, por la forma en que estaban sonando, parecían pasos de caballos.

- ¿? ¿Caballos? ¿En el Digital World?

La chica se asomó por la oscuridad del sitio, a pesar de que estaba iluminado mayormente por la luz de la luna, y pudo vislumbrar a lo lejos del camino, muy a lo lejos, y par de sombras que parecían correr hacia su dirección. Y, juntando el sonido de pisadas que llegaba a recibir, Akari confirmó que alguien iba hacia ella.

- No… ¿Será un demonio o algo así?… ¡N-No importa! ¡No debo dejar que me vean!

Rápidamente Akari se escondió de nuevo en la pequeña casa de heribas que habían hecho los Elegidos y ella. Se acostó en su cama, no sin antes regresar el muro de hierbas tal como estaba, y entonces se ocultó de modo que, por una pequeña rendija del muro de hierbas, podía alcanzar a ver un poco lo que estaba pasando afuera, y justamente la dirección hacia la que apuntaba la abertura era hacia el camino de piedra.

Tras largos minutos de espera, finalmente llegaron los que estaban generando el ruido de caballos: un par de jinetes, usando ropas completamente negras en sus cuerpos y montando caballos del mismo color con una armadura. Akari se sorprendió mucho de verlos, quienes se quedaron quietos ahí mismo depende estaba la chica a mirar a su alrededor.

Tras algunos minutos observando todo, los jinetes parecieron concluir que no había nada, y entonces siguieron corriendo por el camino en la misma dirección en qué comenzaron, hasta perderse más al norte en el camino de piedra. Akari simplemente suspiró.

- N-No sé qué rayos eran esas cosas… pero si que daba mucho miedo… - comentó, y está vez tembló pero no por el frío, sino por el escalofrío y el sentimiento de muerte que percibió simplemente por mirar a aquel par de jinetes - Bien, creo que definitivamente ya es hora de dormir…

…

- ¡Demonios Mayores! ¡Jueces Infernales! ¡Por favor que alguien venga a atender nuestra petición!

- Hmph… ¿Qué rayos quieren?…

Un pequeño grupo de unos 3 demonios entró al castillo causando tremendo alboroto que de inmediato todos los que estaban en el castillo de enteraron de su llegada.

- ¡Venimos con noticias importantes!

- ¿Noticias? Hubieran empezado por ahí…

Uno demonio de alto poder y presencia amenazante se hizo paso entre la multitud, hasta llegar al sitio donde estaban los demonios recién llegados.

- ¡S-Señor Dark-Dorugoramon! ¡Juez Infernal de la Puerta del Infierno!

- ¿Qué tanto quieren como para armar tremendo escándalo?

- Venimos con un mensaje importante que nos dio… lo que queda del Demonio Mayor Mephistomon…

- ¿? ¿Mephistomon?

Dark-Dorugoramon se hizo paso entre los demonios que llegaron, y entonces pudo ver lo primero que le dijeron: lo que quedaba de Mephistomon, que era nada más la parte alta de su cuerpo, que incluía a su cabeza, sus hombros, uno y medio de brazos y parte de sus alas. Se podía notar perfectamente que el Demonio Mayor agonizaba.

- ¿Mephistomon? ¿Sigues con vida?

- ¡S-Señor Dark-Dorugoramon! - al ver a su superior, recobró sus fuerzas - Vengo a r-reportar… otra lamentable derrota…

- Hmph... ¿¡Y para eso te atreviste a venir!? ¿¡Para traer más deshonra a los Demonios!? ¡Ya me tienen harto todos de sus malditas derrotas! - habló en voz alta, refiriéndose a todos los demonios de la habitación para dejar en claro su mensaje - ¡Si alguien vuelve a este sitio a reportar una derrota, no me importa a qué Juez Infernal sirven, yo mismo me encargaré de eliminarlo de este Reino de tinieblas para toda la eternidad, tal que no le sea posible resucitar ni reencarnar! ¡Y empezaré con este maldito demonio!

- ¡N-No mi señor! ¡También traigo buenas noticias! ¡Traigo la ubicación exacta de los Elegidos de JunoKazemon!

- ¡Espere señor!

Estando a punto de despedazar a Mephistomon, Dark-Dorugoramon se detuvo al oír esas palabras.

- ¿Dijiste… la ubicación exacta de los Elegidos de JunoKazemon?

- ¡Si mi señor! ¡En medio de la investigación a la que me mandaron los Royal Lords para encontrarlos, peleé con ellos! Y, aunque solo obtuve la derrota mía, la pérdida de mi ejército, y la gran deshonra de la lástima que me transmitieron solo por ser de nivel inferior a ellos… ¡Me dejaron con vida! ¡Así que logré arrastrarme hasta que los demonios que vienen conmigo lograron encontrarme! ¡Vine aquí, a pesar de mi lamentable derrota y la humillación que genera en mi ser, solamente a informarles a mi Reino y los superiores sobre esta tan valiosa información!

- ¿Puedes repetirlo por favor Mephistomon? ¿Dijiste… Elegidos de JunoKazemon?

Un par de sombras más aparecieron en medio de toda la aglomeración de demonios, un par bastante conocido y muy destacable del resto: Abigarmon y Bahatminmon, los Hermanos Mayores.

- ¡Ustedes…!

- Los primeros que enfrentamos a los Elegidos de JunoKazemon y salieron con vida… junto a Murmukusmon y, ahora enterados, también con Mephistomon…

- Deberíamos hacer nuestro club de sobrevivientes… - bromeó Abigarmon - Creó que también Beelzebumon se enfrentó a ellos…

- ¡Ustedes, malditos! - murmuró Dark-Dorugoramon al verlos - ¿Acaso no tienen vergüenza o qué? ¡Ustedes están castigados después de lo que hicieron!

