Capítulo XXIX
- ... ¿Desde hace... cuánto tiempo hemos... estado caminando?... O, mejor dicho, han estado caminando...
- Unas... 15 horas...
- ¿Qué? ¿15 horas? ¿Tanto?
- Si... hemos avanzado mucho; si volteas hacia atrás, ya no se ve el castillo...
Lúmina se medio levantó de su camilla, y observó hacia atrás.
- ... Tienes razón, Blanc...
Todo el grupo de Digimons que sirvieron a JunoKazemon estaban marchando con lentitud, a pesar de que podrían estar siendo perseguidos por los 2 chicos que vio May esa mañana; o mejor dicho, hace 15 horas. Ahora, el cielo nocturno estaba extendido sobre las cabezas de todos, quienes también tenían un semblante de tristeza.
« Realmente todos se ven tristes... » pensaba Lúmina, mientras la chica veía como todos caminaban y al ver sus rostros « Les duele haber perdido el hogar en dónde JunoKazemon los tenía... y, por las palabras de Noir, al parecer todos ellos eran refugiados. Y acaban de perder el único hogar que tenían... Realmente me siento mal por esto... Esto es mi culpa... »
- Bien, estamos a una distancia segura - declaró Blanc, con bastante timidez en su voz - Yo creo que... debemos descansar...
Entonces, toda la caravana de Digimon se detuvieron y se sentaron en donde cayeran.
- Bien... es hora de dormir...
...
A mitad de la noche, todos los Digimons ya estaban dormidos. Todos yacían en un profundo sueño; todos a excepción de una: Sistermon Blanc.
La Digimon estaba sosteniendo su tridente, mientras temblaba de frío por la oscuridad de la noche y el viento helado que recorrían las montañas en donde estaba. En su expresión podía leerse un profundo miedo, mientras veía hacia todos lados por pequeños lapsos de tiempo.
- Este lugar... si que es bastante frío... - susurró la Digimon para si misma: le era muy difícil mantenerse ahí sin tener a nadie con quien hablar. - Noir... Hermana, espero que estés bien...
Un ruido alrededor del "campamento" de Digimons la hizo asustarse.
- ¿? ¿Quién anda ahí?... - sin embargo, la respuesta fue el sonar del viento sobre los árboles que estaban a su alrededor. - ... Creo que... fue mala idea... instalarse aquí... - Sistermon Blanc tembló de frío y después apuntó con sus manos a un montón de leña, con la esperanza de liberar energía y prender una fogata. Pero, al cabo de un tiempo de dudarlo, no lo hizo - No. Recuerda lo que te dijo Noir: el fuego levantará humo y traerá enemigos... Así que debo resistir lo que queda de la noche...
La Digimon, para no aburrirse de permanecer sentada en el mismo tronco toda la noche, se levantó y comenzó a caminar por entre los Digimons que dormían en el piso.
- Veamos... Debo tener cuidado... ¡! Lo siento... - caminó hasta llegar al otro lado de la caravana, y entonces comenzó a revisar el perímetro en esa zona, el cual era la conexión de la montaña con un vasto bosque que se extendía hasta donde alcanzaba la vista: esos eran todos los dominios de JunoKazemon en el Digital World.
Entonces Blanc recordó cuando JunoKazemon había planeado construir una ciudad en ese inmenso bosque, para tener viviendo de manera más ordenada a los refugiados que llegaban a su castillo. Al final, el proyecto no se cumplió, ya que Blanc estaba totalmente en desacuerdo, y en esos instantes ella, al ver todo el bosque en silencio, meciéndose en el viento nocturno e iluminado por la luz lunar, tan solo afirmo lo que había dicho ese día.
- No podemos cambiar este paisaje por una ciudad... - susurró para si misma esas mismas palabras - Es tan hermoso y tranquilo... Si; creo que tenía razón ese día...
Entonces, después de patrullar en ese lugar, volvió a caminar entre los Digimons para regresar al tronco en dónde estaba sentada. Pero, mientras regresaba, comenzó a escuchar que alguien estaba susurrando algo...
