- Realmente me siento tan tonta por haberle hecho caso a Palmon…

- ¡Oye! ¡No le hables así a Palmon-chan!

- Tu no tienes porque quejarte. Gracias a ti estamos en esta situación.

- ¡Cierto xd!

Los Elegidos en el grupo de Kino estaban reunidos en la cima de una montaña, que era donde le habían pedido de una vez a Sparrowmon que los dejara debido a que… si, estaban completamente perdidos.

Hace unos días Sparrowmon los había prometido llevarlos a la locación de Sakeno. Al final, fue una mentira; pero no por el hecho de que Sparrowmon fuera malvada, ni porque siguiera en los efectos del Death Lure, ni nada de eso.

La razón por la que mintió fue porque es una tonta, y había llevado a los Elegidos dando vueltas literalmente por todo el Digital World, hasta llegar a la cima de una montaña un tanto elevada, en la que podían ver todo el bosque que se extendía por miles de miles de kilómetros, sin mostrar en ningún lado algún final.

Los chicos lucían cambios muy notorios, a pesar de llevar tan solo una semana y media en el Digital World: en todos el cabello había crecido un poco más (tal vez a penas un par de centímetros), además de que los chicos también mostraron señales de cansancio "severas": se cansaban con bastante frecuencia cada que caminaban o que, incluso, estaban debajo del Sol.

- ¿Ahora dónde se supone que buscaremos?

- Yo digo que debemos regresar - replicó Dai - Debemos buscar a Sakeno; para eso salimos del campamento.

- Dime, Dai - le replicó Yami con algo de molestia - ¿Recuerdas el camino de regreso?

- ¡Yo! - intervino sonoramente Sparrowmon.

- ¿En serio? - le cuestionó Kino, su compañera, con algo de molestia - ¿Realmente recuerdas el camino de regreso al campamento?

- Ah, estaban haciendo una pregunta… es que, como los vi discutiendo, creí que estaban haciendo un juego raro de elevar las voces…

- ¿Qué estás diciendo? - le preguntó Yami con fastidio - ¿En qué momento levanté mi voz como para que creyeras que estaba jugando?

- Lo acabas de hacer :v

- ¡No estamos jugando! ¿Y tú realmente recuerdas el camino de regreso al campamento?

- Ah, no :v. De hecho… ¿De qué campamento están hablando?

- Empecemos por el inicio - respondió Yami a Dai, dándose la vuelta para hablarle - ¿Recuerdas el camino de regreso al campamento?

- … No :u

- ¿Entonces, si ni siquiera nuestra "conductora" lo recuerda, como quieres que regresemos al campamento?

- … Entonces, solo queda decir… ¿Perdón? - el chico levantó los brazos en señal de disculpa.

- … Hmph.

- No hay que perder la esperanza - habló con autoridad Takeshi, estando sobre una roca que sobresalía en la superficie - ¡Tenemos una misión, y la cumpliremos cueste lo que cueste!

- Solamente estamos buscando a Sakeno. No es algo tan importante ni grave como para decir "cueste lo que cueste".

- … :v

- ¡Ya no sé que tenemos que hacer! - Kino fácilmente se enojó, y caminó hasta quedar debajo de la roca donde estaba parado - ¡Hey tú! Baja de ahí y dame un abrazo…

- … Como digas… - de manera obediente, Takeshi bajó de la roca y acudió a darle un abrazo a Kino.

Ese tiempo de quedar fuera del alcance del campamento le dio suficiente tiempo para que se volvieran más cercanos Kino y Takeshi, quienes en un inicio parecían pareja por parte del chico; ahora, Kino le aceptaba más expresiones de cariño y afecto, aunque con más condiciones y de manera más estricta.

- … Es raro ver qué tu pidas un abrazo - comentó extrañada Palmon - Normalmente él esta detrás de ti…

- Por fin se da cuenta de que|

- Nada de eso Takeshi - le interrumpió Kino - Solamente quiero que me des un abrazo. Estamos estresados, candados, y yo estoy enojada por hacerle caso a mi compañera Digimon.