- En ese caso, también deberían castigar a Murmukusmon, Beelzebumon, y ahora a Mephistomon por presentarse justamente|

- ¡Cállate inmundo! ¡Tu no tienes derecho a hablar siquiera! - Dark-Dorugoramon le soltó una cachetada a Bahatminmon, tal que de tan solo el golpe lo mandó a volar hasta una pared de la habitación - ¡Ninguno de los 2 puede decir nada! ¡Ustedes simplemente fueron derrotados, y ni siquiera trajeron nada de provecho! Beelzebumon y Mephistomon trajeron información de su ubicación… ¡Algo realmente valioso, incluso más que sus propias vidas!

- … ¿Eso crees, Dark-Dorugoramon?…

Todos los demonios presentes se asustaron, al sentir una presencia realmente devastadora. Todos voltearon hacia la dirección de la voz, y descubrieron colgado de los pies a uno de los Royal Lords: Sataniamon.

- ¡S-Señor Sataniamon! ¡El Royal Lord de Elysian! - de inmediato todos los demonios se arrodillaron, incluso Bahatminmon que estaba en pésimas condiciones después del golpe de Dark-Dorugoramon, y Mephistomon… lo intentó del modo que podía. El único que no lo hizo fue Dark-Dorugoramon, quien miró con incredulidad al Royal Lord.

- Señor… Sataniamon…

- Vaya, vaya… Pero que malos modales tienes… - generando una aura oscura, hizo una especie de escalera por la cual bajó del techo hasta el suelo - Según recuerdo, nunca te escogí como Juez Infernal, aunque no fuera de mi Capa, para que te comportes de este modo… - caminó delicadamente hasta el Juez, hasta quedar de pie frente a él - Hablando de malos modales, aún no me has saludado…

- … S-Si mi señor… - de inmediato se arrodilló a Sataniamon.

- Vaya, parece que estás cargando demasiado estrés en tu cuerpo… enojo, ira, molestia… muchas malas cosas… - el Demonio con apariencia de niño sacó su mano de su túnica y comenzó a sobar delicadamente la cabeza del Juez Infernal - Yo solo quiero tu felicidad… Y no solo la tuya… ¡Sino la de todos los Demonios que habitan en el Inframundo Digital!

- … L-Lo sé mi señor… ¡Pero no puedo! ¡Simplemente no puedo, al tener que ver de nuevo los rostros de|!

- ¿Y por qué tanto odio por ellos? ¿Acaso hicieron algo malo?… - estaba a punto de responder el Juez, hasta que le informó Sataniamon: - La pregunta era retórica… Sé perfectamente que ellos perdieron ante los Elegidos de JunoKazemon… pero, por algún motivo los Jueces Infernales los dejaron vivos.

- Bueno, mi señor, eso fue porqu|

- No me interesa en lo absoluto esas razones. Lo que me importa ahora es el presente: Abigarmon, Bahatminmon: los dejó absueltos de sus castigos. Para cumplir con su venganza que tanto desean…

- S-Señor Sataniamon…

- Pude leer sus pensamientos bastantes grotescos. Están muy ansioso por ir a pelear contra los Elegidos, después de la humillación que les dieron, ¿No es así?

- A-Así es… - Bahatminmon cerró los puños con fuerza - Nunca le perdonaré a Merukimon haberme derrotado tan fácilmente…

- Y esas mujeres y sus Digimons… - Abigarmon apretó los dientes - ¡Las burlas que me hicieron! ¡Nunca lo perdonaré!

- Excelente determinación. Eso supongo que eventualmente les traerá paz y amor en sus corazones, así que está bien.

- P-Pero señor Sataniamon… - trató de replicar Dark-Dorugoramon, pero fue totalmente ignorado.

- Aunque, solamente los dejaré ir con una única condición…

- ¿Condición? Aceptaremos cualquier cosa que nos imponga, con tal de cumplir nuestra venganza…

- La condición es que se lleven a esos 3 de ahí…

- ¿?

Los demonios presentes voltearon, y observaron entrando a la habitación a 3 de los Elegidos de la Oscuridad: Tiván, Natsuko y Zedrick, los 3 acompañados por sus Digimons correspondientes.

- ¿Qué? ¿A los Elegidos de la Oscuridad? ¿Cómo para qué?

- Bueno, en primer lugar no deberías preguntarme eso con esa voz. Tan solo recuerda que soy el superior de tus superiores…

- L-Lo siento mi señor…

- Y en segunda: estos chicos, junto con Sakura y Nanami, no han salido del Castillo a excepción de cuando se realizó la conquista de la Cuidad del Nacimiento. Deberían salir de vez en cuando a calentar los músculos… y yo creo que ahora será un buen momento para eso… - « Además… » pensó para si mismo « Galvatronmon, mi hermano Royal Lord, ha sido muy insistente con que los dejé salir y que peleen sus Digimons. No sé por qué lo quiere, pero… debe tener algún motivo importante para pedirlo con tanta impaciencia »

- … De acuerdo… Nos llevaremos a los niños…

- Tan solo te recuerdo que no somos niños… Ni siquiera un poco… - comentó Natsuko con un aire de superioridad.

- Bien… - habló de manera amable Sataniamon hacia el cadáver viviente de demonio que trajeron - Mephistomon, dinos cuál es la ubicación de los Elegidos. Así, podrán ir lo más pronto posible…

ASFD