8.

Wanda.

Me senté en el final del salón, Thor y Loki debieron salir por una mierda del consejo escolar. Walker está rindiendo un examen que debía dar hace una semana y Carol está delante. No tengo ganas de estar delante, es decir, somos amigos, pero... ¿No es absurdo eso de que siempre debes estar cerca de tu grupo? Por lo general nos separamos, siempre estoy con Carol o Thor, pero también podemos hablar con nuestros demás compañeros, en ocasiones creen que no. Al inicio me veían de forma extraña al ver que les hablaba, y es que el grupo de mis amigos era bastante distante antes de que llegara yo y me adoptaran.

Ahora siempre repiten que soy su líder y que necesitan una líder que los guíe de buena forma. Yo sólo soy yo, supongo que eso cuenta.

—Bien, buen día, muchachos.—Saludó la maestra Vostokoff.

Aunque me habría gustado erguirme para ver con mejor ángulo lo linda que se ve el día de hoy, no estaba de ánimo. Luego de lo que Natasha dijo, sinceramente no me quedan demasiadas ganas de molestar hoy.

No es que realmente sea una preocupación la de todo el mundo quiera ser mi amigo, sin embargo... Soy amable, lo intento. Podría ser una verdadera hija de puta con todos. Pero no lo soy, y odio que Natasha verdaderamente me vea como una caprichosa, es decir... Sé que tengo actitudes que podría mejorar, pero jamás podrán decir que no soy amable.

Es parte de mi encanto y coquetería, el ser amable es grandioso para conseguir puntos con las chicas, no lo hago con esa intención... No lo hacía, pero claro que sé que  actualmente lo utilizo y funciona, pero... ¡No era con aquella intención y no siempre es algo que utilice! Mierda. Tal vez soy un asco.

Vi como comenzaba a explicar unos nuevos ejercicios matemáticos, pero estaba demasiado amargada como para tomar atención a lo que sucedía.

Me ha dado un golpe bajo realmente.

Suspiré y mantuve mi rostro pegado a la mesa casi toda la clase, ni siquiera sentía como pasaba la hora frente a mis ojos, de forma metafórica, ya que ni siquiera estaba mirando hacía algún sitio, únicamente encontraba formas de hacerme sentir aún más miserable de lo que ya me sentía. ¿Cómo no iba a sentirme así? Realmente mientras más pensaba en la forma en que aparentemente Natasha me ve, más me convencía de que algo iba mal conmigo.

¿No ocurre aquello siempre? Ante la mínima oración que te haga pensar que hay algo malo en ti, lo sientes, te persigue y no puedes apartarlo de tu mente, aunque intentes pensar en algo diferente, esa idea vuelve a mi mente, me provoca... Muchas cosas, probablemente ansiedad, y eso acabará en hacer que mis dedos sufran las consecuencias. La parte buena es que tengo curitas nuevas, y mis heridas ya no son tan notorias cada que veo mis manos, más bien mis dedos.

Levanté la cabeza totalmente al sentir una mano posarse sobre mi cabello. Me encontré con los ojos de la maestra Vostokoff.

—¿Qué ha sucedido?—Preguntó ella y yo observé que nadie se encontraba en el salón.—¿Te sientes bien?—Preguntó y negué pero me detuve para asentir rápidamente.

—Sí, lo siento. Sólo he...—Suspiré.—Ya sabe como soy, me dura poco tiempo el interés en algo y... Ya volví a ser yo.

Me levanté y ella tomó mi libreta de anotaciones antes de que yo pudiese tomarla, la vi observar los ejercicios y enarcó una ceja.

—Bien.

Comenzó a corregirlos y anotó puntos extras allí.

—¿Por qué?—Pregunté extrañada de que ella decidiera darme los puntos aún sabiendo que me he dormido en su cara.

—Porque cumpliste con lo que pedí, llévate esos y los traes para la otra semana. —Señaló el pizarrón y se dio media vuelta.—¿No me dirás que te sucede, no?

—¿Por qué asume que algo me sucede y no que simplemente soy así por naturaleza? Es fácil decepcionarse de mí, ya lo sabe. Lo dijo.

Ella se quedó en silencio mientras ordenaba sus cosas. Me quedé de pie unos segundos y luego tomé mis cosas para salir del salón. No dirá nada.

—Sentada.—Me detuvo cuando pasé delante. Ni siquiera tuvo que acercarse. Solamente al decirlo hizo que yo obedezca.—Lamento haber dicho eso, no creí que te dañaría tanto, no quería hacerlo, y sinceramente me emociona verte haciendo ésto y esforzarte es más que suficiente, sólo quiero que sepas que es válido tener días malos, no es necesario que siempre te sientas bien y sonrías. Sólo intenta no rendirte, ¿bien? Eres joven, bonita e inteligente, no necesitas nada más.