- No todos somos perfectos Kino - respondió Agumon, el compañero de Takeshi - A veces, nosotros los Digimons, también nos equivocamos a la hora de creer que sabemos algo… ¡Me he equivocado muchas veces con Takeshi!

- … Si que si… - comentó Takeshi, mirando con ojos acusadores a su compañero.

- Entonces… hasta saber cómo regresar, ¿Que vamos a hacer? - preguntó con bastante curiosidad Bearmon.

- Tal vez los demás chicos puedan saber en dónde estamos, si les mandamos| - antes de que terminara de hablar, Takeshi pensó un poco las siguientes palabras que diría. Pero, finalmente, se rindió y volvió a abrazar a Kino - No, es una pésima idea…

- Entonces, hay que pensar en algo… - Dai se sentó junto a Yami, y los chicos se quedaron pensando en qué hacer.

- Y nosotros… - comentó V-mon, hasta que Sparrowmon le interrumpió.

- ¡Vamos a jugar! ¡Será divertido!

- No lo creo - Palmon también lucía molesta con su compañera. Pero, Agumon se acercó a hablarle.

- … Yo creo que sería buena idea; no jugar, pero si descansar para relajar nuestra mente y pensar en otras opciones.

- ¡Vamos Palmon-chan!

- … Tienen razón, Bearmon y Agumon… - Palmon le sonrió a ambos, y después se dirigió a su compañera - Está bien, vayamos.

- ¡Yeyyyyyyy! - La Digimon bajó un poco por la cuesta de la montaña, y entonces los demás Digimons le siguieron.

Entonces, los Elegidos se quedaron solos en ese sitio, todos y cada uno de ellos pensando en diferentes opciones para regresar al campamento. De vez en cuando, uno que otro levantaba la cabeza para decir algo, pero después de pensar por algún par de segundos extras, dejaba de lado aquel pensamiento.

- … Oye… - Kino rompió el silencio, dirigiéndose a Takeshi - Eres muy cómodo…

- … ¿Gracias?… - las mejillas del chico se sonrojaron levemente. Después, siguió con otras palabras - Ahora que lo pienso, Kino… ¿Ya pensaste en lo que te había dicho? Antes… de todo esto…

Kino se quedó en silencio, mirando a la nada, por varios segundos, antes de que sus mejillas se sonrojaron levemente.

- No lo he pensado mucho. Dame un poco más de tiempo.

- Todo el que necesites… - respondió Takeshi, dando un apretón ligeramente más fuerte al abrazo.

Un sonido extraño sonó detrás de unos cuantos árboles que estaban cerca de los chicos, y todos se levantaron alarmados.

- ¿? ¿Qué es eso?

- No… creo que sea nada bueno… - habló Dai, y luego se dirigió a dus Digimons - ¡Chicos! ¡Alguien viene!

Sin embargo, los Digimons estaban algo lejos de los Elegidos.

- ¡Oigan! - Dai gritó con más fuerza, pero entonces aquel que produjo el sonido en los árboles salió disparado, sorprendiendo bastante a los Elegidos.

Todos pudieron distinguir lo mismo: un extraño gato de color negro mate, de modo que se veía muy oscuro; en sus manos habían unos guantes algo grandes de color morado y rayado rojo sencillo a los costados, con garras y almohadillas del mismo color y tono de su cuerpo; en sus patas había 3 garras pequeñas, más oscuras que su piel, y tanto en su cola en forma de rayas que llegaban hasta la punta, como en las puntas de sus orejas el color que había era el mismo que el morado de sus guantes. Sus ojos eran de un peculiar y brillante amarillo, lo cual destacaba en el Digimon una belleza muy curiosa.

- … - Los Elegidos se relajaron al ver que no era un demonio ni nadie de ellos; sin embargo, no sabían quién era, por lo que podría suponer una amenaza.

- ¿Hola?