- ¿? - Blanc se puso más alerta, y comenzó a moverse entre los Digimons que yacían dormidos, siguiendo el susurro que escuchaba. « Debo hacer... el menor ruido posible... » pensaba, mientras se movía entre los Digimons « De lo contrario, según me dijo mi hermana, quien sea que este en la redonda escaparía o se asustaría, y si es un enemigo, eso sería un verdadero problema... »
Siguió caminando a paso lento y silencioso, hasta que llegó a lo que parecía ser el origen de ese susurro, que por el ambiente y por el sonido que emanaba parecía ser triste y desgarrador: la camilla de Lúmina.
- ¿? - « ¿Ella... está susurrando?... » Se acercó un poco más a la chica y comprobó que estaba susurrando. « ... Bueno, me da alivio saber que es ella. Pero me asusta que sea ella :v... » Se sentó a un lado de la camilla, para prestar atención a lo que estaba susurrando.
~♦♦♦~
< ¿? ¿Qué ocurre? ¿Por qué no has avanzado? >
- Sistermon Blanc dejó de moverse. Ahora se quedó junto a la Elegida...
< ¿Y acaso no es el mejor momento para atacar? >
- ¡Por supuesto que no! Todos estuvieron caminando más de medio día; apenas comieron y bebieron algo, todo por Tai y Yamato...
< ¡Hey! ¡Tagiru! ¡No digas esas cosas! Sabes porque Tai y Yamato están actuando así... >
- Ya lo sé, Ken. Pero... el alboroto que hicieron Tai y Yamato sobre ese ejército demoníaco los alarmó gravemente; además, en este momento están indefensas. Sería muy injusto atacarlas...
< ... >
- ¡Entiéndelo! ¡No las voy a atacar ahora!
< ¡Está bien! Ya escuché... Bien, esta noche no les harás nada... ¡Pero mañana, después de que Tai y Yamato regresen, vas a atacarlas! ¿Entendiste?... >
- Si, Ken. Ya te oí...
< Está bien. Sigue allá... y mañana regresas... >
- De acuerdo...
El chico, sentado en la cima de otra colina, cortó la llamada con Ken y miró atentamente a la caravana que estaba durmiendo en la colina de enfrente.
- Tagiru... ¿Acaso no los quieres atacar?...
El chico solo quedó en silencio, mientras los seguía mirando. Después de permanecer así por un largo rato, volvió a hablar.
- Por supuesto que no. No sé tu, Gumdramon, pero desde que comenzamos todo esto, hay algo que no me cuadra... Y debo investigar qué es...
~♦♦♦~
Después de estar sentada, totalmente quieta, escuchando lo que decía la chica, al cabo de varios minutos alcanzó a distinguir varias palabras.
- ... ¿Cómo funciona todo esto?... Ven a decírmelo...
« ¿Qué rayos está susurrando?... ¿Un sueño?... »
- ... Hay alguien justo aquí, viviendo en mi interior... En este mundo ya estoy muerta y no renaceré...
« ... ¡Espera! Eso es... ¿Alguna canción?... Sus susurros traen una especie de... melodía... »
- ... Así no puedo ver que te ríes de mi...
« ¿Pero qué está cantando?... ¡Suena demasiado triste, saliendo de su boca!... »
- ...Sin respirar, tengo que aguantar... El caos que formé...
« Acaso... ¿Estará recordando algo... triste, o malo?... »
- ...No puedo más, ya no puedo más... Con esta confusión...
« ... Seguramente pasó por cosas muy tristes... o algo que marcó su pasado de una forma muy fea... » entonces llegaron a la mente de Blanc varios recuerdos.
[ - ¡No! ¡Eso es demasiado cruel!
- ¡Es realista! ¡Si llegase a pasar, debemos tener un plan de respaldo!
- ¡Y cuando se enteren!, ¿Qué les diremos?...
- Pues... solo podemos decirles la verdad...