Sonreí.

Ha dicho bonita e inteligente.

—¿Usted cree eso?—Pregunté.—¿O lo ha dicho para hacerme sentir bien?

La maestra Vostokoff sonrió y negó levemente. Observé sus manos con algunos adornos suaves en sus uñas claras. No es de hacer resaltar demasiado sus manos con anillos, y todo eso, tampoco decora demasiado sus uñas, y no usa anillos. No hay anillo de matrimonio, asumo que está soltera, su facebook no decía nada de un novio por lo que me ha dicho Walker.

—Lo he dicho, porque es cierto, Wanda. No deberías permitir que lo que yo diga o...

—No ha sido culpa de usted... Supongo que... Me he tomado muy a pecho lo que me han dicho por allí.

Ella enarcó una ceja.

—¿Qué te han dicho?

—Nada más que la verdad. —Mencioné sin tener más ánimos de pensar en eso. Observé mis zapatos manchados por polvo. La mano de la maestra Vostokoff tomó mi mentón para levantarlo.

—Sonríe, Wanda. Sonríe.—Murmuró.—Eres demasiado joven para...

—No soy tan joven.—La interrumpí. Nos observamos a los ojos unos segundos que parecieron infinitos. Infinitos e intensos.

—Lo eres.

—Defina joven. Defina juventud.—Insistí y la vi sonreír nuevamente mientras volvía a ordenar sus cosas. —¿Y bien?

—Los ejercicios. La otra clase. Nos vemos.—Dijo señalando la puerta. Jalé un poco la correa de mi mochila y suspiré.—Adiós, Maximoff.

—Adiós, maestra.

Me di media vuelta y la oí hablarme.

—Si necesitas algo, no dudes en decírmelo.

—Lo tendré en cuenta.

[•••]

Natasha.

—¿Crees que mamá estaba triste cuando papá se ha ido?—Preguntó Yelena mientras caminábamos a casa. —Yo estaba triste.

—No lo recuerdas.—Mencioné mientras abría la puerta con la llave de casa.

—Ya, es que es por eso. Porque estaba muy triste, y ya no lo recuerdo para ya no estar triste.

—Yels, eras una bebé. Yo recuerdo bien a papá y no me pone triste que se fuese, me da un poco igual.—Empujé la puerta y tomé su bolso al ver como ella lo lanzaba al suelo junto a sus zapatos para comenzar a correr escaleras arriba.

Acomodé todo mientras la veía desaparecer en su habitación. Caminé hasta la cocina y observé mi móvil, no tenía mensajes de Wanda, así que me detuve a pensar en la siguiente estupidez que cometería, quiero saber de ella, pero no sé si debería hablar con ella, por dos grandes motivos, el primero es que ella no me ha hablado, y el segundo es que... No tengo razones para hablarle. Debería pensar en una excusa realmente buena como por ejemplo preguntarle si le han corregido los ejercicios.

Oh.

Sí, eso.

Nat. Haré algo de lo que puedo arrepentirme, Clint. ¿Crees que deba hacerlo?

Mariah. Si vas a arrepentirte, pues no, no deberías.

Clint. Me ha preguntado a mí, yo digo que una aventura es más divertida si huele a peligro.

Nat. Luego me molestas por pensar en cantantes latinoamericanos, haces lo mismo.

Clint. No sé si es de latinoamerica, pero claro, te daré ese punto. Vete a cometer errores, cariño. Yo te apoyo en ello.

Mariah. Clint. Basta de meterle ideas a Natasha. Joder.

Bajé por mis contactos y encontré el chat de Wanda, respiré profundamente. Sólo quiero saber de ella.

Nat. Hey. ¿Te han corregido los ejercicios?

Vi que estuvo en línea, no leyó el mensaje y volvió a desconectarse. Oh. Nuevamente en línea, leyó el mensaje y se desconectó.

Rendida me alejé de mi móvil, okay, he sido una idiota, no debí hablarle, es estúpido creer que debía contestarme. Sólo me hablará cuando me necesite, porque así funciona para ella, cuando ella necesita algo, debe hablarme, antes no.

Nuestra relación es estrictamente profesional, es algo que debí entender en el primer momenro, no hay nada más que eso.

Dios, he sido una verdader...

Me detuve al ver la pantalla de mi móvil encenderse dejando ver el mensaje de Wanda para responderme. Sonreí.

Wanda. Los han revisado. Tengo puntos extras. Gracias por eso.

Nat. ¡Es asombroso! Felicidades por ello. Es todo tu esfuerzo.

No leyó mi mensaje, se desconectó y suspiré. Le he contestado muy rápido. Oh, Dios. Soy una absoluta y total tonta.

Sentí el golpeteo en la puerta y caminé hasta ella. Vi a Clint sonreírme tras ella, Mariah estaba a su lado.