- … - el Digimon no respondió; al contrario, comenzó a oler el aire con curiosidad, y después de hacer eso se dirigió a los Elegidos - Huelo a un Bearmon cerca de esta zona… ¿Han visto algún Bearmon por aquí?…

- ¿? ¿Qué pasa chicos? - con algo de cansancio, los Digimons subieron por la cuesta hasta alcanzar a los Elegidos; entonces, el Digimon nuevo vio a los que acababan de llegar, pero en cuanto alcanzó a distinguir a Bearmon, fijo sus ojos en él.

- Si… él es… - Bearmon salió a asomarse, al tiempo que Yami le señalaba a su compañero.

- ¿Qué está| - Bearmon estaba un poco confundido, pero en cuanto vio a el Digimon se quedó en silencio total - ¿B-BlackGatomon? ¿Eres tú?

- Bastardo hijo de perra… - de un salto, el mencionado BlackGatomon alcanzó a Bearmon, y con sus grandes patas delanteras le comenzó a dar zarpazos salvajes al Digimon oso.

Los demás se asustaron, pero solamente V-mon fue el único que reaccionó y trató de separar a los 2, al ver la violencia de BlackGatomon.

- ¡Oigan! ¡Ayúdenme!

De inmediato los Elegidos y sus Digimons se acercaron y, tras varios esfuerzos realmente agotadores por la violencia que presentaba BlackGatomon, lograron separarlos a ambos.

- ¡Hey! ¿Qué ocurre aquí?

- ¡Suéltenme! ¡Déjenme golpear a ese bastardo!

- ¿Pero por qué? ¿Qué está pasando aquí? - Yami intervino, y de dirigió a su compañero Bearmon.

- Bueno… eso es un poquito fácil de explicar… - Bearmon se dirigió a la chica - Yami, ella es BlackGatomon, nuestra compañera bestia…

- ¿¡Bestia!? ¿¡Después de lo que me hiciste te atreves a llamarme bestia!?

- ¿Eh? ¿Es un ella?

- ¡Claro que lo soy! ¡Y ese de ahí, Bearmon, es un bastardo! ¡Lo voy a matar con mis garras!

- Hey, take it easy… take it easy… - Takeshi abrazó a la gata, y comenzó a acariciarle la cabeza. Pero, más que calmarla, la hizo enojar aún más.

- ¡Suéltame! ¡Y no me toques así! ¡Eso es ofensivo y desagradable para mí!

- L-Lo siento…

- Bearmon… ¿Qué le hiciste a tu compañera para que quiera… matarte? - preguntó Yami con bastante curiosidad.

- … Eh… - el pequeño Digimon comenzó a mirar a todos lados - Digamos que… por un poco de miedo… la dejé abandonada…

- ¿¡Qué!?

- Si… estábamos peleando contra Abigarmon y Bahatminmon hace tiempo, y ellos lograron vencernos y romper nuestra forma divina. Entonces… yo escapé de ahí, y… la dejé sola…

- ¿¡!? ¿¡Cómo se te ocurre hacerle eso a tu compañera!?

- ¡Casi me matan esos malditos! ¡Ahora te voy a matar a ti!

- ¡Pero, BlackGatomon! - comenzó a quejarse Bearmon - Tu seguías con tu forma de AncientSphinxmon cuando rompimos nuestra forma divina… ¡Tu podías seguir en combate! ¡En cambio, yo terminé con esta forma!

- ¡Pero podías ayudarme! ¡Morir conmigo para proteger nuestro ideales! ¡Eso hacen los compañeros de verdad! ¡No escapan de sus problemas!

- ¡Tenía miedo de morir! Pero… - Bearmon volteó a otro lado - Cuando me di cuenta de que debía apoyarte… ¡Regresé a buscarte! ¡Pero Abigarmon y Bahatminmon me atacaron! ¡Y después de eso, terminé en la casa de Yami!

- … - « Entonces… eso le pasó a Bearmon aquella noche que llegó a mi casa… » los ojos de Yami brillaron levemente.