- Esa cruda verdad... No quiero ser parte de esto, hermana... ]
« Ellos... seguramente no saben las cosas que hay detrás de esto... de la responsabilidad de que sean Elegidos... » Blanc miró largamente a la chica. Y después mostró una faceta de determinación « ¡D-Debo protegerla! Ese día ocurrieron muchas cosas malas... ¡Debo protegerla de esa verdad! Y también... ¡De su pasado!... Quiero ayudarla, del mismo modo que ella nos ayudará... »
Ahí siguió Blanc, escuchando a Lúmina cantar durante toda la noche, hasta que los primeros rayos de la luz matutina se asomaron por las montañas...
...
- ¡Noir! ¡Dispárale!
- ¡Eso ya lo sé! ¡Pero es un Digimon nuevo a mis ojos: no conozco sus patrones de pelea!
May y Noir estaban peleando desesperadamente contra los 2 invasores que habían ido a atacar el castillo. Ya era de noche; habían estado durante todo el día peleando, y aunque May, Noir y los demás Digimons que estaban peleando no parecían tener una sola oportunidad de ganar, al menos estaban conteniendo a los 2 Ultimate que tenían enfrente: WarGreymon y MetalGarurumon.
- ¡Tai! ¡Se abrió una brecha! ¡Dales con todo!
- ¡Ya la vi! ¡WarGreymon!
- ¡Si! ¡Gaia Force!
El Digimon alzó sus garras y en ella se formó una enorme esfera de fuego.
- Oh... mierda...
- ¡Todos cúbranse! ¡Ahí viene su ataque!
- ¡Déjanoslo a nosotros May! - un montón de lobos de fuego se pusieron en línea y apuntaron con sus hocicos hacia la esfera - ¡Thermal Mane!
Los lobos soltaron esferas de fuego que impactaron con el ataque de WarGreymon, causando una enorme explosión que iluminó el cielo y desveló el estado del campo de batalla: la antigua entrada del castillo de JunoKazemon, con sus enormes portones de otro y la construcción que estaba perfectamente detallada ahora estaba totalmente hecha pedazos; escombro sobre escombro y piedras sobre piedras. La única cosa que permanecía intacta eran las puertas de oro, que estaban tiradas en el suelo y le servían de escudo a May, Noir y su ejército de Digimons, el Shining Moon. Todo a su alrededor, desde las pequeñas construcciones que decoraban las afueras del castillo como unas pequeñas estatuas y fuentes hasta los árboles del bosque en donde estaba metido el castillo estaban hechos pedazos y envueltos en llamas. El bello bosque que había ahora era un sangriento campo de batalla.
- ¡Gracias, Lynxmon! - la chica sacó su Xros Loader, el cual se iluminó su pantalla - ¡Vamos al siguiente nivel! ¡Lynxmon, Meramon: Digi-Xros!
Los lobos se fusionaron con el Digimon de fuego, y se convirtieron en un enorme hombre de fuego, con varios rasgos de lobos en su cuerpo.
- ¡Meramon Wolf Mode! ¡Ataca a WarGreymon!
- ¡Entendido! - el hombre de fuego levantó vuelo y fue a atacar al Digimon que estaba en el aire.
- ¡MetalGarurumon!
El lobo de metal entonces lanzó varios misiles, que impactaron sobre la línea defensiva de rocas que el Shining Moon había logrado poner durante el ataque.
- Esa era la última barrera de rocas - le infromó Noir a May, cuando se cubrieron y los escombros comenzaron a volar sobre sus cabezas - Ahora, solo las puertas nos separan - En cuanto la lluvia de piedras terminó, Noir se asomó y comenzó a lanzar disparos hacia MetalGarurumon con sus pistolas.
- ¡MetalGarurumon! ¡Destruye esas puertas!
- ¡Si Yamato! - empezó a cargar energía en su boca.
- ¡! ¡Va a usar Cocytus Breath de nuevo! ¡Si lo hace, perderemos otra buena parte del Shining Moon!
- No podemos permitirlo... ¡Dianamon!
- ¡Si May!
La guerrera de la Luna apareció y empezó a lanzar golpes hacia el lobo metálico.
- ¡Rayos! Debo librarme de Dianamon para atacar directamente a las puertas de oro...
- ¡Bien! ¡Ryudamon, denle apoyo a Meramon!