—¿Qué hacen aquí? Creí que nos veríamos mañana en casa de...—Señalé a mi mejor amiga.

—¿Qué hiciste?—Preguntó ella.

Suspiré.

—Le hablé a Wanda. No era para tanto. No debían venir.

Mariah hizo una mueca y se sentó en el sofá mientras Clint avanzaba hasta mi cocina.

—¿Puedo beber agua?

—Tenemos jugo.

—Necesito agua.—Dijo él.—Mariah me ha traído corriendo. Si bebo jugo, quemaré mi garganta. Odio el sabor dulce cuando estoy cansado.

Asentí. Es extraño, no lo entiendo, pero supongo que tiene sentido en su cuerpo o eso supongo.

—¿Qué sucedió? Hoy Wanda se veía desanimada en la reunión. Supuse que sabrías.

Negué levemente. No tenía ni idea de que Wanda se sentía desanimada, eso explicaría por que me ha ignorado a la salida, ni siquiera me ha mirado o ha intentado insistir con las clases.

—¿Reunión de qué?—Pregunté.

—Tendremos una competencia la siguiente semana, por lo que ordenamos los horarios de entrenamientos. Tanto natación como lacrosse. —Se encogió de hombros y sonreí.

—Ella juega volleyball.—Mencioné. Clint asintió.—¿Tendrán competencia también?

—Sí, probablemente en la escuela y las lleven a vernos, luego iremos fuera y tendremos nocturnas también.

—Eso suena increíble...—Murmuré, pero mi cerebro rápidamente comenzó a maquinar historias en donde la chica de mis sueños encontraba a la chica de sus sueños y terminaba perdidamente enamorada de ella.

Aquella que si pudiese cambiarla, y no es que yo quisiera cambiarla, es que claramente alguien en el mundo podría acabar con la etapa playboy de Wanda Maximoff, pero definitivamente esa no sería yo, eso ya lo notaba. Aunque inocentemente creía que quizá en algún punto no era tan absurdo pensar en el destino uniéndonos como dos almas gemelas que están destinadas a amarse.

Creo que la literatura y disney me ha lavado el cerebro de tal forma que jamás podré darme cuenta de que no tendré un romance de aquellos. Mucho menos con Wanda Maximoff.

—¿Qué pasa?—Preguntó Clint.

—Seguro está pensando en Wanda. —Se quejó Mariah.

—Ella seguramente encontrará a alguien linda durante los torneos. Es absurdo, lamento pensar en ésto.—Murmuré.

—Pues sí, como siempre. No puede estar sin tirarse a medio instituto y dos ciudades alejadas.

—Mariah. Wanda no es...

—No tiene nada de malo, eh. Ella puede follarse a quien desee, sólo digo lo que veo, y Natasha lo ha mencionado...

Bajé la mirada.

Mi móvil encendió su pantalla y vi su notificación allí. Mi rostro se iluminó.

—Wanda ha contestado.

Wanda. De igual forma, gracias. Lamento haberte quitado el tiempo. No te molestaré, avísame cuando podamos revisar otros ejercicios y todo eso, tendré entrenamientos por lo que mis horas libres han cambiado.

Observé el mensaje extrañada.

—Creo que está molesta conmigo...—Mencioné. Clint enarcó una ceja y le enseñé el móvil. Él asintió.

—¿Qué le haz hecho? Es muy raro hacer enfadar a Wanda, es como... Un golden.

Suspiré.

¿Qué podría haberle hecho? ¡Es absurdo! ¡Yo la adoro! No creo haber dicho algo que pudiese molestarle, ni siquiera creo algo malo de ella como para que ésto ocurriera.

—No tengo ni la menor idea.—Dije preocupada.—Oh, Dios.

Realmente estoy avergonzada.

Nota de autor:

El 31 fue cumpleaños de Elliot_16 <3 espero que hayas tenido un día increíble, lamento no haber subido un capítulo aquél día como prometí, tenía mucho trabajo encima y no me daba el tiempo. Todxs saluden a Elliot <3

También decir que en ocasiones cuando veo tantas lecturas y pocos votos por lo general me gusta esperar a que los votos suban, ya que me hace pensar que no todos los que leen el fanfic han llegado al último cap, entonces por eso me tomé 2 días para que luego no quisieran abandonar la lectura al ver tantas actualizaciones pendientes. ¡No se olviden de comentar y votar!

Pd: y también agregar que si lxs espero con los votos y eso, no es pq escriba por eso, escribo pq me encanta hacerlo, pero luego hay gente que se queja de que avanzo demasiado rápido y no le da tiempo a leerme 😭entonces me hacen pensar que no les gusta que actualice diario y prefiero esperar :'), sin embargo me aburro demasiado esperando para poder actualizar, así que pido disculpas si les molesta que actualice a diario :(

—Codex.

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