- Bueno señor Bearmon… ¡Gracias por avisarme que me fuiste a buscar después de que me dejaron moribunda! ¡Pero…! Gracias a qué sintieron tu presencia… fue que me dejaron sola para buscarte, y pude escapar…

- … ¡BlackGatomon! - Bearmon caminó hacia Takeshi, quien seguía abrazando a la gata - ¡Por favor! Te pido una sincera disculpa por mi comportamiento. Actúe tan solo por instinto, pero tienes toda la razón. Debí haberme quedado a pelear por nuestros ideales de justicia y honor… O, al menos para sobrevivir… ¡Pero actúe de manera equívoca! ¡Realmente me siento mal por haberte dado la espalda cuando me necesitabas! Aunque, ni tanto, porque supongo que|

- ¡No! ¡Ellos 2 me partieron el hocico en menos de 5 minutos! ¡No pude hacer mucho contra ellos!

- ¡Lo siento! ¡Lo siento! ¡Lo siento! ¡De nuevo lo siento! No lo sabía… ¡El punto es que quiero disculparme! ¡Por favor perdóname!

- … - la gata se quedó mirando a Bearmon de un modo agresivo, tan solo fijando una mirada de molestia. Entonces, le habló a Takeshi - Cosa rara. Bájame…

- ¿Cosa rara?

- ¡Solo bájame!

De inmediato Takeshi bajó a BlackGatomon, a quien dejó en frente de Bearmon. Y, no pasaron ni 10 segundos cuando de manera muy violenta BlackGatomon le soltó un fuerte golpe en la cara a Bearmon.

- ¡! ¡BlackGatomon! - Palmon se asustó al ver aquello, pero Sparrowmon parecía feliz.

- Hey, Palmon-chan… ¿Quién va ganando?

- ¡Au! - Bearmon se sobó la cara - ¿Y eso por qué? ¡Te pedí disculpas!

- Eso, por haberme dejado sola y abandonada… - entonces, un par de lágrimas salieron de sus ojos, y de inmediato lo abrazó fuertemente - Y esto, por regresar por mi después de tu estupidez…

- … - sin replicar nada, Bearmon le abrazó a su compañera. Y ella, sin previo aviso, le dio un beso en su mejilla.

- … Y eso, por confesar tu error…

- … - todos se quedaron viendo la escena. Hasta que Sparrowmon terminó con el silencio formado.

- ¿Y cuándo llegan los golpes?

- Desearía que fueras así - se lamentó Palmon, refiriéndose a Sparrowmon- Normal, serena, y con un promedio de inteligencia mejor al que tienes ahora…

- ¿Eh?

- Bien… - Bearmon se separó de BlackGatomon - ¿Compañeros?

- ¡Si! - BlackGatomon estrechó la mano que su compañero oso le había extendido.

- Okey… ¿Y ahora qué hacemos?

- Debemos de buscar el modo de regresar al campamento… - comentó Dai, pero entonces Takeshi vio algo a lo lejos que le sorprendió mucho.

- ¿Qué es eso de allá?

Todos miraron en la dirección que apuntaba, y entonces visualizaron una leve columna de humo a lo lejos. BlackGatomon fue quien más se sorprendió.

- Eso… ¡Lo veo! - exclamó con gran fervor - ¡H-Hay algo entre los árboles! No puedo distinguirlo bien, porque me tapa el bosque…

- ¿Puedes verlo desde esa distancia? - Yami se sorprendió por la capacidad de su compañera Digimon.

- Claro que sí… ¡Mi vista puede llegar hasta allá! Y veo que… creo que hay, alguna especie de pelea, por cómo se mueven los árboles.

- Tal vez deberíamos ir… ¡Puede que sean demonios atacando a algún Digimon!

- ¿Pero, qué pasará con Sakeno? - preguntó Kino con curiosidad.

- … Honestamente, no tengo ni la menor idea de siquiera si sigue vivo…

ASFD