- ¡De acuerdo! - los pequeños dragones lanzaron pequeñas bolas de fuego hacia el guerrero Dragón.
- ¡! ¡Qué molestos! ¡Grey Fire! - WarGreymon comenzó a lanzar aleatoriamente bolas de fuego hacia los Ryudamon; sin embargo, las bolas también estaban dando en el escondite de May y Noir.
- ¡May! ¡También libera a los Blizzarmon para darle apoyo a Dianamon! - un enorme oso habló con May a modo de consejo.
- Los Blizzarmon son demasiado fuertes - le respondió la chica - Ellos son tan solo nuestro último recurso.
Una bola de fuego de WarGreymon alcanzó muy cerca de May y Noir, levantando mucha tierra y humo, y cegándoles la vista a quienes dirigían el ataque.
- ¡Entonces diles a los Firamon que se encarguen de esas esferas! ¡Nos dejarán o ciegos o heridos!
- ¡Tendríamos demasiados guerreros afuera, Gryzmon! ¡Ya perdimos demasiados Lynxmon, Dorulumons y Dobermons! ¡No podemos arriesgarnos a perder a los Firamon!
Otra esfera golpeó muy cerca de ellos; Noir se vio muy afectada por el ataque que disparó accidentalmente a Dianamon, quien desvió sus ataques de MetalGarurumon.
- ¡Pues debes hacer algo de una vez! ¡Si otra de esas bolas de fuego nos da, estaremos en graves problemas!
- ... - May se estaba preocupando mucho - ¡Rayos! ¡Lo haré! - levantó su Xros Loader - ¡Reload, Firamons!
Entonces, un pequeño puñado de leones de fuego con alas aparecieron a un lado de la chica.
- ¡Firamons! ¡Destruyan todas las esferas de fuego que saque WarGreymon!
- Entendido - todos elevaron vuelo, y comenzaron a lanzar ataques de fuego para desviar o contrarrestar los ataques de WarGreymon.
- ¡MetalGarurumon!
- ¡De acuerdo! - se alejó un poco de Dianamon, y se levantó un poco - ¡Garuru Tomahawk! - del pecho del lobo, salió un misil que fue dirigido hacia Dianamon, con una velocidad tan alta que ella no se dio cuenta y fue impactada directamente.
- ¡Dianamon!
- ¡Bien! ¡Ese ataque abrió un camino! - Noir apuntó con sus pistolas a MetalGarurumon.
- ¡MetalGarurumon! ¡Cúbrete!
- ¡Bless Fire! - las pistolas de Noir lanzaron rápidas y largas ráfagas de balas, que golpearon todo el cuerpo de MetalGarurumon.
- ¡Argh! ¡Cocytus Breath!
- ¡No!
El lobo metálico lanzó un aire realmente frío, que congeló todo a su paso. Varios Ryudamon, Firamon y ambas puertas de oro se vieron afectados por el ataque, congelándose completamente hasta ser estatuas de hielo.
- ¡Oh no!
- ¡WarGreymon!
- ¡Entendido! ¡Great Tornado!
WarGreymon empezó a girar en círculos sobre si mismo, convirtiéndose en un tornado, y se lanzó sobre Meramon. Iba a tanta velocidad que el mismo no se dio cuenta del momento en que fue atravesado por el ataque de WarGreymon.
- ¡No! ¡Meramon! - fue lo que gritó May, antes de que el Digimon de fuego se convirtiera en datos « ¡Esto es muy malo! Ellos... eran los últimos Lunxmon y el último Meramon que estaban en el Shining Moon... »
- ¡Maldición! ¡Mis pistolas se congelaron! - Noir, con desesperación, lanzó sus armas al suelo las cuales se deshicieron - ¡May! ¡Debemos activar el Nuclear Way!
- ¡! ¡No podemos! ¡Todos vamos a salir heridos!
- ¡Mega Claw! - usando sus guantes con garras, WarGreymon empezó a despedazar a los Firamon, quienes no podía hacerle frente y tan solo estaban tratando de atacarlo o de defenderse.
- ¡Todo el Shining Moon está desapareciendo! - le gritó el oso Gryzmon - ¡Debemos escapar! ¡Usa a los Drimogemon!
- ¡! ¡No! ¡No puedo sacrificarlos, tan solo para salvarnos!
- ¡Ya te lo dije! - le respondió Noir - ¡Si siguen el camino que se aprendieron, no saldrán heridos!
- ... ¡M-Mierda!
- ¡MetalGarurumon! ¡Termina con esas puertas, mientras WarGreymon acaba con los Firamon!
- ¡Realod, Shining Moon!
Todos los que quedaban del ejército de May (los pocos Ryudamon y Firamon que sobrevivieron, junto con Gryzmon y Dianamon que ya era una Lunamon por el ataque directo de MetalGarurumon) se convirtieron en datos y entraron al Xros Loader de May.
- ¡! ¡Termina esto, MetalGarurumon!
- ¡De acuerdo! ¡Garuru Tomahawk!
- ¡Realod...!
El disparo de MetalGarurumon impactó sobre las puertas de oro, destruyéndolas completamente pero primero levantando una enorme columna de humo, que rodeó toda la zona. Los chicos tan solo agitaron sus manos para ver, mientras le humo se disolvía lentamente.
- ¡Tai! - WarGreymon bajó y giró sobre si mismo, para disolver todo el humo. En cuanto lo hizo, vieron que las puertas estaban hechas pedazos, pero que no estaban May ni Noir.
- ¿? ¿En dónde están? - el chico comenzó a buscar en todos lados.
- Creo que eso debería responder tu duda - le dijo el otro, que se había acercado a observar.
Los chicos y sus Digimons se acercaron a donde estaban las puertas, y vieron que había un enorme agujero en el suelo.
- ¿? ¿Pudieron escapar?
- Al parecer cavaron un hoyo y lograron escapar... Pero, eso es muy ingenuo - los chicos se separaron un poco del hoyo, y el llamado Tai le habló a WarGreymon - Hey. Termina con esto.
- De acuerdo - voló unos pocos metros y preparó su ataque. - ¡Gaia Force! - creó su enorme bola de fuego, y la arrojó sobre el hoyo. Ésta apenas pudo entrar, y comenzó a descender rápidamente por el hoyo.
- Tontos... Si están bajo tierra, serán incinerados por el ataque...
- Estas en lo cierto, Yamato... - le respondió Tai, mientras WarGreymon descendía al suelo.
- Ahora, solo es cuestión de esperar a que| - Yamato no continuó con si frase, al notar que el suelo comenzaba a ponerse caliente, y que de algunas grietas salían pequeños hilos de humo - ¿Pero qué|?
Antes de que terminara la frase, todo el suelo sobre el que estaban colapsó y comenzó a deshacerse, creando un enorme agujero en el suelo.
- ¡Taichi! - WarGreymon se lanzó para proteger a su compañero, pero antes de que se diera cuenta, una enorme explosión cubrió todo el lugar e hizo estallar todo el bosque que estaba a, por lo menos, 5 km a la redonda. Toda esa zona estalló en una enorme explosión nuclear, que aparte arrasó con los alrededores.
...
- ¡Vamos! ¡Rápido!
Del suelo salieron un par de Drimogemon, que corrieron hacia May que estaba a algunos metros de ellos.
- ¡Corran! - en cuanto estuvieron lo suficientemente cerca, los 2 entraron al Digivice de May, y la chica pudo montar en un Firamon, en donde también estaba Noir - ¡Ya vámonos!
El león de fuego emprendió vuelo en el preciso momento en que la zona alrededor del castillo colapsaba.
- ¡Más rápido! ¡Debemos huir antes de la|!
Entonces, todo el lugar explotó; la onda de choque golpeó tan bruscamente a Firamon que lo convirtió en datos y sacó volando a May y a Noir varios metros lejos del área afectada por la explosión.
- ¡Au! - además, ambas cayeron en la parte empinada de una colina que estaba cerca de la zona de explosión, y comenzaron a rodar cuesta abajo...
ASFD
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